Sabiduría e inteligencia
nos dirijas, que nos enseñes
Iglesia de Cristo
Pastor: Pedro Carlos López.
Oración:
Gracias por la vida Señor, gracias por
la bendición de ser tus hijos, de tener
el privilegio de ser guiados por tu
presencia, por tu Espíritu Santo, por
la presencia de Yeshúa Ha Mashíaj
en nuestro corazón.
Gracias porque tu palabra declara
que como todas las cosas que
pertenecen a la vida y a la piedad,
nos han sido dadas por medio del
conocimiento de nuestro Señor
Yeshúa Ha Mashíaj por el cual
tenemos preciosas y grandísimas
promesas, y queremos tomar esas
promesas, queremos hacerlas
nuestras; Padre, queremos heredar
eso que tú has establecido y que has
dejado para tus hijos, como un
derecho que Cristo ganó y compró en
la cruz del calvario.
Te pido Padre, por cada uno de los
que aquí está, por los que vienen en
camino-; que todos podamos
unánimes, con un mismo corazón,
con una misma actitud, con un mismo
pensamiento, elevar nuestras vidas,
nuestros corazones; Señor, todo
nuestro ser hacia a ti; porque en ti
hay provisión de gracia para cada
una de nuestras necesidades, para
cada uno de los problemas Señor;
tienes provisión para todo Señor.
Tienes sabiduría, tienes inteligencia
Señor, y es por eso que a ti volvemos
nuestros ojos.
Le dijeron los apóstoles a Cristo: ¿A
quién iremos Señor? Solo tú tienes
palabras de vida eterna. Es por eso
que entramos en tu presencia Señor,
buscando que tú nos guíes, que tú
conforme a tu poder, conforme a tu
sabiduría; y que toques Padre, el
corazón de cada uno de los que aquí
estamos para que abras nuestro
entendimiento, de tal manera que
nuestros ojos sean abiertos; y
también Señor, tu palabra y tu
Espíritu se mueva con libertad, para
traernos revelación y para traer
comprensión; y que podamos vivir
con inteligencia, con sabiduría;
disfrutando de tu gracia, disfrutando
de esa paz que sobrepasa todo
entendimiento y que guarda nuestros
corazones y pensamientos en Cristo
Yahshúa. Gracias Padre. Amén.
Una de las cosas que Dios hablo para
nosotros, está en la carta del apóstol
Juan; donde nos dice: amado, yo
deseo que seas prosperado en todas
las cosas, y que tangas salud, así
como prospera tu alma.
3 Juan 1: 2
2 Amado, yo deseo que tú seas
prosperado en todas las cosas, y
que tengas salud, así como
prospera tu alma.
Es por eso que nos hemos enfocado
mucho en la salud mental, la salud
del alma; porque:
El alma tiene:
 Los pensamientos.
 La mente.
 Los sentimientos.
 Las emociones.
 La voluntad.
Conforme nosotros prosperemos en
nuestra alma, es que vamos a
prosperar en toda nuestra vida;
1
nuestra vida mental nuestra vida
emocional, en lo práctico; vamos a
ver la prosperidad y la mano de Yhwh
sobre nosotros.
Otro versículo que Dios nos ha dado:
2 Timoteo 1: 7
7 Porque no nos ha dado Dios
espíritu de cobardía, sino de
poder, de amor, y de dominio
propio.
No nos ha dado Dios espíritu de
cobardía; es decir, no es prudente, no
es sabio, ni inteligente entrar en una
actitud de miedo, de angustia.
La cobardía nos lleva a entrar en el
ciclo de darle vueltas a un problema,
a algo que nos lleva de la ansiedad a
la angustia y finalmente a la
desesperación, o al resentimiento, o a
la amargura, o al enojo, a la falta de
fe, a la falta de paz.
Pero el apóstol Pablo le dice a
Timoteo: no nos ha dado Dios espíritu
de cobardía.
¿Qué es lo que Dios ha provisto para
nosotros?
Nos ha dado espíritu de:
 Poder
 Amor
 Dominio propio.
Hemos visto que esa provisión es
para el alma.
Poder tiene que ver con:
 La voluntad.
Amor tiene que ver con:
 Corazón.
 Las emociones.
 Los sentimientos.
2
Dominio propio, la traducción de esa
palabra que está en griego tiene que
ver con una mente en equilibrio.
Dominio propio: Mente en equilibrio,
una mente en balance.
Esa es la provisión que Dios ha
hecho para cada uno de nosotros; sin
embargo, se nos olvida, nos
distraemos; y no permitimos que la
provisión que Dios tiene para
nosotros sea nuestra; no nos
apropiamos de ella. No la vemos
como algo que sea para mí.
Esto no significa que no crea que eso
está en la palabra, no significa que no
lo sé, ni tampoco significa que soy
consciente de que está ahí en la
palabra, que lo citamos una y otra
vez; también lo podemos saber de
memoria; pero no lo hago
absolutamente mío.
Como dice Santiago:
Santiago 1: 21
21Por lo cual, desechando toda
inmundicia y
abundancia de malicia, recibid
con mansedumbre la palabra
implantada, la cual puede salvar
vuestras vidas.
