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“AÑO DE LA UNIVERSALIZACIÓN DE LA SALUD"

Facultad de Ciencias
Empresariales
Escuela Profesional de
Administración y Economía
CONSTITUCIÓN Y DERECHOS HUMANOS

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN
PROMOVER CONCIENCIA EN LAS PERSONAS

ARTÍCULO DE OPINIÓN:
DERECHO A DECIR ADIÓS

AUTORES:
CHÁVEZ CERNA, Claudia Alejandra.
COLCHADO OLAVARRIA, Daniela Elva.
DEL ÁGUILA SÁNCHEZ, María de Fátima.
ESPINOZA CHAVEZ, Paola
HERRERA VINCES, Carla

ASESOR:
ROCIO VIDAL MARINGOTA

PIURA - PERÚ
DERECHO A DECIR ADIÓS

2020

INTRODUCCIÓN
“Solo en la agonía de despedirnos somos capaces de comprender la profundidad de nuestro
amor”.

La especie humana tiene un ciclo vital, que está marcado por una infancia prolongada que
condiciona el desarrollo de una conducta compleja, donde se queda de manifiesto que el ser
humano es un animal sociable por necesidad, y no por solo elección. Siendo así tan importante
tener relaciones sociales con las personas, cuando llegamos a fallecer esos lazos afectivos se
rompen con el ser querido al que se esta vinculado, lo cual nos lleva a un estado afectivo de
intensidad emocional llamado duelo. En la actualidad estamos viviendo momentos difíciles,
donde vemos como la vida está siendo afectada por la existencia del COVID-19. A pesar de que se
está implementando medidas como la cuarentena obligatoria en la mayoría de países.

Italia, España y EE. UU. Se encuentran en una situación que es muy lamentable con el sistema de
salud casi colapsado. Pasando un desolador panorama con pacientes de mayor edad que al
contraer esta enfermedad se encuentran internados en hospitales con pocas posibilidades de
poder sobrevivir y completamente solos.

Al estar aislados, no es mucha la información de lo que realmente está pasando dentro de los
hospitales.

Sin embargo, una entrevista reciente a la doctora Francesca Cortellaro, del hospital San Carlo
Borromeo en Milán, reveló algo de la pesadilla que viven los enfermos de covid-19.

"¿Sabes qué es lo más dramático? Ver a los pacientes morir solos, escucharlos mientras te ruegan
que les digas adiós a sus hijos y nietos", le dijo al periódico italiano Il Giornale.

"La sala de emergencias se está derrumbando": la dramática situación que deben enfrentar los
médicos que atienden a pacientes con coronavirus en Italia.[ CITATION Fra20 \l 3082 ]

Cada vez nos encontramos con estas historias tan conmovedoras de personas que pierden la
batalla contra este virus que es muy cruel pues te aísla de todo y todos. Pues pierdes el derecho
de tu libertad, el derecho a morir a lado de tus seres queridos, despedirte de ellos, sin recibir al
menos un abrazo de despedida. Que tu familia pueda recoger tu cuerpo y darte una sepultura.

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DERECHO A DECIR ADIÓS

Realizamos este artículo de opinión por la causa de la enfermedad que estamos viviendo hoy en
día, nos hemos visto muy afectados por las muertes que está causando esta pandemia y el dolor
de los familiares al saber que no pueden volver a ver a su ser querido.

La prevención que se nos está brindando hoy en día por todos los medios de comunicación no
está siendo respetada por un lado se da a notar la necesidad de trabajo, por otro lado, la
desobediencia, falta de conocimiento o porque quieren seguir creciendo económicamente no
hace reflexionar a las personas para que este virus deje de propagarse ya que la medida de
aislamiento es necesaria para aplanar la curva y/o eliminación total del virus ya que esto pone en
riesgo la salud de todas las personas en el mundo, sin embargo, hasta que no sea un familiar
cercano no nos vamos a dar cuenta de lo doloroso que es no volver a ver a un ser querido.

