Está en la página 1de 1

Regresar Imprimir

500 días con ella: Chico conoce chica indie


Edwin Culp

Dirección: Marc Webb.


Reparto: Joseph Gordon-Levitt, Zooey Deschanel.
Duración: 95 minutos.
Esta es una historia de chico conoce chica,
pero es mejor que lo sepas de una vez…
esta no es una historia de amor.

La comedia romántica es uno de esos repetidos y muy depurados géneros del cine norteamerican
incluso algunos de sus directores de culto no han logrado escapar. Hemos visto y sido conmovid
vez con una fórmula básica y extremadamente eficaz: una pareja se conoce, se separan por algún
hasta que logran reunirse de nuevo. O bien: el chico consigue a la chica, el chico pierde a la chi
recupera a la chica. En épocas recientes hemos ido desde la hiperclásica Cuando Harry conoció
la premiada serie de TV How I met your mother (que alarga el momento en que el chico conoce
pasando por piezas tan singulares como Annie Hall, en un género que ha permitido explorar una
manera de hacer variaciones sobre la misma fórmula.

El narrador comienza con una promesa abierta al espectador: una trama de chico conoce chica que no es una historia de amor. La historia relata los 500 días de
entre Tom Hansen (Joseph Gordon-Levitt), un joven arquitecto frustrado que escribe tarjetas de felicitación y cree que va a encontrar algún día a su media nara
Summer Finn (Zooey Deschanel), una guapa chica que llega a trabajar como asistente del jefe de Tom, una hija de padres divorciados que no cree en las relacio
plazo. Sólo que no comenzamos en el día 1, sino en el 290: el día en que Summer le ha roto a Tom el corazón y éste necesita que su pequeña, aunque muy mad
Rachel (Chloe Moretz) le consuele. Desde ahí iremos viendo fragmentos de la historia, yendo adelante y atrás en los 500 días de esta relación, cada escena enm
número del día que estamos por ver. La historia dará saltos en el tiempo: irá de un día de felicidad a otro de quiebre, contrastando fragmentos, mostrando mom
junto a otros de desencuentro, mientras el espectador va conociendo mejor a estos personajes y sus formas de pensar.

Aunque 500 días cuenta con un presupuesto mucho más alto que el de muchas películas indie, ésta mantiene una relación abierta con las formas del cine indepe
norteamericano actual. Sus herramientas narrativas cobijan las maduras actuaciones de Gordon-Levitt y una cautivadora Deschanel: diálogos inteligentes que pa
improvisadamente (con diálogos emblemáticos como “Aún eres mi mejor amigo”, o “Llevamos meses como Syd y Nancy”), personajes relajados, naturales, rea
imperfectas. La imagen se inscribe en el mismo estilo: colores poco saturados, planos cerrados, lentes largas, fondos fuera de foco. Y una serie de recursos a lo
estamos acostumbrados: foto fija, entrevistas, comentarios del narrador. Todo en una película que descansa sobre la construcción de sus personajes.

Junto con los personajes, la música también nos va llevando por la trama. Tom y Summer hablan por primera vez sobre una canción de The Smiths, su primer
fuera del trabajo es en un bar de karaoke cantando covers de The Pixies y Nancy Sinatra, y a lo largo de la película también escuchamos más piezas de The Sm
Spektor, The Black Lips, Doves, Simon and Garfunkel, entre otros. No es de extrañar, puesto que Webb ha trabajado como director de videoclips (de músicos
o My Chemical Romance). Lo que sí llama la atención es que Webb no se deje llevar por la tentación de llenar la película de los efectos visuales y narrativos a
tiene acostumbrados el videoclip. Lejos de ello, respeta la forma que encontró para su relato y más bien integra la música de un modo que la vuelve parte funda
narración.

Webb elabora una película propositiva, pero no es capaz de mantener su forma por encima del género: coincidiendo con uno de los momentos menos interesant
soundtrack (“Quelqu’un m’a dit” de la primera dama francesa), la película abandona la forma que había encontrado y comienza a describir las emociones de To
la pareja se va disolviendo. Los recursos iniciales no continúan desarrollándose a lo largo del filme y se atora con los lugares comunes del género. Con todo, ha
trama logra remontar y la película vuelve a las promesas iniciales.

Si bien 500 días con ella no será piedra angular de las comedias románticas, esta película poco pretenciosa acaba cumpliendo con otra de sus promesas: un buen
verano que se alarga para dejarse disfrutar en otoño.

Edwin Culp. Docente e investigador de cine en la Universidad Iberoamericana.

www.nexos.com.mx

También podría gustarte