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ETICA DEL EMPRESARIO EN INGENIERÍA TOPOGRÁFICA

PRESENTADO POR:
Brayan Andres Gualteros Duarte
Código:20191732013

ING. Ivan Reyes

UNIVERSIDAD DISTRITAL FRANCISCO JOSÉ DE CALDAS


FACULTAD DE MEDIO AMBIENTE Y RECURSOS NATURALES
ETICA PROFESIONAL
INGENIERIA TOPOGRAFICA
TABLA DE CONTENIDO

TABLA DE CONTENIDO 1
INTRODUCCIÓN 1
INSPIRARSE EN LOS VALORES FUNCIONALES DEL DESARROLLO 2
ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD. 3
a) En lo concerniente a la función empresarial. 3
b) En lo concerniente a las relaciones del empresario con los colaboradores. 3
c) En lo concerniente al trabajo y al consumo. 4
ÉTICA DE LA /SOLIDARIDAD 5
CONCLUSIONES 6

INTRODUCCIÓN

Toda reflexión moral sobre hechos cambiantes presenta un margen de relatividad


por estar vinculada a las características específicas del momento histórico en el que
tienen lugar los hechos.

En el momento actual toda comunidad define sus propias modalidades de


producción y de intercambio a fin de sobrevivir y mejorar sus condiciones de vida.
Este principio, se un contenido ético, encontrará una realización concreta tanto más
amplia cuanto más eficiente sea la solución del problema de la producción y el
intercambio. Esto significa que el progreso humano está vinculado al desarrollo
económico, aunque el solo desarrollo económico no pueda identificarse con el
progreso humano en este caso enfocado hacia la ingeniería topográfica.

INSPIRARSE EN LOS VALORES FUNCIONALES DEL DESARROLLO

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El empresario tiene la responsabilidad moral y el papel social de volver su empresa
más productiva, eficiente y eficaces. Al desempeñar este papel, el empresario
puede producir desarrollo, contribuir al progreso humano; pero esto dependerá de la
ética que inspiran sus propios comportamientos.
En cuanto agente de desarrollo el empresario desarrolla su papel cuando en la
empresa la relación entre sus empleados como lo son gente de campo y gente en
oficina y recursos producidos es positiva en sus entregas respectivas. A esta
diferencia se le da el nombre de beneficio, y tiene lugar en el ámbito laboral, es
decir, como consecuencia de la cantidad de los bienes que los sujetos están
dispuestos a ceder con el fin de asegurarse una entrega en nuestro caso buenos
productos como excelentes datos tomados, entrega de planos e informes. En este
sentido el beneficio es la eficiencia de la empresa y personal en un medio para su
expansión. Una empresa que no produzca beneficios está en contradicción con su
objetivo, por cuanto consume más de lo que produce. Semejante situación
contraviene a las referencias éticas mínimas de un empresario y puede
considerarse inmoral, por cuanto que, sin beneficios, la empresa no sólo está
destinada a desaparecer, sino que empobrece a la colectividad en su totalidad al
sustraer recursos para inversiones más productivas que mejoren las condiciones de
sus empleados.

Los beneficios de la empresa moderna se diferencian de los obtenidos en las formas


de producción anteriores por ir unidos al crecimiento de los recursos y no a la
apropiación de sus recursos. En ausencia del desarrollo, los beneficios se obtienen
de manera autoritaria o incluso por medio del robo, dando lugar a la explotación del
hombre con jornadas continuas de trabajo y desgaste de sus empleados.

Por consiguiente, todo empresario tiene el deber ético de inspirarse en los valores
del desarrollo: eficiencia, eficacia, productividad. En esto consiste también la base
mínima de su responsabilidad para con la sociedad.

Obviamente, los valores funcionales típicos del desarrollo económico son


compatibles con los valores universales (justicia, libertad, solidaridad, etc.), en los
que también pueden inspirarse los empresarios dentro de la autonomía de su
función y de la libertad de su conciencia.

A la vez que implica la superación de la economía de subsistencia y de miseria, el


desarrollo económico plantea también a la reflexión moral interrogantes inéditos a
los que es urgente hacer frente. Las dificultades críticas constituyen otros tantos
problemas abiertos.

ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD.

La primera gran esfera ética en la que se manifiestan fuertes exigencias de reflexión


es la de la responsabilidad. En un contexto de desarrollo, ésta concierne

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principalmente a los comportamientos inherentes a la función empresarial (a y b), a
la laboral y a la de consumo (c).

a) En lo concerniente a la función empresarial.


Se entiende que es un sentido muy amplio. La creación de empresas y de
asociaciones con el objetivo de satisfacer esos intereses constituye una clara
responsabilidad social; de que se asuman medidas en esta dirección depende, en
efecto, la solución de la mayor parte de los problemas individuales y sociales que se
presentan en una realidad abierta y compleja. Tales iniciativas son como las obras
de infraestructura que se generan para la mejora de la sociedad que es donde
nosotros como ingenieros hacemos parte.

Existe, pues, una doble vertiente de lo empresarial y de la responsabilidad unidas en


su ejercicio: la económica y la social.

Lo empresarial en sentido amplio se puede considerar una función social, puesto


que tiene por finalidad la satisfacción de necesidades propias de cierta zona o
comunidad de personas. Existe, pues, una esfera específica de responsabilidad en
la individuación de las necesidades a las que dirigir la propia iniciativa . Y es
totalmente evidente a este respecto que existen innumerables posibilidades de
elección en las iniciativas empresariales (desde la construcción de un hospital
privado, destrucción de la reserva van der hammen o una vía en mal estado), y no
todas obviamente son compatibles con un planteamiento ético, en el sentido de que
no es moralmente lícita la producción de cualquier cosa (a este respecto se está
prestando atención cada vez mayor al impacto medioambiental de las iniciativas
empresariales y a los problemas relacionados con la contaminación.

Por otro lado, a la hora de juzgar la calidad del desarrollo promovido por la iniciativa
empresarial, parece un deber ético atender a indicadores de desarrollo económico
(productividad del trabajo), indicadores de bienestar social (ocupación, nivel de los
precios) e indicadores de calidad de la vida (seguridad social, instrucción, sanidad).

La responsabilidad social del empresario resulta evidente en este campo, como


resulta evidente la escasez de normas éticas consolidadas en estos temas.

b) En lo concerniente a las relaciones del empresario con los colaboradores.


Esta esfera de responsabilidad concierne tanto a la incidencia que tienen en la vida
de los trabajadores las grandes opciones estratégicas y de gestión como las
condiciones de organización del trabajo. Desde este último punto de vista la
situación actual ofrece perspectivas muy estimulantes y características,
profundamente diferentes de las del pasado.como elegir bueno lideres de trabajo
como en campo como en oficina para que le ayuden al empresario con el trato de la
gente y la elaboración de el producto a entregar

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La gran flexibilidad de organización y el ahorro de trabajo reiterativo y fatigoso que
permiten las nuevas tecnologías aumentan enormemente el grado de libertad en la
organización del trabajo y hacen más accesible el objetivo de la plena valoración de
las cualidades personales de cada uno.

En una sociedad cambiante y en una empresa que cambia con ella, esta
responsabilidad es continua. Por esto engloba también, al menos en el ámbito
profesional, la responsabilidad de enseñar a los colaboradores a cambiar y cómo
cambiar en una verdadera relación interpersonales.

En definitiva, en una sociedad avanzada y compleja existe un espacio muy amplio


de discreción, organización y gestión de cualquier iniciativa. Dentro de ese espacio,
las opciones cantidad y calidad; pero dicho ejercicio no está asistido por un
magisterio ético y sin embargo, la particular importancia del papel del empresario
como persona que asume iniciativas en orden a la solución de problemas colectivos
estaría demandando la elaboración de unos principios ante sociedad.

Si la capacidad de innovación, la eficiencia y la profesionalidad de cada persona en


este caso ingeniero con las se mueve en el propio espacio discrecional están
animadas por el valor social y por la referencia a los principios y valores de la
persona, y orientadas a su vez a objetivos, pueden dar vida a una forma inteligente,
es decir, al desarrollo concreto de proyectos que representen un paso adelante, por
pequeño que sea, en el progreso de la sociedad.

c) En lo concerniente al trabajo y al consumo.