Esta pérdida de vidas en todo el mundo pone en el punto de vista no solo las vidas individuales
perdidas, sino además la gran cantidad de familias abandonados para enfrentar el dolor, la agonía
y la vulnerabilidad. Las severas estrategias de seguridad establecidas por los gobiernos impidieron
que muchas familias pudieran conmemorar el sepelio de sus seres queridos. En algunas naciones,
a las familias no se les permitía sepultar o cremar a sus muertos por sus propios medios, y en
otras, por ejemplo, en China, a pesar de todo confían en que los especialistas les permitirán
recoger los restos de sus familiares. En las ciudades y comunidades urbanas más afectadas, por
ejemplo, Guayaquil, Ecuador, las funerarias están llegando al límite, mientras que diferentes
lugares, por ejemplo, Nueva York, se están preparando para abrir fosas comunes para sepultar a
los muertos. Sin prueba reconocible antes de la inundación del cadáver corriente.

Se entiende que los familiares de los fallecidos tienen potestad de poder darle sepultura y darles
el último adiós a sus seres queridos, pero por la alta posibilidad de contaminación que genera el
COVID-19 se ven privados de aquel beneficio.

Por tanto, no queda otra que adaptarse por las políticas de emergencia que emana cada país para
salvaguardar la vida de los demás.

Esta investigación se hace con el fin de concientizar a las personas lo que otras familias están
pasando por perder a un ser querido y no poder darle el último adiós.

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DERECHO A DECIR ADIÓS

OPINIÓN
Cuando muere un ser querido en nuestra familia podemos darle el último adiós a la vez ir a
rezarle o dejarles algún detalle en este caso que estamos viviendo con la pandemia de ver a los
adultos mayores que fallecen muchos y ver en algunos lugares que niños son infectados y son
hospitalizados el dolor de unos padres que no podrán ver a sus hijos ya cuando hayan vencido
están pandemia. Adultos mayores que se quedaron sin ninguna familia ver el dolor en las noticias
que piden ayuda para poder sobrevivir ,empezaban a subir la lista de infectados gentes alarmadas
y sin trabajos ver en las zonas más pobres de nuestro país pidiendo muchas ayudas que no tenían
nada de alimentación en sus hogares ver la impotencia de ver niños sin alimentarse no podemos
saber si a ellos les afectará la enfermedad del COVID -19 o la desnutrición que están viviendo por
no tener que comer es tan dura esta realidad que estamos viviendo .

Vemos Hospitales colapsando con pacientes con esta pandemia doctores que salen a reclamar por
sus derechos que hoy en día el estado no está cumpliendo con sus pagos y menos los están
protegiendo con implementos de cuidados hacia ellos no sabremos si algún día tirarán la toalla a
esta pandemia porque tienen una familia que proteger.

Definitivamente estamos viviendo un caso que nadie lo esperaba, enfrentar tan pronto y tan
drásticamente que el cuerpo médico no pudo prepararse psicológicamente para poder afrontar y
poder apoyar de alguna forma a todos los pacientes que se ven afectados por esta enfermedad,
es muy cruel saber que mientras unas personas infectadas del covid 19 están luchando contra una
batalla muy fuerte para salvar su vida, aún exista gente que subestime y haga su vida diaria
normal cuando deberían tomar conciencia por favor, ¡PIENSEN EN LA HUMANIDAD!

La única forma de acabar este virus es combatiéndolo en equipo, un equipo que respete las
decisiones tomadas por el presidente de la República, el conjunto de ministros y la conciencia de
cada uno de nosotros.

Despediros es un derecho fundamental que no está establecido en las leyes. Del cual no han
gozado miles de familias durante estas semanas, y del que tampoco gozarán un número inmenso
que vive con incertidumbre si sus familiares se podrán recuperar o se irán a un mundo mejor.

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Un derecho que, al no ser ejercido, duele en el alma retumba el último minuto que pasaron junto
a sus seres queridos. La piel se quema al recrear en sus mentes como se puedo haber pasado los
últimos minutos de las vidas de sus compañeros, amigos o familiares.

