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1.

Nuestra Actitud

“Entrad por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con alabanza; Alabadle, bendecid su nombre.”
Salmos 100:3

Lo primero que debemos tener en claro es cuál debe ser nuestra actitud para salir al templo. Es triste ver
cuántas personas llegan al templo sin expectativa de recibir algo nuevo de Dios y con sus manos vacías,
cuando tenemos tantas razones para adorar a nuestro Dios. Siempre tengamos pendiente que el primer
propósito por el cual nos congregamos es para GLORIFICAR A DIOS. La actitud correcta para llegar al
templo debe ser de ALABANZA. No hay que esperar que el servicio inicie para adorar a Dios, sino que
desde que lleguemos al templo debemos de tener la disposición de adorar aun cuando el servicio no haya
iniciado.

La segunda condición para actitud correcta es PUNTUALIDAD. Cuando estamos ansiosos de algo
regularmente nos desesperamos por recibirlo. Por ejemplo, cuando tenemos alguna salida importante y hay
que despertarse temprano en la mañana, es probable que no podamos dormir bien durante la noche, sino que
nos despertemos varias veces porque no queremos que el sueño nos traicione. Ese mismo deseo de no
perdernos nada de lo que Dios tiene para nosotros en cada servicio, estar expectante por lo que Dios tiene,
debe ser nuestra actitud. Es seguro que cuando actuamos así recibiremos de Dios en cualquier parte del
Servicio, pues no esperamos que las cosas pasen, sino que hacemos que las cosas pasen.

2. Nuestra Vestimenta para el Servicio

Ingrese al templo vestido acorde a quien va a visitar, pensemos que Jesús está allí presente, ahora bien ¿de
qué manera me voy a vestir para estar frente al Señor? No entre al templo con ropa inapropiada. Cuide su
manera de vestir y presentarse, pero tenga cuenta, el templo no es un lugar para exhibir ropa sino para adorar
a Dios con todas nuestras ganas. Traiga una ropa que le permita adorar a Dios con libertad.

3. Mantenga el Orden y la Limpieza dentro del Templo

En nuestro templo las sillas y los instrumentos tienen un orden y una ubicación, procure mantenerlo. Es
responsabilidad de todos mantener el lugar limpio y ordenado, y que este orden también se refleje en la
disciplina del lugar.

a. Evitemos desordenar las sillas o cualquier otro elemento


b. Evite correr dentro del templo
c. Apague su teléfono celular antes del servicio o póngalo en Modo Avión, o en caso de que lo necesite
para recibir alguna llamada obligatoria, póngalo en modo vibrador, pero no permita que esto le robe
su comunicación con Dios, porque Dios no necesita celular para hablar con usted.
d. Si traemos infantes al templo cuide que no molesten la devoción de la comunidad. Si son bebés,
prevenga que lleguen al templo alimentado y limpio; si ya caminan, impida que corran como si
estuviesen en la plaza. Manténgase cerca de las puertas, para poder salir con la criatura por unos
instantes para aquietarle en caso de que se altera.

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4. Cuando se lee la Biblia

Cuando se lee la Palabra del Señor debemos honrarla poniéndonos de pie. Si estamos llegando al templo o
moviéndonos de un lugar a otro en el momento que se vaya a leer alguna porción de la Palabra, debemos
detenernos allí y esperar que se termine de leer para continuar nuestra marcha.

5. “Cada cosa en su tiempo”

Aprenda que Dios es Dios de orden y quiere que cada cosa sea hecha en orden. Cuando vengamos al templo
ocupemos nuestro tiempo conforme el programa que se vaya ejecutando. Es decir, al momento de las
alabanzas, no estemos leyendo la biblia, sino cantando con voz de júbilo a Dios. Durante la predicación no
podemos estar de rodillas (Caben excepciones), sino recibiendo el mensaje de Dios para nosotros.

6. Durante el llamado

Cuando se realice el llamado a los amigos para recibir a Cristo como Su Salvador, tome una actitud de
oración, orando por cada amigo, pues cada uno pelea una batalla en su mente para poder dar el paso de Fe.
Sea usted sabio y ore para que el Espíritu Santo haga la obra y dé el denuedo necesario a cada amigo para
tomar la decisión más importante de sus vidas: Recibir y Seguir a Cristo

7. Al finalizar el servicio

Cuando termine el servicio no se precipite en la salida como si estuviera escapando de un “grave peligro”.
Salga en calma, procurando saludar la mayor cantidad de hermanos pero evite mantener conversaciones
dentro del templo, si tiene algo por conversar, hágalo fuera del templo.

