De las TIC a las TAC: alternativas que buscan generar aprendizaje

significativo.

Por: Lcdo. Esteban Rodríguez Montezuma

Dista mucho, aquellos días, cuando se acudía al único lugar que albergaba

conocimiento y saber: la biblioteca (pública o de la escuela). Eran tiempos en donde

se buscaba, se investigaba, se leía y se transcribía la información contenida en las

enciclopedias de diferentes denominaciones. Tal cual el conocimiento y la historia,

la tecnología no da un paso atrás y constantemente está en rápida evolución,

transformación y perfeccionamiento.

Desde esta perspectiva, no queda más que interactuar y correlacionarnos con los

medios electrónicos de hoy en día, el obviar eso significa dormir el eterno sueño del

vacío profesional. De ninguna manera se debe olvidar los métodos y alternativas

de aprendizaje que antes se usaron, muy por el contrario, deben seguir usándose

en lugares en donde no existen herramientas tecnológicas ni internet porque esta

esta constituye su tecnología razonable de aprendizaje.

En este momento sustento mi propuesta de ensayo a mi estimada facilitadora, he

querido presentar un tema innovador que poco se toca en las capacitaciones

docentes, dejando de lado el papel trascendental del educador en ese universo

presente de la tecnología. Las TIC están y llegaron para quedarse, aun así, distan

mucho para ser consideradas factores determinantes en la calidad de la educación

que se brinda a cada discente en las aulas de clases. Como interpelaba en mi última

clase de Didáctica y Tecnología Educativa, en el año 2008 se entregaron

ordenadores personales a estudiantes de media y en 2014 se entregaron a

estudiantes de pre media. Sin embargo y a mucho pesar, no obtuvimos resultados

alentadores en pruebas internacionales como la prueba PISA ni en los informes de

organismos internacionales como la OCDE.

Ni hablar de las capacitaciones tecnológicas que se dieron a los docentes en donde

se les facilitaba una portátil donde pudieran aplicar los conocimientos adquiridos,

pero como dice el dicho “Lo que no se practica se olvida”, y tal cual lo señale, así

fue. El dilema existente consiste en que a pesar de contar con las TIC, no se ha

elevado el nivel de aprendizaje y conocimiento. En este contexto surgen las TAC

(Tecnologías del Aprendizaje y el Conocimiento), donde se pretende cambiar el

aprendizaje de la tecnología por el aprendizaje con la tecnología.

Es un hecho notorio, no exige demostración, la existencia de herramientas

tecnológicas en manos de nuestros estudiantes, aún en lugares comarcales y

rurales distantes. El detalle consiste en señalar que dichas herramientas de

tecnología informativa, no han sido bien encaminadas a obtener de manera correcta

la información para un aprendizaje significativo e innovador. Ya es tiempo de olvidar

la función de “policías docentes” cuando estamos en las aulas de clase; siempre y

cuando exista un docente plenamente identificado, planificado y consciente de la

dimensión protagónica que ha de desempeñar las TIC en nuestras asignaturas de

clase, observaremos la actitud conductual, innovadora y transformadora de

nuestros queridos estudiantes por medio de las TAC.

En otras palabras las TAC tratan de orientar las TIC a usos más formativos, hay que

dejar de priorizar el uso de las bibliotecas para darles un rango igual al de la

información que se puede obtener a través de las TIC. Es optimizar el uso de estas

herramientas a través de métodos de aprendizaje y no en el dominio exclusivo de

dichas herramientas. Hay que explorar y conocer los posibles usos didácticos que

las TIC nos proporcionan hoy día en el aprendizaje y la docencia.

Como siempre indico, todo empieza con el cambio de actitud de parte de los

docentes en todos los niveles y asignaturas, hay que apostar a ir más allá de

aprender a utilizar las TIC, a explorar las posibilidades infinitas para adquirir

conocimiento para toda la vida por medio de las TAC.

El tema es álgido, abarcador, perspicaz y suspicaz, sin embargo hay que abordarlo

desde diferentes aristas y aprender a compartir experiencias docentes. Se debe

recordar el motivo del cambio de paradigma personal en la búsqueda de un

aprendizaje significativo y perdurable; el centro, núcleo y sujeto de la educación

nacional: nuestros queridos y apreciados estudiantes panameños.