PREVENCIÓN Y PROTECCIÓN CONTRA INCENDIOS

GENERALIDADES
La prevención de incendio tiene su comienzo en lo profundo de la historia de la humanidad. El fuego,
que una vez producido y debidamente controlado, era el amigo más fiel del hombre, se volvió un
peligroso enemigo que destruía sus hogares, sus utensilios de labranza y sus siembras, cuando el
descuido permitió que se extendiese fuera del control humano.
Es lógico pensar que el hombre conoció el fuego a través de la naturaleza y de sus fenómenos tales
como el rayo, la combustión espontánea o el volcán en erupción. En la misma forma que conoció lo
que era el fuego y los daños que ocasionaba supo también como extinguirlo. Todo incendio puede
ser evitado. Hay que descubrir y eliminar toda posibilidad y todos aquellos factores que puedan pro-
ducirlo o que permitan que este aumente y se propague.
Podemos sintetizar la prevención de incendio como la serie de medidas que se toman para eliminar
el mayor numero de riesgos de incendio, el estudio de sus posibilidades y de sus causas, los medios
de propagación y los factores desencadenantes
CAUSAS DE FUEGO
De acuerdo a las estadísticas efectuadas aproximadamente un 90% de todos los incendios son cau-
sados por 11 fuentes de ignición. Estas 11 causas y el porcentaje de los incendios atribuidos a cada
uno de estas son:
• 19% Eléctrico.
• 14% Fricción.
• 12% Chispas mecánicas.
• 8% El fumar y los fósforos.
• 5% Ignición espontánea.
• 7% Superficies calientes.
• 6% Chispas de combustión.
• 5% Llamas abiertas.
• 4% Corte y soldadura.
• 3% Materiales recalentados.
• 2% Electricidad estática.
Las otras fuentes de ignición incluyen a los incendios causados por relámpagos, acciones químicas e
incendios premeditados que suman alrededor del 5% de todos los incendios, el 1% restante son de-
bidos a causas indeterminadas.
FUEGO
La definición más elemental del fuego es:
“un proceso de combustión suficientemente intensa como para emitir calor y luz”
Para la producción de un incendio es necesaria la concurrencia de 4 factores:
• Calor.
• Materiales combustibles.
• Oxigeno.
• Las reacciones químicas en cadena.
Analizaremos a continuación cada uno de los factores.
CALOR
Entre las fuentes capaces de proveer el calor necesario para provocar un incendio podrían citarse
fósforos mal apagados, estufas, colillas de cigarrillos, recalentamiento de maquinas, chispas eléctri-
cas, cortocircuitos, rayos, calefacción, cocinas defectuosas, etc.
Del análisis de cada uno de los factores enumerados surge que evidentemente, todos ellos son evita-
bles. Una de las medidas más comunes es la de prohibición de fumar. Es necesario instruir a todas
las personas sobre los riegos de incendio y la manera de evitarlos. La existencia de carteles alusivos
en los lugares de trabajo es de gran importancia.
Los sistemas de calefacción no deben llegar nunca a temperaturas que puedan determinar la com-
bustión de polvos, vapores, productos o materiales combustible.

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Las estufas debe ser protegidas para evitar salpicaduras de líquidos inflamables o explosivos y estar
separados por lo menos 50 cm. de los elementos combustibles tales como paredes de madera u
otros elementos.
MATERIALES COMBUSTIBLES
Los materiales combustibles están constituidos generalmente por productos o materiales de trabajo.
De ahí que en ciertos establecimientos exista mayor riesgo que en otros en cuanto a la producción de
incendios: textiles, madera, papel, fabricación de explosivos, industrias que trabajan con magnesio y
aleaciones del mismo, hornos de fundición, trabajos con celuloide, con carburo de calcio y acetileno,
pinturas, etc.
Los riegos de incendio, en lo que respecta al material combustible pueden ser disminuidos mediante
una serie de medidas.
OXÍGENO
Este elemento, que prácticamente está siempre presente, es muy importante, pues sin oxígeno no
puede haber combustión. El conocimiento de este hecho es de gran utilidad tanto para la prevención
de incendios como para su extinción.
REACCIONES QUÍMICAS EN CADENA
Son una serie de etapas sucesivas entre los átomos del agente oxidante (oxígeno) y el combustible.
TRIANGULO DE FUEGO
Así como existen diferentes modelos para explicar fenómenos físicos existe un modelo geométrico, el
triángulo de fuego, propuesto originalmente para explicar los mecanismos de acción sobre el fuego,
de los distintos elementos extintores.
El fuego se representa por un triángulo equilátero en el que cada
lado simboliza cada uno de los factores esenciales para que el
mismo exista, y estos son:

CO
LE
TIB

M
• El combustible

BU
US
• El comburente (oxigeno del aire)

RE
MB

NT
• El calor (hasta llegar hasta la temperatura de ignición). CO

E
El fuego se extingue si se destruye el triángulo, eliminando o cor-
tando alguno de sus lados. El calor puede ser eliminado por en-
friamiento, el oxigeno por exclusión del aire y el combustible por
su remoción, todo esto implica una acción física. TEMPERATURA

TETRAEDRO DE FUEGO
A través de muchos años se explicó el problema del fuego me-
diante el triángulo, pero era incompleto. Por ejemplo, no se en-
tendía la acción de los halógenos sobre el fuego.
El iodo y el bromo son eficaces extintores. La sensibilidad de las TEMPERATURA
llamas a ciertas vibraciones, la acción extintora de ondas deto-
E
CO
I BL

nantes, hizo necesario ampliar el modelo anterior incorporando

MB
T
US

un cuarto factor que completo la naturaleza del fuego.

UR
MB

EN

A los factores anteriores, mencionados en el Triángulo de Fuego,

CO

ET

se incorpora, como un nuevo objetivo de la extinción, la Reacción REACCIÓN

EN CADENA
en Cadena.

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CLASES DE FUEGO
Existen diferentes clases de fuegos, las que han sido clasificadas en cuatro categorías:

Fuegos clase A
A este grupo pertenecen todos aquellos fuegos que se presentan en
materiales combustibles sólidos tales como: madera, papel, telas,
carbón, plástico, caucho, etc.
Su extinción se logra bajando la temperatura del mismo mediante
aplicación de agua, gases extintores, o polvos.

Fuegos clase B
Se producen en líquidos inflamables tales como: petróleo, gasolina,
alcoholes, thinner, pinturas, solventes, aceites, etc.
Su extinción se lleva a cabo eliminando la posibilidad de contacto
con el oxígeno, cubriéndolo con arena, extintores de gas carbónico,
polvo químico seco y/o halon. Se incluyen en esta clase los gases
inflamables.
No siempre puede utilizarse agua

Fuegos clase C
Se producen en equipos eléctricos energizados, cables, cajas fusi-
bles, motores eléctricos, artefactos eléctricos, etc. Para su extinción
debe usarse extintores de gas carbónico, polvo químico seco o halon.
Su extinción sólo puede lograrse luego de cortar la energía eléctrica.
Nunca debe utilizarse agua.

Fuegos clase D
Es aquel que se presenta en metales combustibles tales como: mag-

D
nesio, sodio, potasio, etc.
Para su extinción debe usarse extintores de polvo especialmente
formulado.
Nunca debe utilizarse agua.

CLASIFICACIÓN DE LOS EXTINTORES

Los extintores se clasifican en agentes extintores físicos y agentes extintores químicos.
Agentes extintores físicos: Agentes extintores químicos:
• Agua (chorro pleno, niebla y/o vapor) • Polvos químicos secos BC o ABC.
• Espumas (de baja, media y alta expansión) • Halones, derivados del yodo, flúor y bromo.
• Anhídrido carbónico, nitrógeno.. • Polvos especiales para fuegos clase D.

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PRINCIPIOS PARA SELECCIÓN DE EXTINTORES
La selección del elemento extintor adecuada para cada situación depende de:
• El tipo de material combustible.
• La gravedad del posible incendio.
• La eficacia del extintor ante el riesgo.
• La facilidad de empleo.
• Las condiciones ambientales, tales como viento, vapores, etc.
• Los aspectos de seguridad y de salubridad.