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XII
NORMAS DEL CREYENTE (Parte 3)

Hemos arribado a nuestra última clase de este discipulado. Damos gracias a Dios porque hemos llegado
hasta aquí.

III. LA VESTIMENTA DEL CRISTIANO

Siempre hemos escuchado que el cristiano debe ser ejemplo en todo, esto implica su manera de hablar,
sus actitudes y aún su vestimenta. Vivimos en un mundo muy atacado por las modas y estilo de vestir. El
reconocido predicador Charles H. Spurgeon dijo en una ocasión “Londres recibe sus modas directamente de
París; y Paris las recibe directamente del Infierno”. No se necesita ser un moralista, ni siquiera religioso o
estudioso de la biblia para darnos cuenta de la inmoralidad reinante en la vestimenta de moda, especialmente
en las hembras, aunque también toca a los varones y su auge ha sido tan grande que esta modalidad de
vestimenta ha entrado a nuestros lugares de adoración, y esto debido a que líderes religiosos han dejado los
principios bíblicos, algunos para no ofender, otros para llenar los templos y otros por falta de conocimiento,
sin embargo, aunque usted vea lo que vea, no estamos llamados a ACOSTUMBRARNOS a lo que vemos y
creer así que TODO ESTÁ BIEN, sino que debemos de analizarlo bajo LOS PRINCIPIOS DADOS POR
DIOS, que se encuentran en Su Palabra (La Biblia).

Veamos a continuación los Principios Divinos respecto a la vestimenta del Hijo e Hija de Dios:

“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento,
para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” Romanos 12:2

El versículo anterior, aunque no alude directamente a la vestimenta, se divide en tres frases que tocan muy
puntualmente cada área de nuestra vida cristiana, y que queremos sacar a relucir:

1. “No os conforméis”. La palabra conforméis viene de una palabra griega que significa “tomar la
forma de”, es decir, el mensaje de Dios es que no tomemos la forma de este mundo, que no sigamos
en su corriente pues el que se convierte en hijo de Dios ya “no es de este mundo” (Juan 15:19). Dios
es explícito, y nos quiere enseñar que no todo lo que se practica en el mundo debe convertirse en algo
“normal” en nosotros, por el contrario lo que Dios quiere es que nos “transformemos”
2. “Sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento”. La Palabra
Transformar es “Cambiar la forma”, Dios anhela que no tomemos la forma del mundo, por el
contrario que cambiemos nuestra forma, la que hemos traído del mundo, según renovemos nuestro
entendimiento. Es decir, conforme vayamos creciendo en Dios (A través de la oración, el estudio de la
Palabra y la Dirección del Espíritu Santo) debemos ir cambiando la manera de pensar, y dejar de
pensar como el mundo, para comenzar a pensar como un hijo o una hija de Dios.

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3. “Para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”. Lo último que
este verso encierra es que según vayamos creciendo y transformándonos, vamos a comenzar a
COMPROBAR cuál es la voluntad de Dios para nuestras vidas. Es decir, mientras más nos vayamos
alumbrando con la Lámpara (Salmos 119:105), entonces comenzaremos a ver esas cosas que antes no
sabíamos que estaban ahí, como por ejemplo, pasiones ocultas, deseos desordenados y actitudes
incorrectas, y el Espíritu Santo nos guiará a la Voluntad del Padre, la cual debemos obedecer sin
poner oposición alguna, aunque nos cueste lo que nos cueste (1ra Pedro 2:24).

El verso anterior encierra principios que abarcan también nuestra forma de vestir. El plan de Dios no es que
nos parezcamos al mundo, sino que procuremos honrarle a Él en cada cosa que hagamos. Ahora bien,
debemos preguntarnos: ¿Cómo debo vestirme? ¿Qué debo considerar al momento de elegir mi ropa? ¿Cómo
agradar a Dios con ello? La Palabra de Dios en distintos versos nos da luz de cómo debe ser nuestro vestir
cristiano, la mayor parte de lo que tocaremos se refiere a la mujer, pero los PRINCIPIOS se aplican
igualmente para el hombre, veamos:

“Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentosos,
ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos, sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan
piedad” 1ra Timoteo 2:9-10

En este verso aparecen tres palabras claves, las cuales definiremos a continuación:

1) Decoro. Significa vestimenta decente, limpia, ordenada, bien dispuesta, apropiada y de buena
apariencia que demuestra respeto. El decoro hace que nuestras acciones, incluyendo el vestir no le
traigan vergüenza al evangelio. Nuestra apariencia debe ser digna del evangelio.

