Está en la página 1de 2

RELATORÍA: LA PROMESA DE LA COMPUTACIÓN CUÁNTICA

El conferencista Carlos Viviescas inició la conferencia definiendo los conceptos de


información cuántica, computación clásica y computación cuántica. La información
cuántica se entiende como un sistema cuántico para procesar y transmitir
información; la computación clásica se basa en la electrónica y en los transistores;
la computación cuántica, nacida en los años 20, se basa en un computador que
funciona con los principios cuánticos. Se habló de una cuestión basada en que los
transistores usados en los computadores clásicos se logran fabricar cada vez más
pequeños, a tal punto que se ven afectados por la aparición de ciertos fenómenos
cuánticos pero eso no los caracteriza como parte de la computación cuántica. La
idea de usar la mecánica cuántica ofrecía ventajas gracias al principio de la
superposición. El computador cuántico (CoC) sería más rápido que los
computadores clásicos, inclusive que los mejores supercomputadores actuales,
pero poseería dificultades en su construcción.

Entonces el expositor dio inicio a la primera parte de la conferencia, la cual se


centraba en una reciente noticia en la que Google buscaría construir realmente el
primer computador cuántico. El nombre clave del proyecto fue “Supremacía
cuántica”. Hasta el momento se ha reportado la creación de un CoC de capacidad
de 9 qubits (un qubit es una medida de información cuántica basada en la
superposición, equivalente al bit en la información clásica). Para demostrar la
funcionalidad de este computador cuántico, se hará una prueba de principios, lo
que significa que éste deberá resolver un problema que ningún computador clásico
pueda. Se piensa en dos posibles problemas: la factorización de números grandes y
los arreglos aleatorios de circuitos cuánticos. El primero debería usar miles de
qubits para mostrar una diferencia significativa con los computadores clásicos,
pero ese es un problema de difícil abordaje actualmente. Por otro lado, el problema
de los arreglos es un buen candidato y si Google consigue resolverlo, puede
clasificarse como una prueba de principios. Éste consiste en la versión cuántica del
caos clásico, en el que una pequeña variación en la entrada del sistema produce una
salida con cambios significativos. El problema puede subir de escala
exponencialmente al hacer un cambio pequeño. El objetivo de Google es conseguir
trabajar con 50 qubits para resolver este problema.

La segunda parte de la conferencia fue acerca de los conceptos de la computación


cuántica. Fue Richard Feynman el primero en sugerir el CoC. La primera
observación hecha por el conferencista fue que ésta presenta mucho más poder en
un tamaño menor. Lo clásico en computación se basa en información en bits (1 ó
0), almacenamiento en físico y un problema a la vez. Lo cuántico trabaja con
información en qubits (1 y/ó 0), emplea sistemas físicos cuánticos como los átomos
o los fotones y puede resolver múltiples problemas en paralelo (usando el
fenómeno del entrelazamiento).

Los computadores cuánticos deben construirse átomo a átomo y los qubits deben
trabajar en conjunto de forma cuántica, porque de otra forma serían en sí bits
clásicos. De ahí la dificultad para su construcción. Un problema grande que se
presenta en la computación cuántica es la decoherencia, que es la pérdida de la
información cuántica y ésta se da en la transición entre las escalas micro (universo
cuántico) a las macro (universo clásico). Hoy en día se cuenta con pequeños
dispositivos ya existentes que permiten correr algoritmos simples y permiten hacer
pruebas de concepto.

Actualmente la necesidad de los CoC es escalarlos a mayores dimensiones,


aproximadamente 106 átomos. Los resultados que se obtengan del computador
cuántico pueden conducir a dos posibles direcciones. La primera es la obtención de
dispositivos cuánticos de cómputo, que una vez que se tengan podrán procesar los
problemas más rápido. La segunda es abrir el campo a una nueva física, en la cual
se pueden abordar cuestiones como secuenciar genomas y estudiar patrones
climáticos.

Los supercomputadores actuales necesitan el diseño de un edificio apropiado.


Además, si se aumenta sólo en un dígito el problema, ese aumento puede significar
que se requieran dos supercomputadores para resolver el nuevo problema. Llegado
este punto, el conferencista añadió una comparación temporal entre los
computadores clásicos y los cuánticos: el primero podría tardar la edad del
universo resolviendo un problema altamente complejo, pero el segundo podría
hacerlo en una semana. Como a modo de ejemplo, se habló de los sistemas de
seguridad informáticos, que requieren cómputos complejos que tomen mucho
tiempo para ser descifrados. La criptografía usa el problema de encontrar el
producto entre dos números primos muy grandes (factorizar) para operar. Los
supercomputadores clásicos pueden tardar unos 2000 años resolviendo este tipo
de problemas mientras que los CoC tardarían algunos días. Dado este panorama,
algunas agencias de seguridad en los EEUU (como la NSA) temieron que el CoC
fuera capaz de descifrar prácticamente toda la información clásica, con lo cual se
financiaron proyectos que buscaran responder las preguntas de si se puede
realmente construir el CoC y cómo se podrían mejorar las técnicas de encriptación.
Otros escenarios que podría abordar el CoC son la simulación cuántica (estructuras
moleculares, simulación de sistemas cuánticos generales) y las aplicaciones no
imaginarias (lo que hacen los computadores clásicos cuando, por ejemplo, calculan
las trayectorias de los misiles).

El expositor afirmó que los CoC no reemplazarían como tal a los computadores la
computación cuántica, como lo son traducir las leyes de la física en la información
cuántica ya que se debe proteger contra los errores que se obtienen al darse la
redundancia de la información. También se debe proteger contra la decoherencia
(que se manifiesta cuando se pierde el entrelazamiento), que se puede dar según el
ambiente en el que esté el sistema cuántico ya que éste es altamente sensible a su
ambiente. Finalmente, se afirmó que se requiere control cuántico, lo que se refiere
a la construcción de los chips cuánticos por medio de la manipulación y control de
átomos individuales.

También podría gustarte