SU PASTOR Y USTED

Efesios 4:7, 11-12

7Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado gracia en la medida en que Cristo ha repartido los dones11 Él mismo
constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros,12 a fin de capacitar
al *pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo.

INTRODUCCION
En general el pastor:
1. Nos capacitara (preparara)
2. Para servir (ministrar)
3. Para edificar el cuerpo de Cristo (El reino, la iglesia)
Existen medios divinos que nuestro Señor nos da para modelar y amoldar nuestras vidas.
1. Tenemos la palabra de Dios.
2. Tenemos el Espíritu Santo de Dios como maestro y guía constante.
3. Tenemos al hombre de Dios, nuestro pastor.
En esta lección trataremos con la parte referente a la labor que nuestro pastor desempeña en nuestra vida espiritual.
La palabra "pastor" significa "el que cuida un rebaño". Un pastor devoto nos guiará y con su mano auxiliadora será de
gran valor para nuestro caminar con Dios. Como criatura nueva en Cristo, yendo por un camino nuevo con el cual no
estamos aún familiarizados, es necesario que estemos dispuestos a escuchar y seguir a alguien que ya ha recorrido este
camino por muchos años. Cultive el deseo que el hombre de Dios sea quien le alimente y le guíe.

I. SU PASTOR
De acuerdo con Efesios 4:7-11, los pastores son:
1. uno de los regalos especiales de Dios para la iglesia y Él dio (no el hombre) diversos ministerios como un regalo
para ésta. Así como Dios compró a la iglesia con su sangre, (Hechos 20:28) también les dio un ministerio para
que dirigieran, supervisaran y cuidaran a su rebaño.
2. Cuando leemos el Antiguo Testamento, vemos el ejemplo de Moisés en su oficio de pastor. Dios dispuso que
Moisés fuera un dirigente sobre Su pueblo y que fuera respetado y reverenciado, y como jefe de Israel recibiera
tal honor. Así que Moisés hablaba al pueblo en el nombre de Dios.
3. El jefe de una congregación mantiene esta ilustre autoridad, sencillamente, porque
Dios lo ha dispuesto; y sin dudarlo existen buenas y sabias razones por lo cual Dios lo concede.

A. EL ORDEN DIVINO.
Dios sabe (como sabemos nosotros) que para que una organización, un negocio, una familia, o la iglesia misma tenga
éxito necesita tener un director, o un jefe o una cabeza. Puede haber líderes, asistentes, trabajadores y ayudantes pero
solo se necesita una persona que ocupe la posición de suprema autoridad. La palabra final que se le de a una persona
en un asunto de importancia, y que no lleve a cabo conforme a lo ordenado, resultará en fracaso y confusión.
Es muy importante la organización de una iglesia pero muy diferente a la organización de una empresa, negocio, casino
etc. que pueden ser gobernadas por accionistas, comités ejecutivos o algo parecido. No tratemos de ignorar estos tres
hechos:
1. La iglesia es gobernada por leyes espirituales y no carnales.
2. La iglesia no pertenece a accionistas o a una junta oficial de hombres, es propiedad de la Deidad.
3. Dios ha ordenado que los pastores sean los supervisores primarios de las iglesias locales. Nuestro Señor
proclama que esta es Su iglesia (Mateo 16:18) y que Jesucristo es el único dueño de ésta y tiene el derecho
a establecer en ella la clase de gobierno que Él considere prudente.

B. LA COMUNICACIÓN DIVINA.
1. En el Antiguo Testamento, cuando Dios quería dar a conocer algo a su pueblo Israel, lo transmitía a través
de Moisés, su dirigente. Leemos que por lo menos en dieciséis ocasiones, Dios le dijo a Moisés: "Habla a
los hijos de Israel…." Así se procedía en aquel tiempo, aunque muchos israelitas mantuvieran posiciones
de responsabilidad.
2. Este mismo procedimiento se encuentra en el Nuevo Testamento. Aun cuando dentro de toda la iglesia vive
el Espíritu Santo, Dios ha estructurado Su iglesia de esta manera para así comunicar su voluntad a los
santos a través de sus dirigentes.
3. Dios transmite dirección a la congregación por medio de su pastor. Lo vemos vívidamente en el mensaje a
las siete iglesias de Asia, en Apocalipsis 2 y 3. Dichos mensajes iban dirigidos al "ángel” de su respectiva
iglesia. (La traducción de la palabra griega "aggelos" es ángel y no se usa exclusivamente para seres
espirituales, sino también para hombres). La palabra, literalmente significa: Mensajero, enviado, uno que es
enviado. El comentario de Strong nos informa que quiere decir por implicación: Un pastor. Estos ángeles y
solamente ellos son los pastores de las siete iglesias.
4. Su pastor es un mensajero de Dios y los mensajes que pronuncia desde el púlpito, son instrucciones
y reglas de conducta que él considera necesarias para el bienestar de usted y de la iglesia. El pastor
 comunica lo que sinceramente siente que es la voluntad de Dios, para establecer normas santas y Bíblicas.
Su pastor enseñará y predicará lo que siente que es correcto en el temor de Dios. Aunque haya diferencia en
las normas de su iglesia comparadas con las normas de otras iglesias, en su congregación, usted tiene el
deber de seguir las enseñanzas de su pastor sin hacer caso de lo que se lleve a cabo en aquellas.

