Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
IP2 MLIP 2 C. Bello 29.680.968
IP2 MLIP 2 C. Bello 29.680.968
INVESTIGACIÓN
Integrantes :
C.I: 29.680.968
La ley (en latín, lex, legis) es una norma jurídica dictada por el legislador, es decir, un precepto
establecido por la autoridad competente, en que se manda o prohíbe algo en consonancia con la
justicia, cuyo incumplimiento conlleva a una sanción.
Clasificación
Material. Refiere a cuál es el contenido de la norma (su finalidad, la regla de conducta que fija y
las facultades y deberes que otorga e impone).
Formal. Refiere a como debe ser la estructura de la norma (toda norma debe ser general,
obligatoria, escrita, emanada desde el congreso o autoridad competente conforme al mecanismo
constitucionalmente determinado y debe formar parte del derecho de un Estado).
De derecho estricto y de derecho equitativo, también se denominan rígidas o flexibles. En las
primeras la norma es taxativa y no deja margen para apreciar las circunstancias del caso concreto
ni graduar sus consecuencias. En las segundas, resultan más o menos indeterminados los
requisitos o los efectos del caso regulado, dejando un cierto margen para apreciar las
circunstancias de hecho y dar al Derecho una configuración adecuada al caso concreto.
Permisivas: son aquellas disposiciones que autorizan, permiten a un sujeto realizar determinadas
conductas.
Prohibitivas: son aquellas que vedan, niegan al sujeto la posibilidad de realizar determinados
actos o de tener ciertas conductas.
Declarativas: son aquellas cuyo contenido encierra definiciones. "Son personas todos los entes
susceptibles de adquirir derechos y contraer obligaciones".
Imperativas: son leyes que se imponen a la voluntad individual o colectiva, que no dan opción
para el sujeto.
Supletorias: son leyes que rigen solamente cuando las personas no expresan su voluntad en otro
sentido. Están estrechamente ligadas al principio de autonomía de la voluntad.
Características
Generalidad: la ley comprende a todos aquellos que se encuentran en las condiciones previstas
por ella, sin excepciones de ninguna clase.
Obligatoriedad: tiene carácter imperativo-atributivo, es decir, que por una parte establece
obligaciones o deberes jurídicos y por la otra otorga derechos. Esto significa que siempre hay una
voluntad que manda, que somete, y otra que obedece. La ley impone sus mandatos, incluso en
contra de la voluntad de sus destinatarios. Su incumplimiento da lugar a una sanción, a un castigo
impuesto por ella misma.
Abstracta e impersonal: las leyes no se emiten para regular o resolver casos individuales, ni para
personas o grupos determinados, su impersonalidad y abstracción las conducen a la generalidad.
Norma
Es una prescripción dirigida a la ordenación del comportamiento humano prescrita por una
autoridad cuyo incumplimiento puede llevar a una sanción. Generalmente, impone deberes y
confiere derechos.
Clasificación
Normas dispositivas: Obligan cuando no existe una voluntad expresa en contrario del individuo.
También puede considerarse como dispositiva la norma interpretativa, es decir, aquella que va
encaminada a determinar e interpretar la voluntad de las partes.
Clasificación hartiana.
Hart señalaba que lo que diferencia al Derecho de otros sistemas normativos es que está formado
por otros sistemas de normas: primarias y secundarias.
Normas primarias: son las normas de conducta, las normas de comportamiento y que califican
como prohibido, permitido y obligatorio. Estas normas imponen deberes y crean obligaciones,
mientras que las secundarias pueden ser públicas o privadas.
Normas secundarias: son las normas que no tienen por objeto crear obligaciones, sino más bien
atribuir poderes o facultades. Las normas secundarias se introducen para remediar los defectos
que padece o que tiene un sistema de derecho en el cual haya normas primarias solamente. Estos
defectos serían: primero, la falta de certeza, que se remedia por las normas de reconocimiento;
segundo, la inmovilidad, que se subsana mediante la norma de cambio; tercero, la ineficacia, que
se pretende superar mediante las normas de adjudicación.
Normas de cambio: son aquellas normas que nos indican cómo pueden derogarse total o
parcialmente las normas del ordenamiento jurídico. Nos dicen también cómo es posible
modificarlas y cómo introducir nuevas normas. Son las llamadas« normas sobre la producción de
normas», porque determinan quién puede llevar a cabo estos cambios.
Otras clasificaciones.
Normas de orden público, de ius cogens o necesarias: Los sujetos, en sus relaciones, deben
ceñirse a ellas, ineludiblemente, no pudiendo modificarlas por otras de su creación. Esto se debe
al hecho de que manifiestan un preponderante interés colectivo.
Normas de orden privado: Son aquellas que las partes, en sus relaciones, pueden modificar o
sustituir enteramente por otras elaboradas por ellas mismas, pues envuelven interés
exclusivamente para los sujetos de la relación. Rigen en silencio de las partes, son supletorias de
su voluntad.
