INSTITUTO BÍBLICO WESLEYANO

INFORME DEL QUINTO CAPÍTULO DEL LIBRO DE ROMANOS

 
 
 

 
ROMANOS
 
Preparado por:
JESSICA VIVIANA LÓPEZ GÓMEZ
 
Docente:
JHON JAIRO GARCÍA PÉREZ
 
 
 
 
Medellín, Colombia 2020
Es un privilegio de Dios tenerlo a Él, pero debemos tener cuidado en no usar
mal este privilegio para pensar que entonces por su amor Dios me perdonará
continuamente, porque Dios es amor y tiene gracia con nosotros, pero también
es un Dios justo y escudriña nuestros corazones.

Los que nos hemos bautizado hemos representado socialmente nuestra

convicción en Jesús, en que hemos muerto a nuestra naturaleza y hemos sido
limpiados por Dios y renovados para vivir una nueva vida.

Se trata de morir a nuestra naturaleza pecaminosa, pero volver a vivir por

medio de Cristo Jesús. Por lo tanto, no debe reinar el pecado ni debemos
satisfacer nuestros deseos carnales, sino que debemos presentarnos a Dios
sin mancha con mayor razón, pues estamos bajo la gracia.

A aquel a quien obedezcamos en el dueño y el centro de nuestras vidas, por lo

tanto, debemos cuidarnos de que no sea el pecado quien domine nuestras
vidas y nos lleve a muerte.

Antes lastimosamente éramos esclavos del pecado, pero gracias a Dios que
podemos conocerle y seguirle de corazón, fuimos libres del pecado y pasamos
a ser servidores de Jesús, así que si antes nos deleitábamos en el mal y nos
poníamos a su servicio; al conocer a Dios con mayor disposición debemos
servirle, el fruto del mal era la muerte pero el servicio a Dios es la santificación
y la vida eterna “Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios
es vida eterna en Cristo Señor nuestro.