Recibid con mansedumbre la palabra
implantada.
Mientras la palabra no se implanta en
el corazón, cuando no es parte de ti,
que es una memoria, es algo que
está ahí nada más como información;
así no funciona; así no nos sirve.
Lamentablemente algunas personas
caemos en ese engaño de pensar de
que yo ya lo tengo, ya lo memoricé,
entonces ya es mío, que ya es parte
de mí; pero esto no es así, lo
tenemos como conocimiento, pero no
está implantado en nuestras vidas, no
lo vivimos, es así a nivel de
conciencia, pero a nivel
subconsciente, es necesario grabar
nuevas creencias. Es necesario quitar
las memorias, la información que
mayormente está grabado en
nosotros, pueden ser positivo,
pueden ser patrones de vida positiva,
pero eso solo a nivel de carne, a nivel
del mundo, conforme a la moral del
mundo; pero también pueden ser
patrones de vida negativos. Nuestra
vida funciona en base a los
programas, a los paradigmas, a los
patrones que hemos aprendido por
vivencias, por herencias familiares; es
decir, funcionamos no en base a lo
que sabemos; sino a lo que está
grabado en nuestro subconsciente, a
los patrones.
Es importante el reprogramar, es
importante el reaprender, es
importante lo que dice romanos 12:
Romanos 12: 1 – 2
Deberes cristianos
1 Así que, hermanos, os ruego
por las misericordias de Dios,
que presentéis vuestros cuerpos
en sacrificio vivo, santo,
agradable a Dios, que es vuestro
culto racional.
Pablo lo hace como un ruego para
nosotros porque él quiere lo mejor
para las ovejas, porque quiere lo
mejor para los hijos de Dios.
2 No os conforméis a este siglo,
sino transformaos por medio de
la renovación de vuestro
entendimiento, para que
comprobéis cuál sea la buena
voluntad de Dios, agradable y
perfecta.
3
No caigas en el conformismo, no
caigas en la resignación, no caigas
en el desaliento.
Al ver las cosas que nos rodean,
mucha gente se desalienta; mucha
gente se conforma, mucha gente se
resigna; y no hay peor cosa que ver,
que a un cristiano designado. Un
cristiano designado es aquél que ha
perdido el poder, y no nos ha dado
Dios espíritu de cobardía, sino de
poder; ha perdido la certeza, la
seguridad de que Dios le ama; ha
perdido también el dominio propio o
el tomar responsabilidad de sus
propios pensamientos, tomar
responsabilidad de su vida mental.
La vida es algo que nos acontece, es
algo que nos sucede, pero la
respuesta que nosotros tenemos ante
la vida no es lo que sucede a nuestro
alrededor, sino la percepción, el cómo
lo interpretas, el cómo lo digieres,
cómo lo vives, cómo lo experimentas;
porque cada situación, cada persona
lo va a vivir de una manera personal,
individual, diferente.
Dicen en el mundo: cada cabeza es
un mundo; y así, cada uno puede
tener diferentes respuestas.
¿Cuál es la actitud correcta que
debemos tener?
Dios tiene provisión de gracia para
cada momento, para cada necesidad.
Eclesiastés 7: 2
2Mejor es ir a la casa del luto que
a la casa del banquete; porque
aquello es el fin de todos los
hombres, y el que vive lo pondrá
en su corazón.
Salomón que es el que escribe el
libro de Eclesiastés nos dice por qué.
Porque la mayoría de nosotros
preferimos estar en una pachanga,
preferimos el divertirnos en una
fiesta, preferimos estar en un lugar
donde hay risa, alegría, y todo eso ;
sin embargo Salomón nos dice esto
que nos lleva a reflexionar: mejor es
ir a la casa de luto.
¿Por qué?
Nos señala el por qué:
Porque aquello es el fin de todos los
hombres.
Es decir, cuando nosotros llegamos a
un lugar, a un sepelio, a un funeral;
nos permite reflexionar sobre el ciclo
de vida de una persona; pero ese
ciclo de vida que estamos viendo
concluir ahí, a esa persona; y que
hemos dicho que es como la
graduación; es el fin de la vida, se
cierra un ciclo en el que nosotros
venimos a este mundo, venimos a la
tierra y aquí vivimos toda una gama
de experiencias, de vivencias, tanto
positivas como negativas; porque así
podemos calificar nosotros. Hay
cosas que nos hace sentir bien, otras
nos hacen sentir más o menos no tan
bien, y hay otras que nos hacen sentir
mal, esa es una realidad de la vida.
Lo siguiente que dice Salomón es
que: el que vive; es decir, los que
quedamos aquí en este mundo, lo
pondrá en su corazón.
¿Qué puedo aprender de esto?
Qué pues aprender de esta vida, la
vida de este hermano o la vida de
otros hermanos que han vivido.
¿Qué enseñanza me deja?
También, hay enseñanzas que son
positivas, pero también hay
enseñanzas que son negativas
totalmente.
