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Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García.

Heridas Por Arma de Fuego

HERIDAS POR ARMA DE FUEGO

Definición de herida:”Lesión producida en un cuerpo vivo por un choque o un


arma” (1), y por lesión vamos a entender no solo aquellas que produzcan heridas
visibles, sino también toda alteración en la salud producida por una causa externa,
así mismo los códigos penales clasifican las lesiones en: Levísimas, Leves,
Graves y Gravísimas.
Levísimas: No ponen en peligro la vida y tardan menos de quince días en sanar.
Leves: Son las que no ponen en peligro la vida, pero tardan mas de quince días
en sanar.
Graves: son las que ponen en peligro la vida, que no dejan cicatriz visible ni
secuela posterior.
Gravísimas: Las que ponen en peligro la vida y dejan disfunción parcial o
permanente de uno o varios miembros del cuerpo.

De igual forma las lesiones se clasifican desde el punto de vista del


agente que las produce en: Químicas, Biológicas y Físicas o Mecánicas, (2) siendo
esta ultima el tipo de agente en que se encasilla los proyectiles de arma de fuego.

También hay que tomar en cuenta que las lesiones pueden causarse
por presión, percusión, fricción y tracción; ocasionando contusiones (hematomas,
equimosis y demás derivados como corto contusas, punzo contundentes etc.),
escoriaciones, heridas cortantes, punzantes, así como amputaciones; siendo la
herida por arma de fuego característica de ser producida por percusión.

Definición de arma de fuego


Son instrumentos de dimensiones y formas variadas destinados a
lanzar violentamente ciertos proyectiles, aprovechando la fuerza expansiva de los
gases que se desprenden de forma instantánea substancias explosivas en un
espacio confinado (3), Escogimos esta definición por ser una de las mas precisas
(aunque no del todo) , esto debido a que algunas definiciones mencionaban que
una arma de fuego debería de tener como material el metal, y como es sabido
por los conocedores en la materia, en el mercado existen armas fabricadas de
polímetros de alta resistencia que no cuentan con piezas metálicas, otras
definiciones hacían mención a el material del proyectil, pero de igual forma existen
algunos proyectiles plásticos en el mercado, e incluso fabricados de materiales
congelados (con la idea de no dejar indicios, pues este proyectil futurista se

(1) García Pelayo y Gross, “ Pequeño Larousse Ilustrado”; Ed. Larousse, México 1983.
(2) Quiroz Cuaron, Alfonso “Medicina Forense” Ed. Porrua, México 1990, pag. 335.
(3) Gisbert Calabuig J.A. “Medicina Legal y Toxicología” ;Ed. Masson Salvat; Barcelona España 1992; pag. 321
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destruye con el calor). Y decimos que no es del todo precisa debido a que el autor
confunde los términos de explosión en lugar de deflagración este ultimo aplicable
a la combustión de la pólvora, pues de explotar o de inflamarse en forma
instantánea, se estaría causando daños serios al mecanismo del arma, pues
aunque parezca que la combustión de la pólvora en armas de fuego, es casi
instantánea, no lo es, sino mas bien es deflagrante, termino utilizado para una
combustión mas lenta que la de un explosivo.

Orificio de entrada.
Después de haber dado la breve explicación pero necesaria vamos a
entrar en detalle en lo concerniente al orificio de entrada, el cual va a presentar
algunas o todas las características que a continuación se mencionan y que con
fines didácticos intentamos ilustrar; esto claro esta, excluyendo las características
propias que presentan los disparos según su distancia.

Orificio propiamente dicho: Tiende a ser circular cuando el disparo incide


perpendicularmente, sobre la piel, y alargado cuando el disparo se hace en
dirección oblicua, sus bordes son invertidos.

Anillo de enjugamiento: este es un anillo que esta alrededor de la periferia del


orificio de entrada, y es causado a consecuencia de los residuos de pólvora y
aceite que el proyectil arrastra a su paso por el cañón, que viene a enjugarse en la
piel dejando toda la suciedad recogida. Claro esta que en el supuesto de que el
proyectil atraviese otros planos (de preferencia de tela) tendremos ausencia de
dicho anillo, pues toda la suciedad recogida por el proyectil se enjuga en la ropa o
tela que impacte en primer plano. Otros autores le llaman Collarete de limpiado (4).

