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Ayuda y corrupción

Dos artículos en un número reciente de esta revista dan testimonio de las preocupaciones
actuales con respecto a la ayuda internacional al África subsahariana. Aunque ninguno de
los dos, el autor prevé el final de esta ayuda, ambos cuestionan su valor. Uno duda la
efectividad del renovado énfasis puesto por algunos donantes en su uso directamente para
aliviar la pobreza, el otro percibe una "crisis de legitimidad" en la ayudaque regularmente
decepciona las expectativas que se le han conferido. La escala de ayuda a África es
extraordinariamente grande en relación con otros regiones que reciben ayuda y a los
agregados económicos africanos. En 1997 la red el flujo fue de US $ 15.86 mil millones,
equivalente al 5 por ciento de la estimación del PNB para la región subsahariana, mientras
que para otras regiones esta proporción fue inferior a 1 por ciento Si Sudáfrica y Nigeria,
ambos económicamente son los más grandes y relativamente los menos ayudados de los
países africanos están excluidos, la proporción de ayuda al PNB africano se convierte en
10 por ciento. Para varios individuos países, la ayuda aparece como un cuarto, un tercio o
incluso la mitad del PNB. Relativo a la estimación de la inversión interna bruta en la región
(excluyendo nuevamente Sudáfrica y Nigeria), la ayuda en 1997 fue casi del 50 por ciento,
y para algunos países más del 100 por ciento. Ayuda al África subsahariana en 1997 fue el
28 por ciento del total mundial de la ayuda; ayuda a África de bajos ingresos fue 67 por
ciento de ayuda a todos los países de bajos ingresos. La "dependencia de la ayuda", por lo
tanto, corta en ambos sentidos. África depende de la ayuda las agencias y las agencias
dependen sustancialmente de África. El alcance de la Asociación Internacional de Fomento,
la Reducción de la Pobreza del FMI y el Fondo de crecimiento, otros fondos multilaterales
y la ayuda bilateral las agencias se reducirían mucho sin la pobreza africana y en desarrollo.
Mucho reducido también serían las vidas obtenidas de la ayuda de los exportadores,
contratistas, consultores, personal de ONG y académicos que son "distritos electorales
reales de la ayuda en Occidente". 3 Reconocimiento de esta contradependencia lleva a
Roger Riddell a preguntarse por qué los donantes no visto adecuado para analizar las
deficiencias de la ayuda en su propio extremo de la ayuda relación, y Nicolas van de Walle
para notar la ausencia de corriente debates sobre la ayuda de propuestas para la reforma
interna de las agencias donantes.
Ayuda al donante
Sin embargo, el "fin donante" de la relación de ayuda con África es el tema de un libro de
Carol Lancaster, ex Administrador Adjunto de USAID, recientemente notado en este
Journal.5 Este trabajo evalúa el récord de agencias de ayuda en los Estados Unidos,
Francia, el Reino Unido, Suecia, Italia y Japón, y de la AIF y el Fondo Europeo de
Desarrollo. Estas Lancaster considera que las agencias a menudo han sido vulnerables a la
política exterior imperativos de los gobiernos donantes y, en ocasiones, también de
presiones Han juzgado su éxito por el valor monetario de la ayuda. dado en lugar de por los
resultados obtenidos de ese modo. Y comúnmente han carecido de la capacidad efectiva
para administrar las tareas que establecen sí mismos. Si bien algunas agencias se han
desempeñado mejor que otras, ninguno ha "acertado" y la tendencia (a través de alianzas
con ONG) para ampliar el significado y los criterios de "desarrollo" dice en contra de su
hacerlo bien en el futuro. También ahora está disponible un estudio más estrecho de este
tema editado por Goran Hyden y Rwekaza Mukandala.6 Compara el desempeño de tres
donantes en Tanzania durante 30 años a partir de 1965. En las décadas de 1960 y 1970
Tanzania era un favorito especial de los donantes, especialmente de los suecos. agencia
Sida, que fue su mayor benefactor y cuyo personal reconoció un espíritu afín en Nyerere y
una filosofía agradable en Ujaama. Con socios tan agradables, Sida podría brindar ayuda
como un país ‘ programa ", o efectivamente en los términos del destinatario, y no hasta
1984 fue Esta práctica reconoció de mala gana haber sido un error. A diferencia de, USAID
se vio obligada a apagar y encender la ayuda a Tanzania de acuerdo con dictados
presidenciales y para observar los mandatos y prohibiciones del Congreso que ayudaron a
producir un libro de reglas de la AID que 1995 para 1995 tenía 37 volúmenes largo y
podría llenar un carrito de la compra "(pág. 101). Parece indulgente a caracterizar a USAID
en Tanzania como "altruismo pragmático", como Stephen Snook hace en este libro. Los
chinos entregaron préstamos en especie en forma de proyectos llave en mano. Las empresas
resultantes se dejaron a la gerencia de los tanzanos, que "los estropearon" (pág. 225), junto
con el resto de los sector estatal Esfuerzos chinos de rescate a través de la formación
conjunta las empresas no fueron bien recibidas, y los préstamos no han sido reembolsados.