II. LA RESPONSABILIDAD DE SU PASTOR CON USTED.

Examinemos los cargos solemnes dados a su pastor cuando el le ministra a usted como un sirviente a la vista de Dios.

A. EQUIPAR.
1. El apóstol Pablo nos dice en Efesios 4:12 las razones por las cuales Dios ha dado a la iglesia los diferentes
dones del ministerio. El propósito es "…. perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la
edificación del cuerpo de Cristo."
2. "para perfección de los santos", queremos decir que no se trata solamente de madurez, sino preparación
para el trabajo del ministerio. La traducción acertada de esta idea dice lo siguiente en La Biblia Ampliada:
Efesios 4:12 "Su intención fue el perfeccionamiento y la habilitación completa de los santos (Su gente
consagrada), para que ellos hagan el trabajo de ministrar para la edificación del cuerpo de Cristo" (la iglesia).
3. Su pastor le guía con el Espíritu y la Palabra a un lugar útil en el reino de Dios. Él quiere que usted se
desarrolle espiritualmente en tal grado, que su vida sea una bendición para otras personas.

B. ALIMENTAR.
1. Pablo habla a los pastores espirituales acerca de sus responsabilidades ministeriales en:
Hechos 20:28-29
"Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la
iglesia del Señor, la cual Él ganó por su propia sangre. Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de
vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño". La predicación de la Palabra de Dios le mantendrá salvo.
Romanos 10:17,
"Así que la fe es por el oír, y el oír por la Palabra de Dios".
Su pastor, llamado por Dios, predica y enseña la Palabra que puede salvar su alma. Además su pastor, como supervisor,
mantendrá alejados a los lobos que representan a los falsos maestros que tratarán de introducir su doctrina falsa en el
seno de la iglesia.
Jesús dijo de un buen pastor que:
Juan 10:4-5
"….ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz. Mas al extraño
no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de extraños".
En los tiempos de Jesús, el pastor era la puerta del rebaño y las ovejas se movían solo cuando escuchaban su voz. Así,
usted como estas ovejas, aprende a escuchar y distinguir la voz de su pastor entre otras muchas voces pues el a diario y
con todo cariño le ayuda a dirigir su vida. El apóstol Pedro, exhorta también a los dirigentes cristianos a nutrir o alimentar
a la gente de Dios.
1 Pedro 5:2-4
"Apacentad a la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por
ganancia deshonesta, sino con cariño pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino
siendo ejemplos de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de
gloria".
Grey: Rebaño. Congregación de los fieles cristianos bajo la autoridad de su pastor.