Muchas hermanas, antes de conocer al Señor acostumbraban utilizar una vestimenta que estaba muy lejos del
Decoro. Es interesante saber que en algunos lugares, como por ejemplo tribunales de justicia, de algunos
países, se les prohíbe a las mujeres abogadas y hasta a las que no son abogadas, ingresar con ropa escotada, o
con faldas cortas, a la sala donde se llevará el juicio. ¿No es interesante? ¿A qué se debe? Es que existen
ciertas vestimentas que no demuestran ningún respeto, por lo que es obvio que las mismas no deben ser parte
del armario de una mujer cristiana.

La mujer de Dios NO se sujeta a las modas, ni usa ropas provocativas o estilos sensuales como mini-faldas,
vestidos ceñidos, cortos o escotados, pues NO corresponde a mujeres que profesan piedad. La santidad
interna se refleja en la conducta, comportamiento, modo de hablar y en el vestir de la mujer de Dios.

2) Pudor. Significa vestimenta con vergüenza. Tanto pudor como modestia son sinónimos de la palabra
casto, esta palabra implica principalmente un abstenerse de acciones o pensamientos, también deseos
que no sean puros. Vestirse con pudor significa usar ropa que no suscita pensamientos, ni acciones
que promuevan la sensualidad. Deben de vestir femenino, pero no provocativo, esa es la diferencia.
Cuando nos vestimos enviamos un mensaje. ¿Qué mensaje estás enviando tú? ¿Tu forma de vestir
dice que eres una hija de Dios, imitadora de Cristo?

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Las mujeres que aman a Dios y respetan la Escritura bíblica se distinguen por usar ropa reservada que cubre
su desnudez y no expone el cuerpo, pues NO desean llamar la atención de los hombres, suscitando miradas
viciosas, tampoco espera piropos obscenos, ni pretende levantar pasiones. La verdadera mujer de Dios NO
usa ropas insinuadoras que inciten el deseo de las personas hacia las partes íntimas de su cuerpo, tampoco
ropas marcadas a la silueta del cuerpo que estimule el erotismo e instintos carnales mediante la
voluptuosidad.

¿A qué nos referimos cuando hablamos de “cubrir su desnudez”? Cubrir la desnudez no es sólo cubrir ciertas
áreas de nuestro cuerpo, sino que la biblia da detalles específicos de hasta donde debemos cubrir nuestro
cuerpo, para no llamar la atención ni despertar miradas lujuriosas.

Una persona puede descubrir su desnudez aunque la misma esté "vestida". No basta con estar "vestido" si el
cuerpo no se cubre adecuadamente. En toda la Biblia la desnudez se condena como vergonzosa. La palabra
"desnudez" no se limita a no llevar ni un hilo de ropa. Adán y Eva, cuando "conocieron que estaban
desnudos" (totalmente desnudos), "cosieron hojas de higuera y se hicieron delantales", solamente lo
suficiente para cubrir las partes del cuerpo más privadas. Sin embargo, todavía estaban "desnudos". En
Génesis 3:10, aun después de vestir "delantales", Adán dijo: "estaba desnudo y me escondí". Entonces fue
cuando Dios los vistió con túnicas de pieles. ¿Por qué les vistió Dios con túnicas de pieles? Porque todavía
estaban desnudos (Génesis 3:8-11, 21).

La Biblia usa la palabra "desnudo" aunque la persona vista "algo" (aunque no esté totalmente desnuda).

Definición de la desnudez:

"Les harás calzoncillos de lino para cubrir su desnudez; llegarán desde los lomos hasta los muslos"
Éxodo 28:42

¿Qué es el Muslo? “Parte de la pierna, desde la juntura de las caderas hasta la rodilla" (Según DRAE).

Muchas mujeres en las iglesias, y no solamente mujeres jóvenes, llevan ropa que deja desnudos los hombros,
los senos, la cintura (el ombligo), y las piernas. Llevan shorts, vestidos, faldas, blusas que exponen partes del
cuerpo que deben ser cubiertos. La moda ahora es exponer parte de los senos y de sus muslos, pero la mujer
con pudor y modestia sabe que estos son objetos sexuales y que no son para los ojos de ningún hombre
excepto su marido. Esto también se aplica para los varones.

