Materia: Historia Medieval

Alumno: Sumbay Germán

Condición: promocional

Trabajo Práctico N° 9
Las Practicas Políticas en la Edad Media: discusiones teóricas
Hanno Brand , ESTRATEGIAS DE NOMBRAMIENTOS EN LA CORTE DEL DUQUE
FELIPE EL BUENO: NUEVAS APLICACIONES DE VIEJOS MECANISMOS.
En la siguiente reseña pretendemos analizar algunos aspectos de las monarquías europeas
del siglo XV, para ellos utilizaremos, como objeto de estudio, la política de nombramiento
dentro la corte de los príncipes borgoñeses de la primera mitad del siglo XV.

Durante el periodo analizado, los príncipes intentaron imponer su soberanía a través de

acuerdos y creación vínculos entre la corte y los diversos grupos de poder. Uno de ellos fue
la política de nombramiento durante el gobierno de Felipe el bueno Duque de Borgoña
entre 1419 y 1467.

En el servicio de la corte el derecho del príncipe de nombramiento, en principio, no conocía

límites pero en la práctica estaba sometido a muchas restricciones. Ya que los oficiales de
todos los rangos se esforzaban por permanecer por largos tiempos en sus cargos. Aunque el
número de funcionarios era limitado por ordenanza, para prevenir excesivos aumentos de
sueldos, aumentaban en las casas ducales de manera constantes. Por lo que respecta al
derecho de rescindir los contratos de servicio el rey como así también los cortesanos podía
hacerlo, en caso de los oficiales esto se debía porque eran promovido, reemplazados (por
conductas ignorante o por negligencia).

A la muerte de un príncipe el derecho de nombramiento y los contratos de empleo que

había llevado a la práctica llegaban a su fin, posibilitando al sucesor a realizar nuevos
nombramientos de acuerdo a sus propias necesidades.

En el mantenimiento de los funcionarios existía el sistema de rotación de los cargos,

implementado y mejorado por Felipe III. Los oficiales servían por periodos de tres, cuatro,
seis meses al año, pero existían excepciones, servicios que duraban un año como el maitre
de la chambre aux deniers. Este sistema de rotación tenia ventajas, por ejemplo incluía
secciones rivales de la nobleza en la vida de la corte, permitía al duque rodease de los
mejores abogados, médicos, teólogos, etc., la acumulación de oficios fuera de la corte, etc.

El derecho de nombramiento del príncipe fue minado por la reacción de los titulares de los
cargos, que condujo al incremento de diferentes formas de proteccionismo, nepotismo y
corrupción. La formación de densas redes familiares es consecuencia de ello. Dentro de la
casa ducal se fraguo un proceso de transferencia de oficios a familiares, donde los oficiales
de la Corte utilizaban diversos métodos para la construcción de redes basadas en el
proteccionismo y los lazos familiares. Entre estos métodos encontramos a la dimisión
voluntaria del oficio (la resignatio in favorem) que garantizaba el paso de un oficio a un
pretendiente elegido. Esta fue la política más eficaz para neutralizar las políticas de
nombramiento del príncipe. Pero, asimismo existía un procedimiento en la que duque
convencía a los oficiales para que renunciasen y dieron lugar a sus propios candidatos.
También existía la práctica del survivance, se refiere al favor del príncipe de permitir que
un oficial pudiese ceder su puesto a otra persona sin perder su derecho al propio oficio,
aunque fue fenómeno muy raro en la corte ducal.

El servicio en la Casa ducal ofrecía muchas ventajas, esto explica diversos los intentos por
influir en los procedimiento de nombramiento, como el empleo a largo plazo, el acceso al
sistema judicial en la distribución del botín. Una característica del servicio en la corte fue la
acumulación de funciones que permitía el acceso directo de los agentes domésticos al
príncipe y los convertía en representantes leal de la administración central en los territorios
borgoñeses.

