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ETICA, CORRUPCION E IMPUNIDAD EN UNA UNIVERSIDAD

El término corrupción se asocia a un problema de la justicia que debe ser investigado


en función del sistema legal vigente. Desde este punto de vista las autoridades
universitarias no lo pueden considerar lejano a su quehacer cotidiano e incluso, al
igual que sucede con la policía, se considera que la intervención de los organismos
fiscalizadores del Estado es violatorio de la Autonomía Universitaria. No obstante, si
se diferencia la acepción legal del término y se amplía su concepción al ámbito de las
Ciencias Sociales y Económicas, se encuentra que es un tema tratado desde diversos y
rigurosos enfoques e incluso susceptible de ser analizado con todo el instrumental
científico de la Economía, incluyendo su modelización matemática.
La ética en la actuación de las autoridades tiene que ver con la existencia de bienes
colectivos y la presencia de externalidades (cuando una actividad afecta el costo o el
beneficio de otra). En estas situaciones el mercado no asigna precios, lo cual
contribuye a justificar la existencia del Estado. En segunda instancia la corrupción
puede ser vista una expresión de cierta racionalidad económica, pues el individuo
maximiza en el corto plazo sus ingresos. Si se hacen consideraciones intertemporales,
el corrupto, al atentar contra el colectivo, terminará en el largo plazo disminuyendo
sus ingresos futuros. Si se sigue al profesor Cipolla (1996).

” un individuo es inteligente cuando aumenta su bienestar sin


perjudicar a los demás, es malvado cuando lo hace perjudicando al
colectivo y es estúpido cuando se hace daño a sí mismo y a los
demás”
.
En este orden de ideas, en el inmediato plazo el corrupto es inteligente, en el mediano
plazo es malvado y en el largo será un estúpido. Una tercera faceta la ofrece la
impunidad, la cual es la conjunción de dos variables fundamentales del análisis: la
probabilidad de ser sorprendido en un acto de corrupción y, en el caso de serlo, la
pena impuesta por el mismo.

“ Es evidente que a más impunidad, más incentivos para actuar de


manera corrupta y mayor probabilidad de que el estúpido aparezca
como inteligente.”

Es entonces factible formalizar un modelo matemático de corrupción económica que


postule que la misma es una función, continua y dos veces derivable, de seis variables:
la probabilidad de ser sorprendido, el valor de la pena si se es sorprendido, el
beneficio esperado, el nivel de clientelismo, el grado de cooptación y una perturbación
aleatoria. Las dos primeras variables tienen su primera derivada negativa (al
aumentar, disminuye la corrupción) en tanto que las tres siguientes la tienen positiva.
Obsérvese que un modelo de este tipo permite explicar muchos de los actos corruptos
que día a día se descubren en Venezuela y en la Universidad.. Se tiene hoy día
gobiernos deslegitimados, el camino para permanecer en el poder es de aumentar el
nivel de clientelismo y el grado de cooptación, con el consecuente despilfarro en el
gasto público. De otra parte, con un sistema judicial ineficiente y corrupto con penas
cada vez más blandas y negociables, no es extraño encontrar los cotidianos
titulares de prensa relatando casos de corrupción.
El acontecer del pais no es ajeno ni se diferencia a lo que sucede en la Universidad de
Carabobo, la cual hasta el inicio de la gestión rectoral actual funcionó como una
institución normada y reglada, probablemente ineficiente, pero en la cual se
desconocía el clientelismo, donde los ascensos docentes se lograban exclusivamente
por méritos y donde sus funcionarios se comportaban con un claro compromiso con
una ética de lo público.

Contrariando la esencia de una Universidad Pública, a nombre de la “excelencia” y


