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Dialnet ElOrigenDeLosSeresMiticosYSuImpactoSobreLaMenteHum 6270245 PDF
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Fidel Fernández-Rubio
Es licito pensar que las más primitivas especies dían entonces explicarse de otra manera. Por ejemplo,
del género Homo (Linnaeus, 1758) ya debieron sor- los duendes como origen de los ruidos nocturnos y
prenderse de fenómenos naturales tales como el rayo, justificación del olvido de dónde se colocaron obje-
el trueno, el viento, la enfermedad, la alternancia día/ tos; los kraken y serpientes marinas, como origen de
noche, los volcanes, los terremotos, etc. Conforme naufragios imprevistos; los gigantes, como explica-
avanzó el proceso de la humanización y el desarrollo ción de hallazgo de grandes huesos; Caribdis, como
de su capacidad cognoscitiva debió exacerbarse la ne- justificación de un remolino marino; sirenas, como
cesidad de explicar el origen y razón de esos hechos. visión fugaz y deformada de focas; la fragua de Vul-
Esto es muy claro en muchas tribus primitivas donde cano, como explicación de los volcanes; las Moiras
cualquier acaecer, bueno o malo, se atribuye a los es- o Parcas, como justificación de las diferencias en la
píritus. Esta línea evolutiva condujo a pensar en la duración de la vida y el acaecer de la muerte, etc., etc.
intervención de dioses y otros seres invisibles como Seguidamente exponemos, muy en esquema por
causantes de estos fenómenos, formándose mitos y su extensión, los más conocidos seres mitológicos
leyendas, diferentes según el tiempo y las culturas. europeos, forjados en la mente humana por el influjo
El progresivo aumento de los conocimientos, los antes expuesto de los accidentes y fenómenos natura-
cambios en las creencias religiosas y la globalización les, aunque tendremos que omitir los dioses, héroes y
actual relegaron progresivamente muchas de esas le- periplos, ya que ocuparían demasiadas páginas.
yendas y mitos, pero su substrato sigue presente en la Para una mejor sistematización en la exposición
imaginación popular, en las esculturas y pinturas e, los dividimos en dos apartados: 1º.- Seres mitológi-
incluso, tiene un amplio reflejo en la filatelia actual. cos de aspecto humanoide, y 2º.- Personajes mitoló-
Esos mitos y leyendas difieren profundamente se- gicos híbridos de animales y humanos.
gún las diferentes culturas y áreas geográficas y su
variada complejidad hace inviable referirlas aquí en 1º.- SERES MITOLÓGICOS DE ASPECTO
su totalidad. Por ello nos ceñiremos a las que condu- HUMANOIDE
jeron a la llamada civilización occidental, originada,
fundamentalmente, por pueblos de origen indoeuro- A) Humanoides de pequeño tamaño
peo asentados en Europa.
Es interesante constatar que muchas de esas creen- Entre los seres de pequeño tamaño que pueblan
cias y leyendas son equivalentes en los diferentes las leyendas destacan los duendes, (FIG. 1) que son
pueblos que se engloban en esa rama de la humani- seres fantásticos de pequeña talla y aspecto humano,
dad y se mantuvieron en ramas bien diferenciadas, presentes en muchas culturas. Su nombre deriva de la
como la greco-romana y la escandinava, aunque con expresión duen de casa o dueño de casa, por la creen-
distintos nombres, lo que sugiere un origen común en cia de que pueden encantar una casa. En muchas zo-
un mito mucho más antiguo. nas andaluzas se les denomina menges. Son similares
En la casi totalidad de esos mitos se pretende jus- a otras figuras del folclore europeo, por ejemplo, go-
tificar y racionalizar hechos o situaciones que no po- belin en Francia, gnomos y poltergeist de Alemania,
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