4
Pablo les habla a los Corintios de lo
que vivieron sus antepasados cuando
Dios los cruzó el mar rojo, como
fueron bautizados en la nube y el
mar, y que todos comieron el mismo
alimento espiritual, de la misma
bebida; pero no todos se agradaron
de aquello que Dios les proporcionó
(maná y el agua de la roca) y
comenzaron a codiciar más y más de
lo que les ofrecía Egipto, quedando
postrados en el desierto, y Pablo nos
exhorta diciendo que todo eso
sucedió como ejemplo para nosotros.
1 Corintios 10: 6 – 7
6 Mas estas cosas sucedieron
como ejemplos para nosotros,
para que no codiciemos cosas
malas, como ellos codiciaron.
7ni seáis idólatras, como algunos
de ellos, según está escrito: Se
sentó el pueblo a comer y a
beber, y se levantó a jugar.
Hay ejemplos que son positivos,
edificantes, y hay otros que son
negativos. Pero de ambas situaciones
podemos aprender.
No se trata de hacer un juicio de las
personas; por eso nos dice Pablo: las
cosas que están escritas, lo están
para nuestro ejemplo, para que en
ellos aprendamos; para que
aprendamos de las experiencias
buenas y de las experiencias malas.
No se trata de exponer, de juzgar o
decir; porque nuestro enfoque no es
hacia la persona; sino lo que dice la
Escritura es: porque aquello es el fin
de todos los hombres; es decir: tú y
yo para allá vamos; en cualquier
instante eso mismo puede
acontecernos a nosotros. Entonces el
que vive es el que tiene que
reflexionar; el aprendizaje, la
enseñanza y la sabiduría es para los
que quedamos, los que podemos a
aprender.
No es para tener miedo, no para
entrar en pánico; sino para estar
consciente de que es todo un ciclo, y
de ese ciclo podemos aprender.
Eclesiastés 7: 3 – 4
3 Mejor es el pesar que la risa;
porque con la tristeza del rostro
se enmendará el corazón.
Dice que con la tristeza de rostro, se
enmendará el corazón; es decir, en
ese tipo de situaciones, podemos
reflexionar y darnos cuenta, cómo
estamos viviendo, qué cosas estamos
haciendo bien y qué estamos
haciendo mal, qué cosas hacemos de
las cuales no somos conscientes y
que van a generar consecuencias; así
que en el funeral nos dice Salomón,
nos permite reflexionar para
enmendar.
¿Qué es enmendar?
Corregir.
4 El corazón de los sabios está en la
casa del luto; mas el corazón de los
insensatos, en la casa en que hay
alegría.
La sabiduría si no es balaceada con
inteligencia; es decir, la sabiduría, la
revelación de Dios de nada te sirve si
no tienes la manera de estructurarla,
si no tienes claridad, si tienes
confusión en tu mente, si confusión
en tus pensamientos.
Cuando tratamos de explicar, cuando
tratamos de aconsejar; si no lo
tenemos claro nosotros mismos,
provocamos confusión; para eso se
requiere el equilibrio de
inteligencia. Por un lado la sabiduría
es la revelación; pero por el otro lado,
Dios nos tiene que dar la inteligencia
para estructurar; es decir, eso que
viene de arriba, aterrizarlo de tal
manera que yo mismo lo pueda
comprender, lo pueda entonces
articular con palabras, compartir, para
que suceda el milagro que hemos
visto cuando resucita Cristo y que va
caminando junto con los de Emaús, y
que a pesar de que tenían las
Escrituras, no habían entendido,
hasta que Cristo les abrió el
entendimiento.
¿Dónde está el entendimiento?
En el corazón.
Puedes tener la parte izquierda, la
parte derecha de tus hemisferios de
tu cerebro, que nos habla de eso, de
la sabiduría, de la inteligencia; pero
sin que intervenga el corazón, sin que
lo aterrices de una manera práctica,
porque puedo ya tenerlo como teoría;
inteligentemente poderlo compartir,
pero no baja a mi corazón; no ha
llegado a ser parte de mí y de mi
entendimiento.
Dice Santiago:
Santiago 1: 26
26 Si alguno se cree religioso
entre vosotros, y no refrena su
lengua, sino que engaña su
corazón, la religión del tal es
vana.
A veces nosotros tomamos ciertos
versículos, ciertos pasajes de la
Biblia; a veces lo tomamos como una
palabra Rhema, como algo que Dios
nos habla, como algo que Dios nos
dice y eso está bien; debemos
tomarlo; pero debemos tomarlo como
una revelación que tiene que ir
la
seguida de la inteligencia, sumando
el entendimiento. Sin estos tres
5
elementos no hay armonía, no hay
balance, no hay equilibrio.
Hechos 2: 27
27 Porque no dejarás mi alma en
el Hades,
Ni permitirás que tu Santo vea
corrupción.
Este versículo se refiere a Cristo; y se
está refiriendo a que no iba a dejar
que su cuerpo se pudriera, que
estuviera en corrupción. Pero este
versículo algunos hermanos se lo
aplican a sí mismos; dicen que Dios
no va a permitir como santo que soy,
que yo vea corrupción.
Hechos 13: 35
35Por eso dice también en otro
salmo: No permitirías que tu
Santo vea corrupción.
No hay problema si tomamos estas
citas como una palabra Rhema:
Señor, yo lo recibo, yo lo acepto.