haciendo uso de una malentendida Autonomía Universitaria, se permitió que el modus
operandi existente en el entorno, permeara las estructuras del Alma Mater. Es
evidente que la mayor responsabilidad de la actual crisis está en la dimensión interna
de la misma .
La creación de una parauniversidad con fundaciones, institutos,
consorcios, en los cuales el control del gasto se diluye, favorece
la actuación impune y la aparición de actos de corrupción. La
existencia de inversiones sobrevaloradas o ajenas a la razón de ser de la
Universidad es otra muestra de como opera el modelo; llama poderosamente la
atención que hasta la fecha no se haya realizado y publicado un peritaje técnico de
todas las obras, para verificar si los valores declarados corresponden a los de
mercado. Muchos cargos se crearon para acallar una incipiente crítica y el
profesorado en general recibió los mejores aumentos y los pagos más oportunos que se
recuerde. En pocas palabras, hay una disminución de los controles, crece el
clientelismo, se utiliza la cooptación y nadie es castigado, es decir se instrumentan las
condiciones para la actuación indiscriminada de los cazadores de rentas.
El modelo de corrupción económica no es sometido a la evidencia empírica por la
Contraloría Interna, ni la Contraloría General de la República.
En los programas en los cuales se busca el control e inexistencia de clientelismo y
cooptación, se encuentra eficiencia en el manejo del dinero público y continuidad
académica. En el programa donde las anteriores variables cambian de signo se
evidencian casos de corrupción y actos presumiblemente ilegales. Una profesora alega
haberse gastado 45 millones en el mantenimiento del programa y a través de una
fundación se le pagan mediante un contrato extraño y amañado que pondría sobre el
tapete la existencia de dobles pagos y de pagos por lo mismo a dos personas. Un
directivo se lleva 12 millones y los devuelve siete meses después sin explicaciones
legales ni pago de intereses. A un personaje se le giran más de cuarenta millones sin
justificación real. Esto es sólo una muestra en la que se omiten muchos hechos y
detalles para no herir la susceptibilidades.
Lo más preocupante es que después de haber entregado el informe correspondiente
las únicas respuestas que se han recibido son una amenaza unilateral e inconsulta de
acabar los programas, la pérdida de los subconvenios en trámite y el desalojo abrupto
de la oficina en la que ha laborado durante años.......... Este hecho, es evidentemente
descortés y autoritario con otra identidad cultural, obstaculiza el desarrollo normal de
los convenios y fomenta claramente un clima de impunidad.
Salta entonces la pregunta: ¿si al investigar 500 millones, se encuentran 100
claramente comprometidos, qué pasará cuando se investiguen la totalidad de millones
invertidos con recursos . Muchos son los que opinan que esto es mejor no tocarlo.
Unos porque afirman que el escándalo hace daño, olvidando que más daño hace el
clima de impunidad que se está fomentando. Otros añaden que todo se hizo en el
marco de la legalidad, desconociendo que lo antiético debe ser puesto en evidencia por
la Universidad Pública al margen de las leguleyadas que lo amparen. Hay quienes
cuentan que a pesar de las dos toneladas de papel que se han enviado a la Fiscalía no
se ha encontrado nada, escondiendo el elemental hecho de que el deber de las
directivas es enviar información procesada y no un montón de datos, ininteligibles
para quienes desconozcan la lógica del funcionamiento interno de la Universidad.
La conclusión inmediata de toda argumentación anterior es que la recuperación de la
estatura ética y la autoridad moral, pasa por su colaboración en la identificación de
los responsables de la crisis que la llevó al estado de enfermo en cuidados intensivos
que tiene hoy día. No basta con declararla un bastión de solvencia ética y moral, hay
corrupción y existe impunidad. Tampoco se trata de emprender una cacería de brujas
con afanes justicieros, se trata de que el único compromiso real que tiene un
académico universitario es con la verdad y de la relevancia actual que esto adquiere.
No es problema de moralismo o revanchismo, es de equidad intertemporal.

La Universidad recuperaría lentamente su liderazgo en el concierto de las


Universidades Públicas, seriamente amenazadas por las propuestas de financiación
que defiende el Ministerio de Hacienda. La crisis de es usada como "cabeza de turco"
para justificar la disminución en la asignación presupuestal.

Este es uno de los flacos favores que han hecho los responsables de la crisis. De ahí la
gran responsabilidad de salvarse a sí misma y contribuir a hacerlo con el conjunto de
la Educación Pública Superior. También debe cumplir con su papel de creación de
pensamiento critico e independiente, para ayudar a encontrarle salidas a la
complicada encrucijada que enfrenta Venezuela en estos momentos, enfrentada a una
guerra fratricida y carcomida por la corrupción y la impunidad. Si se atreven pone a
prueba el método de investigación propuesto para develar a los responsables, dará el
ejemplo de lo que se debe hacer en el resto de instituciones públicas y ganará el
derecho a reclamar una justa financiación. Es un asunto de equidad intra e
intergeneracional y que daría peso al pedido de continuar en el camino de
rectificaciones y de austeridad. De lo contrario las probabilidades de repetir la
historia serán mayores, pues la impunidad fomentará la aparición de actos corruptos,
dada la persistencia de ciertas prácticas.

EL MOMENTO HISTÓRICO QUE ESTAMOS VIVIENDO NOS OBLIGA EJECER


NUESTRO DERECHO DEBEMOS RESPONSABILIZARNOS Y SER VIGILANTES,
VENEZUELA, LA UNIVERSIDAD NO PERTENECE A NINGUN GRUPO, PERTENECE
A LOS PROFESORES, EMPLEADOS, OBREROS, ESTUDIANTES, A LA COMUNIDAD
REGIONAL Y NACIONAL

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