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Revisar el Arte Digital: Hugo Alegría

Jonás Andrés Soto Silva


28 de Noviembre 2016

Durante las últimas décadas el término Arte Digital se ha vuelto un tema


recurrente y es que con los avances tecnológicos y la eterna adecuación y
transformación del arte estos se han enlazado en propuestas y productos
interesantes. Una característica primordial del Arte Digital deviene en una
interacción necesaria de del espectador con la obra, de la misma forma este
nuevo arte no ocupa un espacio específico en una galería; se apropia o adecúa a
un espacio, a todo esto podemos denominarle como “obra abierta” un término
propuesto por Umberto Eco. Dentro de este pequeño análisis, comprensión, crítica
o revisión me centraré en un par de videos expuestos por un excompañero y
artista de la Licenciatura y Maestría en Artes Plásticas.

Hugo Alegría trabaja primordialmente con lo digital, por digital me refiero al uso de
la cámara y las posibilidades que esta ofrece: las fotografías (secuencias mejor
conocidas como gifs), el video y el video apropiado del entorno cibernético
(internet). Es fácil apreciar que hay una búsqueda por la denuncia social, la
pérdida y creación de la identidad en un mundo de masas, la crítica a los íconos,
en sí es un agente político de esta ferviente sociedad saturada de imágenes.
Dentro de los videos expuestos resaltó información primordial para el
entendimiento y apreciación de estos que desarrollaré en cada uno de estas
obras.

El primer video titulado “Evolución” lo denotó como un material en proceso, que si


bien podría considerarse como ya acabado para él aún no, ya que lo va
“alargando” por una parte porque siempre existirá material nuevo que se puede
añadir y conforma esta evolución visual y del otro lado este crecimiento del video
es debido al método que emplea: la apropiación de videos random de internet

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unos más reconocidos que otros. Este video que yo considero como una nueva
pieza de collage porque es imagen en movimiento, ya no es un collage con un
aura de pieza visual estática, conforma más bien un cúmulo y atiborrado de
imágenes que van desde una generalidad histórica a una particularidad cultural,
hay que entenderlo como la transición de un hombre de las cavernas a uno
civilizado y luego a una sociedad mexicana. Visualmente el atiborrado de
imágenes de películas, videos musicales, escenas de telenovelas y videos propios
fomentan y refuerzan la idea de la pérdida de una identidad ya que vivimos en una
híper realidad de consumo, tanto de productos como de estilos y nuevas formas
de vida, esta híper realidad diluye la conformación de una individualidad por una
extrema visualidad que pretende encasillar a todos (de alguna forma) en
categorías, llamémosle etiquetas o Hashtag, se ha vuelto un medio muy habitual y
usado por las grandes corporaciones para entrar en la pequeña mente de las
grandes masas y orillarlas a la adopción de modas. Volviendo al video, aprecio el
hecho del collage y la extrema dilución y saturación de colores para reforzar el
concepto de evolución e invasión y en este siguiente concepto bastante importante
es el Homo Videns, lo que le sigue al Homo Sapiens: un ser que solo consume
imágenes y no las analiza, no las digiere un humano simplemente visual, no
olfativo, ni gustativo tal vez táctil ya que requiere de sus dedos para deslizar la
pantalla de sus diversos gadgets para consumir imágenes. El video puede
representar un acierto al desarrollarse en una tecnología de producción de
imágenes y emplear las ya existentes para darles otro valor e interpretación, pero
me surge la inevitable cuestión de que ¿qué tan crítico es la imagen cuando se
emplea el mismo canal? Es decir ¿la misma imagen a través de un mismo medio
visual en una red social? Pareciera que se trata de una serpiente devorando su
propia cola. Es cierto que las redes sociales son una herramienta de doble filo, por
un lado se pueden aprovechar al máximo para difundir información, crear
conciencia o critica, pero por el otro también promuevo el consumo exagerado de
las imágenes y es aquí que me surge este planteamiento crítico, de qué serviría
crear una imagen o un video que alude a la crítica del consumo visual exacerbado
si va a terminar en la basura cibernética, es probable que la imagen/video llegue a

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cientos, miles, cientos de miles y que cause una ligera controversia en los
pensamientos de estos nuevos homo vides, pero ¿qué tan durable será? Una
semana, un mes; afortunadamente algo que entra en internet ya no es fácil de
eliminar y se cumple una función extrañamente parecida a la de los museos:
conservar “para siempre” algo y el internet conservará para siempre este algo
(video o imagen) y después de que tuvo su auge volverá en un tiempo después
¿cuándo? No es seguro, pero todo lo enterrado, ocultado, desechado regresa.