Pero esto no es para hacer juicio,
sino que si Dios está poniendo algo
especial en su corazón, tenemos que
orar; pero no en un estado de
ansiedad, que tiene que ver con
salirse del reposo, con perder la paz.
Enseguida paso a la angustia, y
después de eso paso a la
desesperación y empiezo a acercar a él, o te vas a acercar con
desarrollar hábitos. No es lo mismo
tener un pensamiento; pero cuando
ese pensamiento es recurrente, se
convierte en una mentalidad, se
convierte en algo que forma parte de
mí.
Es fácil detectar un carro amarillo si
siempre piensas en un carro amarillo;
es fácil encontrar una oportunidad si
siempre piensas en una oportunidad,
es fácil encontrar cualquier razón
para estar enojados si siempre
piensas en estar enojado; te
conviertes en lo que constantemente
piensas.
Esto es lo que sucede; entras en
ansiedad, angustia, desesperación y
esto finalmente se convierte todo esto
en resentimiento.
¿Por qué se convierte en
resentimiento?
Porque empiezas a pensar: si estoy
orando y le pido a Dios, y lo pido un
infinito de veces; ¿por qué no
cambia? ¿por qué no hace? ¿por qué
no sucede?
Pasas de todo eso a un
resentimiento, a una molestia con
Dios.
Obviamente eso no es un estado
saludable para el alma.
Si tu medicina es algo que te está
dañando …¿cómo puede ser algo
que te va a sanar?
Si vemos que entras en un
resentimiento y la única medicina, el
único que te puede ayudar, el único
que te puede salvar, el único que te
puede brindar el apoyo; es contra el
cual te resientes, contra el cual te
alejas.
Ya la fastidiamos porque no te vas a
una actitud de resentimiento, con una
actitud de soberbia; como cuando nos
acercamos con alguien con quien
estamos molestos.
No podemos cerrarnos a Dios, no es
saludable, no es de beneficio para
nosotros.
Si en la Escritura me dice: no
permitirás que vea corrupción; pero
parece que lo que veo son sólo

6
problemas; esto comienza a hacer
algo negativo en el alma.
Si dice la Escritura:
Salmo 31: 15
15 En tu mano están mis tiempos;
Líbrame de la mano de mis
enemigos y de mis
perseguidores.
Lo trágico para nosotros es que
nosotros no somos los que
determinamos el tiempo de dormir.
“Señor, ya quiero estar contigo”
No es cuando tú quieres; pero
algunos hermanos entran en esta
situación pidiendo a Dios que ya se
los lleve.
Por un lado podemos ver la parte
positiva, pensando que si Dios quiere
que sigamos en este mundo es que
hay una necesidad que Dios quiere
suplir a través de tu vida.
Dice Pablo:
Filipenses 1: 21
21 Porque para mí el vivir es
Cristo, y el morir es ganancia.
22 Mas si el vivir en la carne
resulta para mí en beneficio de la
obra, no sé entonces qué
escoger.
23Porque de ambas cosas estoy
puesto en estrecho, teniendo
deseo de partir y estar con
Cristo, lo cual es muchísimo
mejor;
24pero quedar en la carne es
más necesario por causa de
vosotros.
Pablo tiene esta dualidad, diciendo: si
lo veo desde la perspectiva de Dios,
con la revelación que él había
7
recibido, cuando dice: conozco a un
hombre que fue llevado hasta el
tercer cielo, y el conoce y ha visto
esas cosas inefables que no hay
palabras para describir; obviamente
él dice: es muchísimo mejor. Si Dios
quiere que todavía estés aquí, es que
hay una necesidad que Dios quiere
suplir a través de tu vida.
Todo el que tiene un por qué,
encontrará el cómo le vamos a hacer.
Cuando entras en la desesperanza
de que ya no sabes de qué, para qué,
pierdes el sentido, pierdes el
propósito y eso puede enfermar.
40:28
Cuando vemos el libro del
apocalipsis, el apóstol Pablo solo nos
dice, es muchísimo mejor; pero no
nos describe el por qué. Sin embargo
cuando recibimos el apocalipsis, la
revelación que Dios le da al apóstol
Juan; vamos a ver, por qué es
muchísimo mejor:
Apocalipsis 21: 4
4 Enjugará Dios toda lágrima de
los ojos de ellos; y ya no habrá
muerte, ni habrá más llanto, ni
clamor, ni dolor; porque las
primeras cosas pasaron.
Pero eso es del otro lado, eso es en
esa dimensión que se llama la
eternidad; pero mientras estamos
aquí, en el tiempo y en el espacio,
mientras estás en la tierra, tienes que
ubicarte que aquí sí hay llanto, aquí sí
hay blanco y negro, sí hay luz y
oscuridad, sí hay día y noche, sí hay
frío y calor, sí hay salud, pero
también hay enfermedad, hay
sanidad pero también hay dolor; pero
lo que tienes que hacer es vivir con
sabiduría e inteligencia estando aquí.
Sí debes tener esa expectativa y esa
esperanza de que hay algo en el
futuro que será hermoso, será mejor.
