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Un virus y sus metáforas: gramáticas

militares, fronteras territoriales y estrategias


económicas del biopoder
José Andrés Díaz Hernández

Psicólogo clínico. Miembro de la red de investigadores del Laboratorio Iberoamericano para el


Estudio Sociohistórico de las Sexualidades y actual coordinador de «Opacidades: Grupo de Estudio
sobre Erotismo, Sexualidad y Género».

[Primera entrega: Tráficos virales, cálculos del biopoder y micropolíticas de los afectos]

OTROS ARTÍCULOS EN APOCAELIPSIS


Como era de prever en el caso de un mal no del todo comprendido
LA ANATOMÍA
y extremadamente reacio al tratamiento, la llegada de esta aterradora nueva enfermedad,
SILENCIADA DEL COVID-
nueva al menos en su forma epidémica, ha desencadenado una metaforización en gran escala.
19
Susan Sontag

¿QUÉ ESTAMOS
PENSANDO SOBRE LA
CRISIS DEL
De acuerdo con la versión de los hechos más divulgada, el virus SARS-CoV-2 fue localizado por
CORONAVIRUS?
primera ocasión en diciembre de 2019 en la ciudad China de Wuhan. En pocos días, vía el
movimiento de cuerpos en viajes aeronáuticos, terrestres y marítimos, la infección se esparció por el
APOCALIPSIS,
mundo. En poco menos de tres meses pasó de ser un brote local, a mutar en una emergencia de
BIOPOLÍTICA Y ESTADO
salud pública, de riesgo económico y un acontecimiento político a escala planetaria. El proyecto de
DESTITUYENTE: LA
globalización tecnocapitalista ha conectado cada región del mundo, y el virus se ha diseminado por
PRECARIZACIÓN EN
algunos de sus caminos y transportes más efectivos. La ecología biopolítica, necropolítica y
TIEMPOS DE CÓLERA
psicopolítica se está modificando y de pronto se han tensado los nudos entre gubernamentabilidad,
industria farmacológica, especulación financiera, moléculas virales potencialmente letales, y el ACELERACIÓN
conjunto de representaciones discursivas de los medios de comunicación y sus metáforas CAPITALISTA Y FRENOS
inmateriales que fluyen en las redes sociales. De pronto nos hemos visto inmersos en un contexto de DE BICICLETA
incertidumbre y miedo a las enfermedades, las infecciones, el contagio y la putrefacción.

El poder de las metáforas sobre el virus y la enfermedad no sólo ha trastocado las formas de LA REACCIÓN A LA
sociabilidad cotidiana, las percepciones sobre los riesgos biológicos inherentes a la vida, sino APOCAPTOSIS
también las representaciones sobre la vulnerabilidad de los cuerpos y las gestiones de la
precariedad. Nos encontramos ante una molécula, una secuencia proteínica que literalmente está
incidiendo en la producción de subjetividad. La transversalidad de la fuerza de las metáforas sobre el
virus SARS-CoV-2, que actualmente domina las tribunas mundiales, lleva irremediablemente a SOBRE LA SITUACIÓN
interrogar una vez más las tecnologías de control de las poblaciones, las formas de gestión de los EPIDÉMICA
territorios y la implementación de dispositivos de seguridad, en el mega laboratorio
tecnobiopsiconecropolítico en el que ha devenido explícitamente y en pocas semanas el planeta. La
incidencia del virus ha hecho caer el velo translúcido que cubría la enorme estructura disciplinaria
(arquitecturas de encierro y confinamiento, diseños espaciales para la segregación, edificaciones ALGUNAS REFLEXIONES
para la optimización y sujeción de los cuerpos con fines de producción de capital), junto con las SOBRE EL CORONAVIRUS
tecnologías blandas farmacopornográficas (biomoleculares, farmacológicas y digitales), en su
trenzado con las técnicas necropolíticas que exponen al riesgo de enfermar, morir o ser lanzados a la
indigencia a un gran número de personas.
RESISTIR ES NUESTRA
En los ensayos La enfermedad y sus metáforas y El sida y sus metáforas, Susan Sontag reflexionó RESPONSABILIDAD
sobre cómo la expresividad de las metáforas referentes a las enfermedades, al encontrarse teñidas
de afectividad, emociones y sentimientos, tienen una incidencia subjetiva y política en las formas de
experiencia y racionalidad tanto en las esperanzas que provocan, como en el terror que difunden. La
operación de disección literaria que realiza Sontag no es un ejercicio de estilismo ensayístico, sino el HABITANDO
retrato descriptivo del poder performativo del lenguaje que envuelve al cuerpo vivo y mortal, en un (ENTRE)PARÉNTESIS EL
estudio sobre la fuerza de las figuras metafóricas y su impacto discursivo en la experiencia de las CAMPO
enfermedades asociadas al recelo y la sospecha de estar infectado, el riesgo de contagio y el estigma
de enfermar.
LEER, ESCRIBIR,
Basta ver una enfermedad cualquiera como un misterio, y temerla intensamente, para que MEDITAR
se vuelva moralmente, si no literalmente, contagiosa. […] En todas las epidemias
infecciosas anteriores, la epidemia equivalía al número de casos contabilizados. En el
caso actual se supone que la epidemia consiste ahora en ese número más un número,
que se calcula mucho mayor, de quienes, aunque aparenten buena salud (la aparentan, DESOBEDIENCIA, POR TU
pero están condenados), sin embargo llevan consigo la infección. Constantemente se CULPA VOY A
hacen cálculos, y aumenta la presión para que se identifique y etiquete a esas personas. SOBREVIVIR
Con los tests biomédicos más modernos es posible crear una nueva clase de parias
vitalicios, los enfermos del futuro. […] Paciente significa aquel que padece, y
etimológicamente viene de sufrimiento. No es el sufrimiento en sí lo que en el fondo más NOSTALGIA DEL
se teme, sino el sufrimiento que degrada. CUERPO: 1348-1951-2020

