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Licenciatura en Seguridad Pública

Evidencia de aprendizaje
Mi proyecto de investigación (2)

Docente:
Juan Manuel Pérez Valderrama

Asesor:
Nancy Lizbeth Rojas Delgado

Alumno:
Berrelleza Medina Juan Monserrath

Matricula de estudiante:
ES1911001723

Fecha de envío:
10 de mayo de 2019

Correo electrónico:
JUANBERRE81@nube.unadmexico.mx
Mi proyecto de investigación.

El acoso sexual es un fenómeno social de múltiples y diferentes dimensiones, denunciado por


distintas organizaciones e instituciones y constatado por distintas investigaciones que han
evidenciado la existencia, extensión y gravedad en el ambiente laboral.

Problema de investigación.

Acoso sexual laboral.

El término acoso sexual en el trabajo o acoso sexual laboral apareció en los años setenta en
Estados Unidos y desde entonces, se lucha desde una perspectiva de igualdad para poder
eliminar el acoso sexual laboral.

Aunque se ha señalado que en algunos casos de acoso laboral pueden darse también
conductas que se podrían estar dentro del acoso sexual, es conveniente la distinción entre
ambos. Esta diferencia estriba en que en el acoso sexual las conductas giran en torno al sexo,
y en que la víctima de acoso sexual la percepción de las conductas de acoso es inmediata,
mientras que las víctimas de acoso laboral tardan tiempo en percibir las conductas de acoso.

Ambos tienen características comunes como la situación de humillación y de ataque a la


dignidad que sufren las personas en ambas situaciones, pero el acoso sexual tiene
especifidad por el objetivo de la conducta del acosador y por el tipo de conductas. También se
ha señalado el acosador laboral, a diferencia del sexual mantiene siempre la convicción
interna de no haber hecho nada malo, aún después de la condena, sin embargo el acosador
sexual termina por reconocer que ha realizado alguna conducta inapropiada (Gimeno Lahoz,
2004.

Marco teórico.

1. Acoso sexual.

Concepto de acoso u hostigamiento sexual.

El Diccionario de la Real Academia de la Lengua define el acoso sexual como "aquel que
tiene por objeto obtener los favores sexuales de una persona cuando quien lo realiza abusa
de su posición de superioridad sobre quien lo sufre".

Según la OIT (1995; 1997), para que haya acoso sexual deben integrarse tres elementos:

Un comportamiento de carácter sexual que no sea deseado que la víctima lo perciba como un
condicionante hostil para su trabajo, convirtiéndolo en algo humillante. El acoso sexual es
cualquier tipo de acercamiento o presión de naturaleza sexual tanto física como verbal, no
deseada por quien la sufre, que surge de la relación de empleo y que da por resultado un
ambiente de trabajo hostil, un impedimento para hacer las tareas y un condicionamiento de
las oportunidades de ocupación de la persona perseguida.

Pueden establecerse los siguientes niveles de conductas:

Acoso leve: chistes, piropos, conversaciones de contenido sexual.


Acoso moderado: miradas, gestos lascivos, muecas.
Acoso medio: llamadas telefónicas y cartas, presiones para salir o invitaciones con
intenciones sexuales.
Acoso fuerte: manoseos, sujetar o acorralar.
Acoso muy fuerte: chantaje o presiones tanto físicas como psíquicas para tener contactos
íntimos.

El acoso sexual incluye:

Conductas físicas de naturaleza sexual que pueden ir desde tocamientos innecesarios,


'palmaditas', 'pellizquitos', roces con el cuerpo, hasta el intento de violación y la coacción para
relaciones sexuales.

Conducta verbal de naturaleza sexual como insinuaciones sexuales molestas, proposiciones,


flirteos ofensivos, comentarios e insinuaciones obscenas.

Conducta no verbal de naturaleza sexual como exhibir de fotos de contenido sexual o


pornográfico o materiales escritos de tipo sexual o miradas con gestos impúdicos.
Casos de acoso sexista

Así, los casos de acoso sexual que se suelen describir son:

Que algún compañero se acerca demasiado o invade el espacio físico reiteradamente.


Que algún superior o compañero presiona para mantener relaciones o salir juntos.
Que algún superior ha insinuado mejoras laborales a cambio de favores sexuales.
Que han sufrido asalto o agresión sexual por parte de alguien del trabajo
Que sufren roces o tocamientos indeseados por parte de clientes, compañeros o jefes.

2.-Datos y cifras.

Acoso sexual en el trabajo: estadísticas.

El acoso sexual puede ser sufrido tanto por hombres como por mujeres. Sin embargo, quizá la
mujer es la principal víctima porque en el mercado laboral su situación es más de
subordinación jerárquica o inestable en el empleo. El acoso sexual afecta principalmente a
mujeres jóvenes, de ingresos reducidos, educación no profesional, que han sido asediadas
por largo tiempo y solo se deciden a denunciar el hecho, como último recurso.

La Tercera Encuesta Europea sobre Condiciones de Trabajo (2000) llevada a cabo por la
Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo, indicó que el
acoso sexual no es un fenómeno esporádico, ya que un 3% de mujeres fueron víctimas de
acoso sexual en el año anterior a la realización de dicha encuesta. Si se tiene en cuenta que
tal porcentaje supone un cifra de dos millones de mujeres, el problema cobra una dimensión
de gran magnitud. Son más a menudo víctimas de acoso sexual las mujeres que tienen
empleos precarios.

Con respecto a los hombres, el porcentaje que señala haber sido víctima de acoso sexual es
bastante inferior al de las mujeres. En España, la encuesta del año 2000, de la Secretaría de
la Mujer de Comisiones Obreras señala que un 14,5% de los trabajadores ha vivido una
situación de acoso sexual a lo largo de su vida laboral.

FUENTES:

https://www.psicologia-online.com/acoso-sexual-en-el-trabajo-1073.html#refs

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