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EL DOLOR QUE SE SIENTE AL DEJAR TODO ATRÁS

“Aquí estoy yo empezando de cero en un país desconocido y lejos de casa. Mi


vida dio un giro de 360 grados, todo cambio y les puedo confesar que me sentí
por un momento perdida y sin fuerzas para seguir!! “

“Podemos encontrar nuevas oportunidades en un país desconocido… “


Perdida esa era la palabra que daba vueltas en mi cabeza, me pregunte a mí
misma ¿en que momento mi vida cambio?, ahora que hago, que será de mis hijos
al dejarlos a la “deriva” sentía rabia y al mismo tiempo tristeza del no poder hacer
nada mi país estaba vuelto “una mierda” en ese momento solo quería cerrar mis
ojos y poder despertar y decir todo fue pesadilla. Pero en ese instante “mi madre
dice hija mía esa es la realidad que estamos viviendo hoy, solo nos queda seguir
adelante “ahí sentí que mi vida se derrumbaba en mil pedazos, al ver la cara de
mi madre e hijos de angustia, sus lágrimas corrían por sus mejillas y orando le
pedía a Dios ayúdanos a hacer fuertes. En ese instante salí de casa y me dije a mi
misma ¿es justo que estemos pasando por esto, es justo que mi país se quede sin
comida, sin salud, sin un empleo digno para poder comer un plato de comida?…
ahí entendí que mi hermosa Venezuela ya no era la de antes, todo era un “caos”.
Al ver todo lo que estaba pasando tuve que tomar la decisión que nunca imagine
tomar en mi vida partir de casa. Dejar todo lo que algún día construí con amor y
dedicación, y buscar nuevos rumbos, nuevas oportunidades de vida para mi
familia.
Mi madre la señora Mireya Josefina De Tobila, una mujer que fue madre y padre al
mismo tiempo de dos hijos, pero preguntaran ustedes ¿cómo se llama mi padre
porque digo que mi madre hizo el papel de los dos?… les explicare un poco aquel
señor, o desconocido como yo le digo jamás se tomó la molestia de conocer a sus
hijos simplemente un día se marchó sin regresar y darnos la oportunidad de
conocerlo y sentir que se siente tener un padre. Por eso para mí (es aquel señor
desconocido). Me llamo Suhail Del Mar y aquí les contare un poco de mi vida nací
en el año 1980 en ciudad (Bolívar Venezuela) tome la decisión de compartir con
ustedes quien soy yo, como era mi vida en Venezuela, y como cambio de la noche
a la mañana, quizás crea que ustedes se tomaran un poco de su tiempo y leerán
mi historia y se imaginaran como fue todo, confieso que pensé muy bien antes de
sentarme en mi escritorio, tomar un lápiz y papel, y una taza de café bien caliente
y relatarles todo con, detalles.
Tengo un hermano mayor él se llama Jonathan Dalmir nos llevamos 5 años de
diferencia él tan buen hijo, hermano y amigo quien cuidaba de mi mientras
nuestra madre trabajaba para sacarnos adelante, ingrese a la escuela cuando
tenía 6 años de edad en ciudad Bolívar-Venezuela, fui una buena estudiante con
buenas calificaciones y una excelente disciplina, en el Jesús Maestro termine mi
primaria así se llamaba mi escuela en aquel tiempo yo estudiaba de 7 de la
mañana a 12 del mediodía, en las horas de la tarde, mi hermano Jonathan me
ayudaba a realizar las tareas, y después tomábamos una siesta de una hora a las
6 de la tarde íbamos al paradero de buses a esperar a mamá que llegara de su
trabajo, para ir a cenar juntos como de costumbre. La noche era mi parte favorita,
podía ver a mamá ya que no la veía en el día por su trabajo ella se despertaba a
las 4.00 de la mañana para irse para su trabajo y poder estar a las 6.00 de la tarde
ya en casa descansando, siempre llegaba, y nos servía la cena, hablábamos de
como estuvo nuestro día, y al final de la noche antes de dormir ella siempre
peinaba mi cabello y me cantaba mi canción favorita.

Cuando llegaban nuestros cumpleaños para mi hermano, y para mí era nuestros


días más favoritos, pues nuestra madre ese día nos llevaba a comer helado y
pasear por las calles de nuestra hermosa (Venezuela) y así fueron nuestros
primeros años de infancia felices porque mama siempre nos hacía reír a pesar que
ella a veces se encontraba cansada. A la edad de mis 15 años termine mis
estudios escolares con honores, mi madre se sentía orgullosa pues termine sin
problemas mis estudios, pero en ese instante puede ver su cara de preocupación.
Y le pregunte ¿mamá sucede algo, te encuentras bien? Ella respondió yo estoy
bien hija solo pienso ahora como voy hacer para poder pagarte una carrera
profesional, si con mi trabajo no la alcanza. Yo la mire a los ojos y le dije mamá
tranquila yo puedo trabajar como estilista y ahorrar para poder ayudarte a pagar
mis estudios universitarios ¿porque como estilista? Pues desde niña me gustaba
cortarle el cabello a mis muñecas, y jugar a la peluquería con ellas y desde ese
momento empecé a practicar hasta que aprendí, mi madre con sus ahorros y los
míos pudo pagarme un estudio de estilista y estar mejor preparada.