Anillo de contusión: También conocido como cintilla erosiva: es una zona rojiza
de piel desprovista de epidermis, situada por fuera del anillo de enjugamiento, se
produce por fricción y calor del proyectil, la forma concéntrica de el anillo va a ir en
relación directa con el ángulo de disparo (5)

Es importante hacer mención que lo que se conoce como anillo de


Fish es el conjunto del anillo de enjugamiento con el de contusión, también el
orificio de entrada puede presentar una serie de signos que preferimos hacer
mención en el apartado correspondiente.

(4) Simonin , Camilo Leopoldo, “Medicina Legal Judicial” Ed. Jims Barcelona 1973 pag. 135
(5) Vargas Alvarado, Eduardo, “ Medicina Legal” Ed. Trillas México 1999
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En esta fotografía vamos


a encontrar las
características de un
orificio de entrada
mismo que presenta el
anillo de fish, compuesto
de anillo de contusión y
de enjugamiento.

Características de un orificio de arma de fuego de salida


“El orificio de salida es la lesión provocada por el proyectil después
de atravesar el cuerpo” (6), este orificio tiende a ser:

Irregular en cuanto a su forma: esto es debido al comportamiento del proyectil,


veamos: al salir del cañón, el rayado de este, le da al proyectil un giro sobre su eje
por lo que la forma de su herida de entrada tiende a ser circular, pero al atravesar
los planos óseos así como el dérmico, el proyectil ya no gira como en un principio,
sino que da tumbos y su giro es muy irregular, por lo que el orificio de salida es
también de forma irregular.

Los bodes son evertidos: Esto es producto de igual forma de la salida del
proyectil que vence la elasticidad de la piel y cuyos bordes son expulsados
siguiendo la trayectoria de este.

En ocasiones se puede presentar un fenómeno muy interesante: se


puede encontrar el anillo de contusión, en el orificio de salida siempre y cuando se
tenga apoyada esta parte sobre un plano sólido(7), y en el supuesto de que la
persona presente vida al momento de que lo atraviese, ya que el anillo de
contusión es un signo inequívoco de que la lesión se produjo en vida. (8)

(6) Nerio Rojas, “Medicina Legal “ Ed. “El Ateneo” Buenos Aires , 1956, pag. 57

(7) Apuntes del curso de Capacitacion Constante para Personal de Servicios Periciales del dia 13 de Mayo del 2000

(8) Locles, Roberto J ; “Balística y Pericia “ Ed. La Rocca,; Argentina 1992; pag. 36
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Orificio de salida de un proyectil de


arma de fuego calibre 9 mm ( se
Infirió el calibre debido a que se
encontró el casquillo cercano al
cuerpo), el cual según la prueba de
walker practicada en ropas, este
disparo se le infirió a una distancia
mayor a los 75 cm, distancia a la
que según el Dr. Moreno González
(9), es la máxima que alcanza (en
promedio) la maculacion en prendas
de nitratos y nitritos provenientes de
la deflagración de la pólvora (en una
pistola, ya que en armas largas
tiende a alanzar mas distancia.)

Es importante tener siempre en consideración del por que toma su


forma y características el orificio de salida , ya que cuando un cuerpo presenta
diversos impactos de bala en ocasiones habrá orificios de entrada que parezcan
de salida, imprescindible entonces tener el razonamiento del comportamiento del
proyectil en el cuerpo, ya que como dijimos anteriormente, el orificio de salida
debe su característica de irregularidad a que el proyectil va girando de una forma
arrítmica, ya que los planos que atravesó restaron velocidad y dirección a ese giro
helicoidal sobre su eje, tal y como veremos en la fotografía a continuación:

Herida en sedal.
Esta herida es considerada una herida atípica, “Se considera herida
en sedal cuando un agente vulnerante solo interesa la piel, tejido celular
subcutáneo, aponeurosis y primeros planos musculares en las diferentes regiones
del cuerpo, tanto en su orificio de entrada como de salida, y no deje lesiones
fisiológicas posteriores” (10).
En pocas palabras es lo que se conoce como rosón, en este tipo de
heridas el ángulo de disparo debe incidir a manos de 15 grados con respecto al
plano dérmico; en el supuesto en que el disparo sea con una arma blanca como
por ejemplo el calibre 7.62 (el usado por el AK47), la pura onda expansiva que
genera este proyectil será suficiente para causar daño en la piel aún sin tocarla, al
respecto el ingeniero Lockles nos comenta de algunos estudios realizados con
materiales como jabón, arcilla o gelatina, bajo condiciones controladas, y en las
que se realizan disparos con armas de alto poder encontrando que, el puro aire
que el proyectil comprime y expande hacia los lados es suficiente para causar

(9) Moreno González, Rafael, “Balística Forense” Ed. Porrua México, 1990, Pag. 93
(10) Martínez Murillo Salvador; “Medicina Legal” Ed. Lib. De Medicina, Mex; D.F. 1980.
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daño a estos materiales (estos materiales fueron escogidos por su resistencia la


cual es muy similar a las de ciertas partes de la piel).

Por consiguiente los efectos de esta onda son mayores en cuanto


mayor es la velocidad del proyectil y consiguiente cuando esta disminuye también
lo hace la onda expansiva de calor y consecuentemente la piel o material
desplazados (11).
A continuación vamos a ilustrar un caso práctico sucedido en la
ciudad de Zamora Michoacán en la que se presenta una herida que es muy
penetrante para ser en sedal pero que sin embargo se tiende muy bien a la
definición de Salvador Martínez Murillo.

1-. Se nos entregó por parte de las autoridades municipales el cuerpo sin vida de
un sujeto de sexo masculino de aproximadamente de veinte a veintiséis años,
complexión media, tez morena, boca grande de labios gruesos, nariz recta de
base ancha, pelo castaño oscuro quebrado, frente mediana, el cual carecía de
identificaciones mismo que fue encontrado en un río de la localidad y que fue
rescatado ya sin vida y trasladado hasta nuestras oficinas por las autoridades
municipales (en ciertos estados de la República debido a su difícil e inaccesible
ubicación, las autoridades ejidales recolectan el cadáver, y la inspección pericial
se limita al estudio en el anfiteatro.

En un principio se le localizo un
golpe en la región frontal al cual
no se le dio mucha importancia,
ya que una persona ahogada es
común que presente lesiones
inflingidas a causa de la
corriente del río; pero siguiendo
con el protocolo de Necropsia se
procedió a abrir cavidad
craneana en la cual pudimos
encontrar que esa herida que
presentaba era al parecer un
proyectil de arma de Fuego, por
lo que nos abocamos a buscar
dicho proyectil, no encontrando
nada en el Interior del cráneo

(11) Lockles Ob. Cit.


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Posteriormente y siguiendo
la trayectoria del proyectil
descubrimos que este había
tenido un trayecto tipo sedal
ocasionado por la curvatura
del cráneo, haciendo que el
proyectil viajara por todo
este pasando por la parte
occipital y de igual forma por
el cuello para terminar su
recorrido en la espalda a la
altura del omóplato de donde
finalmente fue extraído.

La causa de la muerte no se debió


al impacto balístico que presentaba, sino que el
resultado de las docimasias pulmonares
revelaron que este sujeto murió ahogado.

El proyectil fue recuperado intacto


y permanece en el archivo balístico de Morelia
Michoacán para un futuro cotejo comparativo
toda vez que se tenga el arma sospechosa. Al
respecto es importante destacar que el estado
de Michoacán cuenta con un archivo balístico
(esto debido a la gran incidencia de crímenes
por arma de fuego) que procede de la siguiente
manera: toda vez que a una persona se le
detiene con alguna arma de fuego, a dicha arma
se le abastece de dos proyectiles útiles para
efectuar igual cantidad de disparos en el cañón
recuperador balístico (este es un cilindro de
acero galvanizado provisto de tres tapas en
diferentes secciones para extraer de su interior
el proyectil, el cual es detenido sin lastimar las
características particulares dejadas en el por el rayado del animo del arma, con
una fibra de Keblar) para evaluar tanto el proyectil como el casquillo recuperado
cotejándolo con un historial electrónico de proyectiles y casquillos encontrados en
la escena de algún delito.
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Características de las heridas suicidas por arma de fuego.

