Presentación

señala las estrategias utilizadas por la industria para defender sus intereses, ig-
norando y ocultando información o desinformando a la opinión pública. Citando
a Douglas, Egilman advierte que: «se debe luchar o no se consigue nada. Si no
hay lucha, no hay progreso. Aquellos que profesan defender la libertad y, sin
embargo, menosprecian la lucha, son hombres que quieren cosechas sin arar en
la tierra; ellos quieren lluvia sin truenos y relámpagos. Quieren el océano sin el
terrible rugido de sus aguas abundantes» (2018).
Barry Castleman, otro reconocido experto en el tema, completa este volumen
de fundamentos para el debate sobre el asbesto con tres sintéticas páginas que
incluimos a manera de conclusiones y recomendaciones. Castleman recoge con
precisión lo que él llama la enciclopedia de malas prácticas contra la salud ocu-
pacional y ambiental que la industria del asbesto ha utilizado en todo el mundo
a lo largo de su historia recién desenterrada. A su vez, hace un paralelo entre el
tratamiento que organismos como la oms le han dado a la industria tabacalera y la
estrategia que se debe emplear con la industria del asbesto. Finalmente, Castleman
recomienda a los gobiernos «interactuar con la industria del asbesto solo en la
medida necesaria para prohibir el uso de nuevos productos de asbesto de la ma-
nera más rápida posible, y proporcionar medidas de protección para manejar los
productos de asbesto que ya existen» (2016).
Asimismo, el anexo 1 se compone de documentos confidenciales de la ins-
dustria, que abarcan desde 1943 hasta 1987, aportados por el doctor David 21
Egilman y recogidos por abogados norteamericanos durante décadas.
Finalmente, como una muestra muy importante del grado de conciencia
que existe hoy en Colombia, al menos entre los círculos profesionales y ciuda-
danos mejor informados, recogemos en el anexo 2 los respaldos instituciona-
les al espíritu que anima la publicación de este libro, junto con algunos comu-
nicados recientes a favor de la prohibición del asbesto dentro y fuera del país.
Todo este rico caudal de información y conocimiento es fundamental para
entender a qué nos enfrentamos como sociedad en un tema tan sensible como
el de la urgente prohibición del asbesto y debe ser difundido con la mayor
amplitud y profundidad posibles. Esto solo lo podemos lograr uniendo los
esfuerzos y recursos de todos: Estado y sociedad civil. Esta es nuestra contri-
bución a una causa común de la humanidad.