Está en la página 1de 6

TRABAJO DE INVESTIGACIÓN DE VIH

1.- PROFILAXISEN ACCIDENTES OCUPACIONALES Y NO OCUPACIONALES

1.1.- PROFILAXIS POST-EXPOSICIÓN AL VIH (PPE): Debe ser considerada como una
medida secundaria para prevenir la infección por el VIH cuando la “prevención primaria” ha
fallado.

Cuando exista un riesgo de exposición ocupacional al VIH, el personal debe recibir


entrenamiento sobre las medidas de bioseguridad que el establecimiento de salud o servicio
médico de apoyo deberá adoptar entre ellas tenemos:

 Implementación de precauciones universales y estándar.


 Proveer al personal de salud el equipo de protección personal y material de seguridad
adecuado, que establezcan las medidas de control y coloquen barreras y filtros entre
el trabajador y el riesgo, así como el entrenamiento apropiado para su uso.
 Vacunación mínimamente para tétanos, difteria y hepatitis B.
 Elaboración de procedimientos de trabajo seguros específicos para cada puesto de
trabajo.
 Gestión y manejo de los residuos sólidos biocontaminados, con sujeción a los
principios de minimización, prevención de riesgos ambientales y protección de la
salud y el bienestar de los trabajadores.
 Uso de materiales punzocortantes con precaución: dispositivos para su desecho
cerca a lugar de procedimientos, no reencapsular las agujas, contenedores para
residuos punzocortantes adecuados.

Para la selección de un régimen terapéutico de PPE se debe considerar el riesgo de la


exposición, la información sobre la fuente de exposición, incluyendo la historia y respuesta a
terapia antirretroviral basado en la respuesta clínica, la cuenta de CD4, la carga viral y la
etapa de la enfermedad.

 CONDUCTA A SEGUIR EN EL CASO DE UNA EXPOSICIÓN OCUPACIONAL:


Se debe proveer de cuidado inmediato al sitio de exposición:

a. Lavar la piel y/o la herida con abundante agua y jabón.

b. Enjuagar las membranas mucosas afectadas con agua o suero fisiológico estéril.

c. No se deben utilizar desinfectantes abrasivos sobre las mucosas.

d. El uso de antisépticos (iodopovidona o alcohol al 70% Vol.) no está contraindicado pero


no hay evidencia de que el uso de los mismos o el hecho de exprimir la zona expuesta
reduzcan el riego de infección.

e. La aplicación de agentes cáusticos (Ej. Lavandina o la inyección de desinfectantes en la


herida) no se recomienda.

f. Dependiendo del tamaño de la herida cubrir la misma con gasa estéril.


g. Comunicar en forma inmediata a la persona encargada del seguimiento de los casos de
PPE en el servicio

h. Acudir a consulta con profesional de acuerdo a las normativas establecidas

 Los pasos para determinar la necesidad o no de PPE en la exposición ocupacional


al VIH son:

- Determinar el grado de severidad de la exposición

- Determinar el estatus de la fuente de infección (paciente)

- Determinar el tratamiento indicado basado en los pasos anteriores

Las siguientes recomendaciones terapéuticas aplican a situaciones donde las personas han
sido expuestas a la infección por el VIH o cuando la información disponible sugiere la
probabilidad de que la persona fuente esté infectada con el VIH.

Cuando exista el recurso las recomendaciones para la PPE deben ser implementadas en
consulta con personas que tengan experiencia en terapia antirretroviral y en la transmisión
del VIH.

 INICIO DE PPE: Las consideraciones para iniciar la profilaxis post exposición deben
tener en cuenta

- El tiempo ideal para iniciar la profilaxis con ARV es en las primeras 2 hs. y
dentro de las 36hs, e inclusive se puede instaurar hasta 72 hs. de ocurrido el
hecho.

- La administración de la medicación debe ser decidida en forma consensuada


entre el médico y el paciente.

- Se debe iniciar la terapia con tres fármacos antirretrovirales para


exposiciones ocupacionales al VIH de alto riesgo.

- Una vez iniciada la PPE y si a las 72 horas se confirma que la fuente es VIH
negativo se debe suspender la PPE.

- Si una recomendación de iniciar PPE es rechazada por la persona que sufrió


la exposición, la decisión debe ser documentada en el expediente médico.

1.2.- PROFILAXIS POST-EXPOSICION NO OCUPACIONAL (PPENO): Se llama así al acto


de exponer (se) una persona al contacto con fluidos potencialmente contaminados con VIH,
fuera de situaciones ocupacionales. En este contexto, son considerados fluidos
potencialmente infecciosos la sangre, el semen, las secreciones vaginales, la leche materna
y las secreciones rectales.