La lección de los tres estudios de caso, según un capítulo final por Hyden y Kenneth
Mease, es que se mejora la efectividad de la ayuda ni por el control de los donantes sobre
su uso, tal como lo mantiene USAID, ni por dando ayuda en los términos del destinatario
como lo hicieron los suecos y los chinos. También se encuentra que la coordinación de la
ayuda entre los donantes no ayuda, quizás porque los autores no simpatizan con la línea
común tomada recientemente por parte de los donantes para establecer las
"condicionalidades" de la ayuda. Las agencias donantes son parte del problema de hacer
efectiva la ayuda. La solución propuesta es la pago de la ayuda prestada a un país en
públicos fondos públicos autónomos algo así como bancos o consejos de investigación ', a
los que podrían presentarse ofertas hecho para financiamiento complementario por
instituciones (ONG y gubernamental) que ya cumple con sus requisitos básicos de otros
fuentes. Una posible implicación, que los autores parecen aceptar tácitamente, es que los
flujos de ayuda se reducirían mucho. Cómo la autonomía de la los fondos públicos deben
ser preservados en los países receptores es una cuestión que no consideran.
Abusos de ayudas
Los temas de ayuda y corrupción están vinculados principalmente a través de los
donantesintentos de reducir la corrupción con condiciones de ayuda. Pero hay otros enlaces.
El capítulo de Snook en el libro de Hyden y Mukandala hace interesante referencia a altos
niveles de corrupción en USAID, presuntamente llegando al derecho de la parte superior,
que comenzó a descubrirse en 1991 y se convirtió en munición en la campaña del Congreso
para abolir la agencia (pp. 98, 101). Entre las prácticas corruptas prominentes parece haber
sido el patrocinio político entre los contratistas estadounidenses. Lancaster escribe que los
informes de la corrupción generalizada en el gobierno italiano que se rompió en 1992 a
veces involucró ayuda italiana, particularmente a Somalia, y fue seguida por "Una caída
libre" en la ayuda italiana a África.8 Pero la corrupción en el extremo donante tiene atrajo
poca atención, posiblemente porque no hay mucha de ella. Por el contrario, se cree
comúnmente que el abuso de ayuda en el extremo receptor ser común, en cualquier caso, en
África. Si la incidencia de la corrupción se considera que la mayoría de los países africanos
están en el rango de sistémico ", como está en la colección publicada recientemente por
Hope y Chikulo de estudios sobre este tema, 9 cualquier adhesión de recursos a disposición
de los titulares de cargos tienden hacia un mal uso adicional para beneficio privado. La
vulnerabilidad de la ayuda al abuso es mayor en la ayuda del programa (apoyo a la balanza
de pagos, apoyo a la reforma económica, alivio de la deuda y compensación por caídas en
las exportaciones precios), donde sus usos se prescriben con menos rigidez que en la ayuda
a proyectos y a través de asistencia técnica. Pero incluso los recursos provistos como
proyecto la ayuda puede liberarse para otros fines si los proyectos tienen un costo
fraudulento, o dejado incompleto, como a menudo lo han sido. Además, mucha ayuda ha
sido dado principalmente por razones políticas (como, más notoriamente, en Mobutu’s
Zaire), en cuyo caso si el uso de la ayuda para patrocinio y personal el enriquecimiento
constituye abuso, es quizás un punto discutible. La corrupción en África se explica en la
colección mencionada anteriormente como, primero, un resultado de la supremacía del
estado patrimonial sobre el civil sociedad. Las normas socioculturales son tales que
fomentan la adaptación de la gente a este orden político. El patrimonialismo impulsa una
expansión de actividad económica estatal En consecuencia, el desempeño económico se
deteriora y la erosión de los salarios de los empleados públicos induce una mayor extorsión.
