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NIVELES DE CULTURA

Introducción
El mundo está lleno de confrontaciones entre personas, grupos y naciones que
piensan, sienten y actúan de modo diferente, todos estamos expuestos a
problemas comunes cuya resolución exige cooperación. Comprender las
diferencias en las formas de pensar, sentir y actuar es condición indispensable
para llegar a soluciones que funcionen, ya que una de las razones por las cuales
muchas soluciones no funcionan es que no se tiene en cuenta las diferencias de
pensamientos entre las personas.
La cultura como programación mental
Cada persona lleva dentro de sí modelos de pensamiento, sentimiento y actuación
potencial que ha aprendido a lo largo de su vida, la mayoría han sido adquiridos
en la primera infancia, ya que en estos momentos la persona es mucho más
susceptible de aprender y asimilar. Tan pronto como ciertos modelos de
pensamiento, sentimiento y actuación se han establecido en la mente de una
persona, ésta debe desaprenderlos para poder aprender algo diferente, y
desaprender es más difícil que aprender por primera vez.
Partiendo de esta premisa denominaremos a esos modelos de pensamiento,
sentimiento y actuación programas mentales o software mental.
El origen de nuestros programas mentales está en los entornos sociales en los
que hemos crecido y acumulado nuestras experiencias virales, empieza en la
familia, continúa en el barrio, la escuela, los grupos juveniles el trabajo y la
comunidad en que vivimos. Los programas mentales difieren tanto como los
entornos sociales en los que se han adquirido.
Un término frecuente para referirse al software mental es cultura, cuyo significado
se deriva al cultivo de la tierra, en muchas lenguas occidentales cultura significa
civilización o refinamiento de la mente y los resultados de dicho refinamiento como
la educación, el arte y la literatura, el autor lo denomina cultura 1; pero en este
caso utilizaremos el concepto que utilizan los antropólogos sociales, donde utilizan
el término cultura para denominar todos los modelos de pensamiento, sentimiento
y actuación a los que nos hemos referido anteriormente, se incluyen todas las
actividades que refinan la mente y las cosas cotidianas y ordinarias en la vida, el
autor lo denomina cultura 2.
La cultura 2 es siempre un fenómeno colectivo porque es compartido por las
personas que viven en un mismo entorno; es la programación mental colectiva lo
que distingue a los miembros de un grupo o categoría de personas de los de otro.
La cultura se aprende, no se hereda. Procede del propio entorno social, no de los
genes. La cultura debe distinguirse de la naturaleza humana por un lado y de la
personalidad del individuo por el otro.
La naturaleza humana es lo que todos los seres humanos tienen en común,
representa el nivel universal del software mental de cada uno; se hereda con los
genes, determina el funcionamiento físico y psicológico básico. La capacidad
humana para sentir miedo, rabia, amor, alegría y tristeza, la necesidad de
asociarse con otros, de jugar y ejercitarse, la facultad de observar el entorno y
hablar de él con otros seres humanos pertenece a este nivel de programación
mental.
La personalidad de un individuo, por otra parte, es un conjunto exclusivo de
programas mentales que no comparte con ningún otro ser humano. Se basa en
rasgos que en parte se heredan con el conjunto de genes exclusivo del individuo y
en parte se aprenden.