Un punto importante, ya que mencioné museo, es el hecho de que este video


“Evolución” es tal vez una pieza concebida para una galería, Alegría comentó que
lo presentaría en el Circuito Independiente de Arte y es un medio bastante bueno
para evadir la publicación en internet o que la obra se encierre en un cuarto blanco
para solo unos cuantos espectadores. La presentación de este video se realizó en
un acto performático donde él y algunos otros colegas tocarían en vivo la pieza
musical que acompaña el video, esta pieza musical de tintes electrónicos, soft y tal
vez pop contiene algunos estribillos y estrofas que dicen “prefiero no hablar para
no ser callado”, ”vivir una vida vacía” y otros demás versos de la nueva sociedad
del homo videns que refuerzan el video y hasta lo hace lucir como un espejo, pero
lo importante para mí es esta premisa que me permití entender a mi forma
“prefiero no hablar a no ser callado” es decir es una frase que me retumba porque
es cantar la derrota a no ser diferente, a no ser uno mismo a rendirse a lo que lo
demás dicen que debes, tienes que ser y es probable que sí, es mucho más fácil
controlar a toda una sociedad igual que a una dispersa, es preferible tener un
rebaño de borreguitos obedientes a una serie de personajes pensantes y hasta
anárquicos, sin embargo difiero de esta premisa que pareciera una verdad
absoluta, esta nueva sociedad tecnológica a dotado a las generaciones jóvenes de
redes sociales que permiten la libre expresión de la identidad, es aquí que yo veo
la evolución verdadera, una mejor manera de demostrar quién eres y en qué
piensas pueden ser estas diferentes y diversas redes sociales que sí acabo de
comentar que no son lo mejor, pero representan una herramienta al alcance
muchos y en las que se puede realizar un activismo y manifestar la unión, la
inconformidad, la identidad y por encima de todo la tolerancia porque siempre nos

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encontraremos con la norma del deber ser que buscará menospreciar estas
identidades que ofrecen un panorama abierto a la pluriculturalidad y es así que lo
que se pone en un muro de una red social también se lleve a la vida cotidiana, es
decir que no quede en un activismo pasivo sino en uno activo.

Regresando un poco a una pequeña conclusión del video Evolución con todo lo
que he expuesto, quiero resaltar algo a lo que nos debería de invitar esta
intervención y creación artística y eso es a un pensamiento crítico ¿cómo? No lo
sé, pero la forma más radical de evitar este Big Bang de imágenes es aprender a
digerirlas, a criticarlas y hasta comprenderlas para poder decir que sí somos homo
videns, pero al menos con algo de criterio.

Un segundo video presentado por Hugo fue “Atrofia cultural” semejante al primer
video en cuanto a calidad: un atiborrado de imágenes, colores, superposiciones,
etcétera, pero con un cambio en los contenidos, sí aún hay referencias
distinguibles de fragmentos de novelas y otros más, pero lo que cambió fue que el
recurso más empleado fueron los dibujos animados, estos dibujos sí representan
una cultura, aquello que se pretende como un ideal dentro de la norma algo que
tiene que ver, en su mayoría, con la distribución de roles de género y el género
comprendido como bipartita y no como polifacético, regresando con los dibujos
animados que establecen preceptos culturales, María Casas en una conferencia
en León habló y comentó que la pedagogía moderna que se sitúa en las casas
(más específicamente) radica en los dibujos animados: se deja al pequeño a que
absorba toda la información expuesta en diferentes programas, series y películas
que muchas veces no representan el nuevo panorama de la realidad sino que
representan un pasado ideal, atrofiando una nueva realidad que cambia y exige
otras facetas, otras realidades, otras características, pero que muy malamente el
aquí y ahora se aferra a un pasado obsoleto, por ello recalco el valor principal (a
mi parecer) de este video que una cultura ya preestablecida no puede permanecer
estática y si se resiste no sirve se va deshaciendo y lo que busca representar ya
no es perfecto, está defectuoso, atrofiado y no representa más la nueva cultura.

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A manera de conclusión debo admitir que no me gustó el trabajo de Hugo, sin
embargo busqué algunos puntos medulares, conceptos rescatables que son y
merecen ser recalcados, desde esta sociedad hiperrealista, híper visual,
totalmente consumista, con un nuevo ser evolucionado llamado homo videns, pero
con aspectos rescatables y que nos ofrecen un nuevo panorama para realidad que
vivimos tan solo con la pluriculturalidad con las nuevas identidades emergentes y
lo radical que se puede lograr ser desde Facebook, por ejemplo. El uso visual de
alegría es algo que me llama la atención, una especie de ingesta de drogas
estupefacientes y no en un plan recreativo sino como una crisis, algo no grato, no
agradable de vivir y lamentablemente es cierto, muchos no quieren, no queremos
vivir una realidad plana, sin opciones.

Los trabajos presentados me parecen que pertenecen a este nuevo orden del arte
digital, por sus diferentes características y por encima todo a la
multidisciplinariedad con la que trabaja, el hecho de colaborar con músicos y hasta
otros artistas visuales me lleva a pensar en lo mucho que nos falta por aprender a
trabajar en equipo, a colaborar y crear algo mejorado, crear un campo expandido
que saliera de la galería y llegara y conviviera con más espectadores,
lamentablemente la concepción de una obra la mayoría de las veces, se piensa
para un espacio en blanco y controlado que preserve un producto que tal vez no
sobreviva a mucho por las exigencias materialistas de una sociedad consumista y
en este caso el arte ya radica más en una reflexión y experiencia vivida que un
objeto preciosista. El arte digital ofrece estas características que ofrecen mucho
por explorar.

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