Gloria a Dios por eso que está ahí,
qué bueno por la revelación Juan ya
no ve en la ciudad templos, ya no va
a hacer templos; porque el Señor
Dios Todopoderoso es el templo de
ella y el cordero. La ciudad no tiene
necesidad de sol y de luna que brillen
en ella, porque la gloria de Dios la
ilumina y el cordero es su lumbrera.
Hemos hablado de que si no hay sol,
si no hay luna, entonces ya no está el
movimiento de rotación, de traslación,
todo eso que nosotros
experimentamos en este mundo.
Estamos en otra dimensión en donde
somos iluminados, y cuando Dios nos
va dando revelación aquí
paulatinamente, vamos
experimentando lo que va a ser allá,
eso es cuando Dios nos va
iluminando en este mundo, nos va
dando destellos, nos va dando luz,
pero no luz que deslumbra, no luz
que nos encandila, como lo primero
que experimentó Juan en el capítulo
1; donde está viendo a Cristo y dice
que tenía en su diestra siete estrellas,
de su boca salía una espada aguda
de dos filos, y su rostro era como el
sol cuando resplandece en su fuerza.
Apocalipsis 1: 16 – 17
16 Tenía en su diestra siete
estrellas; de su boca salía una
espada aguda de dos filos; y su
rostro era como el sol cuando
resplandece en su fuerza.
¿Y qué pasó con Juan?
Dice: cuando le vi, caí como muerto.
17Cuando le vi, caí como muerto
a sus pies. Y él puso su diestra
8
sobre mí, diciéndome: No temas;
yo soy el primero y el último;
Hermoso es que Dios tiene
misericordia den nosotros y nos va
iluminando, no va deslumbrando.
Ser deslumbrado no es siempre lo
mejor.
Juan cayó como muerto.
Nosotros debemos tener la sabiduría
para no deslumbrar a la gente con
tanto conocimiento, con tanto que
tenemos y queremos que a la gente
le quepa en su entendimiento.
Cuando en la gente entra el temor o
la confusión, se bloquea porque ya no
piensa con claridad, no hay la paz
que se debe tener.
Cuando dice Juan: puso su diestra,
nos recuerda lo que dijo el apóstol
Pedro: que nos pongamos bajo la
poderosa mano de Dios; es decir, esa
es la manera en que Dios nos va
dando destellos de luz, va iluminando
nuestro entendimiento, nuestro
corazón, nuestra vida; y lo hace de
una manera sensible, amable. Hay
gente que es desesperada y quisiera
que de una sola vez entendiera; pero
Cristo mismo les dijo a sus discípulos:
Hay muchas cosas que quisiera yo
compartir, pero no están listos. 46: 52
Juan 16: 12 – 13
12Aún tengo muchas cosas que
deciros, pero ahora no las podéis
sobrellevar.
13Pero cuando venga el Espíritu
de verdad. Él os guiará a toda la
verdad; porque no hablará por su
propia cuenta, sino que hablará
todo lo que oyere, y os hará
saber las cosas que habrán de
venir.
Ahí en la eternidad sigue diciendo
Juan, no habrá más maldición, y el
trono de Dios y del cordero estará en
ella…
9
Apocalipsis 22: 3 – 4
3 Y no habrá más maldición; y el
trono de Dios y del cordero
estará en ella, y sus siervos le
servirán.
4y verán su rostro, y su nombre
estará en sus frentes.
5 No habrá allí más noche; y no
tienen necesidad de luz de lámpara,
ni de luz del sol, porque Yhwh el
Señor los iluminará; y reinará por los
siglos de los siglos.
Obviamente como dice el apóstol
Pablo, es muchísimo mejor; porque si
lo comparamos con la vida aquí; la
vida aquí no es sencilla, no es fácil;
no obstante, la vida es bella.
La vida es un regalo, es un privilegio,
es una bendición. Qué hermoso
cuando podemos abrir los ojos en la
mañana y estar vivos, y decir: gracias
Dios por un nuevo día. Contrario a
otras personas que tienen una
actitud…”Aquí estoy, en este valle de
lágrimas”; no sé por qué Dios me
quiere tener aquí.
Esa actitud no es saludable, tampoco
esas palabras ni esos pensamientos.
2 Corintios 11: 23
23 ¿Son ministros de Cristo?
(Como si estuviera loco hablo) Yo
más; en trabajos más abundante;
en razones sin número; en
cárceles más; en peligros de
muerte muchas veces.
Esto dice Pablo cuando está
defendiendo su ministerio; y si
alguien tenía razones y motivos para
decir: Señor, ya llévame de aquí,
porque me está yendo como en feria,
era Pablo precisamente.
24 De los judíos cinco veces he
recibido cuarenta azotes menos
uno.
25Tres veces he sido azotado con
varas; una vez apedreado; tres
veces he padecido naufragio;
una noche y un día he estado
como náufrago en alta mar;
26en caminos muchas veces; en
peligros de ríos, peligros de
ladrones, peligros de los de mi
nación, peligros de los gentiles,
peligros en la ciudad, peligros en
el desierto, peligros en el mar,
peligros entre falsos hermanos;
27en trabajo y fatiga, en muchos
desvelos, en hambre y sed, en
muchos ayunos, en frío y en
desnudez;
28 y además de otras cosas, lo
que sobre mi se agobia cada día,
la preocupación por todas las
Iglesias.