 Está de más decir que la ropa transparente es pura desnudez, no cubre el cuerpo, sino lo expone y
exhibe ante los ojos de todos.
 Ropa muy ajustada al cuerpo para exhibir lo que debe cubrir, mayormente las caderas, los muslos y
los senos, también es desnudez, pues una ropa muy ajustada al cuerpo es como otra capa de piel, y no
más, pues la ropa muy ajustada al cuerpo es para exhibir la forma o figura de las caderas, piernas,
trasero, senos, etc— ¡Es como otra capa de piel! Es como parte del cuerpo mismo. Esta no sirve para
"cubrir decorosamente”, sino para exhibir, delinear, señalar y acentuar la forma del cuerpo y por eso
seducir.
 Ropa muy ajustada al cuerpo es ropa provocativa y la mujer con pudor y decoro no quiere ser
seductiva. La hermana que use ropa deshonesta regularmente dice: "Pero yo no quiero seducir a

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nadie", pero su ropa sí lo hace. A este tipo de ropa es que la Biblia le llama "atavío de ramera"
(Proverbios 7:10).

3) Modestia. Significa vestimenta con moderación, con sencillez; no con lujos buscando vanagloria,
provocar envidia en otros o gloria propia con ropas costosas.

La motivación al vestir en la mujer cristiana debe ser el agradar y glorificar a Dios, no el orgullo ni la
jactancia. La verdadera mujer de Dios sólo pide ser respetada y valorada por su inteligencia, sus valores y
cualidades como persona piadosa. Una mujer que no le importa lo que los demás piensen de ella, ni de su
cuerpo, sino que su única inquietud y propósito es agradar a su amado, y a Dios sometiéndose a su
voluntad. La modestia habla de que la motivación de la mujer al vestirse no sea mostrar lo que tiene y
provocar a otros, a las mujeres a envidiarles y a los hombres a codiciarles.

Dios no desea que centremos nuestra vida en la acumulación de bienes materiales, pueden llevar nuestro
corazón a una vida vana, vacía, sin sustancia ni espiritualidad. ¿Han notado que hay jóvenes que pasan
una hora hablando de la ropa que tienen? Que su mente está llena de las marcas y hasta se pasan horas
viendo revista para ver las tendencias. Hay “creyentes” que están fijándose de la ropa de cada persona en
el culto y criticando, y hasta dejando de ir a la iglesia por no repetir una ropa, eso es VANIDAD.

Veamos qué más dice la Palabra de Dios al respecto:

“Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la
palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas, considerando vuestra conducta casta y
respetuosa. Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos,
sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande
estima delante de Dios.” 1ra Pedro 3:1-4

El apóstol enseña que la vestimenta más importante es la del corazón. No podemos vestir de una manera
correcta como creyentes, si primero no trabajamos en nuestro corazón.

El corazón es el centro del asunto. El núcleo de nuestro ser, la esencia de lo que somos. Es el lugar donde
nuestra mente y voluntad, nuestras emociones y convicciones se unen para darle forma a lo que creemos y las
elecciones que hacemos. Nuestra conducta está determinada por lo que se encuentra en nuestro corazón.

“Como en el agua el rostro corresponde al rostro, Así el corazón del hombre al del hombre”
Proverbios 27:19

La claridad del agua para reflejar la cara (sea el hombre o sea alguna otra cosa) se compara con el corazón,
que refleja la verdadera realidad del hombre. Un dicho popular afirma que “caras vemos, corazones no
sabemos”, acentuando lo difícil que es ver el corazón humano. No es así con Dios, quien puede ver sin
dificultad el corazón del hombre. En conclusión, enseña que el agua y el corazón no pueden falsificarse.

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Debemos de estar alertas porque nuestro corazón tiene una falla grave:

“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Yo Jehová, que escudriño
la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.”
Jeremías 17:9-10

Entonces, debemos de cuidar nuestro corazón porque de él mana la vida (Proverbios 4:23), o sea surgen todos
los asuntos de nuestra vida y como vimos en Jeremías, Dios prueba los corazones. La manera como vestimos
y nos comportamos muestra lo que está dentro en la mayoría de los casos.

Es obvio que “Si en tu corazón sólo tienes vanidad, vas a vestir extravagante. Si en tu corazón tu deseo es ser
sexy, vas a vestir provocativa, si no estás contenta con tu género, vas a vestir como hombre, etc…”

