Hasta la Última Gota

Nunca reconoceremos el valor del agua hasta que el pozo este seco
Thomas Fuller.

El agua es un elemento vital para todos los seres vivos. En este sentido es

fundamental conocer sus formas de aprovechamiento; las posibles afectaciones de las

fuentes hídricas; la escasez de esta a nivel global y la manera en que el calentamiento

global afecta a este recurso tan valioso. Por último se resaltará como la falta o escasez de

este recurso, puede imprimir un giro dramático en la vida del ser humano.

Este es un recurso no renovable, que se requiere para prácticamente todo en la vida,

desde necesidades básicas como la hidratación hasta procesos mineros e industriales. Así,

el consumo promedio de agua es de 1240 m³ por persona/año (Borge, 2012), mientras que,

según la revista Semana informa que para 2019, en Colombia, la agricultura  tiene la

mayor demanda del recurso hídrico con 52%, seguido por la construcción con un 33%,

mientras que el tercer lugar lo ocupa el sector pecuario con 32% y en ultimo lugar la

minería con un 27% de la demanda.

Según la Organización Mundial de la Salud el agua contaminada es aquella cuya

“composición haya sido modificada de modo que no reúna las condiciones para el uso que

se le hubiera destinado en su estado natural” (Citado por Juste, 2019). Los contaminantes

se dividen en tres grandes tipos: químicos, biológicos y físicos. Siendo los químicos

aquellos que alteran la composición del agua y/o reaccionan con ella, como las sustancias

radiactivas y los minerales pesados; los físicos son los que no reaccionan con el agua, pero

pueden dañar la vida en el ecosistema, ejemplo de ello son las partículas en suspensión, y

los contaminantes biológicos que son organismos o microorganismos dañinos o que se

encuentran en exceso, tales como los gérmenes patógenos y los lirios acuáticos (Bermúdez

2010).

Pero no es la contaminación el único problema que afecta a los seres vivos, su

escasez es igualmente relevante: “[…] Más del 40% de la población mundial, viven en

cuencas hídricas con alguna forma de escasez de agua. Más de 1200 millones de personas

viven en condiciones de escasez física de agua, lo cual ocurre cuando más de 75% del curso

de los ríos ha sido extraído. Las regiones del África septentrional y del Asia occidental se

encuentran seriamente comprometidas, al igual que algunas zonas de grandes países como

China e India. Los síntomas comprenden degradación ambiental y competencia por el

agua.” (ONU, 2008, p. 42). En Colombia el Ministerio de Ambiente  y el Ideam presentaron

el octavo avance del Estudio Nacional del Agua (ENA), llegando a la conclusión que se

redujo la oferta hídrica y que hay 391 municipios susceptibles a quedarse sin agua. (Rubiano,

2018).

Ahora bien, este sombrío panorama de escasez se ve maximizado con los efectos que

el calentamiento global produce en el agua y particularmente en la reservas de agua dulce. Se

denomina calentamiento global al aumento en la concentración de los gases de la atmósfera,

tales como vapor de agua, dióxido de carbono, metano y el óxido nitroso que son gases de

efecto invernadero, cuyo aumento en su concentración va cerrando la ventana para la

radiación, impidiendo su salida, lo que produce el calentamiento del planeta. 

En este sentido se prevé el deshielo de los casquetes polares y los glaciares con

el consecuente aumento del nivel del mar que pondrá peligro las ciudades costeras;

la ocurrencia frecuente de los fenómenos de la niña (sequía) y del niño (lluvias

torrenciales), producirá frente a la seguridad alimentaria la afectación de actividades

 de producción, con caída de las cosechas, baja oferta del sector pecuario y piscícola;

la desaparición de ecosistemas con la obvia extinción de flora y fauna.

Así las cosas si el hombre no toma conciencia y medidas efectivas para controlar la

demanda y el uso del agua, se verá abocado a enfrentar la sequía, la disminución del agua

potable disponible, lo que disparara las enfermedades diarreicas, el cólera, la fiebre tifoidea,

la salmonelosis y las enfermedades gastrointestinales, lo que aumentara la tasa de

mortalidad en la población infantil y del adulto mayor principalmente. Que decir de la

oferta de alimentos, seriamente afectada por la disminución de suelos fértiles disponibles y

los impredecibles cambios climáticos que disminuyen dramáticamente el rendimiento de las

cosechas, produciendo hambruna mundial.

Corolario, no esperemos a que se evapore la última gota de agua potable, ni que los

gobiernos prohíban el uso de las sustancias contaminantes o las grandes industrias

transformen sus procesos productivos en amigables con el medio ambiente, que los

científicos descubran nuevas maneras de descontaminar o de aprovechar el agua salada;

debemos comenzar el cambio de nuestras costumbres ahora, lo que compramos, los

vehículos que tenemos, los combustibles que usamos, en fin, no solo conciencia sino uso

del poder invisible del consumidor, como direccionador de la economía de producción, para

logar los cambios que se necesitan mitigando el efecto invernadero y racionando el

consumo del agua.

Elaborado por: Daniel Fernando Cortes Sanabria.

Bibliografía

Bermúdez, Mauricio (2010). Contaminación y turismo sostenible. Recuperado de:

http://galeon.com/mauriciobermudez/contaminacion.pdf

Borge, Mariela (2012). Demanda, abastecimiento y escasez de agua: un problema global.

Éxito Empresarial, No. 215.

Educadores por la Sostenibilidad. (2016). La crisis del agua: Un problema tan grave como

el del cambio climático. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y

Juventud, 14 (1), 711-712.

Juste, Irene (2019). Causas y consecuencias de la contaminación del agua. Ecología verde.

Recuperado de: https://www.ecologiaverde.com/causas-y-consecuencias-de-la-

contaminacion-del-agua-614.html

Rubiano, Maria P (2018). Hay 391 municipios con riesgos de quedarse sin agua en

Colombia. El Espectador. Recuperado de:

http://blogs.elespectador.com/actualidad/el-rio/391-municipios-riesgos-quedarse-

sin-agua-colombia

Semana Sostenible (2019). Agricultura, el mayor consumidor de agua en el país.

Recuperado de: https://sostenibilidad.semana.com/medio-

ambiente/articulo/agricultura-el-sector-que-mas-agua-demanda-en-el-pais/43450