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Hola buenos días a todos, mucho gusto, a continuación me presentaré y les hablare un

poco sobre mí, sobre mi peor miedo y mayor experiencia en mi vida en muchos
sentidos.
Mi nombre es Jeremy Pinto tengo 18 años de edad, vivo con mis abuelos paternos y
actualmente estudio Publicidad y Mercadeo… El sustento económico para mí no ha sido
tan fácil como a muchos les gustaría que fuera, soy amante del turismo venezolano y
gracias a mi conocimiento pude desarrollarme en ello y trabajar como guía turístico de
playas y distintos cayos del país. Para formar parte de este grupo, yo debía aprender a
nadar, tanto en piscinas como en mar abierto y técnicas de primeros auxilios dentro y
fuera del mar; pero esto para mi represento un reto súper difícil, debido a que le tengo
fobia a nadar en mar profundo, miedo a ahogarme, aun después de amar tanto al mar, ya
sabrán que paso a continuación, aprendí y clasifique para el trabajo.

El trabajo es muy lindo sin duda alguna, pero tuve una experiencia que aunque siempre
la tuve presente jamás llegue a creer que pasaría, en chichirivichi zarpo un catamarán de
50 personas, 50 personas que estaban bajo mi cuidado, una de mis responsabilidades era
cuidar a estas personas, rumbo a isla larga son aproximadamente como 15 minutos o
menos hasta llegar al cayo.

Luego paso mi peor miedo, una señora de alta edad, cayó al mar sin salvavidas, en el
medio del mar abierto, sin absolutamente nada alrededor, al ir en alta velocidad quedo
lejos del catamarán, pero ese impulso de que estaba bajo mi responsabilidad, sumándole
a eso, que yo solamente tenía un permiso de trabajo y tenía 16 años de edad, tome toda
la adrenalina que tenía en mi cuerpo y me lancé al mar sin pensar en mi miedo, por
mucha suerte llegue a la señora, la cargue y nade con ella hasta el catamarán luego la
ayudaron a subir y subí yo.

El caso de esta pequeña historia es que así es la vida señores, debemos lanzarnos al
mar, lanzarnos a enfrentar nuestros peores miedos, debemos arrojarnos a nosotros
mimos al límite de nuestra capacidad, sacarnos de nuestra zona de confort, porque las
cosas más grandes y maravillosas que en este mundo esperan por nosotros, están detrás
de todo aquello que nos frena y no nos permite avanzar, está en la profundidad del mar,
sin saber que nos espera y que nos depara para el día de mañana, y fue de este modo
como perdí mis miedos, como comienzo a arriesgarme sin miedo a fallar, a lanzarme a
nadar cada día sin un salvavidas, sin miedo a ahogarme, porque siempre luchare por
aquello que quiero para mí, para llegar al catamarán y subirme de la misma manera que
quiero subir al éxito. Y es por todo esto que fue mi peor y mi mejor día a la vez.
Muchas gracias que tengan buen día todos.

Jeremy José Pinto Piña 28.387.557

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