Visiones cabalísticas de la serpiente del

paraíso
Cábala
  “Al este del jardín del Edén, donde el querubín, y la espada flamante giratoria vigilan
la senda del Árbol de la Vida” (Gen. 3:24)   La serpiente era el tronco y se convirtió en
la voz que habló a la mujer con una irresistible energía luego la serpiente se convirtió en
la espada  del ángel […]
Autor: cadenaaurea
junio 18, 2016

“Al este del jardín del Edén, donde el querubín, y la espada flamante giratoria vigilan la
senda del Árbol de la Vida” (Gen. 3:24)

La serpiente era el tronco y se convirtió en la voz

que habló a la mujer con una irresistible energía

luego la serpiente se convirtió en la espada 

del ángel brillante sobre la puerta

que separaba al jardín del desierto,

a la vida de la muerte.

La serpiente cambio de piel.

Y sigue aquí. 

“La serpiente se despoja de sus pieles reflejadas para convertirse en la espada flamante.
La serpiente corta a través del cielo y la tierra, hasta que se convierte en la flecha
flamante a través de la luz. La flecha nunca hace contacto con el blanco; porque, pese a
que innumerables blancos surgen, ninguno se convierte en un objeto para que pueda
hacer impacto”. -David Chaim Smith
“Adán estaba hecho para participar del Árbol de la Vida: de hecho era su deber hacerlo.
El Árbol de la Vida representa el merkabah sefirótico que refleja la creatividad pura y la
propia imagen de Adán”, David Chaim Smith, The Kabbalistic Mirror of Genesis

¿Dónde yace entonces el pecado, la caída? La caída es el fruto de la dualidad, de la

percepción del bien y el mal. La obstrucción que impide percibir que el universo entero
es el jardín. “Si el Edén realmente representa la totalidad perfecta, entonces esta
totalidad no puede excluir la posibilidad de la imperfección. Sin embargo, visto desde el
lente de la conciencia primordial incluso el error es sabiduría. La unidad significa que
todas las posibilidades se presentan en sí mismas por una naturaleza común”, dice
Chaim Smith.

“La serpiente es la tensión creativa inherente en todo lo manifiesto y sus modos de

transformación. Es la volatilidad presente en todas las relaciones, y aquí yace
simbólicamente entre Adán y su esposa… La serpiente es llamada Nachash cuyo valor
numérico es 358. Este nombre comparte gematria con la palabra moschiach (mesías).
Esto sugiere que el mismo poder que puede despertar los corazones de los seres
humanos puede también puede causar confusión y antagonismo. La tensión creativa es
tal poder. Si su naturaleza esencial es reconocida, entonces la gnosis puede ser
realizada. Sin embargo, si la fijación convencional contrae la brillantez de Ain-Sof,
entonces un interminable aferrarse usurpará la creatividad y se manifestará como
interminables y pesadillescos escenarios egoicos”, David Chaim Smith.