Hoy se ha introducido, en muchas “iglesias” del Señor, lo mundano y el libertinaje, sacando fuera de contexto
un famoso texto: “Dios mira el corazón” (1 Samuel 16:7). Toman medio texto, y para colmo mal interpretado
para hacer una doctrina a conveniencia. Cuando el verdadero contexto de ese pasaje se refiere al joven David,
el cual siendo pastor de las ovejas de su padre y el menor de entre sus hermanos, fue llamado por Dios y
ungido por Rey de Israel, porque el corazón de David era apto para cumplir esa función -y en ese sentido
Dios le dijo al Profeta: “no mires a su parecer ni a su estatura; porque yo lo desecho”. Esta respuesta de Dios
se debió a que en Israel existía la mala costumbre de elegir a sus reyes, basándose solo en características
físicas, como por ejemplo, en lo alto de la estatura y bonito semblante de rostro sin considerar otras áreas
también importantes como la moral del corazón. Aquí en ningún momento dice que Dios descarta o que no le
interese el cuerpo o el aspecto externo y físico de su pueblo como muchos ignorantes piensan hoy. Todo lo
contrario, en el Nuevo Testamento se habla claramente de la importancia de la santidad moral del cuerpo y su
vestimenta como distinción de un pueblo santo (1 Tesalonicenses 2:9; 1 Pedro 3:2-5; 1 Corintios 6:9).

Hay una pregunta interesante ¿Es pecado para una mujer usar pantalones?

Este tema ha sido de mucho debate en las iglesias, incluso ha provocado el sectarismo dentro de las iglesias, y
se toma el siguiente texto:

“No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer; porque abominación es a Jehová
tu Dios cualquiera que esto hace” Deuteronomio 22:5

¿Cuál es el principio de este verso? Este versículo ordena a los hombres y a las mujeres que no inviertan sus
papeles sexuales. No es un versículo acerca de la manera de vestir. Actualmente el rechazo de los papeles es
muy común, hay hombres que quieren convertirse en mujeres y mujeres que quieren convertirse en hombres.
No es la forma de vestir lo que ofende a Dios, sino el usar esta forma para actuar el rol del otro sexo. Dios
tuvo propósitos específicos para hacernos originalmente hombre y mujer.

a. No debe vestir una hija de Dios "Hábito", "Traje" de hombre. La mujer debe vestir como
mujer y el hombre como hombre
b. Esto es una abominación a Dios. Aunque este mandato se encuentra en la Ley para judíos, no
siendo una Ley ceremonial, sino una ley moral, y siendo Dios inmutable en su moralidad, este
mandato se considera como un principio para toda mujer temerosa de Dios,

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¿Significa esto que una hermana no debe bajo ningún concepto usar una prenda distinta de la falda?

No hay duda de que hay un expreso mandamiento de Dios a que las mujeres y hombres creyentes no usen
hábitos del sexo opuesto. ¿Por qué? Sencillamente porque Dios quería dejar bien claro las diferencias entre
hombres y mujeres, y porque la sodomía, o el homosexualismo hacían patente su depravación por medio de
manifestaciones visibles de su pecado con la vestimenta, tanto como hoy los sodomitas visten la ropa del
sexo opuesto. Lo que este pasaje prohíbe es que un hombre o una mujer se vistan como su opuesto, y no
dejen ver con claridad que son hombre y mujer.

Algunas consideraciones:

- Los Saudíes que usan faldas como una vestimenta pudorosa y varonil.
- Lo mismo sucede con una mujer cuyo trabajo demanda cierto tipo de vestimenta.
- Cuando Dios escribió este mandato los hombres usaban un tipo de vestimenta varonil parecido a
una bata o falda.
- Tenemos un principio, no una lista de reglas específicas en cuanto a esto.
- El problema no es el pantalón o la falda sino ¿Qué pantalón? Y ¿Qué falda?

¿Qué creemos como iglesia? El pantalón es una vestimenta muy riesgosa en la mujer, pues debido al cuerpo
de la mujer y a la manera en que es usado, con facilidad se puede perder el pudor y el decoro. No creemos
que el pantalón en sí sea pecado, pues cubre lo que la biblia exige que sea cubierto, sino la forma en que se
usa es el peligro, ya que mayormente se salta la línea del decoro y el pudor. Como iglesia creemos que las
hermanas deben aprender a vestir como una mujer cristiana y que, si por alguna razón (trabajo, estudio, etc.)
le tocara usar un pantalón, procure hacerlo decorosa y pudorosamente, de modo que Dios no se vea
deshonrado, ya que Él todo lo ve.

¿Y qué de una hermana venir al templo con pantalones? Debemos vestir de acuerdo a la ocasión. No
vestiríamos un traje para ir a ver un juego de basketball. Entonces, por protocolo debemos de elegir
sabiamente como vestirnos para un culto, que es diferente a un juego de basketball por ejemplo.