RIESGO DE TRANSMISIÓN DEL VIH TRAS UNA EXPOSICIÓN A UNA FUENTE


INFECTADA

El riesgo individual de adquirir la infección VIH después de una exposición sexual o de otro
tipo depende de la probabilidad de infección VIH en la persona fuente, del tipo de exposición
y de la susceptibilidad de la persona expuesta. En los casos de violación sexual que se
define como un evento de acceso carnal (vaginal, anal o bucofaríngea), inesperado, único,
violento e impredecible, por medio de la fuerza o de amenazas sin consentimiento de la otra
persona está indicada la PPENO, así como en los casos de relaciones sexuales sin
protección en donde se sospecha o hubiere riesgo comprobable de pareja seropositiva para
el VIH o en caso de relaciones sexuales protegidas con rotura de preservativo. La violación
suele producir lesiones físicas y puede, a veces, poner en peligro la vida del agredido, por lo
que constituye una forma de victimización donde la atención debe ser multidisciplinaria,
enfocando aspectos físicos y psicológicos, los que se encuentran contenidos dentro del
Programa Nacional para la

FACTORES DETERMINANTES DEL RIESGO DE TRANSMISIÓN DE VIH/ITS:

 La probabilidad de transmisión del VIH va a depender del tipo de exposición, del estado
virológico de la fuente y de otros factores añadidos, entre los cuales se incluyen:

• Agresión sexual (violación): al ser el acto sexual traumático implica la posibilidad de


laceración de la mucosa y, por tanto, de transmisión del VIH.

• Infectividad del individuo fuente: cargas virales elevadas o signos de infección


avanzada (cifra baja de 30 linfocitos CD4 o enfermedades definitorias de sida) así
como la existencia de infección aguda incrementarían la probabilidad de transmisión.

• Presencia de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) o de heridas o lesiones


en el área genital expuesta • Aparición de sangrado o menstruación.

 Se debe ofrecer tratamiento profiláctico contra las ITS. En mayores de 17 años


administrar: Cefixima 400 mg VO dosis única + Azitromicina 500mg, 2 tabletas VO
dosis única + Penicilina benzatínica 2.4 millones de UI IM en dosis única. En
gestantes y menores de 17 años se debe reemplazar cefixima por ceftriaxona 250 mg
IM, en dosis única.

 Se debe ofrecer la vacuna contra el virus de la hepatitis B de manera profiláctica, vía


intramuscular, a toda persona que no haya sido vacunada o que no conozca su
estado de vacunación. Esta vacuna se ofrecerá al momento de la exposición, al mes
y al tercer mes de la primera dosis de vacuna. En casos de pacientes que refieran
tener las tres dosis de la vacuna contra el virus de la hepatitis B no es necesaria una
dosis de refuerzo. Asimismo, se debe administrar una dosis única de inmunoglobulina
humana contra la hepatitis B, 0.06 mL por Kg de peso, por vía intramuscular, de
preferencia dentro de las primeras 48 horas de ocurrida la agresión sexual.

 Se debe ofrecer Profilaxis Post-Exposición (PPE) para VIH lo antes posible y dentro
de las 72 horas post exposición, mediante el siguiente esquema:

2.- ENFERMEDADES OPORTUNISTAS EN EL VIH

Las infecciones oportunistas son las que ocurren con más frecuencia y son más graves en
las personas que tienen el sistema inmunitario debilitado, incluidas aquellas con el VIH. Las
infecciones oportunistas son menos comunes ahora de lo que eran cuando comenzó a
presentarse el VIH, porque hay mejores tratamientos que reducen la cantidad de VIH en el
cuerpo de la persona y mantienen más fuerte su sistema inmunitario.

Entre las infecciones y enfermedades oportunistas más frecuentes en el mundo figuran: •

Enfermedades bacterianas, como la tuberculosis (causada por Mycobacterium


tuberculosis), las infecciones por el complejo Mycobacterium avium (CMA), la
neumonía bacteriana y la septicemia («envenenamiento de la sangre»). •

Enfermedades protozoarias, como la neumonía por Pneumocystis carinii (NPC),


la toxoplasmosis, la microsporidiosis, la criptosporidiosis, la isosporiasis y la
leishmaniasis.

• Enfermedades micóticas, como la candidiasis, la criptococosis (meningitis


criptococócica) y la peniciliosis. •

Enfermedades víricas, como las causadas por el citomegalovirus (CMV) y los


virus del herpes simple y del herpes zoster. •

Neoplasias asociadas al VIH, como el sarcoma de Kaposi, el linfoma y el


carcinoma de células escamosas.

A continuación veremos describiremos ciertas enfermedades oportunistas:


4.- DIVERSOS ESQUEMAS DEL TRATAMIENTO EN EL VIH

El tratamiento antirretroviral actual consiste en la combinación de al menos 3 medicamentos de los


que se encuentran disponibles en nuestro país, cuyas presentaciones para la población adulta se
describen en la tabla , misma en la que se mencionan las dosis y su categoría de seguridad para el uso
durante el embarazo.

También podría gustarte