Paralela a la problemática ética del empresario, en cuanto a los efectos concretos
de su iniciativa, existe una problemática escasamente explorada, concerniente al
trabajo y al consumo.

La reflexión ética ha resaltado con toda justicia los problemas relacionados con el
carácter subjetivo y personal del trabajo y con la dignidad del trabajador, mientras
que ha dejado en la sombra los problemas vinculados a la relación existente entre
trabajo humano y producción que esta genera. Se trata de explorar las dimensiones
nuevas que asume el tema de la dignidad humana del trabajador en orden a su
responsabilidad como productor. Al hacer esto hay que tener presente que esta
responsabilidad va mucho más allá del respeto a los derechos y deberes, para
adquirir un significado social mediante la aportación de la productividad del
trabajador al desarrollo no sólo de la empresa, sino de la sociedad también.

Responsabilidades y problemas éticos análogos se encuentran en la esfera de los


comportamientos de consumo. Junto a las conocidas distorsiones (consumismo)
hay que profundizar en el significado moral de la libertad de definir la propia "ficha
de los consumos" (como en nuestra vida laboral, que agentes externos nos
proponen hacer cosas indebidas por cuestiones de dinero tal vez por el bien de una

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o dos personas por reducir costos y ganar más. Esto afectará a la sociedad donde
se esté elaborando el proyecto destinado y no será ético para nosotros como
profesionales).

ÉTICA DE LA /SOLIDARIDAD

La solidaridad guarda relación con los problemas implicados en los mecanismos de


producción. También la reflexión debería encaminarse a recoger los aspectos
positivos implicados en el desarrollo económico creado por la capacidad
empresarial.

En las sociedades con economía de mercado la organización social prevé que el


sujeto que tiene la responsabilidad del problema productivo sea la empresa, y quien
la responsabilidad de la distribución sea el Estado, al menos tocante a hacer
efectivas unas condiciones mínimas de solidaridad.

En este campo el empresario tiene al menos dos funciones, y por consiguiente dos
obligaciones de responsabilidad diferentes. En cuanto gestor de la empresa tiene la
responsabilidad y el deber moral de no malgastar los recursos que utiliza y por
consiguiente de perseguir la máxima eficiencia y rentabilidad para la empresa y sus
trabajadores, enseñando a sus colaboradores todo lo necesario para conseguir
estos objetivos. En cuanto a la ciudadanía tiene la responsabilidad de pagar los
impuestos, es decir, de contribuir a financiar las transferencias necesarias para
hacer efectiva la solidaridad social y llevar a cabo la infraestructura que necesita la
sociedad para su mejora.

A la inversa, es necesario señalar las problemáticas éticas relacionadas con el gasto


social del Estado. En este campo se impone la convicción de que la solidaridad se
mide también en términos de eficiencia, que quiere decir que todo derroche de
recursos a alguien que tiene necesidad de solidaridades primarias: como malos
gastos en material o reducciones de salarios, va a conllevar de que la obra a realizar
no evolucione satisfactoriamente o por cuestiones de retrasos por fallas por lo
anteriormente nombrado o el personal a cumplir la labor no se va a sentir motivado
a realizar por los bajos precios a los que contrata, esto es no tener una ética
solidaria hacia sus compañeros y hacia su profesión.

5
CONCLUSIONES

En lo nombrado en la función empresarial se puede decir que la creación de


empresas en el gremio de la construcción que es donde nosotros nos enfocamos el
objetivo es satisfacer los intereses del contratante o de una comunidad con una
clara responsabilidad social, ya que se asuman medidas y decisiones en l ingeniería
que pueden afectar la vida de muchas personas.

También nos pudimos dar cuenta que la responsabilidad social del empresario es
muy importante y resulta evidente en nuestro campo, ya que la motivación que
genera el empresario hacia su grupo de trabajo en la labor que realizamos se va a
ver reflejada en los productos a entregar hacia la sociedad ya que ellos son los que
disponen de nuestro producto terminado como información cartográfica o de
infraestructura .

Por consiguiente, todo empresario tiene el deber ético de inspirarse en los valores
del desarrollo: eficiencia, eficacia, productividad.

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