Está en la página 1de 7

Enfermedad por el virus del Ebola

Datos y cifras

El virus del Ébola es uno de los dos miembros de una familia de virus de ARN (ácido ribonucleico)
llamado Filoviridae

La enfermedad por el virus del Ebola (EVE), antes llamada fiebre hemorrágica del Ebola, es una
enfermedad grave, a menudo mortal en el ser humano.

El virus es transmitido al ser humano por animales salvajes y se propaga en las poblaciones
humanas por transmisión de persona a persona.

Los brotes de enfermedad por el virus del Ebola (EVE) tienen una tasa de letalidad que es de
aproximadamente 50%. En brotes anteriores, las tasas fueron de 25% a 90%.

Los primeros brotes de EVE se produjeron principalmente en aldeas remotas de África central y
occidental, cerca de la selva tropical. Pero el más reciente brote en el oeste de África ha afectado a
grandes centros urbanos, así como las zonas rurales

La participación de la comunidad es fundamental para el éxito del control de los brotes. Un buen
control de los brotes depende de la aplicación de diferentes intervenciones, como la atención a los
casos, la vigilancia y el rastreo de los casos, los entierros en condiciones de seguridad o la
movilización social.

El tratamiento de apoyo precoz con rehidratación y el tratamiento sintomático mejoran la


supervivencia. Todavía no hay ningún tratamiento aprobado que neutralice el virus de forma
demostrada, pero están en fase de desarrollo diversas formas de hemoterapia, inmunoterapia y
farmacoterapia.

Tampoco hay todavía vacunas aprobadas para el ebola, pero se están evaluando dos posibles
vacunas candidatas.

Debido a su naturaleza letal, este virus es considerado como un arma biológica.

Generalidades

La enfermedad por el virus del Ebola (EVE) es una enfermedad grave, a menudo mortal en el ser
humano. El virus se detectó por vez primera en 1976 en dos brotes simultáneos ocurridos en
Nzara (hoy Sudán del Sur) y Yambuku (República Democrática del Congo). La aldea en que se
produjo el segundo de ellos está situada cerca del río Ebola, que da nombre al virus.

El actual brote de ebola en África Occidental (primeros casos notificados en marzo de 2014) es el
más extenso y complejo que se produce desde que se descubrió el virus en 1976. Ha habido más
casos y más muertes en este brote que en todos los demás juntos. Además se ha extendido a
diferentes países. Empezó en Guinea y después se propagó a través de las fronteras terrestres a
Sierra Leona y Liberia, por vía aérea a Nigeria y a los Estados Unidos de América (1 viajero), y por
tierra a Senegal (1 viajero) y Malí (2 viajeros).

Los países más afectados (Guinea, Liberia y Sierra Leona) disponen de sistemas de salud muy
frágiles, carecen de recursos humanos e infraestructurales, y han salido recientemente de largos
periodos de conflicto e inestabilidad. El 8 de agosto, la Directora General de la OMS declaró el
brote de África Occidental como emergencia de salud pública de importancia internacional al
amparo del Reglamento Sanitario Internacional (2005).

El género Ebolavirus es, junto con los géneros Marburgvirus y Cuevavirus, uno de los tres
miembros de la familia Filoviridae (filovirus). El género Ebolavirus comprende cinco especies
distintas:

 ebolavirus Bundibugyo (BDBV);


 ebolavirus Zaire (EBOV);
 ebolavirus Reston (RESTV); ha causado enfermedad en los primates, pero no en humanos.
 ebolavirus Sudan (SUDV), y
 ebolavirus Tan Forest (TAFV).

Las especies BDBV, EBOV y SUDV se han asociado a grandes brotes de EVE en África. El virus
responsable del brote en África Occidental en 2014 pertenece a la especie Zaire.