Este es un punto en los que hay que poner especial atención ya que
declarar la muerte de alguna persona por suicidio sin que este lo sea puede tener
implicaciones serias.

En el caso del suicidio con arma de fuego debemos de tomar en


cuenta algunos indicios tales como:

a) Si las vías de acceso se encuentran o no forzadas;


b) Si existe desorden en el lugar (huellas de lucha y forcejeo);
c) Si el cuerpo presenta su estado natural y primitivo a como sucedieron los
hechos;
d) En caso de haber algo manipulado determinar en colaboración con el
médico forense, si el occiso pudo o no haber realizado algunas maniobras
con una herida de tal magnitud;
e) Una vez localizado el goteo hemático con características de proyección se
tiene localizado el lugar en el que se localizaba la victima, es cuestión de
interpretar pues la dirección y tamaño de este goteo para poder concluir la
posición del sujeto herido de bala, así como de su arma, y una vez
determinado esto, inferir si pudo haber caído el sujeto hasta el punto en
donde fue encontrado.

En fin, cada uno de estos puntos puede ser desarrollado


extensamente, pero por lo copioso del material, así como por ser ajeno al título
que lleva este trabajo (heridas por arma de fuego) nos abocaremos únicamente a
desarrollar lo siguiente:

Determinación a lo concerniente a las heridas por suicidio.

Prácticamente se estudia todo lo relacionado con un disparo a boca


de jarro y quemarropa (ver disparos por contacto), pero a continuación vamos a
ilustrar una serie de signos recopilados por el sustentante de algunos maestros de
la literatura forense:

El signo del espejo: La experiencia nos hace corroborar este signo suicida en el
que el occiso se observa al espejo al momento de auto inflingirse la lesión, por lo
que se habrá de verificar si la posición de la víctima corresponde o no, así como
goteos con características de aspersión localizados en algún espejo del lugar (12).

Descubriendo la lesión: Algunos suicidas antes de auto inflingirse la lesión se


descubren la zona que este provista de vestimenta para posteriormente realizarse
su auto lesión.

(12) Gisbert Calabuig J. A. “Medicina Legal y Toxicología” Ed. Mazon Salvat; Barcelona 1992., pag. 331
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El signo de herida sorpresa: Se presenta en una o en ambas manos y consiste


en que el occiso al momento de recibir el disparo, en el caso de que el no se haya
auto inflingido esta, tendrá las manos maculadas de sangre, esto por habérselas
llevado hacia la zona herida en un acto sorpresivo e involuntario.

El signo de la mano de sostén: (de Palmieri y Tarsitano) Estos autores han


señalado la existencia de este signo en la mano opuesta que sostiene el arma de
fuego, este se origina debido a que en ocasiones la persona desea auto
lesionarse, sostiene con una mano el arma de fuego mientras que con la otra
mano sostiene la punta del cañón para no errar con la puntería; vamos a encontrar
en la mano de sostén fragmentos no combustos de la deflagración de la pólvora,
así como quemadura, fogonazo y en ocasiones ahumamiento (13).

El signo de la corredera: Este signo se presenta en los suicidios en los cuales se


haya empleado una arma de fuego tipo escuadra con mecanismo semi
automática. Este se debe a que al momento de accionarse el arma, como es
sabido, la acción de los gases que impulsan el proyectil a través del cañón hacen
que la corredera se retraiga para de esta forma, con ayuda de la aguja extractora,
sacar el casquillo percutido del interior de la recámara y al volver dicha recámara a
su posición original sube el proyectil y lo acomoda para el próximo tiro, es
entonces cuando al ejecutar dicha maniobra la corredera pellizca (siempre y
cuando la posición de la mano sea la idónea) la cara anterior externa de la mano.
Este es un signo muy raro, y consiste en un machacamiento en la parte antes
citada de la mano, el nombre le fue adoptado por el sustentante en compañía de
algunos elementos de Servicios Periciales del Estado de Toluca al observarlo en
un suicidio en la ciudad de Morelia Michoacán, pero desgraciadamente los
negativos, propiedad de la Procuraduría de Justicia del Estado de Michoacán, al
cierre de este trabajo todavía no se nos habían proporcionado.