Podríamos darle la razón a Pablo por
tantas calamidades que padecía;
pero sin embargo, a pesar de esto
dice: estoy en estrecho; no sé qué
elegir, el estar con el Señor es
muchísimo mejor, pero entiendo que
debo permanecer porque es
necesario para la edificación de la
Iglesia; no sé qué escoge.
2 Corintios 11: 29
29 ¿Quién enferma, y yo no
enfermo? ¿A quién se le hace
tropezar, y yo no me indigno?
Esto nos hace ver a un Pablo que era
humano, que aunque es apóstol, no
deja de ser hombre, no deja de
experimentar sentimientos; que dice:
me enfermo, me indigno, ¿Quién
enferma y yo no me enfermo? Me
preocupo; pero ese mismo Pablo que
10
nos dice esto es el que escribió
acerca de la salud mental; cuando
nos dice en qué cosas debemos
pensar y nos describe lo que hemos
estudiado. No significa que no es
consciente, porque ahorita está
haciendo un recuento ante los
Corintios, está defendiendo su
ministerio y está diciendo: esto es lo
que yo he vivido, no estoy frustrado,
no estoy amargado, no estoy
desesperado, no estoy en esa
situación; lo dice simplemente como
un recuento de experiencias, de
vivencias de una realidad que
tenemos aquí.
Dice la Escritura:
Romanos 14: 17
17porque el reino de Dios no es
comida ni bebida, sino justicia,
paz y gozo en el Espíritu Santo.
Relaciones
Justicia Voluntad
Paz Mente
Gozo Emociones
Estamos en el mundo, pero no somos
del mundo; puedes estar aquí, pero a
la vez tienes la bendición y el
privilegio de estar también conectado
con Dios a través de esa dimensión
que se llama el Reino de Dios. El
reino de Dios no es comida ni bebida,
no es lo material, no es lo físico, no
es lo que te rodea, no son las
circunstancias; sino son valores que
están por encima; es la:
 Justicia.
 Paz
 Gozo.
Es lo que Dios nos ha dado.
2 Timoteo 1: 7
7 Porque no nos ha dado Dios
espíritu de cobardía, sino de poder,
de amor, y de dominio propio.
Tú eliges, tienes el poder.
El poder legal.
El poder creativo.
El poder de ejecutivo (de ejecutar)
Son los poderes que Dios nos ha
dado, la capacidad que Dios nos ha
dado.
Tiene que ver con el alma. Dios
quiere que prosperes en todas las
cosas, que tengas salud, así como
prospera tu alma.
3 Juan 3: 2
2 Amado, yo deseo que tú seas
prosperado en todas las cosas, y
que tengas salud, así como
prospera tu alma.
¿Cómo está tu alma?

11
2 Pedro 2: 7 – 8
7y libró al justo Lot, abrumado
por la nefanda conducta de los
malvados.
Cuando leímos la historia de
Abraham y Lot y los conflictos;
cuando Abraham le dice a Lot: elige y
aquél elige lo más verde, lo mejor, lo
que piensa que le va a dejar más
ganancias; en lugar de honrar a la
autoridad que representa su tío
Abraham, pero esto no le interesó y
elige lo mejor; pero esto solo es la
apariencia física. Realmente nosotros
no vemos que Lot haya sido justo en
ese momento.
Pero desde la perspectiva de la
eternidad, desde la perspectiva de la
fe, desde la perspectiva de lo que
Dios hace, dice:
Libró al justo Lot…
Ahora…
Para nosotros no se trata de juzgar a
los demás hablando mal de mi
hermano; porque desde la
perspectiva de Dios, él es justo;
porque Cristo hizo que él fuera justo.
¿Qué le hizo justo?
Depositar su fe en Cristo Yahshúa.
Desde la perspectiva de Dios, Lot fue
justo, mi hermano es justo, y usted y
yo somos justo; a pesar de que le
preguntemos a alguien si aquél o este
hermano es justo, puede ser que no
sea a sí para nosotros pero para Dios
sí lo es. No hay bueno ni aun uno.
8(porque este justo, que moraba
entre ellos, afligía cada día su
alma justa, viendo y oyendo los
hechos inicuos de ellos),
Lot no solamente era justo desde el
punto de vista del espíritu; Dios es el
12
que santifica. No solamente es
santificado en su espíritu, sino
también lo está declarando justo en
su alma.
Ahora…
Justo no significa perfecto, no
significa que no tiene fallas, detalles;
todos tenemos nuestros detallitos.
¿Dónde pones tu atención?
Viendo y oyendo.
Viendo y oyendo cada día.
Todo lo que le reclamamos a Dios,
por qué Dios no me quita esto, por
qué Dios no lo cambia, por qué Dios
no me da; pero no es que Dios ponga
todo esto, sino dónde ponemos
nuestra atención.
¿Qué estás viendo y qué estás
oyendo?
