Está en la página 1de 14

DAVID ARELLANO GAULT

GESTIÓN ESTRATÉGICA
PARA EL SECTOR PÚBLICO
Del pensamiento estratégico
al cambio organizacional

FONDO DE CULTURA ECONÓMICA


52 LA TEORÍA DE LA ESTRATEGIA

mullivalentes. La intención debe confrontar "lo dado" con


"lo posible" y no reducir esto último a "lo dado". La direc-
ción, sin embargo, es sustancial para potenciar "lo posible",
Nevándolo hacia la praxis en un esfuerzo conscientemente III. LA MISIÓN' ESTRATÉGICA
incidente.
La estrategia viene a ser, por ende, un esluerzo de refle- "Ustedes saben que n u n c a nos derrotaron en
xión y construcción humanas, y no, hasta ahora, un proce- el campo de b a t a l l a " d i j o el coronel de los
so mecanizable. Los grupos sociales leerán en la estrategia E U A.
la visión del mundo que tienen sus diseñadores y podrán El coronel n o r v i e t n a m i t a ponderó su res-
estar de acuerdo o no con tal visión; remitida ésta a los gru- puesta por un momento. Y replicó: "Tal \ e / , es
pos, formarán parte esencial de! proceso en una compleja posible: pero eso es algo irreievame".
dinámica de diálogo.
La estrategia, por último, es un instrumento básico para Soñar no es en cernido e s t r i c t o , imaginar. En
que la sociedad pueda discutirse a sí misma y en sí misma, ios sueños, las imágenes se soportan más' que
con base en el código explícito que sintetiza la visión del se producen, en lanío que i m a g i n a r es condu-
«_irlas. I m a g i n a r es un \ e r b o a c u \ o .
mundo de los grupos v haciéndolos dialogar entre ellos no
J f . \ I i-. \
por principios de realidad o ideologías —sin que se entien-
da este concepto en forma peyorativa—, sino por principios
de actuación y de metas. En otras palabras, la estrategia es
un principio consustancial a la sociedad, que permite a EL PROCESO ESTRATÉGICO pareciera comenzar por la concep-
los grupos tomar decisiones considerando siempre lo que LLiali/.ación del fin organi/ucional como algo distinto del ob-
otros grupos desean e intentan construir. Por ello, la estra- j e t i v o o giro de la misma. Bajo algunas concepciones, la
tegia no es sino el intento por confrontar, hacia !a búsqueda misión estratégica expresa la delimitación del campo de ac-
de una armonización, las d i s t i n t a s y variadas visiones y ción Je ¡as actividades tactibles,, expresándola como un mar-
concepciones del mundo que poseen los dilerentes grupos cu disciplinario que encauce :a dirección dentro de una gran
que conforman una sociedad. línea de acción. :
Paru utros, este concepto de misión estratégica es de una
ur.n e responsabilidad, pues proporciona una guía global
para la plancacióri.- 1 Peler Drucker establece que e<- e! con-
cepto clave donde se pueden establece!" las prioridades, es-
trategias. planes variados v la asignación de actividades. De
esta lorma, será una descripción concisa relativa a ¡o que es

Comer-sudón del 2^ de a b r i l <Je !97->. en H a n o i , entre el coronel H G


s u n m i e r v Jr.. e n t o n c e s :e(e de la D i u s i ó n de Negociaciones de EL"A, \!
c< H D i i e l I u. j e t e de i a delegación ñor. i el na ni i la. citada en HaiTv Summer-
Q¡: SYreítv : The I ¡L tur.ni \\ar :n Co;.7t>.w, ssi, EL" A, 1981. p. i .
: Paul Sdlleruive. op- ci(.. pp. 224-225.
' G. A. S i e i n e i , Plaueación t'^fratéxica. <.tn s\ México, 1 993, p. ~.
^4 LA M I S I Ó N ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 55

propio de una organización, a partir de la relación clientes- les son recuperados como actores pensantes y construc-
productos. 4 tores de la historia.
Yavit/ y N'euman van más allá y establecen que "una Curiosamente, son los países latinos los que manifiestan
posición deseada, en un mundo pronosticado [...] puede la mayor resistencia a u t i l i z a r este tipo de herramientas y
tratarse como la diana o el marco de la estrategia".-" en los que se prefiere seguir actuando según el i n s t i n t o y la
Para Bryson (1995) la misión de la organi/ación, en t á n - experiencia. Pero, ¿será ésta la solución? En un mundo mó-
dem con sus mandatos, establece su razón cíe ser, la j u s t i f i c a - vil y complejo quedaría claro que pretender basar todas las
ción social de su existencia. Para una agencia gubernamen- posibilidades de éxito en un pronóstico de la realidad cons-
tal u organización no lucrativa, la misión debe i d e n t i f i c a r t i t u i r í a una falla grave. Pero también quedaría claro que la
necesidades sociales o políticas que la o r g a n i z a c i ó n busca experiencia y la intuición podrían quedar, en la mayoría de
cubrir. los casos, f u e r a de lugar a n t e las nuevas \ veces inéditas
En d e f i n i t i v a , es un concepto cla\e. Pero, ¿es un ciato o situaciones que se viven a diario en una realidad que, como
una línea política? ¿Se basa en un análisis del mercado o en hemos visto, se transforma a través de! tiempo.
un pronóstico de la realidad total? ¿Qué d i f e r e n c i a concep- Se podría pensar, entonces, que la mentalidad estratégica
tual tienen: misión, propósito, giro de la organi/ación? conlleva un propósito basado en premisas tácticas, como v a
Pretender establecer que es una imposición, desde el con- vimos. Lo fundamental es que no sea un propósito ilusorio,
texto, pareciera tener graves implicaciones. La creación de sino terrenal, objetivo. Pero para lograr esto último se ha bus-
pensamiento estratégico no puede partir del estrecho espa- cado atender de nuevo a los pronósticos y a los diagnósticos,
cio que le puedan dejar las predicciones del futuro. Susten- preocupados por ver sólo aquello que, en un momento deter-
tar toda la intención organizacional en la débil predicción minado, se puede observar claramente. Si esto es así, nos en-
de los complejos elementos de la realidad económica, polí- contraríamos más o menos como antes, pues ¿cómo se puede
tica y social, ha resultado, por lo regular, en desastres. pensar estratégicamente sólo desde lo factible, desde lo que
En efecto, los patrones que nos quiere imponer un esque- es obvio de observar, sin buscar nuevas posibilidades dentro
ma de planeación clásico, que predice con "exactitud técni- del inmenso y fmctíiero marco de lo posible? Además, ¿cómo
ca" lo que va a suceder y, con base en ello, establecer las lograr pensar estratégicamente sin caer, exclusivamente, en el
líneas de acción con pretensiones de alean/ai' ciertas metas, mundo de los sueños y los buenos propósitos?
se denotan como un sueño bastante lejano de alcanzar. Retomando varios de los principios establecidos anterior-
I n c l u s o , bajo la i n t e r p r e t a c i ó n de que la planeación es mente, debemos empezar por decir que la misión forma par-
parte de la política simbólica, donde no se pretende llegar a te de un proceso estratégico. Significa que debe sen ir para
resultados objetivos sino más bien encauzar a la gente ha- pensar estratégicamente. No correspondería estrictamente a
cia una perspectiva de acción racional, perspecti\ que no un requisito f o r m a l dentro de un esquema a d m i n i s t r a t i v o ,
existe pero que es válida para efecto de m o v i l i z a r a los gru- sino que sería, más bien, un elemento potenciador v ordena-
pos e i n d i v i d u o s , es i m p e n s a b l e ho\a d e n t r o de una dor del pensamiento, que se dirige a definir su inserción den-
sociedad plural, crítica y d i n á m i c a . En ella los grupos socia- tro de una realidad a !a que desea ayudar a construir.
\Veiss y Pideril (1999)° realizaron un estudio en escuelas
4 PL-LLT D n u k e
56 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN" ESTRATÉGICA 57

