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Hemos dicho que el, delito es la conducta típicamente antijurídica y culpable, de ello
resulta que la antijuricidad es un concepto genérico del delito, sin ella no hay delito.
Se determina si una acción es antijurídica cotejando solo las reglas o preceptos del
Código.
Cuello Calon afirma que no hay antijuricidad sin ley penal y para ello se basa en la
vigencia del principio de legalidad. En tanto, que Antolisel, Grispigni y otros,
conceptúan que la antijuricidad no es un simple elemento del delito, sino el delito
mismo.
La distinción entre una concepción formal y otra material del delito, en cierto modo se
la traslada a la antijuricidad en una doble perspectiva; formal o material. La primera
citada en la pura redacción del precepto y la segunda formada por el contenido o
mejor dicho integrada por un valor o bien jurídicamente protegido.
El principal tratadista que propugna una distinción entre una antijuricidad material y
otra formal es
4 TIPICIDAD Y ANTIJURICIDAD
Mezger comienza el tratamiento de este tema afirmando: "Solo es punible el que actúa
típicamente". El delito es acción antijurídica pero es algo mas, también es conducta
típica porque caso contrario el Derecho Penal caería en la arbitrariedad, se vería
sujeto a una inestabilidad y variabilidad, porque el no existir una definición lo
antijurídico en su calificación dependería en última instancia del criterio y juicio del
juzgador, caería en una terrible incertidumbre, pues lo que ayer no era delito hoy
podría serlo. Por eso resulta fundamental para la antijuricidad que el delito Y la pena
sean precisados de modo claro e inequívoco, esta función la cumple el tipo que
descubre las conductas que deben ser consideradas como delitos.
Hemos dicho que el delito es la conducta típicamente antijurídica y culpable, es, decir
que en el Derecho Penal, las acciones que en su propio Ámbito quiere someter a un
tratamiento penal, la antijuricidad no es suficiente sino que debe ir ligada de la tipicidad
para que en materia penal tenga relevancia. En otras ramas del Derecho esto no es
así, basta la antijuricidad, como por ejemplo en el Derecho Civil, Comercial, Laboral,
etc.
Por lo dicho, para que una acción sea delito no basta que se oponga al derecho, es,
necesario que también se adecue al tipo penal. Por ello surge la definición del delito
anteriormente formulada; de donde resulta que los, tipos penales son una verdadera
garantía para el individuo.
Para que penalmente haya antijuricidad se requiere previamente del tipo que nos. dice
lo que es contrario a la ley, define lo injusto penal, de ahí que existiendo ella, del delito
se dice que es acto típicamente antijurídico, tiene esta precedencia.
Dice que al cometer un delito no se viola la ley sino algo superior y por encima de ella
que es la norma y nuestra conducta más bien se adecua a la ley.
Al concluir decimos que los elementos de la descripción típica son dos: el sujeto y la
conducta, que son tema aparte que debe tratarse.
5 LA TIPICIDAD COMO LÍMITE DE LA ANTIJURICIDAD
A raíz de la creación del "tipo" no basta que una conducta sea antijurídica, es
necesario también que sea típica, es decir previamente esta expresada y descrita
como delito por la ley. Sin tipo no hay delito y si esto ocurre Orno vamos a saber que
un acto es delito, si lo predices la existencia de este. En materia penal lo injusto cobra
existencia legal cuando existe una definición de ese injusto y esto lo ha, ce el tipo.
Así como previo y necesario para la antijuricidad penal es la vigencia del tipo, este a
su vez al describir la conducta delictiva limita, la antijuricidad, pues al señalar lo que es
delito y lo que se excluye de ello, incorpora conductas lo injusto y excluye otras. De
esta manera el tipo es un límite a la antijuricidad ya que por ella solo comprendemos lo
que cae en la definición y nada más, lo que esta fuera queda excluido del campo
penal. Esto constituye una garantía para la libertad, seguridad y estabilidad de las
personas, puesto que no responden penalmente por cualquier conducta sino por las
antijuridicidades tipificadas como delito.
El derecho es una ordenación objetiva de la vida, donde se hacen juicios de valor que
califican las conductas como conformadas o no con las leyes, donde lo injusto viene a
ser la lesión a ese ordenamiento. De ahí que las reglas del Derecho aparecen como
normas objetivas de valoración que califican un acto como justo o injusto.
a) Binding dice que el delito es la violación de una, forma que esta encima y mas allá
de la ley a la que se adecua o coincide la conducta antijurídica, La antijuricidad viene a
ser lo contrario o negación de la horma.
La antijuricidad es la con tradición con las normas de derecho, se establece, por este
un juicio referido a la acción que califica el carácter injusto de la conducta. El juicio
referente a la conducta surge una vez que se tiene el efecto de la acción, esta
situación contraria al derecho, da el carácter objetivo de la antijuricidad y ello es lo
decisivo para la punibilidad.
En materia penal una conducta esta prohibida o de acuerdo con la ley, no se admite
una zona intermedia, o sea un actuar indiferente. Cuando el carácter injusto del acto
se halla excluido, falta la antijuricidad.
1. Delitos de intención como el caso del rapto propio (Código Penal, Art. 313), cuando
habla de fines lascivos y otros, que exigen una determinada intención.
2. Los delitos de tendencia, a los que corresponde una conducta como realización de
una tendencia subjetiva, corno el caso de fraude de seguro (Código Penal, Art. 338),
cuando dice, el que con el fin de cobrar para. si o para otros o el secuestro del Articulo
334 “El que con el fin de obtener rescate u otra ventaja para si o para tercero.........”.
Mezger dice q de los elementos subjetivos de los injusto lo siguiente: “Las referencias
anímicas subjetivas del infractor respecto a lo injusto cometido por él, el saber que
infringe el ordenamiento jurídico y el conocimiento de los fundamentos fácticos de
dicha infracción, la intención de actuar contra el Derecho, son solo de importancia en
lo que concierne a la imputabilidad por lo menos normalmente. Pero seria erróneo
querer afirmar este principio sin excepción alguna y referir en consecuencia todo lo
objetivo al injusto y todo lo subjetivo a la culpabilidad, concibiendo el primero solo
subjetivamente y solo subjetivamente a la segunda”.