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X.

INDICADORES DE GESTIÓN
Los indicadores de gestión (RATIOS) que afectan a los almacenes, no es otra cosa que
el cociente entre dos magnitudes.
Debido a la simplicidad de esta definición debemos determinar los principios generales
en los que se deben basar los ratios:

1. Principio de coherencia

Entre el numerador y denominador debe existir coherencia, así como el método de


cálculo elegido (no tendría ningún sentido ni sería comparable un ratio consistente en
sumar una cifra de negocios con la media de la temperatura de una ciudad medida en
grados Celsius en el mes de diciembre).

2. Principio de promedios

Cuando comparamos dos magnitudes estáticas, esta comparativa debe hacerse con
promedios. A efectos de evitar saltos y excesos en las comparaciones, debido a
estacionalidades de la demanda o del abastecimiento.

Los ratios pueden tener dos aplicaciones:


1. Ayudar a la gestión.
2. Evaluar dicha gestión.

Un ratio puede modificarse actuando sobre el numerador o bien sobre el denominador,


lo cual nos indica que las acciones correctoras en nuestra gestión a través de ratios
puede efectuarse actuando sobre cualquiera de las magnitudes.
Otro punto a tener en cuenta, es el valor que arrojan los ratios, algunas ocasiones nos
interesará maximizar dichos ratios; en otras muchas, minimizarlos, y en la mayoría que
se sitúe en un rango de valores satisfactorio.
Son muchos los ratios que se pueden definir, tomando como base la información
suministrada por las cuentas anuales de la empresa y combinando dicha información.
Ahora bien, a la hora de elaborar un árbol de ratios debemos tener en cuenta el objetivo
del análisis; si es posible, compararlo con otras empresas del sector y cuál es la
importancia de determinar dicho ratio dentro del ámbito de mi empresa.
Los ratios se pueden tratar según la información disponible:

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1.1 Ratios estáticos

Ponen de manifiesto el valor del ratio en un momento dado del tiempo, si


desconocemos los datos históricos de la empresa por lo general proporcionaran
una información truncada y sujeta subjetividades.

1.2 Ratios dinámicos

Cuando disponemos de datos, procederemos a un análisis de ratios dinámico, lo


cual nos va llevar a un análisis en el tiempo, basado en las tendencias de los
mismos en la vida de la misma.
Este patrón de comparación interno, basado en el pasado de la propia empresa,
tiene sus ventajas e inconvenientes:

1.2.1 Ventajas

• Se comparan magnitudes iguales.


• Permiten valorar la evolución de la empresa.

1.2.2 Inconvenientes

• Si la empresa es nueva no tiene pasado, volveríamos a una análisis estático.


• Si los resultados anteriores fueron malos, tomarlos como punto de referencia.
• Las mejoras pueden hacerse al entorno, más que a la propia empresa.

1.3 Ratios sectoriales

Este análisis nos lleva a la comparación de nuestros ratios con el resto de las
empresas o con una en concreto.
Este tipo de patrón de comparación externo tiene sus ventajas e inconvenientes:

1.3.1 Ventajas

• Se comparan resultados del mismo periodo y por lo tanto en condiciones


económicas y tecnologías similares.
• Se eliminan componentes subjetivos.
• Es importante el grado de afinidad con la empresa o el sector comparado.

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1.3.2 Inconvenientes

• Publicación de la información con retraso.


• Dudas de la fiabilidad de la misma.
• Puede haber problemas de compatibilidad por la diversidad de métodos
contables, ejemplo: valoración de existencias.

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