Según el interés preponderante que tutelan, los sujetos de las relaciones y la calidad en que ellos
actúan
Según sean dictadas para una totalidad o determinada clase de personas, cosas o relaciones
jurídicas
Normas de derecho común: Son las dictadas para la totalidad de las personas, cosas o relaciones
jurídicas, por ejemplo, el derecho civil.
Normas de derecho especial: Son dictadas para una determinada clase de personas, cosas o
relaciones jurídicas, en razón de ofrecer peculiaridades que exigen apartarla de la disciplina
general de las normas comunes, como el derecho comercial. Entonces, las normas de derecho
común se aplican supletoriamente respecto de las de derecho especial, pero a la inversa, los
vacíos legales comunes no pueden ser llenados con las normas de derecho especial. Es así como
las normas generales del derecho civil suplen los preceptos de las demás ramas del derecho
privado cuando ellas no existen, es decir, cuando existen vacíos legales.
Según su función
Normas supletivas o integradoras: Suplen los vacíos del contenido de las declaraciones de la
voluntad de las partes o autores de un acto jurídico.
Normas transitorias: Son las que tienen duración puramente temporal, ya sea para satisfacer una
necesidad circunstancial o para facilitar el paso de la antigua legislación a la nueva.
Normas de aplicación, reenvío o referenciales: Son las que, para los casos que ellas contemplan,
no establecen regulación, sino que disponen que esta ha de ser la que para casos distintos
contemplan otras normas.
Según su alcance
Normas de derecho general o común: Son las que rigen en todo el territorio.
Normas de derecho particular o local: Son las que imperan solo en una parte determinada del
territorio nacional.
Según la sanción
Normas menos que perfectas: Si bien se hallan dotadas de una sanción, esta no es adecuada.
Normas rígidas o de derecho estricto: Son las que solo pueden aplicarse a los supuestos que
contemplan y no a otros por análogos o parecidos que fueran.
Normas elásticas o de derecho flexible: Son aquellas cuya aplicación puede extenderse a otros
casos o supuestos por ellas contemplados, parecidos o análogos porque responden al espíritu de
la norma y nada se opone a su aplicación extensiva o analógica, a ambas o, al menos, a la primera.
Normas sustantivas o materiales: Son las que tienen una finalidad propia y subsistente por sí,
fijando la regla de conducta y las facultades y deberes de cada cual (por ejemplo, las normas de
derecho civil).
Normas adjetivas o formales: Son las que poseen una existencia dependiente y subordinada, pues
solo tienden a facilitar los medios para que se cumpla la regla establecida, garantizando el respeto
a las facultades y deberes atribuidos por las normas sustantivas (por ejemplo, las normas de
derecho procesal).
Características
Temporalidad y contexto
En ese sentido, pueden variar de un sitio a otro o de una época a la siguiente, a medida que la
sociedad normada cambia también sus valores sociales.
Por ejemplo, en Occidente comer con las manos desnudas es considerado una falta a las normas
de etiqueta en contextos formales, mientras que en otras regiones del mundo es la norma
aceptada.
Función
Las normas de todo tipo tienen una función primordial: garantizar que las colectividades humanas
que comparten un tiempo y un espacio específicos posean un código de conductas más o menos
semejante que les permita cohabitar de manera pacífica y mutuamente respetuosa.
Así, las normas de cortesía, por ejemplo, permiten a dos desconocidos interactuar sin correr el
riesgo de ofender al otro o ser ofendidos de antemano.
Carácter colectivo
A pesar de que un individuo pueda tener normas íntimas y personales para consigo mismo, por lo
general se considera que todo tipo de norma ha de ser social y colectiva, es decir, debe servir para
vincular a dos o más individuos que la aceptan de buena gana.
Una norma no puede regir a una colectividad que la desconoce o la rechaza, así como no puede
operar si solamente uno de los miembros de la colectividad se adhiere a ella y los otros no. Las
normas son un hecho social.
Autonomía
A pesar de que toda norma requiere de la aceptación de los partícipes para operar, no todas las
normas pasan por nuestra aprobación o por nuestra consideración.
Algunas son autónomas, es decir, provienen de nuestro libre albedrío y pueden o no ser
violentadas sin mayores consecuencias sociales (aunque sí personales).
Otras, como las leyes, son heterónomas: nos son impuestas por la sociedad y ella, como un todo,
nos obliga a aceptarlas y acatarlas (o, de lo contrario, a vivir al margen de la sociedad).
Coercibilidad
Unilateralidad o bilateralidad
Se habla de normas unilaterales cuando deben ser aceptadas por todos los individuos de la
sociedad, a pesar de que puedan estar en franco desacuerdo con lo que proponen. En cambio, la
bilateralidad es la condición de las normas en que se establece una facultad y una obligación, es
decir, que puede o no aplicarse dependiendo del caso particular.