Sus escritos hacen también una crítica incisiva del uso de las metáforas bélicas para hablar sobre
las enfermedades, el cuerpo y la vida, explorando un campo complejo de alegorías en las que la
aparatosidad del lenguaje envuelve en niebla difusa una experiencia de temor a aquel sufrimiento HOSPITALIDAD E
que degrada y virtual o literalmente aniquila. Las metáforas puestas en marcha por los discursos INMUNIDAD VIRTUOSA
biopolíticos de los Estados Nación a nivel global sobre el virus SARS-CoV-2, son aquellas que siguen
las lógicas bélicas de las técnicas de la guerra, lo cual muestra además de su reverso necropolítico,
la vía de utilización de las técnicas psicopolíticas digitales de control, regulación y administración de
los afectos, deviniendo en una experiencia inédita de transitar involuntariamente por una pandemia REFLEXIONES SOBRE LA
global. PESTE

La medicina se volvió verdaderamente eficaz y las metáforas militares cobraron nueva


credibilidad y precisión sólo cuando se consideró que el invasor no era la enfermedad
sino el microorganismo que la produce. Desde entonces las metáforas militares han DEVENIR VIRUS
permeado cada vez más todos los aspectos de la descripción de una situación médica
dada. La enfermedad es vista como una invasión de organismos extraños, ante la que el
cuerpo responde con sus propias operaciones militares, como la movilización de las
«defensas» inmunológicas; mientras que la medicina, como en la jerga de la mayor parte
de las quimioterapias, es «agresiva». Más grosera es la metáfora que sobrevive aún en los CUIDADOS PARA EL
cursos de sanidad pública, donde habitualmente se describe la enfermedad como una PUEBLO EN TIEMPOS DE
invasora de la sociedad, y a los esfuerzos por reducir la mortalidad de una determinada PANDEMIA:
enfermedad se los denomina pelea, lucha, guerra. REFLEXIONES
COLECTIVAS PARA
En los últimos días hemos escuchado de boca de los jefes de Estado de las principales naciones, TRANSITAR LA
hablar de una guerra para referirse a la crisis de salud pública global que atravesamos. Dichos INCERTIDUMBRE,
discursos nos sumergen en un contexto bélico, nos vuelven soldados somatopolíticos de un ejército ENSAYOS PARA NO
de cuerpos en potencial riesgo de contagiar, ser contagiados, y morir. A su vez nos encontramos bajo HABITAR LA
el control de estrictas medidas de asilamiento, vigilancia del tránsito por los espacios públicos y IMPOTENCIA
meticulosos protocolos sanitarios. Mi afán aquí no es desestimar lo necesario de las prácticas de
higiene y de cuidado comunitario para la contención de la pandemia como una tarea vitalmente EMANUELE COCCIA: «EL
primordial en nuestros contextos particulares. Lo que quiero es reflexionar sobre el uso de las VIRUS ES UNA FUERZA
metáforas bélicas para referirse al tratamiento biopolítico de la pandemia del virus SARS-CoV-2. ANÁRQUICA DE
METAMORFOSIS»
Dicha reflexión me parece crucial, porque las gramáticas militares han impregnado de manera eficaz
la vida, mi vida, y la tuya. La vertiginosa implementación de medidas disciplinarias, la rápida LA COMUNIDAD
renuncia de derechos fundamentales sostenida en el temor de la ciudadanía, el proceso de sitiado y INTOCABLE
confinamiento de regiones específicas, así como el cierre de las fronteras, muestra que las