La pena les ataca cuando se acuerdan de los propósitos de futuro que ahora solo son papel
mojado, cuando recuerdan la última promesa que no pudieron cumplir. Nadie tenía en cuenta
que esto sucediera de la noche a la mañana, ni se esperaba que ese beso, abrazo, sonrisa, caricia,
esa salida, esa reunión familiar iba a hacer la última. Por eso, recapacitemos por todo lo que está
sucediendo, Dios no quiera y nos pase alguno de nosotros...y no poder dar "el último adiós".

Aún no nos sacamos del pensamiento que la humanidad sigue siendo el peor virus, Porque a
pesar de ver las noticias en que los hospitales están llenos de personas con esta enfermedad, de
ver la cifra innumerable de fallecidos. No somos la suficiente empáticos, no somos lo
suficientemente solidarios con los otros. Ojalá que cuando todo esto pase, seamos un poco más
diferentes y que esto nos haya enseñado a valorar un poco más la vida.
Cuando un ser querido muere, el poder darle un último adiós significa todo. Pero a través de la
coyuntura que estamos viviendo es mucho más penosa y mucho más difícil poder hacerlo.
Muchas víctimas de covid-19 están muriendo en aislamiento hospitalario sin la compañía de
familia ni amigos, las visitas están prohibidas por el alto riesgo de contagio, no cabe duda que está
enfermedad nos impide todo, porque primero te aísla de tus seres queridos justo antes de morir y
después no permite que nadie le dé ese tan ansiado último adiós a las personas que más amaron,
las familias quedan totalmente devastadas y les resulta muy difícil asimilar ese momento.
Acariciarles la mejilla una última vez, tomarles la mano y verlos por última vez. El no poder hacer
todo eso es muy traumático". Por tanto, a todo esto, amemos más, seamos mejores personas
cada día, disfrutemos cada momento de nuestros seres queridos y no esperemos el último día de
sus vidas para poder expresar todo lo que sentimos hacia ellos.
Con la llegada de este virus, que está afectando de manera sorprendente a la población mundial,
nos encontramos con la situación donde los diferentes países tienen los hospitales colapsando.

Nosotros hemos leído varias noticias en especial de países donde tienen una tasa de natalidad
baja. Donde vemos que la mayor parte de personas de la tercera edad son los más vulnerables.

Al adquirir este virus, nos deja aislados de todo y todos para así evitar su propagación, es muy
triste ver que se deba elegir entre las personas a quien salvar y quien dejar morir.

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DERECHO A DECIR ADIÓS

Hemos llegado a ver que estas víctimas mueren solos, sin poder despedirse de sus familiares. Ni
poder recibir una sepultura digna. Ver como los familiares lloran de manera desconsolada al solo
ver el cajón desde sus balcones de sus casas y no volver a ver más a su ser querido.

Por eso nosotros con este artículo queremos llegar a concientizar a las personas para que puedan
tomar las medidas de sus gobiernos y respetarlos, para poder así evitar que nuestra familia se vea
afectada.

Si amas a tu familia, no la expongas, ¡Quédate en casa!

Como es a ciencia cierta despedirnos de nuestros familiares y darles la última despedida para que
puedan descansar en paz, es algo que nos llena de tristeza, angustia, nos flagela a tal punto de no
hallar consuelo. Pero con toda esta crisis humanitaria por el covid 19, este "Último adiós" es a
puertas cerradas, solo médicos pasan por el desgarrador momento de despedirse de personas
que no son sus familiares, amigos o personas cercanas, pero que desde el primer momento lo
sintieron así, este hecho duele más que la muerte misma. No todos estamos tomando conciencia
de eso y ¿Saben por qué? Porque aún ninguno de los nuestros se ha visto afectado. Escuchamos
decir "solo mata a los viejitos", hasta qué punto de inhumanidad estamos llegando, sin olvidarnos
que las personas de tercera edad sienten al igual que nosotros. Es triste ver noticias o reportajes
donde adolescentes salen, beben y se divierten estando en cuarentena. Y ¿sabes que la
impotencia que sentimos? ¿Que sí algunos de estos muchachos se llegarán a contagiar de esta
temible enfermedad, en los hospitales, se les daría preferencia a comparación de algunas
personas que ya tienen mayoría de edad y sabes por qué? "PORQUE AÚN ESTÁN EMPEZANDO A
VIVIR". No, ¡QUE RABIA, QUE RABIA!

