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ECONOMIA ECOLOGICA

La economía ecológica es una ciencia que estudia la viabilidad en términos de


sostenibilidad del modelo económico, a través de los flujos de materiales, energía y
residuos que se necesitan.
A diferencia de la economía convencional o neoclásica que tiene como objetivo la
persecución del crecimiento económico a través del uso óptimo de insumos y factores de
producción. La economía ecológica no es una rama de la teoría económica sino un campo
de estudio transdisciplinar, de forma que se fusionen distintas áreas de conocimiento de
forma que se puedan afrontar los problemas complejos.
Estudia las relaciones entre el sistema natural (biosfera) y los subsistemas social y
económico que se desarrollan en su seno, haciendo especial hincapié entre la inviabilidad
del crecimiento económico continuo que choca con los límites físicos y biológicos de los
ecosistemas. Una economía que Se desarrolle dentro de los límites de la naturaleza y en
términos de justicia social son centrales en la economía ecológica, aspectos que no son
centrales en la economía convencional.

ECONOMIA CIRCULAR

La economía circular se presenta como un sistema de aprovechamiento de recursos


donde prima la reducción de los elementos: minimizar la producción al mínimo
indispensable, y cuando sea necesario hacer uso del producto, apostar por la reutilización
de los elementos que por sus propiedades no pueden volver al medio ambiente.

Es decir, la economía circular aboga por utilizar la mayor parte de materiales


biodegradables posibles en la fabricación de bienes de consumo –nutrientes biológicos-
para que éstos puedan volver a la naturaleza sin causar daños medioambientales al agotar
su vida útil. En los casos que no sea posible utilizar materiales eco-friendly –nutrientes
técnicos: componentes electrónicos, metálicos, baterías…- el objetivo será facilitar un
desacople sencillo para darle una nueva vida reincorporándolos al ciclo de producción y
componer una nueva pieza. Cuando no sea posible, se reciclará de una manera respetuosa
con el medio ambiente.

 
BIOECONOMIA

La bioeconomía es un modelo económico basado en la producción de recursos biológicos


renovables y la conversión de estos recursos en productos con valor añadido, como
bioproductos, bioenergía y servicios.
Surge como respuesta a los retos medioambientales y sociales actuales para garantizar el
suministro y reparto justo de los alimentos, mitigar los efectos del cambio climático y
reducir la utilización de combustibles fósiles. Además, permite generar oportunidades
para el desarrollo económico y el empleo.
La bioeconomía pretende promover el uso de recursos biomásicos (renovables) para
sustituir a los recursos basados en combustibles fósiles al objeto de lograr productos más
sostenibles. De esta forma, se contribuye a la sostenibilidad de la economía en general y
se involucra a una multitud de industrias y servicios en este nuevo modelo económico.

ECONOMIA SOLIDARIA

La economía solidaria es una estructura de producción, distribución, consumo de bienes y


servicios centrado en el ser humano, arropada por valores como la autogestión,
autonomía, educación, equidad, ayuda mutua, transparencia, cooperación entre
entidades y el compromiso con la comunidad, en la que se destaca la solidaridad basada
en la preocupación por los demás para lograr el beneficio común.

 El principio o fundamento de la economía de solidaridad es que la introducción de niveles


crecientes y cualitativamente superiores de solidaridad en las actividades, organizaciones
e instituciones económicas, tanto a nivel de las empresas como en los mercados y en las
políticas públicas, incrementa la eficiencia micro y macroeconómica, junto con generar un
conjunto de beneficios sociales y culturales que favorecen a toda la sociedad.

ECONOMIA NARANJA

Es el conjunto de actividades que de manera encadenada permiten que las ideas se


transformen en bienes y servicios culturales, cuyo valor está determinado por su
contenido de propiedad intelectual. El universo naranja está compuesto por: i) la
Economía Cultural y las Industrias Creativas, en cuya intersección se encuentran las
Industrias Culturales Convencionales; y ii) las áreas de soporte para la creatividad.
Se conoce como naranja, porque normalmente este color se asocia con la cultura, la
creatividad y la identidad y es lo más cercano a identificar estas manifestaciones. En otras
palabras, la economía naranja implica convertir el talento en dinero a través de proyectos
que conviertan las ideas en acciones productivas, fomentando la creatividad, las
habilidades y el ingenio de los emprendedores.

CONTRATO DE COMPRAVENTA INTERNACIONAL

El contrato de compraventa internacional se basa en el acuerdo entre dos partes


(importador y exportador) domiciliados en dos países distintos que se comprometen al
intercambio de una mercancía por el pago de un precio.
En este contrato deben constar datos como el precio, la cantidad, incoterms (términos o
reglas comerciales de uso habitual en el comercio exterior, publicados por la CCI y que
establecen la distribución de riesgos, obligaciones y costes entre el exportador e
importador en una compraventa internacional, la calidad, las especificaciones técnicas, el
puerto de destino, etc.
Este es cada vez más común ya que la compraventa internacional se ha convertido en un
habitual en las empresas, puesto que es la forma que tienen de internacionalizarse y
operar por todo el mundo.