¡EL TEMPLO NO ES LUGAR PARA QUE LAS HERMANAS VENGAN EN PANTALONES! Además,
hay un verso que cita:

“Por lo cual, si la comida es a mi hermano ocasión de caer, jamás comeré carne, ni haré cosa con que mi
hermano caiga” 1era Corintios 8:13

En fin, cualquiera que sea la vestimenta, calzado o maquillaje que usen las mujeres cristianas en cualquier
cultura o sociedad, deben estar basados en estos tres principios: El de ser decorosos (apropiado y de buen
gusto), con pudor (apropiada, aceptable de una mujer cristiana, que no sea sexualmente provocativa) y con
modestia (libre de orgullo, pretensión y vanidad) especialmente cuando se asiste a la casa de Dios.

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Culminaremos este tema con algunos preguntas que cada mujer cristiana debe hacerse y algunos puntos que
como cristiano debemos considerar:

 ¿Mi vestir a diario es modesto, decoroso, exhibe pudor, vende santidad o en cambio incita a los
hombres a la lujuria?
 ¿Dedico más tiempo a Dios y a obedecer su palabra que a arreglarme?
 ¿Presto más atención al bienestar de mis hermanos y personas a mí alrededor que a mi ropa,
cosméticos etc…?
 ¿Soy conocida por ser una persona bien vestida físicamente o por mi buena conducta y actitud? En
el mejor de los casos ambas cosas, siendo la segunda la que más debe de destacar.
 ¿Estoy consciente de que Dios prueba el corazón y no se guía por lo que ve fuera?
 ¿Sé que descuidar mi aspecto físico también está mal delante de Dios?

Puntos a considerar:

- No es vestimenta para un hijo o hija de Dios: Ropa ceñida al cuerpo, Ropa transparente, Ropa que
esté por encima de las rodillas, y que deje descubierta partes que no sean brazos, cabeza y piernas
(de la rodilla hacia abajo), pues cualquier otra área al descubierto es deshonroso delante de Dios.
- Ropas con símbolos inmorales, o imágenes indecentes no deben ser usadas por cristianos.
- Las ropas exageradas o extravagantes (colores exagerados o brillos, que arrasen miradas), así
como peinados y adornos.
- En nuestra iglesia, las hermanas (miembros), NO deben asistir en pantalones.
- Ropa “guayadas”, con rotos y que muestren parte de la que debe ser cubierta, no es para un
cristiano.
- Las mujeres deben tener su pelo largo (por lo menos por debajo de los hombros), los varones
deben tener su pelo corto según enseña 1ra Corintios 11.
- Los varones no deben cubrir su cabeza en el templo (gorros o gorras).
- Finalmente, cada vez que vaya a vestir una ropa, y sienta que tiene que preguntarse si en verdad
esa ropa es de agrado a Dios o no lo es, tome la decisión de no usarla, pues muy probablemente es
la voz del Espíritu Santo dándote a entender que no es de Dios, y hoy es un buen día para revisar
tu armario y sacar todo lo que a Dios no le agrada. Ojo: Lo que no agrada a Dios, no es ropa
exclusiva para un día. Dios es Dios todos los días.

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XIII
DIVERSOS TEMAS DE IMPORTANCIA

(PARTE A)

“Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres,
conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.” Colosenses 2:8

Hoy en día son muchas las corrientes nuevas que se han infiltrado dentro de la iglesia. Corrientes llenas de
filosofías puramente humanas, cargadas de sutilezas con el único fin de distorsionar la verdad de Dios por la
mentira, y que lamentablemente han sido abrazadas por las iglesias alcanzando así gran popularidad dentro
del pueblo evangélico.

En la parte A de esta clase trataremos sobre estos temas, pidiendo al Espíritu Santo su entendimiento:

1. EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD

A) ¿QUÉ ES? Y ¿QUÉ ENSEÑA?

El “Evangelio de la Prosperidad” es una creencia religiosa compartida por muchos cristianos, quienes
sostienen que la bendición financiera y el bienestar físico son siempre la voluntad de Dios para con ellos,
y que la fe, el discurso positivo y las donaciones a causas religiosas aumentarán la riqueza material propia. La
doctrina enfatiza la importancia del empoderamiento personal y propone que es la voluntad de Dios que su
pueblo sea feliz en esta tierra.”

Lo que este falso evangelio predica es que nosotros podemos usar a Dios para tener en esta vida prosperidad,
pero una prosperidad en términos materiales (buena salud, abundancia de bienes, carros del año, casas
grandes, etc). Además, prometen una felicidad que:

1- No depende de tener a Cristo como Señor y Salvador, sino de tener bienes materiales.

