Está en la página 1de 7

Introducción

Los riesgos financieros, son la preocupación de toda empresa, puesto que estos
riesgos, a pesar de que han existido siempre, con el transcurrir del tiempo han
ido tomando una importancia progresiva a nivel mundial, como consecuencia de
los importantes cambios producidos en el negocio de las empresas financieras,
tanto de inversión como de crédito y también de las no financieras originados en
su gran mayoría por el proceso de globalización e internacionalización de los
respectivos sistemas financieros nacionales.

En el análisis o evaluación de un proyecto de inversión, el riesgo y la


incertidumbre son dos factores que se presentan con frecuencia y que son muy
diferentes. El riesgo considera que los supuestos de la proyección se basan en
probabilidades de ocurrencia que se pueden estimar, el segundo se enfrenta a
una serie de eventos futuros a los que es imposible asignar una probabilidad. Es
decir, existen riesgos cuando los posibles escenarios con sus resultados se
conocen y existen antecedentes para estimar su distribución de frecuencia y
hay incertidumbre cuando los escenarios o su distribución de frecuencia se
desconocen.
Riesgo en proyectos de inversión

Los proyectos están enmarcada en un entorno donde coexisten factores de toda


índole: económicos, políticos, ecológicos, jurídicos, sociológicos, entre otros. De la
capacidad de adaptación a los cambios dependerán no solo los beneficios sino
también su existencia.

Pero un punto fundamental que se debe tener en cuenta, es la supervivencia en


caso de pérdidas catastróficas provocadas por accidentes, negligencias, falta de
profesionalismo o cualquier otro causal de pérdida o efecto dañoso que amenace
con interrumpir las operaciones del proyecto, su crecimiento o reducir sus
utilidades.

El riesgo

En realidad, el riesgo tiene un significado relacionado con el peligro, daño,


siniestro o pérdida. Sin embargo, el riesgo es parte inevitable de los procesos de
toma de decisiones en general y en los procesos de inversión en particular.

Todas las decisiones que se toman implican cierto grado de incertidumbre o de


riesgo. Por lo tanto, es importante evaluar los riesgos inherentes, por ejemplo, a
la inversión requerida para ampliar un negocio antes de efectuar dicha operación.

Los dos elementos esenciales son la identificación de los posibles riesgos (lo que
implica también su cuantificación) y la evaluación de éstos. La identificación
depende, en gran medida, de la información disponible; la evaluación, es una
combinación de las matemáticas con la valoración subjetiva del analista o
evaluador, pues éste debe ponderar la probabilidad de ocurrencia de los riesgos.

El cálculo de los riesgos máximo y mínimo es una tarea sencilla; lo que es


realmente importante es valorar acertadamente y con precisión el riesgo real: la
posibilidad de que se produzca el resultado esperado o previsto. A la hora de
medir los riesgos es importante determinar el grado de control que se ejerce sobre
dichos riesgos.

El riesgo considera que los supuestos de la proyección se basan en probabilidades


de ocurrencia que se pueden estimar en los posibles escenarios con sus resultados.
Se conocen y existen antecedentes para estimar su distribución de frecuencia y hay
incertidumbre cuando los escenarios o su distribución de frecuencia se
desconocen.

En formulación y evaluación de proyectos, el riesgo es un evento o una condición


que si ocurre tiene efecto positivo o negativo sobre los objetivos de un proyecto,
esto es, sobre el tiempo, la calidad, los ingresos del proyecto etc.
Relación incertidumbre — riesgo.

En el momento de tomar decisiones, todos los dirigentes de proyectos deben


ponderar alternativas, muchas de las cuales implican sucesos futuros que resultan
difíciles de prever: la reacción de un competidor a una nueva lista de precios, las
tasas de interés dentro de tres años, la confiabilidad de un nuevo proveedor. Por
esa razón, las situaciones de toma de decisiones se consideran dentro de una línea
continua que va de la certeza (altamente previsible), a la turbulencia (altamente
imprevisible).

Certeza Riesgo Incertidumbre Turbulencia

Bajo las condiciones de certidumbre, se conoce el objetivo y se tiene información


exacta, medida y confiable acerca del resultado de cada una de las alternativas
que se consideran.