El Relativismos Cultural afirma que una cultura no tiene criterio absoluto para
juzgar las actividades de otras culturas como “bajas” o “elevadas”. Sin embargo,
cada cultura puede y debe aplicar dicho juicio a sus propias actividades, porque
sus miembros son tanto actores como observadores.
El relativismo cultural no implica ausencia de normas para uno mismo ni para la
sociedad propia; exige la suspensión del juicio cuando se trata de grupos o
sociedades diferentes del propio.
Símbolos, héroes, rituales y valores
Las diferencias culturales se manifiestan de diferentes formas. De los muchos
términos usados para describir manifestaciones de cultura, los cuatro siguientes
cubren bastante bien el concepto total: símbolos, héroes, rituales y valores.
(Observar la figura)
Los símbolos son palabras, gestos, imágenes u objetos que tienen un significado
concreto que solo es reconocido por quienes comparten la cultura. Las palabras
de una lengua o jerga, la forma de vestir, los peinados, las banderas y los
símbolos de posición social; se desarrollan nuevos símbolos y desaparecen los
viejos con facilidad, los símbolos de un grupo cultural son copiados
frecuentemente por otros, por eso los símbolos se colocan en la capa externa más
superficial de la figura.
Los héroes son personas, vivas o muertas, reales o imaginarias, que poseen
características sumamente apreciadas en una cultura y sirven como modelo de
conducta.
Los rituales son actividades colectivas técnicamente superfluas para la
consecución del fin deseado, pero que dentro de una cultura se consideran
socialmente esenciales, por tanto se llevan a cabo por sí mismas. Ejemplo la
manera de saludar y mostrar respeto a los demás o a las ceremonias sociales y
religiosas.

Los símbolos, héroes y rituales han sido agrupados bajo el término prácticas,
como tales son visibles para un observador externo; su significado cultural es
invisible y reside precisa y únicamente en la manera en que las prácticas son
interpretadas por los miembros del grupo.
En la figura se muestra que el núcleo está formado por los valores que son
tendencias amplias a preferir ciertos estados de las cosas a otros. Los valores son
sentimientos con una flecha que les apunta: tienen un lado positivo y otro
negativo. Ejemplo, malo frente a bueno, sucio frente a limpio.
Muchos valores permanecen inconscientes para quienes lo poseen por ende no
pueden ser discutidos ni tampoco observados directamente por personas de
afuera.
Al interpretar las afirmaciones de las personas sobre sus valores es importante
distinguir entre lo deseable y lo deseado, lo que diferencia uno de otro es la índole
de las normas involucradas. Las normas son los criterios para los valores que
existen dentro de un grupo o categoría de personas. En el caso de lo deseable, la
norma es absoluta y se refiere a lo éticamente correcto. En el caso de lo deseado,
la norma es estadística: indica las preferencias que realmente manifestó la
mayoría. Lo deseable se refiere mas a la ideología; lo deseado, a asuntos
prácticos.
Capas de cultura
Debido a que casi todo el mundo pertenece a diversos grupos y categorías de
personas al mismo tiempo, las personas llevan dentro de sí varias capas de
programación mental que corresponden a diferentes niveles de cultura, por
ejemplo:
- Un nivel nacional corresponde al propio país (o países para las personas
que han emigrado a lo largo de su vida).
- Un nivel de afiliación regional y/o étnica y/o religiosa y/o lingüística, ya que
la mayoría de las naciones se componen de regiones culturalmente
diferentes.
- Un nivel de género, según la persona haya nacido niña o niño.
- Un nivel de generación, que separa a los abuelos de los padres y de los
hijos.
- Un nivel de clase social, asociado con las oportunidades de educación y
con la profesión u ocupación de la persona.
- Para quienes tienen un empleo, un nivel organizativo o corporativo.
Diferencias de cultura nacional
Desde el punto de vista histórico, las sociedades son formas de organización
social desarrolladas orgánicamente y el concepto de una cultura común se aplica
más a las sociedades que a las naciones.
Dentro de las naciones con cierto tiempo de existencia hay solidas fuerzas que
favorecen la integración: una lengua nacional dominante, medios de comunicación
comunes, un sistema educativo nacional, un ejército nacional, un sistema político
nacional, representación nacional en acontecimientos deportivos con fuerte
atractivo simbólico y emocional, un mercado nacional para ciertas habilidades
productos y servicios.
Aun queda una tendencia de los grupos étnicos, lingüísticos y religiosos a luchar
por el reconocimiento de su identidad, si no por su independencia nacional.
Dimensiones de las culturas nacionales
Una dimensión es un aspecto de una cultura que puede medirse en relación con
otras culturas. El autor plantea cuatro dimensiones que forman un modelo
cuatridimensional (4D) de diferencias entre culturas nacionales. Una dimensión
agrupa una serie de fenómenos de una sociedad que de manera empírica se
encontraron en combinación; las siguientes son las 4 dimensiones que plantea el
autor: distancia jerárquica (de pequeña a grande), colectivismo frente a
individualismo, feminidad frente a masculinidad y control de la incertidumbre (de
débil a fuerte). Hace poco fue identificada una quinta dimensión de diferencias
entre culturas nacionales, que opone una orientación a largo plazo en la vida a
una orientación a corto plazo.
La otra manera de representar las diferencias entre países (u otros sistemas
sociales) es por medio de tipologías en vez de dimensiones. Una tipología
describe una serie de tipos ideales, cada uno de ellos fácil de imaginar. La división
de los países en primer, segundo y tercer mundo es una tipología.