estructuras soberanas de los poderes de los Estados se encuentran siempre adormecidas,
únicamente esperando a que las condiciones contextuales requieran la alternancia, activación y
ejecución de sus mecanismos. Los ejércitos de los Estados, desplegados por los territorios para la REPENSANDO EL
vigilancia y control de las poblaciones, son los representantes de un biopoder inquietante. Su APOCALIPSIS: UN
mensaje no se limita a decir que los médicos, científicos y virólogos intentan encontrar un MANIFIESTO INDÍGENA
tratamiento, una cura y una vacuna para el virus, sino que la sociedad como conjunto libra una ANTIFUTURISTA
batalla contra la enfermedad, y que como en toda guerra, se producirán bajas y daños colaterales.
Notemos que usar este aparataje semiótico despoja de cierta cuota de responsabilidad a los OCASO
gobiernos que han permitido el desmantelamiento paulatino de los servicios y las instituciones de
salud pública, así como la incentivación de su privatización. Sabemos que en nuestras sociedades
posfordistas la atención médica es un servicio de lujo al que sólo tiene acceso una élite privilegiada.
Lo brutalmente cruel de esas políticas, de esos discursos, de esas metáforas, es que de manera
vehemente las muertes se vuelven un elemento articulador en la narrativa de su relato sostenido en ACHILLE MBEMBE: “LA
segregaciones, racismos, violencias e instrumentalizaciones bursátiles y financieras de la pandemia PANDEMIA
y la crisis consecuente. DEMOCRATIZA EL PODER
DE MATAR”
Las guerras contra las enfermedades no consisten simplemente en una llamada a que se
preste mayor atención o a que se dedique más dinero a la investigación. La metáfora ¿DE QUÉ APOCALIPSIS
militar sirve para describir una enfermedad particularmente temida como se teme al ESTAMOS HABLANDO?
extranjero, al «otro», al igual que el enemigo en la guerra moderna; y el salto que media
entre demonizar la enfermedad y achacar algo al paciente es inevitable, por mucho que se
considere a este como víctima. Las víctimas sugieren inocencia. Y la inocencia, por la
inexorable lógica subyacente a todo término que expresa una relación, sugiere culpa. LA CRISIS DE SALUD NOS
LLEVA A PREPARARNOS
Ahora bien, otra de las metáforas utilizadas para describir al virus SARS-CoV-2, es aquella sobre su PARA EL CAMBIO
capacidad para traspasar las fronteras políticas de los territorios y contagiar indiscriminadamente a CLIMÁTICO
los cuerpos, no sin dejar en claro que hay segmentos de la población más vulnerables a sus letales
efectos. Dicha gramática apunta a sostener una comunidad global, una responsabilidad compartida LOS PRONOMBRES DEL
y a enfatizar nuestro papel como ciudadanos en este momento de coyuntura. Sin embargo, me VIRUS
parece que el hecho de que se le está prestando tanta atención a los índices de mortalidad del SARS-
CoV-2, no es por una preocupación de los gobiernos del planeta por el bien común de sus
poblaciones y el resguardo compasivo de sus territorios, sino por un terror más profundo,
desconcertante, e incluso enigmático. Se trata del terror de ser contagiados por un virus desconocido, LA FALSA IGUALDAD EN
que compartimos particularmente, y que es alimentado en parte por la sobresaturación de UNA EPIDEMIA
información. No fue así hace varias décadas con el virus del sida y parece un momento oportuno
para recordar lo que sucedió.

