¿Por qué el individualismo es un egoísmo?

El objetivo principal de este texto es construir la base fundamental para comprender y

practicar la filosofía de Nietzsche, entendiéndolo desde un punto de vista individualista, que

busca liberar al individuo de las normas y valores impuestos por el rebaño que compone la

sociedad.

¿Entonces que papel tiene el egoísmo? Entendiendo el egoísmo como una forma de exaltar

los valores propios por encima de los colectivos, siendo así el egoísmo una forma autónoma que

posee el individuo para alcanzar la libertad.

Ahora bien, Nietzsche propone una demolición de los antiguos valores por los cuales se rige

la sociedad, de acuerdo con esto, los valores fomentan y restringen a los individuos a aceptar

situaciones como la servidumbre, la pobreza y la enfermedad; disfrazándolos bajo la promesa de

que en una próxima vida serán recompensados por los martirios sufridos en esta, promulgando

así una vida débil y una moral mansa.

Históricamente se puede observar la inmensa influencia que han tenido las religiones

judeocristianas en el desarrollo y establecimiento de los valores sociales dominantes, como

resultado, el egoísmo ha tomado una connotación negativa, esto se debe a que el hombre debe

pensarse primeramente como un componente de la sociedad, poniendo el bienestar común por

encima de los intereses individuales.

Hay una razón por la cual no le damos la importancia merecida a nuestros propios intereses;

como hombres miserables, la única manera que tenemos de aceptar nuestras dolencias es seguir

la conducta del rebaño; así la pobreza, la enfermedad, etc… no solo me acontecen a mi, sino
también a mi prójimo, dándole pie a la religión para normalizar esta negación de la

individualidad. De esta manera, la autonomía absoluta no se puede pensar en sociedad.

Cuando Nietzsche menciona las tres transformaciones del espíritu hace referencia a como un

individuo deja de estar sometido por los valores impuestos por el rebaño, rebelándose contra

estos y en ultimas creando y viviendo bajo sus propios valores. En consecuencia, en un primer

momento los hombres son como los camellos, serviciales y cargando en sus espaldas el peso de

los valores impuestos, negando así mismo, su cuerpo y su espíritu, ya que, al tener esa carga tan

pesada en su cuerpo, esta demostrando que es inferior y servil, que esta conforme con las

condiciones de vida que se le asignaron, así la humillación toma un papel principal en como se

imponen estos valores.

Al momento en que se libera de esta carga tan pesada, empieza a desarrollar autonomía y

egoísmo, convirtiéndose en un león, caracterizado por su instinto de dominación y rebelión, que

se enfrenta al ‘’tu debes’’ impuesto socialmente con el ‘’Yo quiero’’; al centrarse solamente en

esto deja de lado la Laborde crear nuevos valores por los cuales regirse, obtuvo la libertad, pero

no la libertad de creación.

Por ultimo se convierte en niño, una representación del individualismo, porque se encarga de

crear cosas para si mismo, no esta permeado por un sistema de valores impuesto, es como un

lienzo en blanco que no categoriza las cosas como buenas ni malas, el niño juega y conoce por

sus propios intereses, juega a ser el mismo Dios. La conquista de la individualidad se convierte

en un valor ideal para el acceso a la felicidad, como resultado su voluntad es la que lo lleva a

elegir sus propias acciones.

El fin ultimo del hombre es obtener la felicidad, afirmando su existencia, así creando su

propia moral a través de la voluntad de poder; el individuo toma el papel de ser su propio juez y
pone su voluntad por encima de si mismo como si de una ley se tratara. Se busca tener las

mejores condiciones de vida, el espíritu busca tener grandeza, riqueza y conocimiento, para en

algún momento ser compartido con los demás. (Zaratustra Pag 69)

No podemos ser como los hombres que descuidan su egoísmo ya que es algo que nos

corresponde cultivar, aunque históricamente su valor moral sea negativo, ha ayudado al

desempeño de cada individuo. Nietzsche hace una distinción entre dos tipos de egoísmo; uno de

ellos busca la auto superación para después retribuirla y compartir las riquezas adquiridas y los

valores cultivados con los demás; mientras que el otro busca robar todo lo que se le ofrezca,

guardándose todo para si mismo.

El individualismo no solamente se compone de egoísmo, sino también de voluptuosidad y de

deseo de dominar, entendiendo la voluptuosidad como la exaltación de los placeres, como algo

libre e inocente. El deseo de dominar, tanto a uno mismo como al mundo exterior, sin importar

los medios necesarios, es la fuerza motora, ya que el mero deseo de vivir no es suficiente. No

basta con el mero impulso de sobrevivir, porque no solo existe la necesidad fisiológica de

reproducirse, sino que también hay un deseo de superación, un individualismo que nos lleva a

dejar atrás las convencionalidades.

Cuando se habla de la importancia de crear nuevos valores, es necesario ejercer nuestra

voluntad, y el arte como la mayor expresión de dicha voluntad de poder. El arte es la fuerza

creadora de la vida.

Cuando el hombre se libera de los valores tradicionales, cultiva el egoísmo, asi la creación

espiritualiza los sentidos, esto se puede observar en los artistas, quienes a través de la danza, el

juego, la música y la actividad cómica manifiestan sus ideas e ideales. La ligereza que manejan
les otorga el poder de alzarse por encima de los demás y tomar una posición de dominancia,

frente a esta visión sirve como un puente para instaurar nuevos valores.

El arte no es el arte por el arte, tiene un fin en si mismo, es hecho por los hombres, excita a la

voluntad para que este en constante aumento, por tanto podemos decir que el arte es el objeto del

individualismo, la propuesta artística requiere de un proceso de significación, hay una superación

de la realidad y de la apariencia.