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INGENIERÍA QUÍMICA Y LOS BIOPROCESOS1

Para muchas industrias de alimentos, químicas y farmacéuticas los bioprocesos son esenciales
y contribuyen a la implementación eficiente de muchas técnicas diseñadas, en estos se
implementan células microbianas, animales y vegetales, y componentes de células cómo
enzimas, utilizadas para manufacturar nuevos productos o destruir desechos peligrosos entre
otras cosas, con esto podemos hacer referencia a los bioprocesos como el uso de cultivos de
células y/o componentes de células en un biorreactor, el cual es un proceso que lleva a cabo la
creación de células o uso óptimo de estas. Los bioprocesos han sido desarrollados e
implementados en una gran cantidad de productos comerciales, desde materiales relativamente
accesibles económicamente cómo por ejemplo alcohol industrial, levaduras y solventes
orgánicos hasta sustancias menos accesibles económicamente cómo proteínas terapéuticas,
enzimas, vacunas y antibióticos,[1] en estos últimos se profundizará a lo largo de este texto. Hoy
en día los bioprocesos son fundamentales en el mundo por esta razón se plantean
continuamente formas de mejorarlos, mediante modelos en los cuales se busca con exactitud
observar los comportamientos de la célula al estar en contacto con el medio ambiente. A lo
largo del tiempo se han aplicado un gran número de metodologías de modelado a los
bioprocesos sin embargo gran parte de estas fallan, por este motivo estudiaré metodologías
aplicadas desde los modelados en ingeniería para el crecimiento celular profundizando en los
inicios de la implementación de los antibióticos.[2] Investigadores de la Universidad de Oxford
(Reino Unido), inician la era de los antibióticos, rescatando los estudios paralizados del
científico Británico Alexander Fleming.

El empirismo al basarse principalmente en la experiencia y la observación de lo que ocurre es el


modelo de bioprocesos que mejor se acopló a los hallazgos realizados por Alexander Fleming
desde mi punto de vista, ya que, lo que para una persona sin estas características descritas
representaría una falla o un error para él representó el descubrimiento de un comportamiento
inesperado, sin embargo, este no era su proyecto principal y se convirtió en el estado del arte
indispensable para el inicio de la creación de un antibiótico al que llamó Penicilina, para explicar
este modelo de bioprocesos es común citar a Dochain D. “El modelado de procesos
bioquímicos es un ejercicio delicado. Contrario a la física, donde hay leyes que han sido
conocidas por el hombre durante siglos (la ley de Ohm, la ley de los gases ideales, la segunda
ley de Newton, los principios de la termodinámica, etc.) la mayoría de los modelos en biología
dependen de leyes empíricas. Como no es posible basarlos sólo en el conocimiento disponible
(y validado), es muy importante ser capaz de caracterizar la confiabilidad de las leyes utilizadas
en la construcción del modelo”.[3] Fleming para el año 1928 en el hospital Santa Mary en
Londres al estar investigando sobre el aislamiento de la bacteria, Staphylococus aureus, que
causa las ampollas cometió un incidente que en condiciones normales se desecha pero decidió
conservarlo y analizar el proceso, dicho incidente se debía a la contaminación con una partícula
extraña de una de las placas de Petri que estaba utilizando para la técnica del cultivo, en una
solución nutritiva, Fleming dejó por unos días las placas de Petri y cuando regresó descubrió un
hongo y que ninguna bacteria crecía cerca de la sustancia invasora, alimentó el moho y usando
los mecanismos de extracción disponibles en la época, logró obtener una pequeña cantidad de
material. Fleming nota que el proceso para esta extracción era inestable y tenía dificultad por lo