Provocada por un virus que no se contagia tan fácilmente como el que ahora ocupa los titulares de NO HAY SOLIDARIDAD
las noticias, pero que sin embargo ocasionó la muerte de un gran número de personas debido a la SIN CONFLICTO
negligencia de los gobiernos y al rechazo de la sociedad, la pandemia del sida entre la década de los
ochenta y noventa fue utilizada sanguinariamente como un mecanismo de aniquilación masiva de
sujetos considerados parias. A los enfermos de sida se les estigmatizó, se les culpó, se les maltrató y
se les torturó de manera cruel y despiadada. En aquel entonces las metáforas del virus del sida que PANDEMIA DEL COVID
se forjaron en los medios de comunicación fueron punitivas, prejuiciosas y deletéreas; se trata de un 19: ¿ESTO LO CAMBIA
ejemplo de la calamidad letal de las enfermedades y el uso político de sus metáforas. Lamento TODO?
pensar que no es un sentido de responsabilidad comunitaria el que ha movilizado a las sociedades, a
los gobiernos y a las personas en sus contextos situados respecto al virus del SARS-CoV-2, sino el
miedo. Porque esté nuevo virus no es un asunto de maricones, de putas, de drogadictos y de COVID-19, EL VIRUS DE
inmigrantes como lo fue el sida en los noventa y ochenta; no es un asunto de inmigrantes como lo LA ERA NEOLIBERAL
fue el Ébola en 2016; no es un asunto de pobres como lo fue la crisis del 2008; es un asunto que ha
trastocado cada capa estructural del régimen heteropatriarcal y tecnocapitalista. Es porque de pronto
el hombre blanco heterosexual de clase privilegiada, culto y hegemónico se encuentra inmerso en un
entorno de peligro viral, que los dispositivos de seguridad de los Estados se han activado. Tener en EL #QUÉDATEENCASA
cuenta lo anterior no es con un fin pesimista, de desestimación de la crisis, o de alegato impúdico de MEXICANO O CÓMO
la tragedia, sino para tener en cuenta la memoria histórica del pasado. Alejandro Palomas nos SALVAR AL CAPITAL
recuerda que Hace unas décadas hubo otra pandemia que desató odios en vez de solidaridad CUANDO LA SALUD ESTÁ
EN RIESGO
Hoy, confinados/as como estamos en nuestras casas, quizá sea un buen momento para
HABITAR LA
pensar en lo que nadie ha querido volver a remover a fondo para que la memoria sane
DESOBEDIENCIA:
pronto y la culpa quede silenciada. En nuestros cementerios, en los de este “primer
INCUBANDO LA
mundo” que hoy combate un virus también mortal para otros sectores también
INSURRECCIÓN EN
vulnerables del tejido social, hay cientos de miles de hombres y mujeres que murieron por
TIEMPOS
una pandemia que no eligieron. Esos hombres, mujeres, niños y niñas no descansan en
PESTILENCIALES
paz porque se los enterró con asco y vergüenza, la mayoría de las veces sin mencionar la
causa de su muerte, dándoles la espalda por habernos traído el mal a casa. AGAMBEN:
DISTANCIAMIENTO
Resulta decisivo tener una memoria histórica que permita no repetir en el presente las crueldades del SOCIAL
pasado. Este punto es importante porque, si bien el virus que ahora nos confina no discrimina, lo
único que supera su velocidad de propagación es la rapidez con que las segregaciones sociales,
raciales y económicas proliferan, se reproducen y fortalecen en el entorno bionecropsicopolítico de la “LAISSEZ-FAIRE” A LA
pandemia actual. La racionalidad del mercado, las lógicas de la guerra, las metáforas bélicas, y los PESTE
discursos racistas, xenofóbicos y de segregación, son algunos elementos involucrados en la gestión,
administración y tratamiento de la pandemia del virus SARS-CoV-2.