13) Gisbert Calabuig J. A. “Medicina Legal y Toxicología” Ed. Mazon Salvat; Barcelona 1992., pag. 331
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Maniobra de Taylor: Consiste en llevar la mano que se presume utilizo el occiso


para sujetar el arma hasta la herida que auto inflingió, con objeto de verificar en el
sitio mismo del lugar de los hechos, las características tanto de movilidad como de
locomoción, así como antropométricas de dicha mano para verificar que ésta
tenga la movilidad y pueda sujetar en la posición en que se infiere se encontraba
el arma que utilizo para auto lesionarse; por ejemplo, un disparo en una parte
posterior de la nuca resulta fácil para una persona de complexión delgada
propinárselo a si mismo, sin embargo, otra de complexión robusta y obesa le sería
difícil o imposible colocar dicha mano en esa posición, siendo así como se lleva a
cabo la maniobra de Taylor (14).

Signo de la empuñadura; Este signo esta condicionado a la existencia del


espasmo cadavérico, muy frecuentemente encontrado en las lesiones por arma de
fuego que interesan los centros nerviosos superiores (15). Este fenómeno
cadavérico no puede simularse debido a que el arma debe quedar sujetada como
en vida y en el supuesto de que alguien se le ocurra colocarle al occiso el arma en
la mano y luego esperar la rigidez cadavérica, este no presentaría el agarre que se
debe de observar en la empuñadura.

Signo de vacilación en suicidio: Este es cuando el occiso se apoya en


reiteradas ocasiones y con moderada presión, el arma de fuego, dibujando
entonces la trama del cañón y borde de la pistola, no confundir con el signo de
Puppe Werkgarnert, el cual se explicara en el apartado de disparos de contacto.

De igual forma se deberá de verificar la presencia de nitratos y


nitritos en ambas manos, así como numero de heridas que presenta,
direccionalidad del disparo, y distancia de la boca del cañón hacia el orificio de
entrada.

(14) Vargas Alvarado, Eduardo, “Medicina Forense y Deontología Medica”, Ed. Trillas, 1991.

(15) Gisbert Ob. Cit., pagina 331


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Características de las heridas por su distancia.

A boca de jarro: En este rubro están contempladas aquellas heridas producidas


cuando la boca del cañón del arma se encuentra apoyada sobre la superficie a la
cual disparo, para esto se tienen los siguientes tipos de contacto (16):

• Contacto firme: Este apoya y presiona toda la superficie de la boca del


cañón, aquí los bordes del orificio se presentan chamuscados por el efecto
de los gases calientes.

• Contacto laxo: El contacto es muy ligero, dejando un espacio muy


pequeño pero suficiente para permitir el deposito de humo alrededor del
orificio de entrada.

• Contacto angulado: La boca del cañón forma un ángulo por lo que el


ahumamiento y las quemaduras se hacen presentes en forma alargada
(este nos sirve también para determinar la posición del arma al momento
del disparo).

• Contacto incompleto: Cuando la boca del cañón se apoya sobre regiones


del cuerpo que por sus características no son planas.

En estos disparos de contacto cualquiera que haya sido ya sea a


boca de jarro, firme, laxo, angulado e incompleto nos presentan los siguientes
signos:
• Signo de Puppe Werkgartner: Consistente en la reproducción del
contorno de la boca del cañón sobre la piel y puede verse tanto a la presión
del cañón como por el calentamiento de este (17).

• Signo de boca de mina de Hoffman: Consistente en el aspecto


desgarrado de los bordes irregulares y ennegrecidos del orificio de entrada,
esto se debe a la acción de los gases que salen junto al proyectil y que se
acumulan bajo la piel.

(16) Cibrián Vidrio Octavio, “Balística, Técnica y Forense”, México 1998, pág. 211

(17) Vargas Alvarado, Ob. Cit.


