Está en la página 1de 3

¿Qué es lo que tanto nos gusta de las tiendas D1,

Justo & Bueno y Ara?

En Colombia se ha adoptado una nueva forma de comercialización de productos con precios muy
económicos, a como los podemos encontrar hoy en día en cualquiera de los grandes
supermercados de cadena o en las tiendas de barrio. Teniendo en cuenta que, en Colombia, hace
diez años no se contaba con estas tiendas, solo podíamos encontrar los grandes supermercados de
cadena como ÉXITO, JUMBO Y OLIMPICA. Este nuevo formato del negocio en nuestro país ha
tenido mucho impacto, ya que se ha evidenciado que a las grandes cadenas de supermercados le
han bajado las ventas.

Además, las personas o los consumidores que frecuentan estas tiendas encuentran allí una gran
cantidad de productos básicos para el hogar, con precios muy económicos para la canasta familiar.
Estas tiendas tienen varios productos con marcas propias, otras características que distinguen a
este tipo de tiendas como JUSTO Y BUENO, ARA y D1; que invierten poco en la publicidad, la
decoración de estos locales es muy sencilla, también tienen poca mano de obra, también podemos
darnos cuenta que en estos locales que no tienen estantes, sino que exhiben sus productos en las
mismas cajas en donde vienen, se evidencia poca mano de obra, los espacios de estas tiendas
son muy reducidos y tampoco tienen parqueaderos, de igual modo cobrando las bolsas en donde
empacan los productos para los clientes. De esta manera se les reducen los costos y así
disminuyendo el precio de los productos.

En nuestro municipio de El Espinal podemos encontrar que existen cinco de estas tiendas; una
tienda ARA, dos JUSTO Y BUENO y dos tiendas D1, Y aquí podemos evidenciar que en un municipio
de aproximadamente 80.000 habitantes se han podido sostener, pero también les han traído
problemas económicos a las tiendas de los barrios y veredas, y a los almacenes de cadena como
MERCACENTRO, ÉXITO Y OLIMPICA; perdiendo participación en las ventas generando un menor
crecimiento en sus intereses.
Se dice que los almacenes de CARULLA y SURTIMAX, están trabajando con la estrategia de
la omnicalidad que consiste en abordar todo el ciclo de vida de la relación del cliente con
las empresas proveedoras, donde se establece una comunicación e interacción
consistente por los distintos canales que el cliente quiera usar para interactuar con la
empresa, como en las tiendas físicas, por internet o teléfono. Según Mansilla, dice que los
parqueaderos y las plazoletas de comidas siguen siendo un punto muy importante para
los grandes almacenes de cadena.
Sin embargo, para el análisis de esta nueva estrategia de negocio y comercialización de
productos, centrándonos más que todo en las tiendas D1, ARA y JUSTO y BUENO, según el
analista de mercados Nielsen “las tres cadenas que hacen parte de este modelo
respondieron al cierre de 2016 por 7% de las ventas totales del comercio, cuando en 2013
apenas representaban 1%”. (Revista Dinero, 2016). Gracias a que en abril de 2017
crecieron los puntos de venta en el país llegando a 1080 debido a la buena aceptación que
ha tenido este tipo de negocios en nuestro país.
Para concluir, este modelo de las tiendas de descuento en Colombia ha revolucionado
mucho el comercio retail, creando alternativas de comercialización con el fin de ganar más
clientes. Estas tiendas de descuento vienen creciendo al punto de estar hoy en día en los
primeros lugares en ventas en el comercio colombiano. Teniendo, así como afectados
para el crecimiento económico a las tiendas de barrio y los supermercados de cadena. Ya
que las personas lo que buscan son alternativas para mejorar su capacidad de compra
debido a los precios bajos, y así han dejando de ir a los supermercados de cadena y a las
tiendas de los barrios.

En Colombia se adopta una nueva forma de comercialización de productos con el modelo de


tiendas de descuento o Hard Discount importado de Francia, Alemania y otros países de América
Latina como Argentina. Los consumidores inician a frecuentar locales con una cantidad de
productos básicos con marcas propias, poca mano de obra, menores espacios, sin parqueaderos y
donde tienen que pagar hasta por las bolsas de plástico, todo con el objetivo de ahorrar dinero.
Este nuevo formato de negocio en Colombia ha impactado de diferentes formas varios actores del
comercio como son las grandes cadenas de supermercados perdiendo participación en las ventas,
esto conlleva a generar un menor crecimiento en sus utilidades. A

Para los expertos las cadenas de bajo costo tienen precios accesibles
porque tienen más volumen y menor precio.
Sin embargo, el valor agregado de la tienda de barrio está en la
posibilidad de comprar al menudeo o fiado lo que la familia necesita para
el diario.

No son una tradicional tienda de barrio, pero tampoco un supermercado


de cadena. Se caracterizan por tener estanterías  llenas de cajas y en ellas
los productos que venden. En el centro de los pasillos se apilan más
productos, pueden ser gaseosas, arroz, jabón en polvo, leche, todo
directamente en la caja donde se transportan desde los centros de
producción. Así es una típica tienda D1,  entre  200 y 400 metros
cuadrados, espacio en el que le ofrecen a los consumidores calidad a
precios bajos. Este ofrecimiento, precisamente, es el que ha llevado a
cientos de colombianos a comprar en las llamadas tiendas de bajo costo o
de descuento, las cuales hoy participan con el 6 % del mercado, cuando
apenas en 2014 eran el 2 %, según cifras de Fenalco. En Colombia operan
bajo esta modalidad las tiendas D1, ARA y Justo & Bueno, pero las
tradicionales cadenas de almacenes han buscado estrategias  para estar
más cerca del consumidor y tratar de frenar la competencia de las tiendas
de bajo costo.  Cálculos de las directivas de D1, que ha sido una de las de
más rápida expansión (operan 500 tiendas), indican que los productos que
venden  pueden ser hasta 30 % más baratos comparados con otras marcas
del mercado. Por ejemplo, un litro de agua se vende en $800. Mientras
que en otros supermercados 350 ml. de agua valen $1500; la lata de atún
se vende a $3150, en otros establecimientos oscila entre $3350 y $4700;
1000 gramos de detergente en polvo vale

También podría gustarte