C. Velar.
Como supervisor, su pastor se vuelve también vigilante. El supervisa su desarrollo espiritual y es responsable, ante Dios,
por el cuidado de su alma.
Hebreos 13:17
"….porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta…."
El deber de su pastor como vigilante es muy serio. Cuando usted se extravía y el no le advierte o previene para que se
retire de los malos caminos, Dios le hace responsable por su infortunio.
Ezequiel 3:17-18
"Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tu la palabra de mi boca y los amonestarás
de mi parte. Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tu no le amonestares o le hablares, para que el impío sea
apercibido de su mal camino, el morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano".
Su pastor sabe que esto significa que está en una posición de mucha responsabilidad como ministro del evangelio. De
ahí que no pueda tomar ligeramente la tarea de presentar a gente que se ha preparado a si misma para la venida de
Cristo. Por consiguiente, los mensajes del pastor acerca de la Palabra de Dios son para cuidar, animar, inspirar,
fortalecer y conmover su corazón para que usted no se pierda.
Ahora usted comprende el oficio importante que su pastor desempeña es para guiarle en su crecimiento y
perfeccionamiento espiritual. La razón por la cual muchos cristianos fallan a Dios y vuelven al mundo, se debe a que no
crecen debida y normalmente. Una vez que haya recibido al Espíritu Santo, existe un tiempo para crecer
2 Pedro 3:18
Nos dice: "….creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo".
Esta escritura implica que debe haber progreso en nuestro caminar con Dios.
Crecer implica ir hacia adelante, lo cual sugiere actividad. La segunda parte de este versículo es muy importante, ya que
cuanto mas conocimiento adquiere una persona acerca de Nuestro Señor y su Palabra, su oportunidad de alejarse a
consecuencia de enseñanzas falsas, disminuirán.
En el Antiguo Testamento, vemos que Dios habló a su pueblo diciendo:
Oseas 4:6
"Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento…."
¿Entonces cómo llega el conocimiento?
El conocimiento nos es impartido a través de la Palabra de Dios y a través del auxilio del ministerio.
Otra escritura que se relaciona con nuestro conocimiento y conexión con el ministerio es:
Hebreos 6:1
"Por tanto, dejando ya los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección".
El escritor nos está diciendo que no nos metamos con las doctrinas o la fundación de la iglesia, porque estas han sido
cuidadosamente establecidas por los apóstoles y es una custodia sagrada que nunca debemos violar. Sin embargo el
nos anima a que sobre estos cimientos continuemos edificando, puesto que para construir nuestras vidas
apropiadamente necesitamos de un guía para que nos dirija. Vemos una vez mas la importancia de una dirección fiel,
que pueda orientarnos o ayudarnos a evitar errores, mientras construimos sobre un cimiento firme.

III. Su responsabilidad a su pastor.

A. Estimar.
Pablo nos exhorta a que tengamos en alta estimación a nuestros líderes espirituales.
1 Tesalonisenses 5:12-13
"Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros y os presiden en el Señor, y os amonestan; y
que tengáis por mucha estima u amor por causa de su obra, Tened paz entre vosotros".
1 Pedro 2:17
"Honrad a todos".
En Romanos capitulo 13, la Biblia también nos dice que demos honor a quién honor merece. Si dicha referencia es
hecha solamente con respecto a las autoridades humanas, cuanto más debemos honrar a las autoridades espirituales.
En verdad ministros que dirigen bien son,
1 Timoteo 5:17
"….dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar".

B. Apoyar.
Hay varias maneras por las cuales usted puede apoyar a su pastor. Las dos más importantes son las finanzas y la
fidelidad.
1. Finanzas.
Su apoyo monetario al hombre de Dios le vendrá a usted en forma natural. El aprecio que sienta hacia él, hará que la
bendición sea recíproca. Este entendimiento está basado en la escritura cuando Pablo preguntó a los Corintios acerca de
las ofrendas ministeriales.
1 Corintios 9:11; 13-14
"Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si segaremos de vosotros lo material?"
"¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y los que sirven al altar, del altar participan?
Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio".
Dios ha ordenado que el ministerio sea apoyado con diezmos y ofrendas.
Diezmos en el plan de Dios, significa que demos el diez por ciento de nuestras entradas, para el ministerio.
2. Fidelidad.
Siempre sea fiel a su pastor. No se convierta en crítico de sus maneras o metodos.
Cuando otros lo critiquen, defiéndalo siempre y ore por él. La palabra de Dios nos enseña que nunca toquemos a sus
ungidos, (1 Samuel 24:6-10).
Fidelidad comprende también, atender con regularidad a los cultos de alabanza.
De hecho este es un mandamiento que se encuentra en:
Hebreos 10:25
"No dejando de reunirnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortandonos; y tanto mas, cuando veis que aquel
día se acerca".
Añadiendo a lo anterior, sea pronto en dar su apoyo durante los días de ayuno y oración, cuando el pastor sienta que es
el momento de reunirnos para un avivamiento o por necesidades espirituales especiales. Aprenda la bendición de la
cooperación. No hay nada mas placentero para el corazón de un pastor que saber que puede contar con usted como
alguien que siempre está en el lugar que debe estar.