y malversación de fondos. Las causas adicionales de corrupción son el bajo riesgo de que
atraerá represalias y la falta de "liderazgo ético ejemplar" en Estados africanos Patrick
Chabal y Jean-Pascal Daloz han dibujado recientemente un más cuadro optimista del estado
patrimonial en África. Los clientes distribuyen generosidad y protección; Los clientes
suscriben lealtad. Esta relación explica la base moral del liderazgo y la forma que adoptan
los políticos responsabilidad. Las personas han confiado o delegado poder a quienes
cuidará de ellos. La corrupción es intrínseca porque la presión sobre los clientes que
recompensan a sus seguidores son implacables. La ayuda entra en escena como una fuente
principal de los recursos que sustentan el sistema patrimonial. Los menos recursos internos,
más ayuda se depende. Los clientes tienen intereses propios para promover, pero suponer
que esos intereses antagónicos a las preocupaciones populares es engañoso. La corrupción
es un aspecto de un Economy economía moral ’en la que hay reciprocidad asimétrica ’entre
líderes y liderados. La validez de este contrato social implícito, por supuesto, ha sido
durante mucho tiempo cuestionado En Nigeria, por ejemplo, se presentó una amarga
denuncia contra las depredaciones de la "clase política" hace tanto tiempo como la huelga
general de 1964. En la frase de Achebe, el dueño había necesitado lo suficiente para aviso.
El injerto "egotista" bien podría considerarse cada vez más superó el tipo "solidario" en el
sucesivo ejército nigeriano regímenes.12 La generosidad puede haber sido transmitida, pero
en el momento de Abacha es dudoso que mucho más allá de los círculos de élite.
generalizado, incontrolable y sin restricciones ", mientras que en cuanto a la reforma
económica ‘La realidad bajo el sistema liberalizado en la Tercera República es uno de
aumento de los niveles y la omnipresencia de la corrupción ".14 El Movimiento por la
democracia multipartidista utilizó fondos públicos para comprar votos en 1996 elecciones.
La privatización de Zambia se ha convertido en una raqueta en beneficio de unos pocos
bien conectados. El movimiento de Kenia hacia la política multipartidista ha visto un
crecimiento sustancial en la corrupción de alto nivel y de nivel local ", según al difunto
Stephen Riley. ‘Un informe reciente [de investigación]. . . habla de un criminalización
generalizada del aparato estatal ".16 En Etiopía, una marea de Bamidele Olowu observa la
corrupción progresiva; ‘. . . la corrupción es convirtiéndose rápidamente en un problema
importante para hacer negocios con la sociedad civil servicio'. En Ghana, donde los
programas de reforma económica han sido seguido desde 1983 y la política multipartidista
desde 1992, el presidente Rawlings en la apertura del Parlamento en 1998 deploraba
públicamente un resurgimiento de lo que se llamó en la década de 1970 'kalabule'. Que las
elecciones competitivas del partido deben estar asociadas con corruptos las prácticas no son
sorprendentes, y los donantes de ayuda eran ingenuos si no preveían eso. Las fiestas son
costosas de mantener, las nominaciones de partidos son costosas de ganar, las elecciones
son costosas de combatir. Los recursos tienen que ser encontrados de alguna manera.
Referencia a las elecciones celebradas en la "primera liberación" de África en la década de
1950 y principios de los años sesenta habrían sugerido dónde podrían encontrarse. Incluso
en las democracias maduras de Europa y América del Norte, los partidos y aspirantes a
promesas comerciales de altos cargos —quizás usualmente tácitas— de "acceso",
preferencia u honores a cambio de las enormes sumas de dinero que necesitar. Los líderes
políticos en las democracias están bajo presión continua para dar paso a la corrupción, y
con frecuencia sucumbir. En cuanto a las condicionalidades económicas, una explicación
de su fracaso para reducir la corrupción se ofrece en el caso de Tanzania por Hyden y
Mease Es la inflación que siguió a la devaluación de Tanzania chelín después del comienzo
de la reforma en 1986. ‘Estas circunstancias llevaron a la desintegración de la moral
pública ", el colapso de las ganancias reales de los funcionarios deben ser compensados por
un injerto.19 La inflación es, por supuesto, menos resultado que una causa de devaluación,
pero los funcionarios habían sido protegidos contra la catastrófica caída de los ingresos
reales que ocurrió bajo Nyerere. Así en este caso, los incentivos para la corrupción
aparentemente surgieron de la redistribución de ingresos como consecuencia de las
reformas. Pero las reformas aún podrían tener disminuyó las oportunidades para la
corrupción. En Nigeria, el breve programa de ajuste estructural comenzó en 1986 ‘redujo
algunas posibilidades de corrupción pero también hizo nuevos corruptos oportunidades
disponibles. Como se dijo en ese momento, las licencias para importar tenían sido
reemplazado por licencias de banco. En este caso se podría argumentar esa corrupción
persistió porque la reforma estaba incompleta. Sucesivo los gobiernos encontraron un tipo
de cambio unificado y determinado por el mercado a reforma demasiado lejos. Lo
incompleto de la reforma económica y del poder de la condicionalidades económicas para
efectuarlo: va de alguna manera hacia un general explicación de la supervivencia de la
corrupción. Como se observa con frecuencia, el reformas más sencillas (como la
eliminación de la sobrevaloración de la moneda y la domesticación controles de precios)
mientras que los más difíciles (como la reconstrucción del sistema financiero y el servicio
civil) permanecen sin hacer. Pero es en cualquier caso improbable que las
condicionalidades puedan llegar a ser completamente efectivas en eliminando la
corrupción. ¿Podrían los donantes disminuir seriamente el poder del Estado en economías
dominadas por las rentas de los recursos naturales ¿explotación? ¿Podrían alguna vez
detener la extorsión de la policía? Podrían ellos prevenir la corrupción en el sector privado?