En muchas ocasiones el término "riesgo" se usa de manera confusa con


"incertidumbre", pero no significan lo mismo. Se habla de riesgo, cuando se
conocen las probabilidades de los posibles resultados de la inversión; y de
incertidumbre cuando no es posible determinar tales probabilidades. Así, la
diferencia entre riesgo e incertidumbre radica en el conocimiento del que toma las
decisiones acerca de las probabilidades, u posibilidades, de que se obtengan los
resultados esperados.
Bajo condiciones de incertidumbre es poco lo que se sabe de las alternativas o
de sus resultados, es decir el decisor no cuenta con información suficiente para
determinar las probabilidades de los sucesos posibles a acaecer, viéndose obligado
a especular a fin de asignar a los diferentes resultados una probabilidad subjetiva.

Por tanto, el riesgo y la incertidumbre son condiciones imprescindibles para la toma


de decisiones en la que los administradores conocen la probabilidad de que una
alternativa específica lleve al logro de una meta o resultado deseado (riesgo); y por
otro lado se enfrentan a condiciones externas imprevisibles o cuando les falta la
información necesaria para el establecimiento de la probabilidad de determinados
sucesos (incertidumbre).

El asumir un riesgo exige obtener algo a cambio. Ningún empresario asumirá


riesgos sin una compensación. De aquí que exista una relación entre riesgo y
rentabilidad en la mayor parte de las decisiones financieras de una entidad.

Métodos y herramientas para gestionar el riesgo

Los proyectos que tienen un crecimiento sostenido y un mayor margen de ganancia


son aquellos que cuentan con un programa integral de gestión de riesgo. Por eso,
gestionar el riesgo aumenta la rentabilidad.

Pero para que esto suceda, se debe utilizar diversos métodos y técnicas que les
permita abordar las amenazas de manera sistematizada y organizada. A
continuación las principales herramientas que existen para hacerlo en cada una de
las fases de la gestión: identificación, evaluación y calificación.
Métodos para identificar el riesgo

El proceso de gestión de riesgo comienza con la identificación de las amenazas.


Para reconocerlas adecuadamente existen diversos métodos de análisis de riesgos,
que pueden clasificarse en dos: deductivos e inductivos.

Normalmente se sigue un procedimiento para reconocer cuáles son los fallos y los
errores, que permitirá establecer una solución para cada uno de estos eventos.

Métodos para la evaluación de riesgos

Existen dos clases de métodos para calificar y evaluar el riesgo: el método


cualitativo y el cuantitativo.

Método cualitativo
Es el método de análisis de riesgos más utilizado en la toma de decisiones en
proyectos empresariales, los emprendedores se apoyan en su juicio, experiencia e
intuición para la toma de decisiones.

Este método para evaluar el riesgo se emplea cuando el tiempo y el presupuesto


son escasos, pues requiere una menor inversión de recursos. El análisis cualitativo
tiene en cuenta las amenazas, las vulnerabilidades, el impacto y, ocasionalmente,
los controles.
Los métodos cualitativos incluyen:
 Brainstorming
 Cuestionario y entrevistas estructuradas
 Evaluación para grupos multidisciplinarios
 Juicio de especialistas y expertos (Técnica Delphi)
Para disminuir el grado de subjetividad y potenciar el grado de precisión, se utilizan
técnicas propias del método cuantitativo.
Método cuantitativo

El método cuantitativo utiliza técnicas matemáticas y estadísticas para recopilar


información relevante. Con base en esos datos se asigna una valoración numérica a
la materialización de un evento. Por eso, es el método que permite asociar una
probabilidad y su correspondiente distribución al evento de riesgo y a sus
consecuencias.
Usualmente el análisis cuantitativo se realiza luego de haber hecho el análisis
cualitativo, aunque también es posible hacerlos de manera independiente o incluso
simultánea. De cualquier forma, es importante que se realicen como un
complemento que enriquezca aún más el análisis.

La decisión de cuál método utilizar pasará por una serie de factores como son la
naturaleza del proyecto, la disponibilidad de dinero, la calidad de la información
disponible y el tiempo.

También podría gustarte