Está en la página 1de 2

Roma

La historia de Roma se divide en tres etapas

El séptimo y último rey de Roma fue Tarquino el Soberbio. Hijo de Prisco y yerno de serbio, Tarquino
también era de origen etrusco. Fue durante su reinado cuando los etruscos alcanzaron la cúspide de su
poder

Monarquía

LA SOCIEDAD: La sociedad se integraba con una clase alta o nobleza, que estaba constituida por los
patricios, que detentaban todos los privilegios; y una clase baja, la plebe, compuesta por los
extranjeros y vecinos, que carecían de derechos y no tenían ninguna participación en el gobierno.

Patricios
Plebeyos
Clientes
Libertos
Esclavos

EL GOBIERNO: El gobierno solamente podía ser ejercido por los patricios, (imagen: patricio romano)
que eran los descendientes de los fundadores o padres de la ciudad. Los patricios constituían una
aristocracia, integrada por un grupo reducido de familias, cuyos jefes formaban parte del Senado, que
era la institución más importante de Roma. Era presidido por el rey y a su muerte ejercía
transitoriamente el poder hasta que elegía a su sucesor.
Además, existía la Asamblea del Pueblo o Comicios por curias, que era convocada por el rey para
reunirse al pie del Capitolio. Allí se concentraban las treinta curias que agrupaban a los patricios y
clientes de una misma zona.
La autoridad suprema era ejercida por el rey que era, a la vez, jefe militar, sumo sacerdote y juez
supremo. Sin embargo, la monarquía era electiva y su poder estuvo limitado por el Senado y La
Asamblea del Pueblo

Organización Política:

La Realeza: El rey elegido por la Asamblea


El Senado: lo integraban los jefes de las familias patricias
La Asamblea o Comicios por Curias: Formada exclusivamente por los ciudadanos
La República: Con la caída de Tarquino el Soberbio, se extinguió la monarquía en Roma. El rey fue
sustituido por dos cónsules que eran elegidos anualmente por las Curias. Con ello comenzó la república
(de res, cosa; y pública, del pueblo), por la mayor participación que se concedió a los ciudadanos en el
gobierno, que fue más aparente que real, porque los cónsules gozaban de igual poder que los reyes y
presidían el Senado y la Asamblea del Pueblo.
Por esta época se creó la Asamblea de las Centurias, que tuvo mayor importancia que la antigua
Asamblea de las Curias. Los comicios por centurias se reunían en el campo de Marte (dios de la guerra)
y en ellos se votaba por centuria
En su desplazamiento, los cónsules utilizaban la silla curul y llevaban un acompañamiento de doce
guardias o lictores que portaban el fascio, que era un haz de varas con un hacha en el centro, que
simbolizaba la autoridad.
Cuando la seguridad pública se hallaba amenazada o en circunstancias de extrema gravedad, los
cónsules eran reemplazados por un dictador, que ejercía poderes extraordinarios durante el término
de seis meses. En ese lapso tenía derecho de vida y muerte sobre todos los ciudadanos e iba
acompañado de veinticuatro lictores.

También podría gustarte