El lavado de dinero es un acto ilícito que se realiza para hacer el intercambio
de la riqueza obtenida de modo ilícito y convertirlo en activos financieros para hacerlos pasar por lícitos, en sí, el lavado de dinero es considerado un delito en el cual los que lo cometen buscan la forma de ocultar la procedencia de dinero puesto que ha sido obtenido de manera ilegal o ilícita.4 A este delito se le considera un fenómeno social y económico debido a que el origen del mismo se deriva de diferentes acciones ilícitas que al mismo tiempo se orientan al desorden y la descompostura de la sociedad. En las últimas décadas el delito del lavado de dinero ha cobrado fuerza puesto que no está limitado por algún territorio en específico si no que es globalizado. Debido a lo mencionado anteriormente se tomó la decisión de tipificar y sancionar este delito al realizar el proceso de replantear la política internacional antidroga iniciada a finales de 1984 y concluyó finalmente en 1988 en la convención de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) contra el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas.4 La relación entre las outsourcing y el lavado de dinero, que en este caso se pueden definir como un tipo de relación por contrato que le permite a la empresa a utilizar las instalaciones físicas de la empresa b y resolver de una manera fácil sus necesidades operativas, ya que les otorgan los servicios necesarios para desarrollar las funciones de su proceso productivo. Estas forman parte de una tendencia que poco a poco se ha introducido dentro del ámbito empresarial que consiste en obtener recursos para la empresa a provenientes de la empresa b y esto se presta para que sea más fácil la malversación de recursos o mejor conocido como el delito de lavado de dinero.4