públicas para establecer la relación que existe entre la mi- cionalidad de la praxis; 8 direccionalidad que parte de un
sión y tos resultados. Las autoras concluyeron que la elec- principio intencional devenido no normativamente .sino en
ción que se haga del contenido y el estilo retórico de la referencia y en relación con la realidad c u l t u r a l de una
misión puede tener consecuencias que facilitan o deterioran sociedad. Esto implica pensar la realidad desde e! "aún no",
los resultados, en que la claridad, el tono activista y el enfo- como una realidad en elaboración, un espacio por conquis-
que son las tres dimensiones del estilo retórico. Por otra tar. Se trataría, en fin, de poner al sujeto en función de !a
parte, la selección electiva del contenido de la misión está realidad.'
en función del trabajo que real i/a la organización, la orien- Partiendo de estas premisas básicas, la misión o fin estra-
tación de la organi/.ación hacia su trabajo v el contexto tégico puede entenderse como la perspectiva que los acto-
político y a d m i n i s t r a t i v o en el cual opera la organización. res tienen acerca de ¡o que ellos, aislados o a través de una
Elaborar el concepto tic- m i s i ó n implicaría tener capaci- organización, buscan ser en la realidad, como imagen ideal
dad para hacer flexible la compleja interrelacion contexm- racional, en tanto que consciente, discutida \, de
organi/.ación. abriendo asi la posibilidad de que sus i n t e r - su accionar i n d i v i d u a l u organi/acional. 1 "
conexiones se a m p l í e n , en un c o n t i n u o , entre determinismo Aquí lo ideal no significa un ideal descabellado o ilusorio:
v voluntarismo. es ideal porque establece la intención de la organización
Implicaría, también, manejar un concepto do misión que para con el contexto. La misión es algo más que eí giro, es
vaya más allá de ser un ciato para una empresa o institución la preocupación central de la organización, pues t r a t a de
o un simple listado de buenos propósitos por parte de los establecer una condición de actuación que tenga, como
dirigentes organizacionales, o de propósitos tan alejados de parámetro, la necesidad de sintetizar la posición deseada e
la realidad que no f u n c i o n a l i c e n la actuación organizacio- imaginada c o n s c i e n t e m e n t e en el t i e m p o respecto de la
nal, aunque sin p e r m i t i r que se convierta en un concepto organización. Es la imagen de lo no de\enido^.de lo "aún no
asesino de la creatividad para pensar en su inserción. existente", pero posible de constituirse. 1 1
El enfoque m i l i t a r nos lleva a pensaren la m i s i ó n como ia Es m u \e establecer las condiciones de' e q u i l i -
i n t e n c i ó n máxima a la que se aspira: el deseo valorativo de brio necesario para que este concepto f u n c i o n e en ia d i n á -
alcan/.ar un propósito, según una forma de pensar. mica real. Debe contener, sin d u d a , una i n t e n c i ó n que po-
El en I oque- de la gestión e s t r a t é g i c a recuperará, corno sea d e t e r m i n a d o s grados de r a c i o n a l i d a d , a u n q u e ^e Jc'rv
p r i n c i p i o ontológico v epistemológico, una definición M.¡^- buscar que no coarte la i m a g i n a c i ó n . E n c o n t r a r eMa Jo-;-
ianciai: la historia es la construcción objetKamente posible vio r a c i o n a l i d a d debería c o n s t i t u i r el e l e m e n t o c!a\ Je ia
de ios actores sociales. 1
Con esto no se pretende establecer un neoidealismo sino
un parámetro mucho má.s real, una combinación de! electo ' H u u o Z e m e 1 m a n . f ^ > c>';':<. • i/V ,'í,1 YÍ "-,\;. • •." ..'.' n 2S
objetivo de las relaciones entre d e i e r m i n i s m o \- • ¡huí. pp 32-33.
1 A pai ; i r de a q u í nos riMenrenm- e \ c ! u s ¡ \ . m í e n l e .¡I casi > .,-, _ M M ; / J
mo. Lo real-objetivo "se desdobla ' —nótese que no "se sepa-
,_ ¡nruti \s que quede e n i e n d i d o que esia pe i's p e c i n a eMi aiegu
ra ' o "se divide"— en dos planos: la p r a x i s a c t u a n t e en los se puede a p l i c a r a i n d i v i d u o s , grupos Je aeUMV- o a e u a l q m e r cierr
sucesivos momentos \l provecto que c o n f o r m a la ciirec- d < > n d e oí hombre tomo de-eisiones.
Esia- eate^orias de Hniest Blnelí son mu> p e n i n e n i e s . pue- oxphca
en >u p l e n i l u d , la p e i v c p L i ó n de un i d e a l eonm hi p u i e n c i a c i ó n de 1'
po-iblc. tomo im.iiiin.icii'in tructík-ra o deseo Je \<> viable de t . o n v t r u i r
E. Bloch, F.l pri'icipit) L'.-tpi'rtiu-ti. Aguilur. Madrid, 1977.
58 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 59

