Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
INTRODUCCION:
El empleo de esta técnica en los Vacunos proporciona una serie de ventajas desde el
punto de vista zootécnico, económico y sanitario.
A pesar de las ventajas que se pueden lograr con el uso de la inseminación artificial, si
esta técnica no se aplica correctamente, se presentan un sinnúmero de inconvenientes o
limitaciones. En este sentido, el empleo de reproductores de escaso valor genético puede
ocasionar consecuencias catastróficas en la cría del ganado, por lo tanto, en los centros de
inseminación artificial solamente deben utilizarse los reproductores cuyo potencial
genético haya sido estimado; por otra parte, su uso irracional puede causar problemas de
consaguinidad y al mismo tiempo ser el foco a partir del cual se propagan enfermedades
venéreas y defectos hereditarios.
II. OBJETIVOS:
3.1. DEFINICIÓN:
La inseminación artificial es el
método de reproducción en el cual el
hombre ha sustituido el apareamiento
natural entre el macho y la hembra.
Para poder realizar dicha técnica se
debe extraer semen al macho, diluirlo
y conservarlo, para luego, mediante
una técnica e instrumental adecuado
depositarlo en el lugar y momento
preciso del aparato reproductor de la
hembra con el fin de fecundarla.
Diagrama de la
inseminación artificial de una vaca
Entre las recomendaciones que se pueden hacer para una mejor detección del celo
tenemos las siguientes:
En lo posible debe tenerse un sitio apropiado para la observación del celo, por
ejemplo, realizarla en los lugares donde los animales tienen a disposición sal
y suplementos minerales.
Observar el celo preferiblemente tres veces al día, las mejores horas son
durante el ordeño de la mañana, de 7 a 9 a.m. y en la tarde después del
ordeño, antes de enviar los animales al potrero.
Momento de la inseminación:
La vaca generalmente presenta su primer celo entre 30 y 45 días después del parto.
Sin embargo, la inseminación debe efectuarse después que sus órganos
reproductivos han regresado a su estado normal. En vacas Criollo Limoneras, la
primera inseminación después del parto, puede realizarse a partir de los 45 días; en
cambio en las razas europeas se aconseja esperar hasta los 60 días.
Las vacas que hayan tenido un parto difícil, retención de placenta, flujo de pus y
otras anormalidades deben ser examinadas por el Médico Veterinario, el cual
realizará exámenes genitales periódicos e indicará cuando serán inseminadas de
acuerdo al programa reproductivo de la finca.
Inseminación de novillas:
Para inseminar una novilla es necesario observar su desarrollo corporal, más que la
edad. En el ganado lechero de razas grandes (Holstein y Pardo Suizo), el peso ideal
para inseminar una novilla es de 330 a 350 kg. En el ganado limonero, las novillas
se inseminan a partir de los 280 kg.
Una vez que se ha identificado la vaca que está en celo y no se encuentra ninguna
anomalía, se procede a la inseminación, para lo cual se sujeta la hembra y se procede
a limpiar la vulva con toallas de papel desechable. Luego se descongela la pajuela en
el termo descongelante, cuya temperatura debe ser de 35 a 37°C. Una vez que se
descongela la pajuela en un tiempo de 20 segundos, debe usarse inmediatamente,
montándose en la
pistolela. Posteriormente
el técnico se coloca el
guante en la mano y
efectúa la inseminación.
Registro
reproductivo: Para desarrollar un programa de inseminación artificial, deben
establecerse adecuados registros y controles. Existen diferentes tipos de registro,
fundamentalmente deben contener los siguientes aspectos: control de celos y
servicios, control de preñez, control de gestación y parto, y el control de
alteraciones ginecológicas y tratamientos.
Termo descongelante.
Tijeras corta-pajuelas.
Cepillo para el aseo del animal.
Guantes desechables.
División apropiada de potreros que permita tener una adecuada subdivisión del
rebaño en: vacas preñadas, vacas lactantes, vacas no lactantes, vacías y novillas
de reemplazo.
Personal capacitado para todas las labores que el programa requiere, tales como:
prácticos inseminadores, obreros adiestrados en la observación y detección del
celo. Este personal debe ser supervisado por el Médico Veterinario, quien
planifica y coordina el programa de inseminación artificial.
Una de las desventajas es que puede requerir un nivel de manejo más alto que en
monta natural. Por ejemplo, en la inseminación artificial existe mayor oportunidad
de que ocurran errores humanos que con la monta natural.
La inseminación debe hacerse correctamente y en el momento óptimo. Para obtener
una alta tasa de concepción y camadas numerosas, la detección del estro (chequeo
del celo) debe ser hecha cuidadosamente y sin fallas
El estro (celo) es más fácil de detectar en cerdas que en gorrinas y al igual que
la monta natural, la fertilidad es mejor en las primeras
Para lograr buenos resultados, las gorrinas deben haber manifestado celo y
tener al menos 7 meses de edad, 125-130 Kg. de peso y doble inmunización
contra parvo virus y leptospirosis.
3. Detección de celo:
En las marranas, el celo se presenta con una periodicidad de 19 a 21 días y tiene una
duración de dos a tres días.
Los síntomas visibles de la hembra en celo son los siguientes: excitación, emisión de
gruñidos característicos, tumefacción y enrojecimiento de la vulva, disminución del
apetito, cambio de comportamiento hacia otras hembras (tendencia a montarse entre
ellas) y búsqueda del macho e inmovilidad ante su presencia. Precisamente este
último síntoma es el que permite determinar con exactitud el momento más oportuno
para realizar el servicio ya que coincide con la aceptación del macho. Se comprueba
ejerciendo presión con ambas manos sobre el lomo de la cerda ante la presencia del
padrillo.
En las cerdas, la capacidad fisiológica para reproducirse (pubertad) aparece entre los
4 y 5 meses de edad; sin embargo al no haber aún completado su desarrollo
anatómico, no están suficientemente preparados para afrontar una concepción
prematura.
La vida reproductiva de las futuras madres debe iniciarse a partir de los 7 u 8 meses
de edad y con un peso vivo de alrededor de 130-135 kg.
5. Técnica de siembra
La misma puede ser realizada por el productor o médico veterinario. Por cada
servicio se efectúan no menos de 2 siembras. Por lo tanto, se manejarán dos dosis
inseminantes por hembra.
Dependiendo del
tipo de envase
(frasco, sachet,
tubo), cada dosis
inseminante
contendrá entre 80
y 100 ml con un
número mínimo de
espermatozoides de
3.000.000.000. Las
mismas deben ser
conservadas a 15ºC y al abrigo de la luz.
Recomendaciones:
IV. CONCLUCION:
V. BIBLIOGRAFIA:
www.ceniap.gov.ve/publica/divulga/fd17/texto/uso.htm
www.inia.org.uy/prado/2004/inseminacionartificial.htm
www.inta.gov.ar/pergamino/ investiga/grupos/porcinos/reprod.htm
www.puc.cl/sw_educ/prodanim/caracter/fi8.htm
BATH Donald L. (1987) Ganado Lechero. Editorial Interamericana. México.
México.
CEPAC- Centro de Producción Audiovisual para la Capacitación (1978)
Curso de Manejo de Ganado Lechero. Lima. Perú