Otelo Frases

-"Ser de tal o cual manera depende de nosotros. Nuestro cuerpo es un jardín y nuestra voluntad, la jardinera".

-"La honra no es más que una atribución vana y falsa que suele ganarse sin mérito y perderse sin motivo".

-"El pobre contento es rico y bien rico; quien nada en riquezas y teme perderlas es más pobre que el invierno".

-"Si al robo sonríes, robas al ladrón: te robas si lloras un vano dolor".

-"No habiendo remedio, las penas acaban al vernos ya libres de todas las ansias. Llorar la desdicha que no tiene cura
agrava sin falta la mala fortuna".

-"Si en la balanza de la vida la razón no equilibrase nuestra sensualidad, el ardor y la bajeza de nuestros instintos nos
llevarían a extremos aberrantes. Más la razón enfría impulsos violentos, apetitos carnales, pasiones sin freno. Por eso, lo
que tú llamas amor, a mí no me parece más que un brote o un vástago".

-"El celoso no lo es por un motivo: lo es porque lo es. Son los celos un monstruo engendrado y nacido de sí mismo".

-"Aquel a quien roban, si no advierte el robo, mejor que lo ignore, y así nada pierde".

-"Te juro que es mejor ser engañado que sospecharlo una pizca".

-"De bobos es vivir si la vida es un suplicio, y morir significa prescripción si la muerte es nuestro médico".

-"El diablo de la embriaguez se ha dignado ceder el puesto al diablo de la ira".

-"Cuando el Maligno induce al pecado más negro, primero nos tienta con divino semblante".

-"Te lo ruego, háblame en la lengua de tus propios pensamientos y dale al peor de todos la peor de las palabras".

No, no puedo callar, no quiero. Hablaré libre como el viento, aunque me condenen Dios y los hombres y el infierno. No
callaré, debo habla

Si tras cada tempestad llegan gales calmas,

!soplen los vientos hasta despertar a la muerte!.

Los malos pensamientos son por su naturaleza venenos que al principio, apenas hacen sentir su mal sabor pero que, a
poco que actúan sobre la sangre, abrasan como minas de azufre.

Los hombres deberíamos ser aquello que parecemos.

Tal pensamiento corroe mis entrañas como un mineral venenoso.

Ya está concebido. El infierno y la noche tenían que alumbrar este monstruoso engendro.

Un año o dos no revelan un hombre. Todos son como estómagos y nosotras comidas. Nos comen con hambre y una vez
llenos, nos eructan.

!Oh, tú, invisible espíritu del vino, si careces de nombre que te distinga, llamémoste demonio!.

Nunca se oyó que por el oído sane el corazón.

Si en la balanza de la vida la razón no equilibrase nuestra sensualidad, el ardor y la bajeza de nuestros instintos nos
llevarían a extremos aberrantes.
Frases Macbeth
El poder es la escuela del crimen.

Hago lo que todo hombre hace. No lo sería si hiciera más.

Que la alegría reina sin vergüenza.

La excesiva confianza es la capital enemiga de los mortales.

Las cosas iniciadas por el mal sólo en el mal se vuelven fuertes.

No deberíamos preocuparnos por cosas que no tienen medicinas.

Los actos  contra la natura  generan perturbaciones contra la  natura.

Cada minuto, se genera una nueva infelicidad.

Todos los defectos son excusables, contrarrestados con el peso correspondiente en virtudes.

Que la bendición de Dios vaya contigo y todos los que del mal quieren hacer el bien, y de los enemigos, amigos.

Es legítimo que escapamos de un lugar donde no se espera clemencia.

Espero que tus oídos no desprecien para siempre mi boca. por haberles hecho escuchar las palabras más dolorosas que
has oído hasta la fecha.

La vida es una sombra errante; un pobre comediante que se pavonea en el breve instante que reserva la escena, y luego
ya no se escuchará. Es un cuento de hadas, que no significa nada. Narrado por un idiota lleno de voz y furia.

No tire de su sombrero para sus ojos; para acariciar su dolor; penas que no hablan, susurran a los oídos del corazón
húmedo e invitan a romperse.

Lo que se hace no se puede deshacer.

¡Oh! ¡Qué negro es el Infierno!

Los proyectos en el pensamiento se basan en esperanzas sin certeza.

La modesta prudencia me prohíbe entregarme a una credulidad muy rápida.

Lo que tienes precisión es el remedio restaurador de todas las criaturas vivientes: dormir.

Insignia de nobleza similar a las estrellas brillará en aquellos dignos de ellos.

Su enfermedad es otro alboroto de visiones que se siguen, rápidos y numerosos, robándole paz. (...) En los casos de este
orden, sólo el paciente puede curarse a sí mismo.

¡Una gran perturbación de la naturaleza, esto de recibir al mismo tiempo el beneficio del sueño y proceder como si
estuviera mirando!

Usted será capaz de dar a sus placeres una amplia satisfacción, y sin embargo pasar por un hombre frío a los ojos de la
multitud.

En este mundo, practicar el mal es a menudo encomiable y hacerlo bien a veces es una locura peligrosa.