En este punto, la racionalidad pura no se puede dar. Al La misión se construye como una imagen deseada que
hablar de racionalidad no se habla sólo del cálculo de la con- busca parámetros de viabilidad basándose en la reflexión.
versión de las consecuencias en fines, de acuerdo con la Pero nos estamos moviendo en el espacio de las decisio-
utilización de determinados medios, sino también de "refle- nes no estructuradas y, como agravante, parecería que
xión"; es decir, de pensamiento lógico sobre el deseo razo- pretendemos sistematizar el mundo de los fines humanos,
nado o ideal objetivado que se pretende lograr. Este deseo o los que, a fin de cuentas, son valores. E l i m i n a n d o el pre-
ideal lo vemos sustentado, conscientemente, en una pers- j u i c i o positivista de los límites que le imponen al analista
pectiva de la realidad concreta, apoyado en una ideología, los juicios de valor, pero sin olvidar la obvia importancia
en el sentido amplio y no peyorativo de la palabra. 1 - que tienen el cuidado científico y la d i f i c u l t a d de t r a t a r
No olvidemos la complejidad, incluso psicológica, de con valores devenidos de las profundidades complejas de
obtener los fines que se plantea el pensamiento estratégico. la m e n t e h u m a n a , creemos que, en un m u n d o como el
Sin embargo, debe entenderse que el hábito de pensar es- nuestro, los fines no pueden ser decisiones estructuradas,
tratégicamente correspondería a buscar el equilibrio entre aunque esto bien podría estar sustentado en un problema
la realidad y el sueño; no como diagnóstico sistemático, de grado.
pues esto sería a esta a l t u r a del pensamiento adaptativo; Sistematizar los fines implicaría una nueva perspectiva
tampoco como intención. de quien toma decisiones. Una decisión, con respecto a los
Aquí, el pensamiento estratégico es un pensamiento diri-
fines de órganos societales, deberá ser discutida cada vez
gido a la creatividad, a la imaginación, a la búsqueda de
más frecuentemente, en forma colectiva, enfrentando el ám-
alternativas innovadoras; pero con realismo, como poten-
bito del disenso como método de discusión que pretende la
ciación de lo posible, enmarcado dentro de un provecto de
búsqueda de consensos parciales. A d e m á s , el acuerdo en
construcción i n t e n c i o n a l de la realidad. Antes habría que
la misión de la organización, particularmente si éste es
decir que hacer un diagnóstico coarta la libertad de pensa-
miento e imaginación \" al pensamiento cuando consensual, se convierte él mismo en una fuente de poder
éste sólo se dedica a revisar las restricciones, buscando defi- para la organi/ación (Pfeffer, 1981 y 1992).
nir con ello las oportunidades y amenazas. Siempre será más cómodo simplemente decir que los
fines se imponen por el líder, se imponen "desde arriba". La
El éxito estratégico no puede reducirse a una fórmula [...] ha\s mentales > maneras
disciplina de pensar
de la administración,
que pueden ser adquiri-
sistemáticamente ha sufrido
cuando se abre la puerta a la discusión de los fines, porque
dos [...] v liberar' el poder creatho del subconsciente [...] la eso a su vez, abre las puertas al conflicto, al debate y a la dis-
creatividad, productividad mema] y el poder de la considera- cusión entre los actores organi/acionales respecto de la natu-
ción estratégica, no conocen fronteras nacionales. 1 ' ra le/.a de la organización para la que trabajan. Por eso la
La misión no debe ser un concepto que trate de i n v o l u - administración ha evitado sistemáticamente abril' la discu-
crar a la imaginación total. Los sueños pueden ser intere- sión respecto de los ñnes. Pero el análisis estratégico parte
santes, pero su decodificación, i n t e n t a n d o incorporarlos a j u s t a m e n t e de la importancia de abrir la discusión entre los
ia realidad, es sustancial. grupos organinacionales.
Pongamos el caso de una empresa mexicana que pertene-
ció al sector público, la telefónica Telmex. Definía su misión
así: "Prestar los servicios de telefonía v de telecomunicacio-
60 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 61

nes inherentes en la forma más amplia, moderna y eficien- del todo dependiente de las luchas entre las coaliciones
te, al menor costo para el usuario".14 organizacionales. Existen también determinaciones contex-
Ésta sería la razón básica de su existencia como empre- túales y, más allá, perspectivas e interpretaciones de los
sa de servicio. Pero habría más que eso: é~a sería la razón actores respecto de estas determinaciones. Muchos esfuer-
ideal de su actuación pública, su intención explícita; su zos se han realizado para consolidar una posición válida y
razón básica podría ser mucho más simple: "otorgar servi- trascendente que considere a la organización, pública o pri-
cios telefónicos al país". Pero su intención es clara y múlti- vada, industrial o de servicios, económica o política, como
ple: hacerlo extensivo a todo el país, satisfaciendo a amplios un ente vivo y complejo que va más allá de ser un "levia-
grupos sociales a bajo costo y eficientemente, tanto en lo tán", un conjunto de hombres que pueden ser simplificados,
económico como en lo tecnológico. al decretarse que la organización misma está definida por
La misión es algo muy humano, muy vivo. Se remite a la un solo hombre. Esto, en teoría, es denominado por algu-
forma en que se percibe la realidad dinámica y en cómo nos como la perspectiva del "actor racional unificado", co-
actuar sobre ella.'; Es un código que se refiere a la posición mo exponíamos anteriormente.
que tienen y desarrollan los grupos e individuos dentro de Esta idea ha resultado muy poderosa pues aparentemen-
la organización, en sus diferentes grados, dependiendo del te explicaba la realidad de una manera bastante aceptable,
caso, como forma de ver e] mundo. La misión debe ser un aunque dejaba sin explicar fenómenos importantes tales
reto para la mayoría de los implicados en su logro.16 como el conflicto, la cooperación'orgánica, la vida interna
Es lógico que las misiones organizacionales se definan de una institución, etcétera.
con cierta heterogeneidad. No hay parámetros rígidos en la Mejor ha sido pensar en algo más real, aunque más com-
definición de estas imágenes. Construir una misión debería plejo. Pensar que la organización "es la suma total de mu-
soportar, como dijimos antes, un complejo proceso de deco- chos poderes; es un tesoro de potenciales creativos, un or-
dificación. Tenemos suficientes ejemplos analíticos que nos ganismo vibrante con su propia existencia, su propia vida,
hablan de la importancia que poseen los grupos internos su propia personalidad".lf
por el hecho de participar y buscar definir el camino de una En las organizaciones no todo puede ser tratado bajo la
estrategia organizacional, queriendo así imponer su visión idea extrema de que constituye, en suma, un espacio de ra-
del mundo sobre los otros.17 cionalidad colectiva, como tampoco podemos pensar que la
Sin embargo, construir una misión no sería un proceso organización representa, íntegra y exhaustivamente, al due-
K Telmex, El proceso deplaneación er, Telmex, s, e., s. f., p. 9. ño. No todo es un paraíso donde el hombre vive en armonía
L" Es interesante pensar por qué este concepto se utilizó para designar íi con otros hombres, como tampoco todo es explotación por
los grupos de sacerdotes que vinieron de España para completar la con-
quista: una misión venía en términos de discurso a abrir un nuevo mundo, parte del "burgués", o peor aún, del capital.
desde una nueva "perspectiva' de lo que era y significaba. Las misiones Sin embargo, no por causa de tales premisas debemos
tienen mucho que ver con el intento de expandir el principio de realidad concluir en lo "obligado", lo "lógico": el rechazo a todo lo
que se posee, hacerlo universa! y válido. Otro ejemplo curioso de esto es que
el FM] haya decidido llamar misiones a los grupos que arriban a nuestros que signifique capitalismo y la realidad social que éste ha
países, para constatar y hacer evidentes algunos principios básicos por los construido. El sistema capitalista contribuyó a estructurar
cuales se deberían solucionar determinados problemas. Estos principios la organización moderna, ese espacio tremendamente po-
básicos reflejan la visión del mundo de tal organismo.
)CI R. Ackoff e.1 al., Guía pare controlar al futuro de la empresa. Limusa.
tenciador para la transformación de la realidad, donde los
México. 1986. p. 46- l f F. G. Harmon y G. Jacobs, La diferencia vital, Norma, Bosotá, Colom-
17 R. Mazzolini, op. di., y M. Pettigrew. op. cii.
bia, !98S,p. 105.
62 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 63