JOINT VENTURE

Esta palabra inglesa que significa colaboración empresarial es aplicada cuando dos o más
empresas toman la decisión de introducirse en un nuevo mercado o desarrollar un
negocio durante un determinado tiempo. El propósito será el de obtener las mayores
ganancias posibles de esta unión o asociación.

Esta clase de contratos está muy bien desarrollado, por los beneficios, pero también los
deberes que conlleva. Por ejemplo, establece que las empresas compartirán desde los
objetivos finales hasta el control del proyecto común. Además, una vez firmado, quedará
establecido que habrá que compartir los conocimientos de ambas empresas, ya sean
tecnológicos, sobre el mercado, sobre el producto, etc.

Sin embargo, hace falta destacar que estas asociaciones estratégicas temporales no
comprometen la independencia jurídica de cada una de las empresas, personas o
cualquier tipo de organización involucrada. Lo que las une es una finalidad comercial, que
será realizada a corto, media o largo plazo de acuerdo al motivo de la asociación y el
tiempo estimado del cumplimiento de objetivos en conjunto.
Durante este tiempo de colaboración, las empresas tendrán que trabajar en una misma
dirección y respetando las normas. Es una colaboración en donde se persigue una meta en
conjunto que representará beneficios para ambos socios. Con esta colaboración serán
compartidos el equipo de trabajo, los costes, las inversiones, el control y la
responsabilidad.

Una joint venture suele realizarse en realidad entre empresas que complementen
recursos unas con otras, que pertenezcan al mismo sector. De este modo cada una estará
encargada de aportar la experiencia que posee sobre la materia.

CONTRATO SABER HACER

La franquicia se caracteriza por ser un método de explotación, en el cual el know-


how o saber-hacer marca la diferencia con otras fórmulas de asociatividad comercial. Este
saber-hacer lo componen un conjunto de conocimientos prácticos no patentados, que
permiten al franquiciador transmitir al franquiciado la filosofía corporativa y la
metodología de su empresa, base de su éxito empresarial.

Para cualquier empresa, crear unas señales de identidad es la base fundamental de su


negocio, pero para una franquicia es indispensable desarrollar un concepto de negocio de
éxito, verificarlo, probarlo en la práctica, describirlo y recogerlo en soportes que nos
permitan su transmisión a terceros.

CONTRATO DE DISTRIBUCION EXCLUSIVA

La distribución exclusiva es un contrato atípico dentro de la legislación colombiana, esto


quiere decir que en la actualidad no tiene una regulación normativa ni el código de
comercio o en alguna ley. Este tipo de contrato es importante para negociar la distribución
de productos extranjeros.
Es importante tener en cuenta que, a pesar de que los distribuidores asumen el riesgo
comercial derivado de la reventa de los productos previamente adquiridos al empresario y
que, en principio, la resolución del contrato de distribución no supondría para el
distribuidor la pérdida de dichos clientes, en determinados casos donde se produce una
terminación anticipada del contrato de distribución los juzgados y tribunales están
reconociendo a los distribuidores una indemnización equivalente a la indemnización por
clientela prevista en la ley del contrato de agencia. El contrato de distribución se
configura, junto con el contrato de agencia, como un elemento esencial en la exportación
comercial en la medida que ofrece, con una inversión mínima y un riesgo controlado
(siempre y cuando los medios de pago pactados con el distribuidor ofrezcan garantías de
cobro) la posibilidad de llegar a potenciales consumidores/usuarios a los que, sin la
participación del distribuidor en la cadena de transmisión, sería muy complicado acceder.

CONTRATO DE AGENCIA
El contrato de agencia consiste en que una de las partes, llamada agente, se compromete
ante la otra a realizar, de manera continuada o estable, actos y operaciones de comercio
por cuenta ajena como intermediario independiente y sin asumir los resultados de dicha
actividad (salvo pacto en contrario) a cambio de una remuneración.
El primer requisito para ser agente es ser independiente por lo que no son agentes los
viajantes o representantes de comercio dependientes ni ninguna otra persona que realice
la actividad por una relación laboral por cuenta ajena.
Se considera que existe dependencia cuando el que realiza la actividad comercial no
pueda organizar su actividad o el tiempo que le dedica según sus propios criterios.
Si se pacta que el agente asuma los resultados de la operación personalmente este pacto
deberá constar por escrito fijando la comisión, si no es nulo.

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