Transmisión

Se considera que los huéspedes naturales del virus son los murciélagos frugívoros de la familia
Pteropodidae. El virus del Ebola se introduce en la población humana por contacto estrecho con
órganos, sangre, secreciones u otros líquidos corporales de animales infectados, de chimpancés,
gorilas, murciélagos frugívoros, monos, antílopes y puercoespines infectados que se habían
encontrado muertos o enfermos en la selva.

Posteriormente, el virus se propaga en la comunidad mediante la transmisión de persona a


persona, por contacto directo (a través de las membranas mucosas o de soluciones de continuidad
de la piel) con órganos, sangre, secreciones, u otros líquidos corporales de personas infectadas, o
por contacto indirecto con materiales contaminados por dichos líquidos.

La infección del personal sanitario al tratar a pacientes con EVE ha sido frecuente cuando ha
habido contacto estrecho y no se han observado estrictamente las precauciones para el control de
la infección.

Las ceremonias de inhumación en las cuales los integrantes del cortejo fúnebre tienen contacto
directo con el cadáver también pueden ser causa de transmisión.

Los pacientes son contagiosos mientras el virus esté presente en la sangre.

Transmisión por vía sexual

Se precisan más datos de vigilancia e investigaciones sobre los riesgos de la transmisión por vía
sexual y, en particular, sobre la prevalencia del virus viable y transmisible en el semen a lo largo
del tiempo. Entre tanto, y sobre la base de la evidencia actual, la OMS recomienda lo siguiente:

 Todos los supervivientes de ebola y sus parejas sexuales deberían recibir asesoramiento
con el fin de adoptar prácticas sexuales seguras hasta que su semen arroje resultados
negativos en dos pruebas de detección del virus. Se debería proporcionar preservativos a
estas personas.
 A los hombres que hayan superado la enfermedad se les debería ofrecer la posibilidad de
someterse a una prueba de detección del virus en el semen 3 meses después del inicio de
los síntomas y, posteriormente, a aquellos que den positivo, todos los meses hasta que sus
muestras de semen den negativo en dos RT-PCR, con un intervalo de una semana entre
ellas.

Los supervivientes y sus parejas sexuales deberían:

 abstenerse de mantener cualquier tipo de relación sexual;


 adoptar prácticas sexuales seguras, en particular el uso correcto y sistemático de
preservativos, hasta que su semen haya arrojado resultados negativos en 2 pruebas de
detección del virus.

Una vez que den negativo para el virus, los supervivientes pueden reiniciar su actividad sexual
normal sin temor a transmitir el virus del Ebola.

Teniendo en cuenta nuevos análisis de las investigaciones en curso y las consideraciones del Grupo
Consultivo de la OMS sobre la Respuesta a la Enfermedad por el Virus del Ebola, la OMS
recomienda que los hombres que hayan sobrevivido a la enfermedad tengan prácticas sexuales e
higiénicas seguras durante los 12 meses siguientes al inicio de los síntomas o hasta que los análisis
del semen den negativo 2 veces para el virus del Ebola.

Hasta que su semen dé negativo en 2 pruebas de detección del virus, los supervivientes deberían
mantener una buena higiene personal y de las manos lavándose de forma inmediata y exhaustiva
con agua y jabón después de cualquier contacto físico con el semen, incluida la masturbación.
Durante este periodo los preservativos usados deberían manipularse y desecharse en condiciones
de seguridad para evitar el contacto con los líquidos seminales.

Todos los supervivientes y sus parejas y familiares sean tratados con respeto, dignidad y
compasión.

Consejos provisionales sobre la transmisión por vía sexual de la enfermedad por el virus del Ebola

Síntomas de la enfermedad

El periodo de incubación (intervalo desde la infección hasta la aparición de los síntomas) oscila
entre 2 y 21 días. Las personas no son contagiosas hasta que aparecen los síntomas.