Extintores a base de agua:

Se los utiliza en operaciones de soldadura y corte. En la protección de edificios situados en lugares
remotos, en la industria de la construcción. Se cargan fácilmente con agua limpia, solo exigen cuida-
dos simples, deben agregárseles aditivos para bajas temperaturas, etc. Existen de presión incorpo-
rada y de bomba. Pueden actuar en forma intermitente o continua.
Extintores de anhídrido carbónico:
No dejan residuos. Se los utiliza especialmente para siniestros en equipos electrónicos delicados y
caros. Tiene un alcance aprox. de 2,50 metros. No actúan cuando hay viento o corrientes de aire
fuerte. Los portátiles tienen carga hasta de 9 Kg. También hay montados sobre ruedas con carga de
22 a 45 Kg., se descargan entre 8 a 30 segundos.
Para hacer funcionar el extintor se sostiene éste en posición vertical, se quita el seguro en forma de
anillo (o espoleta) y se oprime la palanca.
Extintores de gases especiales (halones, FM 200, inergen, etc.):
Son similares a los anteriores pero tienen un alcance algo mayor, aprox. 5,00 metros. Su eficiencia
de extinción es también mucho mayor que la del CO2.
Extintores de polvo:
Su selección exige una cuidadosa evaluación debido a sus diferentes diseños y tipos de polvos.
Los portátiles tienen un alcance de 3 a 5 metros. Son más eficaces con viento.
Son de dos tipos básicos.
• Los de presión incorporada.
• Los activados por cartucho (cilindro presurizado externo)
Los de presión incorporada son más aptos para situaciones de uso menos frecuente. Los activados
por cartucho tienen la ventaja de que se llenan rápidamente sin necesidad de equipos especiales. Por
tal razón son más aptos para lugares distantes o mal comunicados.
Otra de las cosas a tener en cuenta es que el tamaño depende del personal disponible y facilidad de
empleo.

Cuadro comparativo de aplicación:

Clase de
Extintor A AB ABC BC ABC D
Tipo Dióxido de Polvos Espe-
Agua Espuma Polvo ABC Halones
De Fuego carbono ciales

A SI SI SI
Poco eficiente
SI NO
Sólido Muy eficiente Eficiente Muy eficiente Eficiente es eficiente

SI
B NO Muy eficiente SI SI SI NO
Líquidos es eficiente No usar en gases Muy eficiente Eficiente Muy eficiente es eficiente
inflamables

C NO NO SI SI SI NO
Riesgo debe usarse debe usarse Eficiente Eficiente Muy eficiente es eficiente
eléctrico

D NO NO NO NO Relativamente SI
Fuego en debe usarse debe usarse debe usarse debe usarse eficiente Muy eficiente
Metales

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ROL DE INCENDIO
Detección del fuego:
En general los fuegos comienzan con un pequeño foco, que una vez propagado, adquiere grandes
proporciones. Salvo en el caso de una explosión, el foco inicial puede llegar a pasar inadvertido.
PASOS A SEGUIR EN CASO DE INCENDIO
Una vez producido el incendio, se imponen la siguiente serie de pasos a seguir:
• Designación de tareas.
• Aviso.
• Evacuación del personal.
• Evitar la propagación del fuego – según instructivos.
• Extinguir el fuego – según instructivos.
DESIGNACIÓN DE TAREAS
Deberán asignarse las tareas a ejecutar durante una contingencia considerando todas las situaciones
posibles. De esto surgirá una guía (flujograma) con instrucciones precisas del comportamiento de
todo el personal del establecimiento, como por ejemplo: encargados de dar alarma, encargados de
efectuar la comunicación al departamento de bomberos, encargados de evacuar al personal y reali-
zar control de ausentismo encargados de extinguir el fuego, etc.
Por ello, es conveniente poseer un listado con dichas tareas y su correspondiente responsable.
DAR AVISO
Lo más importante es avisar de inmediato. Las personas deben ser instruidas al respecto, la premisa
es:
Primero avisar y luego si es posible, tratar de combatir el fuego.

EVACUACIÓN DEL PERSONAL

• Identifique e ilumine convenientemente con luces de emergencia las rutas de escape y salidas
de emergencia.
• Si se trata de un edificio con varios pisos, diríjase siempre a planta baja.
• Utilice las escaleras de emergencia, nunca los ascensores o montacargas.
• No corra, mantenga la calma, no genere situaciones de pánico.
• No trate de llevar bultos que entorpezcan un ágil desplazamiento.
• Desplácese lo más cerca posible del piso si hay humo en el ambiente.
• No regrese al edificio una vez que lo ha abandonado.
• Si se encuentra atrapado y no puede salir del lugar, trate de cubrir todo tipo de rendijas, para
evitar el ingreso de humo, acérquese lo más posible a una ventana, trate de ser visto, y espere
que lo rescaten.
• Una vez fuera del local constate la presencia de todo el personal y asegúrese que estén a salvo.

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