Estar solo, agonizando en tu lecho de muerte, es algo que ni al peor enemigo se le desea.

Lo más lógico y habitual es que cuando alguien se apaga puedas acompañarle, estar a los pies de
su cama, acudas al velatorio y le des el último adiós. Darle una muerte digna. Imagínense que la
abuela o abuelo que esta postrado en esa cama de hospital es tu familiar, que has vivido toda tu
vida con él/ella, y que lo más triste es que no puedas darle el último adiós, el último beso o el
último abrazo. Imagínate, que en algunos lugares se entierran en fosas comunes a todos y en
otros los llevan en crematorio en caravanas de carros de militares, teniendo como escenario un
desgarrador momento. Ya ven como si es importante acatar todas las medidas de seguridad. ¡NO!
esto no es un juego. NO, esto no es decir soy joven no me va a pasar nada. Y que de una vez por
todas entendamos que, al finalizar esta crisis, no nos gustaría ver en nuestra mesa con un

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integrante menos, sí por si ya es doloroso la muerte repentina de alguno de los nuestros, no nos
imaginamos el dolor, el sufrimiento de todas esas personas que están perdiendo a muchos seres
queridos en esta batalla.

ARGUMENTACIÓN
En nuestra cultura se suele vivir la muerte con nuestros rituales propios de despedida y rodeados
del cariño de familiares y seres queridos. Hay una manera, podríamos decir, "habitual" de vivir el
duelo, pero también hay formas no tan habituales, sobre todo, cuando la experiencia ha sido
traumática o cuando la muerte del ser querido ha llegado en circunstancias especiales como la de
la pandemia del COVID-19 en la que no hemos podido despedir a los nuestros como nos hubiera
gustado. [ CITATION Ayu20 \l 3082 ]

Referente a lo que dice el autor, estoy de acuerdo porque nuestra cultura sobre las despedidas a
los seres queridos que no dejan, suele ser rodeados de compañía, amor y cariño. Pues es muy
difícil que podamos dar una sepultura digna, ni mucho menos vivir el duelo de perder a nuestros
seres queridos que mueren por este terrible virus, pues se propaga de manera desmesurada. Por
lo cual esto atenta contra los derechos de estas personas a no ser tratados de manera digna, que
sus familiares no puedan ni despedirse de ellos por última vez ni mucho menos recibir su cuerpo
para poder darle el último adiós.

Pero te preguntarás ¿QUÉ ES EL DUELO?

Pues nos referimos al tiempo que se da el ser humano para poder vivir su dolor a la pérdida del
ser querido. Vamos asimilando de poco a poco el vacío que deja su partida, lo cual deja una gran
ansiedad, un montón de emociones a flote que nos hacen buscar respuestas ante lo que estamos
viviendo.

DON JUAN DEL RÍO, certeramente ha dejado escrito en su Diario de un pastor ante el COVID-19
que «no hay un adiós más dolorido que no poder despedir de este mundo a la persona que has
amado».[ CITATION Mar20 \l 3082 ]

Prepararse para morir significa a menudo terminar el trabajo de toda la vida, dejar bien
arreglados los asuntos con la familia y amigos, y hacer las paces con lo irrevocable. Para muchas
personas en fase terminal y sus familiares son significativos las cuestiones de orden espiritual y
religioso. El servicio religioso representa una pieza importante del equipo terapéutico en algunos
sanatorios y centros de cuidados paliativos, y los proveedores profesionales de atención médica