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Signo de boca de mina


realizado en temporal
derecho, en el cual se
observa además en la
parte superior derecha a
un lado de la flecha de
señalamiento, una herida
semi circular producto de
la parte inferior del cañón,
a esta herida se le conoce
como Puppe Werkgartner

Dibujo que ilustra como los gases


que acompañan al proyectil se
infiltran por debajo de la piel y
generan el golpe de mina

• Signo de Benassí: Se observa en el hueso del cráneo alrededor de la


perforación de entrada y es homologo a lo que en la piel es el tatuaje; su
utilidad radica en que nos sirve para determinar disparos por contacto aún y
cuando el tejido se encuentre putrefacto ya que como dijimos anteriormente
se va a encontrar en hueso.

Además de estos signos también en las ropas es posible encontrar en los disparos
por contacto los siguientes signos, mismos que son un poco menos frecuentes:
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• Signo de calcado de Bonnet: Se observa cuando el disparo se efectuó


sobre ropa de tramo laxa, en este cado el humo reproduce la trama de la
ropa sobre la piel (18).

• Signo de deshilachamiento crucial de Nerio Riojas: Consiste en el


desgarro en forma de cruz que se hace a la ropa y que tiene los bordes
ennegrecidos por el humo (19).

Aquí podemos observar el


fenómeno del deshilachamiento
crucial, nótese los bordes
ennegrecidos producto de la
combustión incompleta de la
pólvora.

• Signo de Escarapela de Simonin: Consistente en dos anillos


concéntricos de humo en la ropa alrededor de la perforación de entrada (20).

Heridas a quemarropa: Estos son los considerados a corta distancia (no más de
75 centímetros) en donde la distancia entre el cañón y el arma es reducida, lo que
impide una dispersión sustancial de los granos de pólvora y del humo que
acompañan al proyectil, los orificios a quemarropa van a presentar tres zonas (21):

(18) Vargas Alvarado, Eduardo, Ob. Cit,

(19) Nerio Riojas, Ob. Cit.

(20) Simonin Camilo Leopoldo, “Medicina Legal Judicial, Ed. JIMS, Barcelona

(21) Cibrián Vidrio Octavio, “Balística, Técnica y Forense”


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• Zona de tatuaje: esta constituida por los granos de pólvora que se expulsan
junto al proyectil incrustándose en la piel, debido a que estos granos de
pólvora van a una temperatura elevada al momento de incrustarse en la piel
no desaparecen ni con lavado... Al respecto se recomienda se tome una
fotografía con ropa (para ver si hay algún signo de los encontrados en
ropa), acto seguido se fotografía el orificio sin limpiar, para posterior a un
limpiado se toma la fotografía en la que se decidirá si es tatuaje o al
removerse con el agua es falso tatuaje.

En esta fotografía se
aprecia el orificio de
entrada acompañado de
tatuaje, aquí se lavo
perfectamente la herida
para corroborar si
efectivamente nos
encontrábamos ante la
presencia de un tatuaje,
recordemos que el
autentico tatuaje NO se
quita con el lavado.

• Zona de ahumamiento : Es proveniente del humo de la deflagración de la


pólvora, este ahumamiento se quita con el lavado de la herida y es difícil
confundirlo con el tatuaje ya que el tatuaje presenta una granulación así
como pequeños orificios en la piel que circundan el orificio de entrada,
además en el tatuaje se observa una coloración mas rojiza, contrario a la
coloración del ahumamiento la cual es mas obscura. A continuación
anexaremos una fotografía en donde se aprecia un ahumamiento causado
por la deflagración de la pólvora de un proyectil de bajo calibre, que
atendiendo a la forma que presenta este podemos inferir que la dirección
del disparo, la cual es de abajo hacia arriba, obedece a la posición de la
victima al momento de sufrir la herida (cabe mencionar que esto se infiere
ya que el cuello le da una movilidad excelente a la cabeza la cual debió
haber estado hacia atrás , cosa contaría sucede con el abdomen donde
este tipo de trayectos son mas difíciles de ver)
Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García

Además de presentar
ahumamiento en esta herida
cuya trayectoria es de
adelante hacia atrás y de
abajo hacia arriba (esta
trayectoria se infiere debido a
el alargamiento del orificio de
entrada así como por el
ahumamiento, misma que
será ratificada por la
necropsia de ley), presenta
además signos de lucha y
forcejeo en cara y manos.