En el curso Seguridad, territorio y población, Michel Foucault analizó la implementación y genealogía MOLOCH Y EL
del biopoder como técnica de gubernamentabilidad. Su investigación traza un esbozo del CORONAVIRUS
surgimiento histórico de las sociedades de seguridad mediante el control de los procesos vitales de
las poblaciones (natalidad, mortalidad, demografía, pandemias, etc.), en territorios cartográficamente
trazados y políticamente delimitados. Su argumento tiene una vigencia asombrosa para la reflexión
sobre el sistema legal, los mecanismos disciplinarios y los dispositivos de seguridad puestos en IMAGINEMOS GESTOS-
marcha ahora mismo, con la salvedad de que no hay que obviar o desestimar los aparatos BARRERA CONTRA EL
necropolíticos y psicopolíticos añadidos a la ecuación, lo que nos da como resultado una amplia y REGRESO A LA
compleja estrategia de poder en nuestros actuales enclaves urbanos que valdría la pena ir PRODUCCIÓN PRECRISIS
desmenuzando.
TRÁFICOS VIRALES,
Siguiendo a Foucault, considero que tener en cuenta el abanico de las variantes metafóricas antes CÁLCULOS DEL
mencionadas sobre la pandemia actual no es para describir una sucesión de regímenes Estatales, BIOPODER Y
sino para trazar una crónica de los procesos que están aconteciendo al interior de los Estados MICROPOLÍTICAS DE LOS
mismos, en donde los puntos de acento son colocados de acuerdo con los problemas concretos y las AFECTOS
técnicas específicas que plantea el abordaje de la pandemia (aislamiento de los enfermos y
cuarentena de la población, cierre de los comercios, declaración por parte de mandatarios de Estados COVI-CHO, LOS
de alarma o emergencia, cierre masivo de fronteras, implementación de medidas de urgencia para ‘EJEMPLOS’ INDÍGENAS Y
mitigar una venidera crisis económica, etc.). Con base en los puntos hasta aquí expuestos, se hace ALGUNOS TIPS ANTI
evidente por qué la pandemia del SARS-CoV-2 no se limita a ser un problema de salud pública global, ANTROPOCENO
sino también un problema social, un desafío ético, un reto económico, un acontecimiento geopolítico
y un evento subjetivo, con consecuencias locales para cada región y con efectos particulares para UN VIRUS Y SUS
cada sujeto. METÁFORAS:
GRAMÁTICAS MILITARES,
En síntesis, nos encontramos ante tres poderosas metáforas sobre la pandemia del SARS-CoV-2: la FRONTERAS
bélica, las de la segregación y las de la racionalidad del mercado. Al ser un virus con una rápida TERRITORIALES Y
velocidad de expansión, fácilmente contagiable y con una capacidad letal comprobada, los ESTRATEGIAS
dispositivos disciplinarios han sido expeditamente implementados. El peligro es que la ECONÓMICAS DEL
instrumentalización del virus, vía las metáforas previamente citadas, que trenzan la fuerza del Estado BIOPODER
con los nacionalismos, el racismo, la xenofobia, la precariedad económica, la desigualdad social y la
PREGUNTAS SOBRE LA
racionalidad del capitalismo, han creado pequeños bloques híbridos de espacios confinados para la
PANDEMIA ACTUAL
experimentación bionecropsicopolítica. Si considero necesario señalar esas metáforas sobre las
DESDE EL PUNTO DE
enfermedades que recubren la gravedad y delicada situación que atravesamos en el planeta, es
VISTA DE IVAN ILLICH
porque una de las enseñanzas más brutales que aprendimos de la pandemia del sida es que esas
metáforas tienen también el poder de matar.
AMALGAMA DE
MIRADAS
Ante este panorama, hay todavía, por suerte, pequeñas líneas de fuga, espacios de acción
APOCAELÍPTICAS
micropolítica y ejercicios viables para la reconversión de las tecnologías de los afectos. En lugar de
una obediencia ciega fomentada por el miedo, que nuestra voluntaria cuarentena siga una lógica de
los cuidados y los afectos, la confianza, la empatía y la reflexión comunitaria. Acepto que la
EL «DÍA SIGUIENTE» ES
incertidumbre es patente, pero que el miedo no nos paralice. Ahora más que nunca, si nos es posible,
HOY
debemos debatir colectivamente, haciendo uso de las tecnologías digitales y las redes eléctricas del
internet, para la defensa de una verdadera sanidad pública y de políticas colectivas de igualdad
radical, así como para el ejercicio de prácticas micropolíticas de cuidado. Que la contingencia
sanitaria no sea un confinamiento de las ideas, los debates y las críticas. Que lo que nos libere de
AGAMBEN: UNA
nuestro necesario aislamiento físico sea la compañía de los afectos y que con ellos imaginemos
PREGUNTA
otras formas de libertad.

TAGS: Apocaelipsis, covid19, Economía, metáforas, militar, Necropolítica


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