2- No trasciende a nuestras vidas (solo aplica para la tierra). Mientras que la Biblia enseña que el gozo
del Señor trasciende aún más allá de nuestra vida aquí en la tierra. (El infierno está llena de gentes que
fueron muy prósperos en la tierra en términos materiales, pero ¿De qué les valió si hoy se encuentran
en la peor miseria de toda su historia?

Además, este “evangelio” enseña que la enfermedad es producto del pecado, por cuyo motivo, Cristo cargó
"nuestras enfermedades en la cruz" y por eso nadie tendría que estar enfermo. Si alguien padece enfermedad
es por su pecado y su falta de Fe. También dicen que si ofrendas grandes cantidades de dinero para la "causa"
Dios te devolverá dicho dinero "acrecentado" de acuerdo a tu fe.

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B) SU FORMA DE PREDICAR.

Las predicaciones se caracterizan por un fin proselitista, es decir, en lugar de querer convertir
desinteresadamente un alma persiguen seguidores a su merced. Capta gran cantidad de oyentes porque
endulza los oídos, hablándoles lo que la gente quiere escuchar con frases tales como:

1. ¡Dios te quiere bendecir!


2. ¡Dios tiene un regalo para ti!
3. ¡Dios quiere solucionar tus problemas, cancelar tus deudas y prosperarte!
4. ¡Dios quiere tu felicidad!

Pero pasando por alto u omitiendo información de doctrinas vitales sobre:

1. El arrepentimiento de pecados.
2. La verdadera obra de cristo en la cruz.
3. El plan de salvación (El castigo eterno y la salvación eterna).

C) SUS GRANDES MALES:

- Despierta codicia (das más solo para recibir más; no por gratitud) (2da Corintios 9:7)
- Amor al Dinero (1ra Timoteo 6:10)
- Malos deseos como Avaricia, Egoísmo, Otros. (Lucas 12:15)
- Fija la mirada en las cosas terrenas (1ra Juan 2:15)

D) ¿QUÉ PENSAMOS AL RESPECTO?

Nuestra creencia está basada en la Palabra de Dios y la podemos resumir al leer estos tres versos que siguen a
continuación:

“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”
Mateo 6:33

“Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.”
Filipenses 4:19

“Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. Porque los que quieren enriquecerse caen
en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y
perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de
la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.”
1ra Timoteo 6:8-11

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2. LA CONFESIÓN POSITIVA

A) ¿QUÉ ES? Y ¿QUÉ ENSEÑA?

Es otra herejía infiltrada en la iglesia que no nace en la Palabra de Dios, sino en la Nueva Era y la Metafísica.
Esta enseña que nuestras palabras tienen poder para crear realidades, es decir, que al DECLARAR,
DECRETAR o simplemente CONFESAR nuestras palabras crean realidades las cuales pueden ser vistas en
el futuro o en el presente.

Gracias a esta teología se escucha a muchas personas con expresiones tales como:

“Decreto que esta ciudad queda libre de las Drogas”


“Ordeno al huracán que no atraviese nuestra isla”
“Te declaro sano”
“No confieses que estas enfermo”

B) SUS GRANDES MALOS

- Enseña que Dios está atado a la Palabra del Hombre. (“No aceptamos un “NO” por respuesta”)

- Diviniza al hombre y humaniza a Dios: En este sentido es el hombre quien determina las cosas que
sucederán, no el hombre.

- Dios es mirado como un “genio de la lámpara”, como un medio y no como el fin. Dicen que Dios
debe concedernos nuestras peticiones sólo porque tenemos fe al momento de pedir las cosas.

C) ¿QUÉ PENSAMOS AL RESPECTO?

Nuestra creencia sobre este tema permanece en la Palabra de Dios y la podemos resumir al leer estos tres
versos que siguen a continuación:

“Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.”
1ra Juan 5:14

Las respuestas a nuestras peticiones no dependerán de nosotros, ni de que lo declaremos o confesemos con
nuestras palabras, sino que dependen de que sea Su Voluntad.

“Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi
carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual
tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se
perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que
repose sobre mí el poder de Cristo.” 2da Corintios 12:7-9

¿Por qué Pablo no declaró o decretó para que fuera quitado su aguijón? En lugar de eso ROGÓ a Dios para
que lo quitase y Dios no lo quitó. Ninguno de nosotros va donde su jefe o el gobernante de su nación
diciéndole: “Yo te ordeno que hagas esto o aquello”; entonces si no lo hacemos con ellos ¿Quién nos dio
derecho para hacerlo con el Soberano Dios?
71 | P á g i n a M a n u a l d e D i s c i p u l a d o p a r a N u e v o s C r e y e n t e s - I C S U
“!Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y
ganaremos; cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que
se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor
quiere, viviremos y haremos esto o aquello. Pero ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia
semejante es mala;” Santiago 4:13-16

La confesión positiva es una jactancia que ha engrosado el corazón de los hombres dentro de las iglesias
creyendo que sus palabras tienen poder para producir realidades. En lugar de eso, al hablar debemos decir “si
el Señor quiere” porque toda nuestra vida depende de Él y no de nuestras confesiones.