• Zona quemada: es producto de la flama y gases calientes que salen por el


cañón al momento al momento de deflagrarse la pólvora.

Recordemos que tanto el anillo de contusión, como la quemadura en


orificio de entrada son signos inequívocos de que las heridas fueron inferidas en
vida.

Orificios producidos a distancia intermedia: Es una distancia mayor que la


anterior pero por la cercanía con el objetivo y en relación al tipo de arma y
cartucho a utilizar (existen ciertas marcas que por la mala calidad de sus
componentes la pólvora deflagra muy diversificada , ósea que no enciende toda al
mismo tiempo, siendo estos fragmentos de pólvora que apenas se están
combustionando, los que generan el tatuaje, por que obviamente los ya combustos
se trasformaron en gas que permitieron al proyectil salir del arma a través del
cañón) algunas heridas de distancia intermedia todavía van a conservar tatuaje,
aunque este ya muy dispersado. Entonces se tendrá por entendido que la
distancia intermedia es de entre 80 y 150 centímetros, estando el tatuaje
supeditado a los elementos antes citados así como a las condiciones del lugar
(abierto, cerrado, con o sin viento etc..)

No deberá el investigador confundir un tatuaje ya muy dispersado


por la distancia a la que fue realizado con las heridas producidas por objetos que
se proyectan junto con el proyectil, ya que las del tatuaje guardan un diámetro
menor y se muestran uniformes en tanto que las otras son mayores y de diversas
formas (ver apartado de heridas atípicas).
Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García

Los disparos que sufrió este sujeto


fueron realizados a una distancia
intermedia (esto debido a que se
localizo el arma y casquillos y
después de realizar un diagrama de
expulsión de ellos se llego a esa
conclusión), sin embargo no
presenta ningún tatuaje ya que
además de que el viento era fuerte,
contaba con una chamarra puesta,
de igual forma no presenta anillo de
enjugamiento pues el proyectil se
limpio en dicha chamarra

Orificios producidos a larga distancia: Aquí solo se observan los efectos


mecánicos producidos por los proyectiles (orificio de entrada, anillo de
enjugamiento y anillo de contusión) y en el caso de los proyectiles de calibre alto
se observa el signo del cono entruncado consistente en un orificio de entrada de
diámetro regular y uno de salida bastante grande con exposición de tejido y hueso,
tal y como se ilustra en el siguiente caso practico:

El occiso que aparece a continuación es un policía municipal del


estado de Michoacán que recibió varios disparos, sin embargo se infiere que este
fue el que le causo la muerte.
El orificio que se señala es de
entrada (obsérvese anillo de
enjugamiento y de contusión este
ultimo nos indica que se
encontraba el sujeto vivo a pesar
de haber recibido ya varios
disparos) realizado con un arma
calibre 357 mágnum a una
distancia de aproximadamente 2.5
metros; la otra herida de tipo lineal
que se localiza en maxilar inferior
derecho también es de bala pero
del tipo atípicas, y tomo esa forma
debido a que el proyectil ya le
había atravesado el brazo
(fotografía de abajo)
Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García

Esta otra, muestra el orificio de salida


de la herida que acabamos de
observar, aquí tenemos ejemplificado
el signo del cono entruncado,
nótese la diferencia de los bordes los
cuales se encuentran estrellados y
desgarados aunque muy distinto a
como aparece en el golpe de mina, el
cual tiende a desgarrar mas la piel, y
presentar muy quemados los bordes
producto de los gases.

En esta otra, vamos a observar la


trayectoria que sufrió en el brazo
derecho y que le ocasionó una
herida atípica en el maxilar. Esta
extraña trayectoria obedece a que el
occiso se encontraba en un plano
inferior al de su atacante (se
encontraba ya en el piso), dicha
herida sugiere una maniobra de
defensa por reflejo queriendo
detener los proyectiles.

