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LA VELA
Consiste en ir dejando el cuerpo blando gradualmente, igual que una vela cuando se derrite.
Es importante tener música de fondo que acompañe de forma pausada el ritmo del cuerpo de
los niños y/o adultos.
Se pretende que con estos ejercicios el cuerpo entre en una relajación profunda.
LOS MOLINOS
Está basado en procesos respiratorios del yoga, necesita de música y se puede realizar de forma individual o colectiva.
Su duración será acorde a la música de fondo, al igual que el ritmo de los movimientos.
LA PERILLA
Mejora la atención y el control de sí mismo; se puede aplicar entre actividades, en la noche antes de ir a dormir o por la mañana. Se lleva a cabo
en parejas: madre-hijo, padre-hijo, hermano-hermano.
Se puede agregar el hecho de cerrar o abrir los ojos y hacer caras feas pero sin
reír.
EL PEZ
Relaja la nuca y los hombros. Activa la digestión, calma la emotividad, la angustia y el nerviosismo. Se recomienda llevar a cabo antes de alguna
actividad que requiera gran atención o un ejercicio físico.
Las primeras veces un integrante de la familia realizara las acciones con el niño mientras se van dando las explicaciones, ya que el juego consta
de dos etapas.
1. El niño deberá de estar descalzo y acostado boca abajo en el suelo, los brazos pegados al cuerpo, con las palmas de las manos levantadas
y las piernas juntas.
2. En esa posición se levanta una pierna al mismo tiempo que se inhala, posteriormente se baja lentamente mientras se exhala, se hace lo
mismo con la otra pierna.
3. Se repiten los pasos anteriores de cinco a seis veces.
1. El niño deberá de estar descalzo y acostado boca abajo en el suelo. Las piernas estarán juntas, las manos pegadas al suelo a la altura de
los hombros y levantando la cabeza porque el pez quiere ver el cielo.
2. Debe de elevar los hombros y el pecho del suelo mientras inhala y se mantiene esa posición sin respirar por algunos segundos.
3. Se regresa al suelo despacio y se exhala el aire.
4. Se repite de cinco a seis veces.
El muñeco blando y duro
Permite al niño conocer las partes de su cuerpo punto por punto para llegar a la relajación total, así mismo regula la respiración y calma al niño.
Puede aplicarse en cualquier momento, ya sea antes o después de cierta actividad.
Es importante que se lleve a cabo en una habitación iluminada, y que el adulto se cerciore que el niño tiene conocimiento sobre las partes de su
cuerpo. Se debe de explicar previamente al niño los siguientes verbos:
1. El niño deberá de estar acostado en el suelo con los brazos separados y lo más tranquilo
posible.
2. Se le dirá: crispa los dedos de los pies mientras inhalas y relajas al respirar.
3. Crispa las pantorrillas mientras inhalas y relajas al respirar.
4. Mete el estómago (endurece) mientras inhalas y ablandalo sacando el aire suavemente al
exhalar.
5. Aprieta los brazos contra tu cuerpo con las palmas hacia arriba.
6. Eleva los hombros mientras inhalas y bajalos quitando la tensión al exhalar.
7. Estira el cuello con la cabeza hacia los hombros al inhalar y relaja al exhalar.
8. Cierra los ojos fuertemente al inhalar y relajar al exhalar.
9. Abrir mucho la boca, lentamente, varias veces, y después bostezar.
10. Siente todo tu cuerpo sobre el suelo, húndelo y permanece así con los ojos cerrados por
cinco minutos.
11. Cuando haya transcurrido el tiempo se debe de abrir los ojos pero lentamente.