seres humanos adquieren la posibilidad de impulsar la rea- "Estamos interesados en satisfacer cualquier necesidad de
lidad más allá de sus esfuerzos individuales. comunicación, quienes quiera que sean los solicitantes". 21
Como entes complejos, construidos f u n d a m e n t a l m e n t e Para la AT&T, obligarse a atender umversalmente el mer-
por seres humanos, las organizaciones no son una caja de cado de comunicaciones otorgando todos los servicios, la
donde emane por todos lados una racionalidad impersonal. estaba llevando a una crisis institucional que ponía en jue-
Algunos se han aventurado a establecer que la organización go su existencia misma a mediano plazo. Obvios son los
es tan "humana" que posee incluso un inconsciente: el in- problemas que surgen, en el mundo presente, dentro de un
consciente institucional. Aparte de la obvia i n f l u e n c i a de ambiente tecnológico tan turbulento como el de las comu-
Jung (1970) probablemente esto se deba a que los hombres, nicaciones al imponerse una misión de tal calibre.
a fin de cuentas, le imprimen a las cosas sus temores, sus Lo complejo provenía de que esta misión no hacía sino
características, sus valores, sus creencias o sus (mes. responder al centro psíquico creado por valores arraigados
En algunas organizaciones estas creencias y estos valores en el siglo xix: el servicio universal, la estandarización y la
se hallan profundamente enraizados en la gente que partici- jerarquización central, entre los más significativos.
pa en su interior. A esto se le ha denominado centro psíqui- A la luz de los profundos cambios que se vivieron a lo largo
co organi-acional y en él se han establecido los parámetros del siglo xx, los valores y, por lo tanto, la misión, requerirían
sustanciales para una satisfactoria definición de su mi- Lina revisión. Resulta sumamente interesante reflexionar,
sión. 19 De acuerdo con Moore (1995), si la misión expresa con base en la crónica de Toffler (1988), acerca del profun-
un valor o un propósito que una comunidad defiende, en- do hecho que significa para la gente de una organización
tonces estará dispuesta a darle al dirigente su apoyo. tener que aprender a adaptar sus valores y, por consiguien-
Ésta es una perspectiva trascendental, pues sin necesidad te, la misión, intactos durante décadas. A estas personas de
de retornar a la idea de un "hombre" que define todo para la m e n t a l i d a d conservadora el autor les propone, por tanto,
organización, corno tampoco t e r m i n a r en un nuevo "actor revisar sus valores a la luz de la nueva ola que vivimos,
racional unificado", se logra aquí incorporar ambos fenó- transformando así profundamente su misión.
menos bajo una construcción valorativa que los miembros La misión de la AT&T se propuso algo así: "Tiene como
organizacionales realizan no sólo para a d q u i r i r poder sino m i s i ó n asegurar a los EUA un sistema de comunicaciones
t a m b i é n para compenetrarse con los valores que han esta- con los máximos adelantos técnicos para voz y datos, pro-
blecido y hegemonizarlos. veyendo aquellos productos y semcios y 'sólo aquellos' que
L'no de los casos más interesantes que vale la pena men- no pueda proveer ninguna otra compañía, a un n i v e l equi-
cionar, por el hecho de que no se refiere a una situación lati- valente de costo, calidad e interés social"."
noamericana, es el estudio que ha hecho Alvin Toffler de la Es por ello que insistimos tanto en la i m p o r t a n c i a de un
American Telegraph and Telephone (AT&T). : O En esle estu- concepto como ésle, pues exhibe, en suma, la razón de ser
dio, el autor discute sobre la compleja interconexión entre cíe un ente, la declaración de una i n t e n c i ó n de amplio al-
la misión de la organización y su comportamiento total, ad- cance-' basada en valores y creencias organizacionales.
ministrativo, operativo y estratégico. La transparencia de la misión, aunada a la poca importan-
Podríamos resumir la misión en los siguientes términos: cia que se le ha dado como concepto sustancial del proceso
64 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 65