Por estas ventajas, los mecanismos como clientelismo y la venalidad fueron determinantes
en políticas de nombramientos del príncipe y por ellos intervinieron en ocasiones para
garantizar la presencia de miembros de su Casa en la administración ducal. La trasferencia
de funciones pública a unos de sus funcionarios junto con las ventajas financieras
representó otra forma de política de nombramiento que se refiere a la venta de oficios por
parte de los duques. El beneficiario obtenía la totalidad de la posesión del oficio comprado
y con ello el derecho a venderlo a otra persona o de designar un sucesor. Por eso la
venalidad fue un mecanismo para la acumulación de oficios.
La entrega de regalos, fue otro mecanismo, ya que la donación de un oficio representaba la
generosidad del príncipe, como presentación de candidatura a los oficios, promociones o
intervenciones ducales, etc; como gratitud del servicio prestados. Además la entrega de
regalos fue muy importante, ya que compartir un botín en la corte era el componente más
atractivo del servicio en la casa ducal, y representaba un papel trascendental en la
formación y la confirmación de las relaciones sociales y de poder en la corte. El regalo no
era solo algo físico- material sino que también se simbolizaba en un flujo continuo de
expresiones de respeto, lealtad y sumisión del poder ducal. Además definía las relaciones
de poder en la corte creando las obligaciones de servicio y confirmando el status de
dependencia del receptor, por ello fue considerado como un medio de modelación de la
jerarquía social en la Corte y por donde giraban las relaciones personales entre el duque y
sus servidores.

También estaban las indemnizaciones que eran destinadas a cubrir los gastos adicionales
que se producían en el oficio. Estas se diferenciaban del don que tenía un aplicación más
amplia, se ocupan de dinero, ropa, objeto de valor, que están vinculados a servicios
específicos.

La entrega de regalos fue utilizada por los duque con el fin de afianzar su posición y para
construir y modificar las redes en la se basaba su poder.

Para ir concluyendo podemos ir respondiendo a los interrogantes planteados ¿Cómo

gobiernan los príncipes del siglo S.XV? y ¿Qué instrumentos usaron para ello?
Los príncipes bajomedievales gobernaban amplios y diversos territorios que se
diferenciaban por su cultura, costumbres, lenguas, leyes, y formas de gobierno. Uno de
ellos, el duque de Borgoña, durante la primera mitad del siglo XV, Felipe III el bueno
gobernada sobre diversos territorio que poseían diferentes formas de gobierno, era duque de
Luxemburgo, Brabante, Limburgo, conde de Flandes, Artois, Charolais, Holanda, Zelanda,
Hainaut, entre otros. Para gobernar estos territorios los duques desarrollaron una política de
nombramiento para imponer su soberanía entre la corte y los grupos de poder, y garantizar
así el buen funcionamiento del gobierno. Para ellos utilizaron diversos instrumentos como
el sistema de rotación de cargos, por la cual los funcionarios servían por periodos menores
de 6 meses; el clientelismo que se aseguraba con la conformación de densas redes
familiares; la venalidad que fue la compra de un oficio y obtención del libre derecho de
venderlo o asegurarlo para su sucesor; otra fue la entrega de regalos como gratitud por los
servicios prestados; y la indemnización para cubrir los gastos que se producían en el oficio,

Bibliografía

 Hanno Brand , ESTRATEGIAS DE NOMBRAMIENTOS EN LA CORTE DEL DUQUE

FELIPE EL BUENO: NUEVAS APLICACIONES DE VIEJOS MECANISMOS, en
Traducción del Dr. Guillermo Nieva Ocampo para uso interno de la cátedra de Historia
Medieval del artículo de Hanno Brand, “Appointment Strategies at the Court of Duke
Philip the Good: New Applications of Old Mechanisms”, en S. Gunn y A. Janse, The Court
as a Stage. England and the Low Contries in the Later Middle Age, Woodbridge, The
Boydell Press, 2006, pp. 85-100.