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UN BESO EN EL ALBA

Se ha atosigado
el recuerdo de tu éxtasis,
y la fría madrugada de tus ojos
ahuyenta el sendero
de una sombra confundida.
Ayer,
la vida mía fue detenida.
Ayer,
el suspiro de la brisa
asesinó mis oídos.
Ayer,
la luna húmeda y temblorosa
se asomó
por la ventana de tu cuerpo
y supe entonces
que fue el beso
en el alba del amanecer.
LOS MIL BESOS DE UN HUESO

En el dulce destello de tus labios,


el silencio negro de la noche
se apodera del deseo,
donde los mil besos,
de aquella espuma
en la cual,
un día escribí tu nombre,
abrazan el frenesí de tu cuerpo.
Hoy,
un hueso húmedo ha roto el éxtasis
y tu piel se acerca mas
a donde está la oscuridad silenciosa
de una luna,
llena de tabúes
y secretos.
ANOCHE CUANDO DORMÍA

Anoche cuando dormía,


el sueño de tus manos besó mis mejillas,
la luz ortodoxa de tu éxtasis
iluminó el vestido rojo de mis ojos.
Anoche cuando dormía,
los labios inexistentes de tu voz,
quisieron dibujar en mi piel
un dulce y tibio rayo de luna.
Anoche cuando dormía,
solamente sentí
que era simplemente un sueño,
adormecido,
en la tibia arena de tu cuerpo.
LEY DE DIOS

Tu cálido cuerpo
me estremece
en el sexo de tu boca.
Se derrite mi espíritu excitado
al subir uno a uno tus deseos.
La carne peca
en el mismo pecado,
de los mandamientos,
de tus besos.
EL LIENZO DE UNA LÁGRIMA

Se inicia el ansia vanidosa


de una sonrisa melancólica
y tal vez la mona lisa,
ya no ansíe sonreír.
Se inicia un renacer oculto
en Da Vinci y su pincel,
donde suda el hambre,
donde reposa mi almohada,
donde en la mano del lienzo
se logró dibujar
el sonido de una lágrima
al caer.
NAUFRAGIO

Mi sol aun respira


en aquel mar tan desierto;
ha naufragado la luna
en donde la piedra incita a mis apetitos.
He devorado las lejanías
de la oscuridad hambrienta
y vinieron adelante
las azarientas del olvido,
que se esconden
en las sombras sin salida,
de tus huesos.
CONDENADO TIEMPO

Cuando ayer fue mañana


yo pude adornar tu cuerpo
con el alma de los dioses.
Cuando hoy fue el ayer
la razón de los errores
atosigó mis huesos.
Puedo decir que mañana
tal vez no sea mañana,
porque mis pasos
desde aquí
están frágiles de libertad.
LUZ DE LUNA

La fogata de tus ojos se arriesga


con la cohibida luna.
Quizás.
Tu nariz filantrópica
o la esfinge de venus,
puede ser la boca enamorada
de tu aliento.
No lo sé,
será aún el cuerpo
de tu alma
que tal vez,
ya no puede ver.
EL MUNDO EN CONTRA

La vida
oye a lo lejos susurrar
la humedad torcida.
El mundo se duerme
en los destellos sosegados
de mis ojos sangrientos.
Grita en el horizonte
la cripta de mi naufragio.
El sol
doblegado en su oscuridad
se zambulle en el rostro
de una luna muerta.
Entonces;
ese mundo,
se ha puesto en mi contra.
I

Querer,
lo inevitable del lamento
que desgarra y devuelve
sin entender
la inmensidad del vacío.
Querer,
un lejano lienzo
que transforma su frazada
en un abominable grito de duda;
resignado.
El tanque abre sus ventanas
a la velocidad que lo pienso.
Es visible la piedad tostada
que hace su sombra en brisa,
el fuego en ceniza
y el silencio en soledad.
II

No sé el por qué del entonces.


No sé el por qué de lo oculto.
No sé la sinapsis de la muerte que
agoniza.
Alguien me mira como tantos otros, y
las ruinas de mis manos se pierden
al no encontrar mi sangre.
¿Quién?
Es solo el principio
que llora,
que oye,
que ve;
y no hace falta el cauce
que se desborde
en mis reflexiones.
III

He vuelto a la vida
en total silencio.
Murió mi pena hasta entonces.
Mis pasos se desangran,
mis pisadas son lentas.
Sin embargo,
mi aliento vive
en la carne que peca
con retraso,
sin límites.
He tocado un tan lejos sin nada
que deja un latido de camino.
He vuelto a la vida sin alma
que se desgarra día a día
sin dejarse resucitar.
REGRESO

He vuelto de nuevo al entorno


donde la vida culmina
y empieza en el no entender de la brújula.
Comienzo a mirar el horizonte
donde Morfeo
se ha dormido en mi regazo,
y el encarno de los sueños
reencarna sin terminar.
He vuelto de nuevo
pero no entiendo;
todavía,
mi mente no ha dado un porque
del desgarro,
corazón.
REVELACION

Voy al encuentro
en donde mis manos y tu cuerpo
se transforman.
Furias degolladas al azar.
Voy al encuentro
y el fantasma de tu nombre
se agudiza.
Lo he encontrado,
y el estándar de una revelación
me atormenta.
AUSENCIA DE TI
Tu mirada,
en la clandestina noche
sin alas sangrantes.
Tu boca,
de rosas y espinas
en el suburbio sol
de mis manos danzantes.
Entonces,
será tu piel
quien se ha tatuado
el agujero de un beso
ausente y hastío,
en la profundidad
del vacío.
SILENCIO

Te busco en cada hoja


donde la estrella se fuma
un pedazo de tu alma.
Te busco
en un pedazo de sábana
donde la almohada nocturna
de mi cama
dibuja las letras de tus besos.
Te sigo buscando, y aun,
el lápiz ausente,
falta de papel
muere de simplicidad.
DISTANCIA
Déjame buscar en tus ojos
un beso distante
Déjame buscar en tu nombre
la sonrisa
que dibuja tu piel.
Tal vez,
a la hora muerta
de un reloj sin agujas
tu voz
abrazará el silencio
de un homologo naufragante
mientras yo
estoy ausente.
MUERTE
El dia
ha exterminado el cadáver
de unas agallas heridas.
Hoy,
La soledad del tiempo
tiene sed del reloj.
Hoy,
la furia de un minuto
se ha jugado la muerte.
Desde entonces
el favor se enviuda
al no resucitar
la existencia del silencio.
DISTANCIA
Déjame buscar en tus ojos
un beso distante
Déjame buscar en tu nombre
la sonrisa
que dibuja tu piel.
Tal vez,
a la hora muerta
de un reloj sin agujas
tu voz
abrazará el silencio
de un homologo naufragante
mientras yo
estoy ausente.
Hastío Silencio
¿Cuál es el precio de la soledad?
pues alguien me la ha querido comprar
¿Qué tanto vale el silencio?
si la eternidad yace vacía
en mi almohada.
Que extraña es la lejanía de la luna.
Que diminuto es el olvido,
cuando el recuerdo se desvanece
en una gota de lagrima.
¿Dónde esta la pluralidad del hastío?
¿Dónde buscaré el crepúsculo
de mi noche sin paz?
Pues el beso
de unos labios moribundos
se aferraron en la agonía de mis dedos
para no resucitar jamás.

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