3. LOS DONES ESPIRITUALES

“Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo
Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el
hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a
otro, interpretación de lenguas.”
1ra Corintios 12:8-10

Los dones espirituales son herramientas dadas por el Espíritu Santo a la iglesia para provecho del Cuerpo de
Cristo.

“Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho.” 1ra Corintios 12:7

Sin embargo, muchas iglesias hoy en día creen en “la cesación de los dones espirituales”, esto es, que los
dones ya cesaron y que sólo pertenecieron a la época antes de Jesús

¿QUÉ PENSAMOS AL RESPECTO?

1. Están vigentes: Según lo enseña la Palabra de Dios los dones se encuentran vigentes hasta el día en
que Cristo venga a buscar Su Iglesia.

2. Son dados conforme el Espíritu Santo quiere. (1ra Corintios 12:11)

3. Son herramientas y deben ser anhelados por los hijos de Dios.

4. Hay juicio para los que falseen de ellos.

Todas estas enseñanzas han encontrado lugar dentro de la iglesia porque hemos dejado a un lado la Palabra
de Dios. Como cristianos, la biblia es nuestro libro de texto y por ella seremos guiados hasta la estatura de un
varón perfecto. Es tiempo de volver a la Palabra de Dios y vivir para Él.

72 | P á g i n a M a n u a l d e D i s c i p u l a d o p a r a N u e v o s C r e y e n t e s - I C S U
(PARTE B)

En esta parte B hablaremos sobre el deseo de la iglesia y la responsabilidad de cada nuevo miembro:

¿QUÉ PERSEGUIMOS COMO IGLESIA?

 Ser una Iglesia que mantenga en alto los principios enseñados en la Palabra de Dios.
(1ra Timoteo 3:15)

 Que lejos del legalismo y del liberalismo seamos amantes de la Santidad y defensores de ella.
(Hebreos 12:14)

 Que pongamos en alto el Nombre de Cristo, exaltando su Gloria y Poder (Efesios 1:5-6)

 Que seamos las manos y los pies de Cristo, siendo Sal y Luz en este mundo que muere sin Dios
(Mateo 28:19; Mateo 5:13-16)

¿CUÁL ES EL COMPROMISO DE LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA?

 Unirse a la visión y proyectos de la iglesia.

 Integración y fomento de la unidad del Cuerpo de Cristo.

 Defensor de las doctrinas de la Iglesia.

 Respeto a las autoridades de la iglesia.

 Amor por la iglesia, por la membresía y por el bienestar y testimonio de ella.

73 | P á g i n a M a n u a l d e D i s c i p u l a d o p a r a N u e v o s C r e y e n t e s - I C S U
¡FELICIDADES POR HABER COMPLETADO ESTE DISCIPULADO!

DEBES SABER QUE:

• NUESTRA MISIÓN ES:

"VAYANA LAS OVEJAS PERDIDAS DEL PUEBLO. VAYAN Y ANUNCIEN QUE EL REINO DE LOS

CIELOS SE HA ACERCADO. SANEN A LOS ENFERMOS, RESUCITEN A LOS MUERTOS Y

EXPULSEN A LOS DEMONIOS. USTEDES HAN RECIBIDO GRATIS ESTE PODER; NO COBREN

TAMPOCO POR EMPLEARLO."

• NUESTRA MISIÓN ES:

"SER UNA IGLESIA SANTA, UNIDA POR EL VÍNCULO DEL AMOR, QUE CON EXCELENCIA

RINDA CULTO A DIOS, QUE SEA REFUGIO AL AFLIGIDO, DONDE SEAN MULTIPLICADOS LOS

MINISTERIOS Y LOS DONES, Y QUE BAJO LA VISIÓN CELULAR ESTABLEZCA NUEVAS

IGLESIAS HIJAS"

• NUESTRA META ES:

"QUE CADA CREYENTE GANE UN NUEVO CREYENTE CADA SEIS (6) MESES."

PASO SIGUIENTE:

REUNION CON LOS PASTORES.

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