de análisis estratégico lanío en la práctica como, en menor Una misión es un fin; un fin es un valor. Bajo estas premi-
medida, en la teoría, se debe al l i m i t a d o esfuerzo de com- sas se pueden esgrimir varios argumentos. Por ejemplo,
prensión de que ha disfrutado, por considerársele un concep- negar el fin como objeto científico de estudio, lo que sería
to y un estuerzo propios del mundo de los sueños. acercarnos al "mundo feliz", a la pesadilla weberiana de los
En las ciencias sociales estamos acostumbrados a que si hombres diminutos, que defienden sus puestos insignifican-
algo no posee una clara distinción dentro del mundo de la tes sin ninguna imaginación, sin vida. En este caso, toma-
práctica utilitaria, así como tampoco un nexo claro con una mos el fin como un dato. El sueño positivista de dejar a un
teoría específica, cuando mucho le otorgamos una especie lado los valores, como garantía de objetividad, será desde
de subcategoría analítica, calificándolo de "parámetro" de siempre una grave preocupación de los administradores.
discusión. Véase cómo en la historia de la administración se realizan
Así, si la misión no es un dato, un intento de hacer racio- esfuerzos múltiples para hacer realidad un mundo así: los
na! todo contenido de la i m a g i n a c i ó n , tampoco es un s i m - fines están dados y la gente es incapaz de comprenderlos; o
ple deseo o propósito. ¿Qué coherencia teórica posee y, por bien, están dados en forma abstracta, por un monstruo
tanto, qué utilidad práctica puede tener? La trascendencia leviatánico llamado "estructura jerárquica". 26
cíe un concepto como e! de " m i s i ó n " radicaría t a n t o en su En otro orden más avanzado de la ciencia se ha buscado
capacidad ordenadora respecto de los criterios de actuación construir una estrecha relación entre los fines y los medios,
como en sus intentos de recuperación del espacio humano incluso mediante el artificio de denominar al binomio de
para una acción como ésta. otra manera: alternativa-consecuencia. A lo sumo se ha lle-
Evaluar una actividad, es decir, establecer un juicio sobre gado a encontrar que, dependiendo de! nivel en que nos
la actuación de algún fenómeno social, implica una alta encontremos, un fin puede ser el medio de otro fin, a la vez
capacidad cíe racionalización. 2 4 Racionalización es, llana- que un medio puede ser el fin de otro medio. Algunos bus-
mente, acercar los espacios de construcción de los medios a carán dar solución a este espinoso problema convirtiendo,
los objetivos o los fines, en forma cada ve?, más congruente. al fin, una meta en dato, que bien podría denominarse
Esto implicaría reducir ocasionalmente los fines, pero no es "meta-dato"; ya sea con base humana, un neoidealismo
así por antonomasia, pues con los mismos o mayores recur- basado en el líder o en un concepto nacional o religioso, o
sos se pueden lograr fines de mavor alcance. En sentido es- extrahumana, como en el determinismo sfeziano.
t r i c t o es compaginar recursos con fines, donde los fines y Es necesario que el pensamiento administrativo rompa
los medios encuentran altos niveles de interpenetración. las limitantes cadenas conceptuales de los fines y deje de
La misión está en el m u n d o de los fines y el que éstos pue- reducir lo posible a lo dado, abriéndose mejor desde lo dado
dan ser instrumentos reales, en los j u i c i o s respecto de la a lo posible. No todo se soluciona haciendo cada vez más
actuación de algo, requiere pasar por un t a m i z que haga estructurada alguna decisión, al procurar que algún día sea
viable, a priori, el propio fin. Esta ú l t i m a afirmación bien intraducibie a una computadora. Éste es un paso muy im-
puede ser considerada "sacrilega" dentro de las escuelas portante, pero lograrlo no implica seguir simplificando las
clásicas de la administración.-' Expliquémonos mejor. cosas o escondiendo la complejidad práctica real de ellas.

:4 \i> entendiendo por racional i/ación tu que se encuenira mucho en -6 Taylor, Fayol y Mayo, los llamados padres de la administración mo-
boga: "reducción". derna, se encontraron dando una lucha sistemática por comprender cómo
:í Rucoi-dcmos sencillamente a H. Simón. El comportamiento lograr la cooperación bajo el proceso de separación sistemática entre con-
tituiro. Amular, Buenos Aires. 1978. cepción-ejecución.
66 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 67

Tal vez uno de los primeros pasos que deberíamos dar sea de que la concertación de la misión de la organización que
aceptar conceptos tales como el de misión, que, para ha- sea socialmente deseable y justifique los propósitos produ-
cerlo racional, debería ir más allá del concepto de "calcula- cirá entusiasmo (Bartlett y Ghoshal, 1994).
bilidad" y acercarlo más al de "reflexivo"; reflexión que no Por eso creemos que el tamiz que puede hacer viable un
significa per se cálculo perfecto de los medios sino aplica- fin, la misión en este caso, no puede ser otro que el diálogo
ción de la conciencia, de la mente y de los valores ante el y la discusión abierta y plural del propio fin o misión, pues
logro de cierto espacio futuro. a fin de cuentas deviene de principios valorativos sin los
Hablamos, entonces, de la capacidad humana de imagi- cuales una organización no pasa de ser una "burocracia de
nar proyectos a partir de un principio de realidad, desde papel". Ninguna teoría podría llegar a sistematizar los fines.28
una perspectiva del mundo que es comprobable a través de la En la práctica, construir la misión implica más que la apli-
práctica cotidiana. No hablamos de "la mejor realidad", ni cación de algún método de conocimiento grupal de los obje-
mucho menos. Los seres humanos cometemos errores y tivos de la organización: Método Delphi, Método Electra,
éstos forman parte de nuestra vida.27 lluvia de ideas, desarrollo organizacional, grupos expertos,
El desorden y el caos son expresión del orden, de lo im- etc. Implica, además, toda una capacidad negociadora y con-
previsible, de la natural imposibilidad de tener siempre una ciliatoria de los grupos dirigentes para estar preparados a
"mejor manera" de hacer las cosas. La pluralidad y el con- aceptar y construir basados en la pluralidad y aceptando la
flicto, expresiones lógicas de una realidad compleja, son evaluación de la misión en forma constante y abierta por
elementos que alejan la utopía del óptimo permanente. parte de todos los grupos organizacíonales. Debería ser
Hablamos de la realidad posible dentro de lo factible, que prioritario otorgarles a las organizaciones públicas y priva-
puede lograrse fortuitamente o puede construirse desde das de América Latina un centro psíquico, como una tenta-
una estrategia dirigida, intencional. Por eso hablábamos de tiva de pretender recuperar los valores y las creencias que
que la misión debe ser viable a priori, pues se invoca a la permitan reconstruirlas como entes poderosos y sinérgicos,
capacidad de construir la realidad desde una perspectiva de en las que la gente se sienta comprometida en cualquier
ésta que, sin ser perfecta, encuentra su viabilidad en cuanto nivel y encauce sus acciones, sus coincidencias y sus dife-
resuelve los problemas objetivos a los que tiene que enfren- rencias hacia una organización viva, que les otorga a los
tarse. seres humanos mucho más que un sueldo para vivir. Real-
Bajo la idea que permea todo este trabajo de realidad mente no podemos pensar en una región moderna sin bus-
como totalidad, síntesis de múltiples determinaciones, el car potenciar a su gente haciéndola crecer.
concepto de viabilidad es imposible, hoy en día, para alcan- Comprendida de esta manera, la misión permitirá obte-
zar una racionalización total; sin embargo, es factible de ner un criterio sumamente poderoso de actuación al ser el
comprenderse y construirse para que la acción sea dirigida gran parámetro viable de inserción al contexto. Se transfor-
como expresión viva de la perspectiva del mundo de los maría, así, en un proyecto no sólo deseado sino también
grupos o de las personas que procuran implantarlo, además factible de ser evaluado, aparte de significar un juicio cons-
- 7 Tenemos mucho que aprender todavía de pensadores como Antonio
Gramsci, quien, desde una perspectiva globalizante tan poderosa como el 2* Como el mismo Weber plantearía: si los fines son la vida, lo humano
marxismo, no se reduce a ella, sino que encuentra en la vida la dinámica de la acción, al sistematizar los fines, al hacerlos presa de una racionalidad
más compleja de construcción de lo general, partiendo desde lo particular, L'ga!, mediatizada, e! hombre se acercaría a morir, como ser humano, si
y no a la inversa- Véase Antonio Gramsci, Cuadernos de la cárcel, t. i, Juan esta sistematización no le da nueva "vida" como espacio colectivo para la
Pablos, México, 197S. definición de objetivos colectivos.
LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 69
68