¿Podrían los países donde la corrupción era endémica realmente hacerse honestos por las
amenazas (no siempre creíbles) retener la ayuda internacional? En Botswana, por
reputación, uno de los menos países africanos corruptos, la construcción de la
responsabilidad democrática debía muy poco a las influencias extranjeras de cualquier tipo,
según John D. Holm en el Capítulo 15 de Corrupción y Desarrollo.
Remedios para la corrupción.
Los colaboradores de Hope y el libro de Chikulo discuten los intentos realizados en África
para frenar la corrupción y otras medidas que podrían tomarse. En parte, reiteran las recetas
de los donantes: liberalización económica, prensa libertad, independencia judicial, altos
salarios para los funcionarios, el fortalecimiento de la sociedad civil. La suposición tácita
de que las instituciones de la sociedad civil la sociedad en África escapa de la corrupción
apenas se ajusta a lo cotidiano conocimiento. También se recomienda la descentralización
del poder, aunque es no está claro por qué la probidad debería ser más evidente a nivel
provincial y local niveles que centralmente. Sin embargo, se requiere el "liderazgo ético" de
los estados dichos líderes, posiblemente, pueden permitirse ser menos éticos. También se
consideran son restricciones legales impuestas por disposiciones constitucionales, códigos
de conducta y agencias de "vigilancia" anticorrupción. ¡Incluso la "Guerra contra la
indisciplina y la corrupción" de Abacha se presenta como una "estrategia de reforma". El
ejemplo sugiere que las leyes y las instituciones anticorrupción no tienen valor a menos que
pueden ser tomados en serio. Paul Collier ha señalado que todos son considerados corruptos
en una sociedad conocido por su corrupción, y en consecuencia nadie tiene nada que perder
comportándose de manera corrupta. Supongamos, sin embargo, que los subgrupos honestos
pueden ser identificado públicamente y, en cierta medida, protegido contra la
contaminación por La reputación de la sociedad en general. La demanda de sus servicios
crecerá y la honestidad se encuentra para pagar. Cualquier miembro que transgreda sus
reglas de La probidad ahora será un perdedor. Las instituciones clave en un mercado
comercializado La economía son las auditorías y los tribunales. Los contadores y abogados
son, por lo tanto, las personas entre quienes se necesita crear subgrupos honestos. primaria.
Las profesiones están sujetas a reglas, y las reglas se vuelven más efectivas como se
desarrolla la profesión. Los sacerdotes no divulgan confesiones, los médicos conservan
vida siempre que sea posible, los abogados observan la ley, los contadores impiden engaño,
los maestros no falsifican los exámenes, los periodistas no revelan fuentes. El
incumplimiento de las normas conlleva sanciones, en algunos casos expulsión. Un punto
significativo es que las reglas han evolucionado dentro de las profesiones. sí mismos. Estas
profesiones a menudo se autorregulan. Ellos tienen ser honesto más por sus propios
intereses que por las leyes, las agencias de "vigilancia" o los "líderes éticos". Otros grupos
ocupacionales buscan convertirse en "profesionalizado". Aquí, tal vez, hay una indicación
de dónde se avanza en la reducción de la corrupción. La probidad no es necesariamente
transmitido por el estado; más a menudo, tal vez, se filtra hacia arriba al Estado. La
corrupción ha sido "bien documentada en todas las sociedades del mundo", pero en, por
ejemplo, los países nórdicos, Nueva Zelanda y Canadá es inusual, tanto en niveles altos
como bajos, mientras que en Nigeria, Camerún o Kenia. La corrupción en ambos niveles es
común. En otros países, como el Reino Unido y Estados Unidos, la corrupción de alto nivel
es mucho menos frecuente de lo que estaba en el pasado no lejano. Los estudios de
corrupción en África beneficiarían de estudios comparativos que prestan atención a los
procesos por los cuales países en otros lugares, con el tiempo, se han vuelto relativamente
honestos.

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