24/01/19

Daniel Olvera Ponce, 1° cuatrimestre Teoría Fotográfica

Sobre la Fotografía
Susan Sontag
Capítulo 1. En la caverna de Platón

Desde que la fotografía apareció, el mundo empezó a tener miles o millones de

perspectivas distintas sobre la realidad de las cosas y los acontecimientos, tanto
por aquellos que la consumen como por aquellos que desde las primeras tomas
buscaron capturar el entorno.

Ya sea de forma documental, artística o experimental, la fotografía nos brinda una

visión de los instantes, de un momento que a pesar de ser continuo en el tiempo
se puede congelar para mostrar al mundo que algo ha pasado, y es ahí, en ese
extracto, donde radica la interpretación de los sucesos, basados tal vez en la
realidad individual de cada ser, o la percepción general de una sociedad, de
acuerdo con la clase social, económica o diversidad cultural.

Es evidente que cada uno vive una realidad distinta, a pesar de compartir el
mismo espacio y tiempo. Por ejemplo, la realidad en un conflicto bélico es distinta
para los soldados, tanto para los invasores como para los defensores, distinta para
los civiles, distinta para los políticos, de igual forma para el periodista de guerra.

Aquel que hace una foto tiene la intención de mostrar algo a los demás, unas
vacaciones a la playa, una mascota recién adoptada, un paisaje que ha parecido
espectacular, la belleza de una persona, una injusticia, un acto heroico, un hecho
atroz, o algo terrorífico. Y todo esto causa la apertura de un mundo interior que
quiere exponerse a otros, sin embargo, lo que para unos es blanco, para otros es
negro… o rosa.

Así, la fotografía se puede ver como un si o un no, hay o no hay, es o no es,

porque detrás de cada toma hay un todo, que cambia con la dirección de la
mirada, del lente de la cámara. Fuera de los márgenes, del limite del encuadre y
de la misma imagen, existen más elementos que pueden cambiarlo todo y
convertir una cosa en otra, que, dependiendo de la visión del mundo de cada
individuo, puede significar algo importante o solo existir como el registro de un
simple acontecimiento.