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logran facilitar al afectado y a sus familiares un servicio espiritual apropiado si ellos no disponen
de un sacerdote, un pastor u otro consejero espiritual. [CITATION Eli17 \l 3082 ]

Afrontar al fallecimiento es un transcurso muy difícil, con altibajos emocionales. Sin embargo,
para la mayoría de las personas, es una fase de camino a una nueva comprensión y a un
desarrollo íntimo. El objetivo de afrontar a las heridas del pasado, el restablecimiento de las
relaciones y el hecho de preocuparse por los seres queridos reconoce que las personas
desahuciadas y sus familiares obtengan a menudo un profundo equilibrio íntimo. [ CITATION
Kar17 \l 3082 ]

Estoy de acuerdo con lo que dicen dichas autoras, asimismo en la actualidad estamos viendo
como fallecen dichas personas por una enfermedad letal, donde se van sin despedirse y como
dejan a sus familias sin poder despedirse, en donde el transcurso por el que pasan los familiares y
amigos es muy difícil.

Es verdad que cada persona por la que pasa dicha enfermedad COVID-19, a veces son errores
cometidos por uno mismo, pero todos tenemos derecho a morir dignamente porque es una
decisión que puede tomar una persona o la que representa al final de la vida, pero lo más
importante es respetar la voluntad de la persona.

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CONCLUSIÓN
Hemos llegado a la conclusión de que si la sociedad no toma conciencia de todo lo que conlleva el
no tomar las medidas necesarias frente a esta crisis tendremos el escenario más doloroso que
ningún ser humano le gustaría afrontar. El perder a un familiar en estas circunstancias ni al peor
enemigo se le desea. Recordemos que no estamos encerrados en nuestros hogares, estamos
protegidos, y sobre todo estamos salvaguardando nuestra vida y la vida de quienes nos rodean. Sí
por si el decir adiós, el darle el ultimo abrazo, beso, sonrisa en su lecho de muerte ya es triste,
doloroso y para nada reconfortante, imaginemos lo que es decir adiós desde lo lejos sin ver, tocar,
sin despedirnos por última vez. Pues entonces tomemos esta reflexión para valorar más nuestra
vida, a nuestros familiares, nuestra naturaleza.

Para que al finalizar no tengamos vacíos en nuestra mesa, y que cuando todo esto pase seamos
mejores seres humanos, que esto nos haya hecho aprender a la fuerza la solidaridad, respeto,
empatía, la humanidad que a veces nos hace falta. También nos haga ver la perspectiva de un
mundo diferente en el cual nos atrevamos a seguir nuestros sueños, anhelos, el compartir cada
momento con nuestra familia, y amigos, no dejando para mañana lo que tranquilamente
podemos hacer hoy.

 Sabemos que no despedirse de un familiar es doloroso, causa un trauma emocional.


 El derecho que deben tener los enfermos del coronavirus antes de morir, de poder
despedirse de sus familiares, aunque sea por una videollamada.
 Que las autoridades den un trato digno a las personas que se contagian de este virus y
pierden la batalla.
 La sepultura a los muertos es un más que un ritual para la mayoría de culturas, por lo que
vemos que las familias se les hace difícil poder vivir su duelo de la mejor manera.
 Queremos llegar a concientizar a las personas, para que se queden en casa y evitar que el
contagio se siga propagando.

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Ayuso, F. P. (2020). Publicaciones Claretianas. Obtenido de


http://www.publicacionesclaretianas.com/sites/default/files/Cuando%20perdemos%20a
%20un%20ser%20querido.pdf

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Cortellaro, F. (21 de Marzo de 2020). BBC News Mundo. Obtenido de


https://www.bbc.com/mundo/noticias-51979714

Martín, J. d. (20 de ABRIL de 2020). Arzobispo Castrense de España. Obtenido de


https://www.arzobispadocastrense.com/index.php/1875-diario-de-un-pastor-ante-el-
covid-19-20-4-2020

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