Recuerdo un episodio de los Simpson, donde Lisa Simpson (la cual es muy
ambientalista) protestaba por el “fracking”, y sí el señor Burns está metido
en la controversia, era el que efectivamente estaba buscando diversificar sus inversiones. Del tubo de la cocina de la casa salía agua incendiada. El “Fracking” es una técnica aplicada a la extracción de gas. El proceso consiste en la inyección a gran presión de agua, arena y químicos en reservas subterráneas, para fracturar las rocas y liberar así gas.
Dentro de las ventajas que ofrece en un país es de garantizarle la
independencia energética de los principales productores de petróleo y gas. Los gobiernos interesados dicen que el buen uso del fracking minimizaría el impacto ambiental que se puede producir, realizando estudios del terreno y de la maquinaria antes de comenzar la extracción y mientras el proceso tiene lugar.
En contra encontramos argumentos sobre todo ecologistas y ambientalistas.
Diferentes organizaciones defienden que esta técnica tiene serias consecuencias para la salud y para el medio ambiente. El mayor riego está en los aditivos y componentes químicos que se añaden al agua y en el mismo gas natural. Este riesgo existe debido a que durante el proceso, el agua utilizada con sus aditivos y el gas mismo se pueden filtrar a las reservas de agua y acuíferos, causando impacto tanto a los humanos que dispones de las instalaciones como al ecosistema del acuífero. Además debido al suministro de presión hacia las diferentes partes de la corteza terrestre, la posibilidad de sismos parece ser un factor indirecto más con la presencia de fallas superficiales en los terrenos donde se hace fracking. Las fracturas con el tiempo debilitan las fallas cercanas y esto podría desencadenar sismos moderados. Los Estados Unidos es el pionero en el desarrollo del fracking. Desde 1998 los yacimientos de fracking no convencionales se expandieron, hubo tanto inversión que para 2013 ya había superado a Arabia Saudita y Rusia como productor de petróleo y gas. Por lo tanto es en territorio estadounidense donde se ha desarrollado con más auge el tema de la legalización así como la exploctación del gas. Para el caso de Costa Rica, se declaró la moratoria en la explotación de todos los hidrocarburos en territorio continental y marino hasta el año 2050 mediante el decreto del presidente de la República y el Ministerio de Ambiente y Energía. Ese mismo lanzó su política para suprimir los combustibles fósiles en el año 2050.
Desde mi punto de vista mantendría una posición en contra, por su alto
riesgo de contaminación de acuíferos con los fluidos de fracturación y con el propio gas de la roca. Existe también el riesgo de que un pozo se conecte con otro antiguo mal sellado y que el gas se filtre a un acuífero o a la superficie, terminando incendiándose el agua como en el capítulo de los Simpson. Además el gas está formado en gran parte por metano, que es un gas de efecto invernadero más potente que el dióxido de carbono. Cualquier escape en fase de perforación, fracturación o producción es más nocivo que los gases que se generan después en su combustión