Este documento presenta varios pasajes bíblicos que discuten el tema del dinero y las riquezas. Algunos textos indican que Dios es el origen de toda riqueza y poder, y que no se puede servir a la vez a Dios y al dinero. Otros pasajes enfatizan la importancia de la humildad, la compasión por los pobres, y la necesidad de contentarse con lo necesario en lugar de enriquecerse. En general, el documento sugiere que las verdaderas riquezas son espirituales y que debemos reconocer que
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Este documento presenta varios pasajes bíblicos que discuten el tema del dinero y las riquezas. Algunos textos indican que Dios es el origen de toda riqueza y poder, y que no se puede servir a la vez a Dios y al dinero. Otros pasajes enfatizan la importancia de la humildad, la compasión por los pobres, y la necesidad de contentarse con lo necesario en lugar de enriquecerse. En general, el documento sugiere que las verdaderas riquezas son espirituales y que debemos reconocer que
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Textos bíblicos que hacen referencia al dinero y riquezas
Este documento presenta varios pasajes bíblicos que discuten el tema del dinero y las riquezas. Algunos textos indican que Dios es el origen de toda riqueza y poder, y que no se puede servir a la vez a Dios y al dinero. Otros pasajes enfatizan la importancia de la humildad, la compasión por los pobres, y la necesidad de contentarse con lo necesario en lugar de enriquecerse. En general, el documento sugiere que las verdaderas riquezas son espirituales y que debemos reconocer que
Este documento presenta varios pasajes bíblicos que discuten el tema del dinero y las riquezas. Algunos textos indican que Dios es el origen de toda riqueza y poder, y que no se puede servir a la vez a Dios y al dinero. Otros pasajes enfatizan la importancia de la humildad, la compasión por los pobres, y la necesidad de contentarse con lo necesario en lugar de enriquecerse. En general, el documento sugiere que las verdaderas riquezas son espirituales y que debemos reconocer que
Textos bíblicos que hacen referencia al dinero y riquezas
De ti proceden la riqueza y el honor; tú lo gobiernas todo. En tus manos están
la fuerza y el poder, y eres tú quien engrandece y fortalece a todos. -- 1 Crónicas 29:12 Nadie puede servir a dos señores, pues menospreciará a uno y amará al otro, o querrá mucho a uno y despreciará al otro. No se puede servir a la vez a Dios y a las riquezas. -- Mateo 6:24 Dios nos ve de una manera muy diferente. Para él la riqueza que cuenta de verdad y la que nos beneficia es la espiritual. Una de las cosas que él valora más es el corazón humilde que le busca y que quiere vivir de acuerdo con sus mandamientos. Nuestro anhelo debe ser tener más y más de Dios, de su presencia y su dirección en nuestras vidas. Como el salmista, nuestro deleite mayor debe ser hacer la voluntad de nuestro Señor (Salmo 40:8)} Los ricos son los amos de los pobres; los deudores son esclavos de sus acreedores. -- Proverbios 22:7 ¡Anda, perezoso, fíjate en la hormiga! ¡Fíjate en lo que hace, y adquiere sabiduría! No tiene quien la mande, ni quien la vigile ni gobierne; con todo, en el verano almacena provisiones y durante la cosecha recoge alimentos. -- Proverbios 6:6-8 Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él? -- 1 Juan 3:17 Porque nada trajimos a este mundo, y nada podemos llevarnos. Así que, si tenemos ropa y comida, contentémonos con eso. -- 1 Timoteo 6:7-8 Más vale tener poco, con temor del señor, que muchas riquezas con grandes angustias. —proverbios 15:16 No debemos jactarnos de lo que tenemos como si fuera un premio a nuestra propia fuerza o inteligencia. Más bien, debemos reconocer con humildad que es por la gracia de Dios que tenemos todo lo que tenemos, sea mucho o sea poco. No lo merecemos, pero Dios en su infinita bondad nos concede lo que necesitamos para vivir. Todo viene de Dios, él lo creó y es su dueño. Él da y él quita de acuerdo con su voluntad y a él debemos dar la gloria (Romanos 11:36).