Diferencias culturales por región, religión, género, generación y clase


Las culturas regionales, étnicas y religiosas explican las diferencias dentro de los
países, los grupos étnicos y religiosos a menudo trascienden las fronteras políticas
del país. Estados unidos, el ejemplo más destacado de pueblo compuesto por
inmigrantes, muestra ejemplos tanto de asimilación como de conservación de
identidades grupales a lo largo de generaciones.
Las culturas regionales, étnicas y religiosas pueden describirse en las mismas
dimensiones que las culturas nacionales.
La filiación religiosa en sí misma es menos relevante desde el punto de vista
cultural de lo que a menudo se supone.
Las diferencias de género no suelen describirse en términos de cultura, admitir
que dentro de cada sociedad existe una cultura masculina que se diferencia de la
femenina ayuda a explicar por qué es tan difícil cambiar los roles tradicionales. Las
mujeres no son consideradas aptas para los puestos que tradicionalmente han
ocupado los hombres, no porque carezcan de capacidad técnica para
desarrollarlos sino porque las mujeres no poseen símbolos, no se corresponden
con las imágenes del héroe, no participan en los rituales ni fomentan los valores
dominantes en la cultura masculina y viceversa.
Las diferencias de generación, en cuanto a símbolos, héroes, rituales y valores
son evidentes para la mayoría de personas. Los acontecimientos históricos
afectan a algunas generaciones de una manera especial, también el desarrollo de
la tecnología; estas diferencias atañen con frecuencia a las esferas relativamente
superficiales de los símbolos y los héroes, de la moda y del consumo.
No existe evidencia de que las culturas de las generaciones actuales de diferentes
países estén convergiendo.

Las clases sociales entrañan diferentes culturas de clase. La clase social está
asociada con las oportunidades educativas y con la ocupación o profesión de una
persona. Los criterios para asignar a una persona a una clase son a menudo
culturales: los símbolos desempeñan un papel importante, es el caso de los
acentos en la pronunciación de la lengua nacional, el uso de ciertas palabras y los
modales.
El género, la generación y las culturas de clase solo pueden clasificarse
parcialmente en las cuatro dimensiones encontradas para las culturas nacionales,
esto se debe a que no son grupos de personas sino categorías. Los países (y los
grupos étnicos también) son sistemas sociales integrados. Las cuatro dimensiones
son aplicables a los problemas básicos de dichos sistemas. Categorías como el
género, la generación o la clase son solo partes de sistemas sociales y por tanto,
no se les pueden aplicar todas las dimensiones. Las culturas de género,
generación y clase deben describirse en términos propios, a partir de estudios
especiales de esas culturas.

Culturas organizativas

El autor define la cultura organizativa como los activos psicológicos de una


organización, que pueden usarse para predecir lo que ocurrirá con sus activos
financieros en un periodo de cinco años.

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