Se caracterizan por la aparición súbita de fiebre, debilidad intensa y dolores musculares, de cabeza
y de garganta, lo cual va seguido de vómitos, diarrea, erupciones cutáneas, disfunción renal y
hepática y, en algunos casos, hemorragias internas y externas. Los resultados de laboratorio
muestran disminución del número de leucocitos y plaquetas, así como elevación de las enzimas
hepáticas.

Actualmente, se considera que las personas en riesgo de contraer fiebre hemorrágica por virus del
Ébola son aquellas con antecedentes de viajes a África subsahariana, las personas que cuidan a los
pacientes infectados, así como los trabajadores que se encuentran en contacto con primates
infectados de origen africano.

Diagnóstico
Antes de establecer un diagnóstico de EVE hay que descartar otras enfermedades infecciosas
como el paludismo, la fiebre tifoidea, la meningitis. Las infecciones por el virus del Ebola solo
pueden diagnosticarse definitivamente mediante distintas pruebas de laboratorio, a saber:

 prueba de inmunoadsorción enzimática (ELISA);


 pruebas de detección de antígenos;
 prueba de seroneutralización;
 reacción en cadena de la polimerasa con transcriptasa inversa (RT-PCR);
 microscopía electrónica;
 aislamiento del virus mediante cultivo celular.

Las muestras de los pacientes suponen un enorme peligro biológico, y las pruebas tienen que
realizarse en condiciones de máxima contención biológica.

Tratamiento y vacunas

El tratamiento de apoyo —rehidratación con líquidos orales o intravenosos— y el tratamiento de


determinados síntomas mejoran la supervivencia. Todavía no hay ningún tratamiento de eficacia
demostrada, pero se están evaluando diversas formas de hemoterapia, inmunoterapia y
farmacoterapia. Tampoco hay aún vacunas aprobadas para el ebola, pero se están evaluando dos
posibles vacunas candidatas.

Prevención y control

Un buen control de los brotes depende de la aplicación de diferentes intervenciones, como la


atención a los casos, la vigilancia y el rastreo de los casos, los entierros en condiciones de
seguridad o la movilización social. La participación de la comunidad es fundamental para el éxito
del control de los brotes.

Reducir el riesgo de transmisión de animales salvajes al ser humano a consecuencia del contacto
con murciélagos de la fruta o monos o simios infectados y del consumo de su carne cruda. Deben
utilizarse guantes y otras prendas protectoras apropiadas para manipular animales. Sus productos
(sangre y carne) deben estar bien cocidos antes de consumirlos.

Reducir el riesgo de transmisión de persona a persona en la comunidad a consecuencia del


contacto directo o estrecho con pacientes infectados, especialmente con sus líquidos corporales.
Hay que evitar el contacto físico estrecho con pacientes con EVE y utilizar guantes y equipo de
protección personal adecuado para atender a los enfermos en el hogar. Es necesario lavarse las
manos con regularidad tras visitar a enfermos en el hospital, así como después de cuidar a
enfermos en el hogar.

Reducir el riesgo de posible transmisión sexual. Teniendo en cuenta nuevos análisis de las
investigaciones en curso y las consideraciones de su Grupo Consultivo sobre la Respuesta a la
Enfermedad por el Virus del Ebola, la OMS recomienda que los varones que sobrevivan a esta
enfermedad tengan prácticas sexuales e higiénicas seguras durante los 12 meses siguientes al
inicio de los síntomas o hasta que sus muestras de semen den dos veces negativo para el virus del
Ebola. Se debe evitar el contacto con líquidos corporales y se recomienda el lavado con agua y
jabón. La OMS no recomienda el aislamiento de los pacientes convalecientes de ambos sexos una
vez que sus muestras de sangre hayan dado negativo para el virus del Ebola.

Medidas de contención de los brotes. Entre ellas se encuentran la inhumación rápida y segura de
los cadáveres infectados, la identificación de las personas que puedan haber estado en contacto
con alguien infectado por el virus y su observación durante 21 días. También son importantes la
separación de los enfermos y de las personas sanas para evitar una mayor propagación, y el
mantenimiento de una buena higiene y de la limpieza del entorno.