Pusimos el ejemplo del apóstol Pablo;
no se trata de que ignoremos; nos
dice: he sido azotado, he estado en
las cárceles, he estado en peligros,
etc., y describe todo lo que ya leímos;
es consciente, pero no se clava en el
sufrimiento.
Por eso no es edificante que sigamos
retroalimentarnos de quejas, de
sufrimiento.
¿Dónde está tu enfoque? 1:04:27
¿Qué estás viendo?
¿En qué te estás fijando?
¿Qué estás escuchando?
Cada día su alma está afligida…
Ansiedad, angustia, desesperación, o
desesperanza; cuando pierdes la
esperanza, tiene que ver con el futuro
y todo lo ves negro.
El balance lo vemos en Pablo: para
mí es muchísimo mejor allá con el
Señor; por eso nos dice también:
Si habéis muerto con Cristo, poned la
mira en las cosas de arriba…
Colosenses 3: 1 – 3
1 Si, pues, habéis resucitado con
Cristo, buscad las cosas de
arriba, donde está Cristo sentado
a la diestra de Dios.
2 Poned la mira en las cosa de
arriba, no en las de la tierra.
3 porque habéis muerto, y
vuestra vida está escondida con
Cristo en Dios.
¿Dónde está tu vida?
Con Cristo en Dios.
¿Dónde vas a poner tus ojos?
Así que, estaba en un error, desde la
perspectiva que Dios me estaba
dando; no está diciendo que era malo
como persona, está diciendo que era
un justo; es justo por la obra de Dios,
por la obra de Cristo, por lo que Dios
hace, él te declara justo.
Pero a veces entramos en ese tipo de
pensamientos derrotistas, de enojo
contra Dios, desalentados por no
poder alcanzar aquello que estamos
esperando; afligiendo cada día mi
alma, viendo los hechos inicuos del
mundo.
Esto no significa que ignoremos lo
que está pasando en el mundo, que
no sepamos de nuestras
circunstancias y que si yo decidiera
enfocarme en eso, mi alma estaría
mortificada, mi alma estaría afligida;
entraría en ese proceso de ansiedad,
de angustia, desesperanza,
resentimiento; pero decido no
enfocarme en eso.
13
Decido cuando necesito perdonar,
perdono; cuando necesito aconsejar,
aconsejo.
Echando toda mi ansiedad…
1 Pedro 5: 7
7echando toda vuestra ansiedad
sobre él, porque él tiene cuidado
de vosotros.
Nosotros no tenemos el poder de
cambiar a nadie.
2 Crónicas 20: 6
6 y dijo: Yhwh Dios de nuestros
padres, ¿no eres tú el Dios en los
cielos, y tienes domino sobre
todos los reinos de las naciones?
¿No está en tu mano tal fuerza y
poder, que no hay quien te
resista?
Para darle una clave de lo que
podemos hacer y cómo podemos orar
con la actitud correcta.
Señor, quiero soltar esta situación…
Es algo que está sobrepasando mi
capacidad, sobrepasa mis fuerzas,
sobrepasa mi entendimiento, no lo
puedo entender, mucho menos
controlar, y admito que no está en mi
capacidad…
Cuando hablamos de los niveles de la
realidad; el nivel 1 donde está la
actitud de dominio, en este nivel es
donde se mueve el diablo: la actitud
de dominio, el usarlos como objetos;
el de no honrar a las personas, verlos
como cosas.
Josafat está diciendo: Señor, en
nosotros no hay fuerza, no hay
capacidad porque aquellos son
muchos…
De la misma manera a veces
nosotros vemos cosas que son del
diablo literalmente, que es maldad
pura y que el diablo se mueve en ese
nivel y que está usando toda su
fuerza; pero yo no lo puedo enfrentar
en este mismo nivel; tengo que
elevarme en el nivel del respeto y la
colaboración en donde somos
colaboradores de Dios, en donde no
estamos solos, en donde como
Josafat dice: no hay para que peleen
ustedes, Yhwh peleará por nosotros,
no te preocupes, no te esfuerces, no
te estreses.
Pablo nos dice:
2 Corintios 10: 3 – 5
3 Pues aunque andamos en la
carne, no militamos según la
carne;
4 porque las ramas de nuestra
milicia no son carnales, sino
poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas,
5 derribando argumentos y toda
altivez que se levanta contra el
conocimiento de Dios y llevando
cautivo todo pensamiento a la
obediencia a Cristo,
Nuestras armas no son del nivel 1;
además tenemos autoridad, llevando
cautivo todo pensamiento al señorío
de Cristo Yahshúa.
2 crónicas 20 : 19; 21
19 Y se levantaron los levitas de
los hijos de Coat y de los hijos de
Coré, para alabar a Yhwh el Dios
de Israel con fuerte y alta voz.
Hemos visto que al pensamiento no
se le ordena desde el pensamiento,
se le ordena hablando; pero también
cuando cantamos, estamos
declarando, estamos hablando,
estamos diciendo; y eso hace que
nuestro pensamiento, que nuestro
14
enfoque sea diferente al que vimos
de Lot.
¿Por qué se afligía cada día Lot?
Viendo y oyendo.
¿Qué tiene que hacer usted?