C. Sometimiento.
Someterse a la autoridad es otra responsabilidad dada por Dios, y que debemos rendir a nuestros líderes espirituales.
Hebreos 13:17
"Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar
cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejandose, porque esto no es provechoso".
Su líder desea ayudarle y ver que sus necesidades espirituales sean atendidas.
Esto es posible, únicamente, si usted está dispuesto a someterse a sus enseñanzas, consejos y advertencias. Notará
que a través de toda la Palabra de Dios se da especial importancia al ministro llamado por Dios. Antes de que en alguna
ocasión se convierta en crítico, o se rebele debido a las condiciones que existen en la iglesia, o porque la relación con su
pastor no es la mejor ya sea por su personalidad o tipo de liderazgo o por las condiciones que puedan existir, que a usted
aparentemente le estorban o le molestan. Es entonces el momento propicio para ayunar y orar pidiendo a Dios un
cambio ya sea en su pastor o en usted.
Leyendo la Biblia observamos las consecuencias de no mostrar un respeto apropiado a los ministros de Dios. En
Números 12 y 16 se citan tres ejemplos de las consecuencias de una actitud inapropiada hacia el hombre que Dios ha
puesto a la cabeza de la congregación.
Romanos 15:4
"…. las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron…"
1 Corintios 10:11
"….están escritas para amonestarnos…."
Primer incidente. La hermana y el hermano de Moisés rehusaron reverenciarle, y fueron todavía mas lejos, al atreverse a
juzgar a Moisés insinuando que el se estaba tomando mucha autoridad siendo solamente un hombre. Aún mas, ¿no
fueron Maria y Aarón también ungidos por Dios? Este era su pensamiento y crítica. (Números 12:1-2). Dios los escuchó y
les contestó prestamente, (versículos 4-8). Una terrible sentencia cayó sobre Maria y quedó leprosa. (versículo 10). ella
sufrió el reproche y la afrenta de haber sido echada del campamento por siete días y avergonzada ante los ojos de toda
la congregación. Fue sanada, porque el hombre a quién ella había rehusado respetar, oró por ella (versículo 13).
Levantar la mano o usar la lengua en contra de un hombre de Dios, es simplemente buscar dificultades.
A la persona que no domina este espíritu, le esperan solo dolores de cabeza.
Segundo incidente. Cuando Moisés fue desdeñado y acusado de obtener mucho poder está registrado en Números
capitulo 16. Coré, Datán y Abriam acusaron a Moisés y a Aarón de abarcar mucho para si mismos, elevándose por
encima de la congregación, siendo que (según ellos) la congregación era santa (versículo 3) y también le acusaron
porque ellos mismos fallaron en llegar a Canaán (versículo 13). Rehusaron reconocer la diferencia entre el líder
designado por Dios y el resto de la congregación. Dios les castigó con una muerte horrible (versículos 31-35).
Este espíritu aún prevalece y trata de abrirse paso dentro de la iglesia. Cuando usted sienta y vea tal espíritu obrando, no
se identifique con el.
Tercer incidente. El desprecio hacia el líder ordenado por Dios se encuentra en Números 16:41. Aunque Israel había
presenciado lo sucedido a aquellos que trataron vergonzosamente al enviado de Dios, al día siguiente se atrevieron a
acusar a este mismo hombre diciéndole: "Usted ha matado a la gente de l Señor" y así se pusieron del lado de los
rebeldes que habían muerto bajo la mano de Dios. No solo faltaron al respeto a Moisés sino que lo acusaron de tirano al
creer que el había sido responsable de la muerte de quienes se le oponían. Cuan equivocados estaban al respecto pues
los que habían muerto no eran "la gente del Señor". Moisés no los mató, ni era un dictador, solamente fue un instrumento
de Dios.
Esta rebelión tuvo un costo de catorce mi l setecientas vidas (versículo 49) y prueba lo aborrecible que es ante Dios faltar
al respeto y a la honra a los hombres que Él ha elegido como sus pastores.
Casi todas las dificultades de la iglesia tienen su raíz en este espíritu de rebeldía contra sus pastores. Cuando una iglesia
funciona dentro de este espíritu algo muere dentro de ella. Todo lo contrario, usted debe aceptar a su pastor como
dirigente nombrado por Dios. Si usted hace lo mandado, ayuda a fortalecer la iglesia y bendice el reino de Dios.
No es el intento dejar la impresión de que su pastor sea infalible, pero siempre será su pastor, al menos que Dios lo retire
de la congregación. Si está equivocado usted puede estar seguro que Dios se encargará de este asunto.
Nuestro pastor principal, Jesucristo, dice a aquellos que serán sus discípulos "Seguidme". La Biblia exhorta a los
creyentes a que sean:
Efesios 5:1
"Sed, pues, imitadores de Dios, como hijos amados"
Y que sigan a sus sub.-pastores,
Filipenses 3:17
"Hermanos sed imitadores de mi, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis en nosotros."
1 Corintios 11:1
"Sed imitadores de mi, así como yo de Cristo."
La palabra de Dios nos enseña a seguir, respetar, creer y trabajar con el hombre de Dios. El es un representante de
nuestro pastor celestial de quién se dice:
1 Pedro 2:21
"Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus
pisadas."
1 Tesalonicenses 1:6
"Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con
gozo del Espíritu Santo."