Orificios de bala atípicos: Estas son poco vistas y dentro de ellas encontramos:

• Los orificios de bala producidos por rebote: Al igual que los orificios de
salida, el giro del proyectil ya no es helicoidal, por lo que no gira ya sobre su
eje, razón por la que estos orificios presentan las características de uno de
salida, pero con anillo de contusión, en estos se tiene que poner especial
cuidado en el lugar donde sufrió el rebote, fijarlo bien para poder establecer
lo concerniente a la dinámica del proyectil (22)

(22) Vargas Alvarado, Eduardo, Op cit.


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• Orificios acompañados de fragmentos: es el caso de aquellos proyectiles


que después de atravesar algún plano impactan al individuo arrastrando
con el algunos fragmentos que se proyectan con fuerza hacia la periferia de
la herida, dejando múltiples heridas todas ellas se diferencian del tatuaje
debido a que son de tamaño irregular (unas mas grandes que otras) y que
además su coloración no es tan vinosa como en el caso del tatuaje, (ya que
el tatuaje le da esa coloración por la temperatura a la que viajan estas
partículas)

Esta herida (la cual se sitúa a


la altura del codo viene
acompañada de gran
diversidad de pequeñas
heridas algunas mas
prominentes que otras debido
a que al momento de
atravesar el proyectil el
parabrisas empujo con el los
fragmentos de vidrio hacia el
brazo

Y por ultimo tenemos el proyectil que atravesó varias capas dérmicas y que
proyecta de una capa a otra restos óseos así como viscerales.

Reacciones de defensa y de sorpresa: Estas


reacciones son muy especiales y nos sirven para
determinar si hubo algún tipo de alevosía o
ventaja , y en ciertos casos como el que a
continuación se ilustra, poder determinar la
intención de un suicida, todos estos son muy
diversos y variados y serán circunstanciales, por
lo que no nos es posible establecer una lista de
ellos, siendo la experiencia del investigador el
que podrá descubrirlos. En la fotografía tenemos
a un joven con un orificio de entrada en temporal
derecho con salida en el izquierdo un orificio
mas en antebrazo izquierdo.
Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García

El suicida se infirió un orificio


de entrada con golpe de mina
obsérvese el signo de Puppe
Werkgartner cerca de la ceja.

En esta otra ilustración vemosl


orificio de salida con bordes mas
irregulares, que el de entrada
presentando entonces el signo del
cono entruncado.

Pero de todos estos datos el mas


interesante se encuentra en su
antebrazo izquierdo, pues
presenta una herida por arma de
fuego que en un principio se
pensó que pudo haberse realizado
durante una maniobra de lucha y
forcejeó, pero al no encontrar un
segundo casquillo percutido, se
examino este llegando a la
conclusión de que el brazo lo
tenia apoyado (en posición de
descanso) entre el sillón y su
cabeza
Heridas por arma de fuego Gerardo J .M . Pérez García

Esta fotografía tomada en el anfiteatro


comprueba la teoría que se manejaba, y
tomando como base esta posición
podemos pensar que el hoy occiso no
tenia pensado autolesionarse, sino mas
bien estaba en una posición de descanso
y tal vez decidió hacer una maniobra con
el arma (como rascarse) en el temporal

Esta otra ilustra un par de disparos


los cuales se infiere fueron
causados al contestar la agresión de
forma inmediata, veamos, lo que
sucede es que al oir una agresión de
esta naturaleza el cerebro da la
orden de responder-huir-sobrevivir,
es entonces cuando aun y sin tener
el blanco asegurado se efectua la
orden al cerebro de responder-
atacar, de hecho mucha gente se a
lastimado a si misma y a sus
compañeros a causa de este
fenómeno, en el que se dispara
todavía enfundada el arma.

En esta otra vemos a un sujeto que no


tuvo tiempo suficiente de desenfundar
pues se aprecia que su mano derecha
solamente esta próxima al arma, sin ni
siquiera haberla podido desenfundar,
por lo que en base a esto podemos
determinar que de los mas de 120
disparos efectuados por ambas bandas
en ese restaurante, fue el primero o
segundo disparo el que le causara la
herida de muerte a este sujeto, ya que
de lo contrario hubiera podido aunque
sea sacar el arma.
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