Cuidar de dónde vamos a poner
nuestros ojos, dónde vamos a poner
nuestra atención.
21 Y habiendo consejo con el
pueblo, puso a algunos que
cantasen y alabasen a Yhwh,
vestidos de ornamentos
sagrados, mientras salía la gente
armada, y que dijesen: Glorificad
a Yhwh, porque su misericordia
es para siempre.
1:21:10
Imaginémonos en las circunstancias
en las que Josafat esta diciendo:
Señor, en nosotros no hay fuerza, no
hay capacidad para enfrentar a tan
grande multitud que viene contra
nosotros.
Si nosotros nos ponemos a oír u ver
la situación del país, la situación de la
seguridad, etc., no hay capacidad
alguna en nosotros que podamos
controlas estas circunstancias, no hay
fuerzas en nosotros; pero dice; a ti
levantamos nuestros ojos.
2 crónicas 20: 12
12 ¡Oh Dios nuestro! ¿no los
juzgarás tú? Porque en nosotros
no hay fuerza contra tan grande
multitud que viene contra
nosotros; no sabemos qué hacer,
y a ti volveremos nuestros ojos.
¿A dónde tenemos que levantar
nuestros ojos?
Lot conforme a su patrón le dice
Abraham: elige, y dice que él alzó sus
ojos y miró el valle, vio hacia
Sodoma, vio hacia Gomorra, vio las
riquezas; y este fue su enfoque; y él
siguió en ese mismo enfoque. A
nosotros se nos dice:
Colosenses 3: 1 – 2
1Si, pues, habéis resucitado con
Cristo, buscad
las cosas de arriba, donde está
Cristo sentado a la diestra de
Dios.
2 Poned la mira en las cosa de
arriba, no en las de la tierra.
3 porque habéis muerto, y
vuestra vida está escondida con
Cristo en Dios.
Pongamos la mira en las cosas de
arriba donde está Cristo a la diestra
de Dios.
Señor, en mí no hay fuerza, yo no
puedo cambiar las circunstancias, no
puedo cambiar la situación, no puedo
cambiar los conflictos que vivo, con
mi familia, con mis padres, con mi
esposa, con mis hijos, no puedo
cambiar la situación que vivo en el
trabajo, no puedo cambiar a mis
superiores, a mis autoridades, no
puedo cambiar a las personas; en mí
no hay fuerza, no puedo cambiar
automáticamente la situación de
salud Señor que vivo, no puedo sanar
a mí mismo; pero recurrimos a tu
gracia Señor, recurrimos a tu gracia
Padre, a tu poder, a tu capacidad;
porque no nos ha dado Dios espíritu
de cobardía, sino de poder, amor y
dominio propio; así que Señor, tú
conoces la situación, la enfermedad,
los problemas con mis hijos, tú sabes
todo de mí Señor; te entrego todas
mis angustias; todas mis
incapacidades Señor; te entrego los
15
problemas que tienen mis hijos por la
falta de amor entre ellos que tal vez
yo haya sembrado en su corazón; te
entrego los problemas que están
viviendo mis hijos, la falta de trabajo,
la falta de responsabilidad, la falta de
interés a Ti Señor, el desorden en
que viven; te entrego todas las
enfermedades que me aquejan a mí a
mi esposa, a mis hijos, a mi tía, a mis
hermanos en sangre; te entrego mi
incapacidad de ser creativo y pensar
en qué otro camino puedo serle útil a
mi familia para traer provisión que
venga de ti Señor; te entrego la
incapacidad de entender lo que mis
autoridades hace para bien del país y
que me afectan; entrego el miedo que
siento por que me amenacen par no
dejarme trabajar, dejando de hacer lo
que se hacer, te entrego todo de mí
Señor, porque tú sí me conoces y
sabes cuáles son mis virtudes, mis
capacidades que aunque yo no me
dé cuenta, tú sí conoces, te entrego
todos mis errores, las malas palabras,
los malos pasos que doy
constantemente; no me permitas
dejar de tener gratitud a Ti Señor,
pues todo lo he podido gracias a tu
misericordia y tu gracia Señor, no me
permitas Señor agradecer por cada
día que vivo, pues tus misericordias
también me cubren en los nuevos
días así como también tu bendición.
Señor, yo no puedo cambiar ni a mi
esposa, ni a mis hijos, ni siquiera a mí
mismo, pero tú sí puedes hacerlo; no
me dejes juzgar a nadie, porque eso
no me pertenece, y si cambiara mi
manera de vivir, te pido que sea
como tú quieres y de acuerdo a tu
misericordia, concédeme las
peticiones que te pido para así
también bendecir a los que me
rodean, empezando a mi casa, a mis
hijos, a mis hermanos, a mi tía, a la
familia de mi esposa. Yo no puedo
cambiar nada Señor, eres tú el que lo
puede hacer. Gracias Señor, gracias
Padre Eterno. Gracias por tu
misericordia que es para siempre,
gracias por tu bendición diaria, por la
provisión diaria que nunca nos ha
faltado, a pesar de mí, siempre te has
mantenido fiel a tu palabra, a tu amor
con que nos amas. Gracias Yhwh.
Amén.

16