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Ensayo individual. Identificar las condiciones que se requieren para que se del crecimiento celular, indispensable en
el desarrollo de los bioprocesos con base en los tipos de microorganismos, tipos de células, metabolismo, medios de
cultivo y factores de crecimiento. Magda Alexandra Castilla Tarazona. D1. 25 de mayo del 2020.
que pierde el interés, por esto el descubrimiento permaneció inactivo durante más de una
década y para la segunda guerra mundial se necesitó retomarlo con urgencia ya que, era
necesario la implementación de un antibiótico que generara pocos efectos secundarios y tuviera
mayor alcance, el número de muertes hacía la investigación urgente, pues morían las personas
con heridas leves a causa de infecciones en cuestión de días, es entonces cuando Howard
Florey, farmacólogo australiano y Ernest Chain, bioquímico de la Universidad de Oxford se
unieron probando la importancia de la bioquímica y los modelos en el desarrollo de bioprocesos
con base en la identificación y clasificación de los tipos de microorganismos y células,
retomaron los estudios realizados por Fleming y junto con George Heatley biólogo y bioquímico
inglés estabilizaron y purificaron el antibiótico, mediante sus conocimientos como ingeniero
bioquímico agregó el otro factor que hoy hace tan importante esta materia en nuestra carrera la
“Ingeniería”, y desarrolló la técnica back-extraction.[4] Después de meses de trabajo produjeron
suficiente penicilina para tratar roedores a los cuales se les media el tiempo de vida desde la
aplicación, los resultados dieron luz verde para implementar en humanos aunque no se tenía en
cuenta que las cantidades de penicilina tendrían que aumentar, la primera persona fue tratada
18 meses después del inicio del proyecto para el 12 de febrero de 1941 y fue un paciente
procedente de Londres, el cuál reaccionó positivamente a la penicilina y a mostró signos de
recuperación, para su infortunio la penicilina se agotó y tuvo que interrumpirse el suministro lo
que finalmente retrocedió los avances y el paciente murió, el nuevo reto fue la producción en
grandes cantidades de penicilina lo que incluía al proceso ingenieros, fisiólogos microbianos y
otros científicos. Para noviembre de 1941 el estadounidense Andrew Moyer microbiólogo junto
con Heatly, simplificaron el proceso para obtener la penicilina multiplicando por 10 la cantidad
de antibiótico que obtenían por medio de fermentación y tan sólo 2 años después se
comercializaba; ese mismo año (1943) entraron a ser parte de la guerra, siendo una poderosa
arma de los soldados aliados contra las infecciones.
Finalmente, por sus descubrimientos, Fleming compartió el Premio Nobel de medicina en 1945
junto a Chain y Florey. [5] A pesar de que Fleming no lo hizo sólo, por años se ha llevado el título
con mayor renombre, esto ha despertado muchos sentimientos encontrados en los que
investigan el tema, me incluyo. Harry Sidebottom autor e historiador británico afirma que “Todos
conocen a Fleming porque la maquinaria publicitaria del hospital de St. Mary [donde trabajaba
Fleming], incluido lord Beaverbrook, un magnate de la prensa que era además uno de los
patronos del hospital. siempre mantuvo que la penicilina fue descubierta por Fleming, sin
mencionar a Oxford o a Florey”[2] pensamiento con el que concuerdo, por años el poder ha
manipulado los medios de comunicación y estos han cedido siendo en realidad portadores de
una verdad a medias. Hoy en día el proceso con la fermentación de la penicilina ha continuado,
al igual que la interacción de biólogos e ingenieros y el aumento del rendimiento de la sustancia
obtenida. El proceso ha implicado una mejor comprensión de la fisiología del moho, vías
metabólicas, estructura de la penicilina, métodos de mutación y selección genética de moldes,
proceso de control y diseño de reactores. Antes del proceso de penicilina, no había ningún
ingeniero químico que buscara formación especializada en las ciencias de la vida. Con la
llegada de los antibióticos modernos, surgió el concepto de ingeniero de procesos biológicos. [3]
Es por esta razón que la historia de este primer antibiótico condiciona también la historia del
ingeniero químico al tener la unión de la bioquímica e ingeniería. Es importante saber que el
trabajo en equipo es fundamental para el desarrollo efectivo de cualquier proyecto. El estado
del arte es la tarea con mayor tiempo y conocimiento; la experiencia puede jugar un papel
fundamental como también lo puede ser la paciencia. Los momentos de crisis también pueden
verse como impulsos necesarios para proyectarse y potencializar talentos, invertir y forzar a
encontrar resultados que cambien el mundo. La idea es sólo una idea mientras no se busque
desarrollarla.
REFERENCIAS

[1]. http://www.scielo.org.co/pdf/rion/v30n1/0120-100X-rion-30-01-00073.pdf
[2]. https://elpais.com/elpais/2016/11/04/ciencia/1478255667_207238.html
[3]. Dochain D. Automatic control of bioprocesses. USA: Editorial John Wiley & Sons, Inc.; 2008.
[4]. https://en.wikipedia.org/wiki/Norman_Heatley
[5]. https://es.wikipedia.org/wiki/Alexander_Fleming

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