Encajar, Vivir y Cambiar

¿Encajas tú? La sociedad se encuentra envuelta en este pensamiento de poco

razonamiento. Que si eres de dicha forma te excluyen de un grupo social, o
que si quieres entrar a dicho grupo social debes soportar la presión de grupo y
de una u otra forma cambiar tu esencia como persona para lograr “encajar.”
Tanto mujeres como hombres han evolucionado su pensar, no son lo mismo
que fue hace unos años. ¿Será esto cierto? O simplemente quizá ahora se ha
resaltado este carácter egoísta y antipático.

En las noticias logramos tener un pequeño punto de vista sobre lo que nuestra
generación está viviendo en estos días. Suicidios, abortos, problemas
alimenticios como la anorexia y la bulimia, depresión, y la lista sigue y sigue.
Haciendo énfasis en cada uno de los problemas anteriormente mencionados se
lograría sacar conclusiones concretas de el porque se sufre de dichas
situaciones hoy en día. La anorexia, claro ejemplo de estas situaciones, es el
siglo XXI, el siglo en que todo es aceptable hoy en día. La diferencia de
apariencias es más abierta a las personas, y esto ha provocado que la
población n o se sienta segura de sí misma. Hablando más enfáticamente en el
sexo femenino, la mujer desde años atarás ha vivido llena de complejos; muy
gorda, muy flaca, muy alta o muy enana, varias descripciones que si dicen
quienes somos en el físico pero que la misma mujer ha exteriorizado tanto al
punto de juzgarse a si misma y no amarse ni respetarse. Lleva eso al extremo
de no querer comer para bajar de peso y ser como el estereotipo de belleza
que nos muestran las campañas de modelaje, tiendas de vestuario, e incluso
cantantes y famosos.

Hemos escuchado a lo largo de nuestra vida que el cambio empieza por

nosotros mismos. Entonces ¿Cuándo pensamos actuar? Esperaremos más
suicidios innecesarios? Nos adaptaremos a cambios e ideales que nos traerá
la sociedad? Si todos aportáramos un grano de arena al cambio y evolución de
nuestro propio ambiente, todo sería distinto. Encajar ya no sería un término tan
significativo en nuestra vida. El amor propio al fin saldría a la luz y seria como
una estrella que quizás se había perdido en su propio espacio y luego salió de
nuevo a brillar como nunca. Debemos empezar a querer mejorar día con día, a
no solo existir si no más bien vivir. Una frase ejemplar y debería ser usada
infinidad de veces: “vive y deja vivir.” No solo seamos una espina más en esa
rosa que intenta incesantemente crecer y florecer, seamos el agua y sol de
dicha flor e impulsemos y ayudemos a que cumpla su objetivo.

Concluyendo no cabe de más decir que aprendamos a comprender el mundo

en el que vivimos. Abramos nuestros ojos y olvidemos ese pensar de “ya es
común” cambiemos nuestro alrededor y así es como el mundo empezara a
cambiar. Quédate con esto en tu mente… ¿estas tu cambiando al mundo, o el
mundo te está cambando a ti?