tructor de nuevas acciones caracterizadas ahora por su a nivel estratégico, establecer la posición estructural y co-
potencialidad de aplicación real. yuntural de la organización.
La visión estadunidense de los stakeholders (como ya se En este sentido, se busca comprender cuáles son los princi-
mencionó: grupos de influencia o condicionantes) presenta pios que le dan vida a la organización y qué es lo más sobre-
una avanzada idea acerca de la necesidad de construir la saliente que ha hecho a lo largo de su historia. De aquí se van
misión desde una perspectiva que integre todas las expecta- deduciendo los espacios, los actores y los sistemas más rele-
tivas de los diversos grupos. Para esta visión es sustancial vantes que han intervenido en este proceso. Éste sería un pri-
hacer entender a los "grupos de interés", personas o grupos mer punto de posicionamiento: el estructural. Con él se bus-
que en forma directa o indirecta afectan las acciones estra- ca encontrar cuál es el principio creador y destructor de la
tégicas, la dinámica de la toma de decisiones interna de la propia organización y cuáles serían los límites impuestos por
organización con el fin de que éstos actúen en forma res- la propia dinámica que le hizo dar a luz.
ponsable e informada. Es también importante conocer la El segundo punto de posicionamiento para la misión sur-
forma como reaccionan ante determinados impulsos, con el ge de una comprensión coyuntura!: cómo se responde, en ac-
fin de tomar en consideración este elemento como factor ciones concretas, a los requerimientos estructurales y a las
estratégico. implicaciones que el movimiento de las variables políticas,
Éste es un buen intento para hacer comprender que la sociales y económicas tienen para la organización. La clave
decisión estratégica requiere la constitución de una idea es observar detenidamente la posición en que se encuentra
básica: las estrategias podrán tener mayores garantías de la organización y luego, al observar de manera somera las
éxito en la medida en que se logre entender que, de algún tendencias del cambio, figurarse el movimiento posible de
modo, ellas están definidas por factores humanos tan im- la realidad en su situación estructural. Esto requerirá modi-
portantes, aunque intrincados, como los valores humanos; ficar la perspectiva que la organización tiene de sí misma y
sin la inclusión de estos valores las posibilidades de éxito se de su proyección futura. De esta manera se propone la
reducen. siguiente metodología para el diseño de la misión estratégi-
Pero debe quedar claro que la definición de la misión va ca (véase la figura 111.1).
más allá de esto, pues estaría obligada a construir vínculos En todas las organizaciones los marcos formal e informal
orgánicos sólidos con los actores sociales y no sólo infor- y, sobre todo, sus relaciones con los sistemas económico \, conforma
marles, y predecir su comportamiento. Es decir, se requiere
un enfoque de relaciones públicas y recursos humanos esfuerzo analítico. Antes que una organización pueda defi-
novedosos. nir su misión, ésta debe conocer exactamente formal e in-
formalmente lo que le requerirán hacer (y no hacer) las
autoridades externas (Bryson, 1988 y 1995). Por una parte,
METODOLOGÍA PARA EL DISEÑO DE LA MISIÓN ESTRATÉGICA la ley establece los límites y espacios de actuación, y sobre
esta base se interpretan y orientan alternativas de posición.
Hemos dicho que la misión no es un buen deseo ni un ideal En rigor, estos espacios no estarían definiendo los determi-
a secas, pues incorpora conscientemente la intencionalidad nantes de toda la acción, pero sí estarían permitiendo la
del accionar. Por ello no es un sueño sino un profundo es- existencia formal de la organización en una sociedad demo-
fuerzo de imaginación en la dirección de sentimientos crática.
constructivos. Imaginar y desear conscientemente requiere, Por otra parte, el sistema económico, su ámbito de acción
70 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 71

FIGURA III. 1. Metodología para el diseño intrínsecas a la organización, entre ellas, los valores, la cul-
de la misión estratégica tura, el liderazgo, el conflicto y el poder.
Bryson y Alston (1996) proponen una serie de preguntas
Marco forma! que conducirán a la declaración de la misión en organiza-
e informa! ciones públicas y no lucrativas:

1. ¿Quiénes somos?, ¿cuál es nuestro propósito?, ¿en qué


actividad estamos?
Análisis 2. En general, ¿cuáles son las necesidades básicas socia-
covuntural les y políticas que cubrimos? o ¿cuáles son los proble-
mas básicos sociales o políticos que dirigimos?
3. En general, ¿qué queremos hacer para reconocer o
anticipar y responder a estas necesidades o proble-
Misión
mas?
estratégica
4. ¿Cómo responderíamos a nuestros stakeholders cla-
ves?
monetario y de mercado, es determinante especial de los 5. ¿Cuál es nuestra filosofía y cuál es nuestro núcleo de
márgenes de la competencia y de las posibilidades de des- valores?
arrollo; y el sistema político, visto en términos de la históri- 6. ¿Qué nos hace distintivos o únicos?
ca relación Estado-régimen político, le otorga al estratega 7. ¿Cuál es nuestra misión actual?
una visión más profunda acerca de los distintos papeles 8. ¿Nuestra misión actual está actualizada?; si es así,
asignados en la trama de poder, en la dinámica de existen- ¿de qué forma?
cia y en los avances de la institución. 9. ¿Qué cambios propondría en la misión?
En las empresas el marco formal es el conjunto de reglas 10. Examine las respuestas a las preguntas anteriores y
explícitas; en una organización pública se deben considerar, esboce una misión.
entre otras: la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos (para dependencias y entidades públicas mexi- Estas visiones genéricas, que buscan posicionar a la orga-
canas, así como para entidades federativas y municipios), nización dentro de su espectro de acción contingencia!, con-
las leyes, los reglamentos interiores; los manuales de orga- forman los principios determinantes de la misión. El siguien-
nización, los programas, los convenios, los acuerdos y las te esfuerzo se dirige hacia la incorporación de un principio
circulares. Todos ellos esclarecerán los mandatos formales volitivo, considerando lo que ha sido la organización. Con
externos e internos de la organización. Al exterior implica estos factores se construve la misión estratégica.
conocer su función específica como dependencia o entidad
y su relación con las otras dependencias federales. Interna-
mente requiere el escrutinio de las funciones que debe lle- LA VISIÓN ESTRATÉGICA
var a cabo, a través de programas o proyectos.
Las reglas informales son aquellas que no están explícita* Si bien la misión estratégica delinea un marco disciplinario
mente establecidas en algún documento; sin embargo, son que encauza la dirección en un esfuerzo conjunto unidirec-
72 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 73

cional, el punto final al cual esta dirección se debe dirigir, la La visión estratégica es la idea que une a la gente en un
meta, debe ser coherente con los resultados que del esfuerzo esfuerzo común y no el carisma del líder, como muchos
se busquen. Aquí es donde el pensamiento estratégico, como suponen. Para Robert Greenleaf, autor del libro Leader-
parte del proceso estratégico, toma la forma de visión estra- slüp Crisis, la ejecución óptima se basa en la existencia de
tégica, cuyo pape! es ser la idea guía que influye anímica y una poderosa visión compartida que envuelve a la organi-
emocionalmente en los esfuerzos de una organización para zación a través de una amplia participación, donde el
el encuentro con su futuro deseado. líder tiene un papel activo de participar y encauzar los
Mintzberg (1994) procura situar de mejor manera el pa- esfuerzos.
pel de la visión en la estrategia general de planeación. Para La visión y el pensamiento estratégicos guardan íntima
él resulta claro que existe un conflicto entre la píaneación y el relación; tanto el primero como el segundo se forman a par-
pensamiento estratégico. Menciona al respecto que la pla- tir de las grandes ideas alrededor de las cuales la organiza-
neación estratégica debe pasar a un segundo plano debido a ción construye su futuro. Como perspectiva, la estrategia es
que impide el pensamiento estratégico. en parte un p u n t o de ventaja y en parte una visión de esa
Deja en claro, además, la separación de funciones de am- ventaja, particularmente la manera en que esta visión deli-
bas: mientras que la planeación estratégica se refiere al aná- nea las decisiones y las acciones. Es, por tanto, una visión y
lisis y la metodología que procura el logro de objetivos, el una dirección, una mirada hacia aquello en lo que la com-
pensamiento estratégico trata sobre la síntesis, sobre el uso pañía o la organización pretende convertirse.2g
de la intuición y la creatividad para formular una perspecti- Para John Bryson, autor de Strategic Planning for Public
va integrada, una visión con respecto a dónde debe estar la and non Profit Organi-ations, la visión estratégica es más
organización. importante como guía para la aplicación de la estrategia de
Peter Drucker menciona al respecto que la planeación lo que su contenido mismo dice, debido a que el desarrollo
estratégica no tiene que ver con las decisiones futuras, sino de la estrategia se guía por lo que se está tratando de cum-
con el futuro de nuestras decisiones presentes. Esto signifi- plir, el propósito de la organización.
ca identificar los puntos estratégicos sobre los cuales nece- Resulta claro entender por qué es necesaria una visión
sitamos tomar decisiones en vista del f u t u r o que estamos dentro del proceso estratégico y la participación de los ac-
buscando como organización, y actuar sobre eso. "No im- tores y los valores que a su contenido deben asociarse o
porta cuan brillante sea la estrategia si ésta no contiene incluirse. Ahora bien, ¿cómo se construye la visión estraté-
valor antes de ser ejecutada." El valor al que Drucker se gica?, ¿bajo qué circunstancias debe ser elaborada esta
refiere es la visión estratégica. visión?, ¿cómo se incluyen los distintos factores organiza-
Para Wallace Stettinius (2002) la visión estratégica es el cionales dentro de ella?
resultado del pensamiento estratégico, que se complementa Para empezar, el establecimiento de la visión debe ser rea-
con las estrategias que atañen a esa visión y las estrategias lista y creíble, bien articulado y fácilmente entendible, apro-
referentes al redireccionamiento organizacional, a las deci- piado, ambicioso y que responda al cambio. Debe orientar la
siones claves que deben tomarse. Además de lo señalado energía de la organización, servir como guía y ser congruente
por este autor, las estrategias no lo son todo en el estableci- con sus valores. En pocas palabras, la visión debe significar
m i e n t o y la formulación de una visión; los actores que un reto y a la vez una inspiración para el logro de su misión.
intervengan en el engranaje de esfuerzos hacia esa visión 29 Fred Níckols, Three Fonns of Strategy: Corponife, Competirían and Stra-
son la parte fundamental de la estrategia en general. ¡egy in General, 2000.
74 LA MISIÓN' ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 75