Control de la infección en centros de atención médica

Los profesionales sanitarios deben observar en todo momento las precauciones habituales en
todos los pacientes, independientemente de su diagnóstico. Entre ellas se encuentran la higiene
básica de las manos, la higiene respiratoria, el uso de equipos de protección personal (en función
del riesgo de salpicaduras u otras formas de contacto con materiales infectados) y prácticas de
inyección e inhumación seguras.

Los trabajadores sanitarios que atienden a pacientes con infección presunta o confirmada por el
virus del Ebola deben aplicar, además de las precauciones generales, otras medidas de control de
las infecciones para evitar cualquier exposición a la sangre o líquidos corporales del paciente y el
contacto directo sin protección con el entorno posiblemente contaminado. Cuando tengan
contacto estrecho (menos de 1 metro) con pacientes con EVE, los profesionales sanitarios deben
protegerse la cara (con máscara o mascarilla médica y gafas) y usar bata limpia, aunque no estéril,
de mangas largas y guantes (estériles para algunos procedimientos)

Quienes trabajan en el laboratorio también corren riesgo. Las muestras tomadas a efectos de
diagnóstico de personas o animales con infección presunta o confirmada por el virus del Ebola
deben ser manipuladas por personal especializado y procesarse en laboratorios adecuadamente
equipados.

Respuesta de la OMS

El objetivo de la OMS es prevenir los brotes de ebola mediante el mantenimiento de la vigilancia


de la enfermedad y la prestación de apoyo a los países en riesgo para que elaboren planes de
preparación. El siguiente documento ofrece orientaciones generales para el control de los brotes
de las enfermedades por los virus del Ebola y de Marburgo.

Control de los brotes de las enfermedades por los virus del Ebola y de Marburgo - en inglés

Cuando se detecta un brote, la OMS responde prestando apoyo en diversos ámbitos: vigilancia,
participación de la comunidad, atención a los casos, servicios de laboratorio, rastreo de los
contactos, control de la infección, logística, y capacitación y asistencia a la seguridad de las
prácticas de inhumación.

La OMS ha formulado recomendaciones detalladas sobre la prevención y el control de la infección


por el virus del ebola:
Cronología de los principales brotes de la enfermedad por el virus del
Ebola

Especie Cas Defuncio Tasa de


Año País del virus os nes letalidad

República
Democrática del
2012 Congo Bundibugyo 57 29 51%

2012 Uganda Sudán 7 4 57%

2012 Uganda Sudán 24 17 71%

2011 Uganda Sudán 1 1 100%

República
Democrática del
2008 Congo Zaire 32 14 44%

2007 Uganda Bundibugyo 149 37 25%

República
Democrática del
2007 Congo Zaire 264 187 71%

2005 Congo Zaire 12 10 83%

2004 Sudan Sudán 17 7 41%

2003

(Nov-
Dic) Congo Zaire 35 29 83%

2003

(Ene-
Abr) Congo Zaire 143 128 90%

2001-
2002 Congo Zaire 59 44 75%

2001- Gabon Zaire 65 53 82%


Especie Cas Defuncio Tasa de
Año País del virus os nes letalidad

2002

2000 Uganda Sudán 425 224 53%

Sudáfrica (ex-
1996 Gabón) Zaire 1 1 100%

1996

(Jul-
Dic) Gabón Zaire 60 45 75%

1996

(Ene-
Abr) Gabón Zaire 31 21 68%

República
Democrática del
1995 Congo Zaire 315 254 81%

1994 Côte d'Ivoire Taï Forest 1 0 0%

1994 Gabón Zaire 52 31 60%

1979 Sudán Sudán 34 22 65%

República
Democrática del
1977 Congo Zaire 1 1 100%

1976 Sudán Sudán 284 151 53%

República
Democrática del
1976 Congo Zaire 318 280 88%

También podría gustarte