El desarrollar una visión parte del entendimiento de la establecerse el horizonte del tiempo sobre el cual se
situación actual y se construye con el conocimiento adqui- basará la actividad, digamos de cinco a 10 años.
rido y desarrollado en la fase de aprendizaje. Los gerentes el) Preguntar a los participantes qué piensan sobre las
determinan dónde necesita o busca estar en el futuro la or- siguientes preguntas:
ganización. La brecha que existe entre las condiciones pre- /. ¿En qué te gustaría que tu comunidad sea diferente?
sentes y la visión representa para la organización la necesi- U. ¿Cuál es el rol que te gustaría que la organi/ación
dad de cambio. 30 tuviera en tu comunidad?
King (1995) sugiere que la arquitectura guía de una com- ííí. ¿Cómo visualizas el éxito?
pañía u organización debe basarse en la visión estratégica e) Luego, pedirle a cada grupo que elabore una metáfora
que ésta tenga. En otras palabras, esta visión sirve como de la organi/ación, y que describa un retrato del éxito.
puente entre el estalus actual de la organi/ación (donde El valor de la metáfora consiste en que la gente amplía
está) y el estatus deseado (donde quiere estar). sus horizontes de pensamiento y experimenta con dife-
rentes maneras de pensamientos sobre qué significa el
éxito para ellos.
EL PROCESO DE CREAR: us" EJERCICIO /) Todos los grupos deben compartir con otros sus retra-
EN LA FORMACIÓN DE LA VISION tos del éxito. Alguien puede facilitar la discusión y ayu-
dar en el análisis de lo que quieren decir al respecto y
Como gran parte de la planeación estratégica, el crear una de lo que esperan de su visión.
visión empieza y se basa principalmente en la intuición y en gi Buscar las áreas o los puntos donde existan acuerdos,
los sueños. La siguiente parte muestra un sencillo ejercicio así como las ideas diferentes que resultaron del proce-
que se puede usar en la organi/ación para definir su visión, so. El fin de esto es encontrar un lenguaje común sobre
con el cual se asegura que la elaboración de ésta proviene el cual los miembros de la organi/ación puedan relatar
de una visión compartida. Como parte del proceso estraté- su propia visión del éxito."
gico, la creación de la visión sigue, por lo general, los
siguientes pasos: La American Society oí Museums publicó en 1995 un do-
cumento llamado Nuevas visiones, que expresa la necesidad
a) Debe llevarse a cabo una j u n t a con el staffo con el co- de establecer una visión compartida que permitiera con-
m i t é de planeación; iniciar una lluvia de ideas sobre lo ducirse bajo una atmósfera de mutuo respeto y confianza a
que la organi/ación busca en el f u t u r o ; hablar sobre los miembros del staf]] el consejo general, los voluntarios, los
ello y tomar nota de los valores en los que exista con- consejeros y los visitadores. Tomaran como ejes centrales
senso. La diferencia de ideas no necesariamente repre- los siguientes puntos:
senta un problema.
bí Dividir a los participantes en pequeños grupos con el • El pensamiento estratégico forma las grandes ideas, o
fin de i n c r e m e n t a r la participación y generar creati- visiones, alrededor de las cuales la comunidad puede
vidad. avanzar y construir el futuro de los museos.
el Este proceso no debe llevar más de una hora y debe
-: \\'¡ll Phillips. "Don't do Stralegit: Planning First: Problem Sohing.
icu S t e i t i n i u s , \lo\ing Be\onci Siraiegic Plannitii;, Manasemem S t r a t f g i c T h i n k i n g , P l a n n i n g and M a n a g e m e n t and the Ncu Visions
L -\k'u, 2000. Process," en Managenteut Briefings. 2001 ( w v v u . q m 2 . o r g / m b r i e f / 4 2 . h t m i ) -
76 LA MISIÓN ESTRATÉGICA LA MISIÓN ESTRATÉGICA 77

• La planeación estratégica toma las grandes ideas y las Cumpliendo con todo esto se crea un ambiente que incentiva,
convierte en necesidades específicas para su aplicación en el largo plazo, el pensamiento estratégico, y a su vez crea una
día tras día. visión que propicia la oportunidad para que los líderes apren-
• La planeación estratégica sin el pensamiento estratégi- dan de manera colectiva sobre las oportunidades primarias y
co puede cambiar detalles i n ú t i l e s en la misma vieja amenazas que restringen al museo y que representan un reto
dirección, o peor, establecer como nueva la dirección para el futuro. 32
equivocada.
El punto importante es que los miembros de una orga-
• El pensamiento estratégico sin la planeación estratégi-
nización sin visión pueden trabajar arduamente, pero po-
ca puede crear una visión impresionante, pero imposi-
drían no ser creativos en la búsqueda de nuevas y mejores
ble de llevar a la práctica.
maneras de llegar a una visión si no hay una formalmente
Nuevas visiones surge entonces como un i n t e n t o de avu- establecida.
La visión es una imagen guía del éxito en términos de una
dar al staffy al comité a trabajar colectivamente con el fin
contribución a la sociedad. Si un plan estratégico es el pro-
de mejorar el cuma de aprendizaje dentro de los museos,
yecto de trabajo de una organización, entonces la visión es
enfocar las prioridades, crear una visión para e! futuro y
la interpretación artística de los logros de ese proyecto. La
dirigir al museo hacia una amplia base de mejoras y cam-
visión estratégica es una descripción textual que proporcio-
bio. En este sentido, el documento plantea cuatro puntos
na una foto similar para cada miembro del grupo sobre el
generales:
destino del trabajo conjunto de la organización.
La falta de visión es la primera razón por la cual los pla-
• El diálogo, que pretende mejorar ia comunicación para nes estratégicos fallan. L'na visión fuerte y sólida contribu-
el aprendizaje y la adaptación al cambio. ye al éxito. La visión une los inalterables valores del servicio
• La evaluación, como una manera de considera]- la situa- en el largo plazo. La visión sirve para inspirar compromisos
ción actual del museo y su disposición y habilidad para v enfocarlos a la acción; es por ello que el establecimiento
el cambio.
de la visión estratégica requiere, por tanto, que todos los
• Una visión que e s t i m u l e el pensamiento sobre la direc- miembros de la organización expandan sus expectativas,
ción del cambio. aspiraciones y acciones y las comprometan en una meta
• La planeación de la acción, que dirija al museo hacia la común, teniendo en cuenta que una visión clara del futuro
visión establecida. deseado para la organización es un componente esencial
del éxito.
La técnica bajo la cual fue elaborado este documento
busca, en otras palabras, elevar el nivel de diálogo producti-
vo > mostrar cómo focalizar los objetivos y establecer las
prioridades. Esta herramienta, la visión, muestra los retos a
los que un museo se enfrentaría si se le permitiera al staff y
a otros miembros de la organización resolver problemas,
usar datos de manera más creativa y tomar decisiones de
rápida aplicación. 32 \Vill Phillips, en op. di.

También podría gustarte