A mis 17 años de edad, conocí un chico él se llamaba Mario de la torre él fue mi


primer amor (llamémoslo así) nos enamoramos tanto que a la edad de mis 18
años nos casamos por la iglesia, pues mi madre no estaba feliz con la decisión
que yo había tomado ella me decía eres una niña aun no estas para esas cosas, y
en ese momento mi vida, cambio.
Al pasar los años todo cambio, pues mi esposo ya no era el mismo hombre que
algún día me enamoro con su forma de ser, empezaron los problemas, y cuando
hablo de problemas me refiero a maltrato físico, verbal y psicológicamente. Hay
pensé en las palabras que algún día mi madre me dijo, pero ya no podía cambiar
las cosas…. en ese instante empecé a enfermarme y con el tiempo de dos meses
me puede dar de cuenta que no estaba enferma de algo grave, si no que mi
cuerpo estaba cambiando porque me encontraba en estado de embarazo, les
confieso que sentí alegría y temor al mismo tiempo, pues era mi primera vez como
madre primeriza dentro el matrimonio con Mario tuvimos dos hijos. Pero a los 5
años de relación nos separamos pues ya no estábamos enamorados como antes.
Yo decido irme a la casa de mi madre y ella sin duda alguna me brindo su ayuda y
me dijo siempre serás bienvenida esta es tu casa. Pues ya en ese tiempo tenía
unos mejores estudios como estilista podría conseguir un trabajo y sacar a mis
hijos adelante así como un día mi madre nos sacó adelante a mi hermano y a mí.
En ese tiempo me dedique simplemente a mis hijos y mi madre después de 4 años
de separada tomo la decisión de darme la oportunidad con otro hombre con el cual
viví 14 años, quien se llamaba Emilio Santos… como describirlo a él si era un
hombre de buenos sentimientos, amoroso, respetuoso. Con el tuve 3 hermosos
hijos, el me cambio la vida para bien, un día “él me dice amor tengo un regalo para
ti cierra los ojos” emocionada y nerviosa al mismo tiempo le digo dime que es,
cuando él me dice ya puedes abrir los ojos y lo que veo es un recibo de pago y le
digo ( que es esto un chiste ) él me dice solo lee el papel, cuando yo, decido leerlo
me encuentro con una autorización por 5 años para estudiar una carrera
profesional en la universidad, yo no podría creerlo solo lo abrace muy fuerte y le
dije gracias por ser tan bueno conmigo, y el con una sonrisa en su rostro me dijo (
quiero que seas alguien en la vida, quiero que seas una profesional y salgas
adelante )

Un sueño tan anhelado por fin se hacía realidad, puede ingresar a la universidad
y estudiar una carrera profesional, en ese momento me sentía feliz porque iba a
estudiar lo que yo soñaba en la vida ser una abogada, y poder ejercer mis
estudios en mi país esa era una de mis metas, mi carrera duro 5 años… pero
cuando un sueño se terminaba de cumplir todo cambio dio un giro de 360 grados
les hablo de un cambio que jamás llegue imaginarme ¿quieren saber cuál fue ese
cambio?
Pues permítanme y les cuento lo más duro de toda mi vida, (dejar mi país,) dirán
ustedes duro ¿dejarlo porque? Cuestión de trabajo conocer culturas nuevas,
nuevos idiomas, si tenía pensado conocer otros lugares, ciudades, o países. Pero
no como una inmigrante… mi país “Venezuela” entro en una situación jamás
vista ya no había alimentos, empleos para poder sostener a una familia, el país
que algún día fue rico en oportunidades hoy en día se está quedando vacío, ¿y
saben porque? Pues yo le llamo rebeldía del gobierno venezolano… duelen las
palabras que les voy a decir “mi país está destruido” y pasaran muchos años para
que vuelva hacer ser la Venezuela que era hace 10 años atrás. Por esta situación
les digo un sueño quedo a la mitad de cumplirse. Pero sin darle importancia a mis
emociones, a mi tristeza que me estaba matando por dentro tenía que seguir
luchando pues mis esperanzas aun no estaban del todo perdidas, pues yo tenía
unos hijos y una madre que debía sacar adelanté. Pero al mismo tiempo sentía
que mis fuerzas se estaban acabando, no sabía que rumbo coger, en ese
momento recordé que tenía una amiga en Colombia, con pena me tome la
molestia de escribirle y contarle mi situación, sin duda alguna ella me dijo (las
puertas de mi casa están abiertas, cuando desees venir a Colombia )… con un
nudo en la garganta le dije gracias por brindarme una mano , para mí es muy
importante ya que no tengo a quien más pedirle una posada al llegar a un país
desconocido…!!

Y lo que nunca imagine pasar en la vida, comenzó a suceder… (Empacar mis


maletas, para partir de casa), y buscar nuevas oportunidades para sobrevivir a la
crisis que mi familia y yo estábamos pasando. Con lágrimas corriendo por mi
rostro me toco dejar todo lo que más amo “mi familia” ellos que son para mí la otra
mitad de mi alma… y bueno sin más cuentos el 19 de marzo del 2018 partí de mi
querida Venezuela, les tengo que confesar que en ese instante sentí temor, un
vacío en mi estómago con muchas ganas de despertar de esa horrible pesadilla,
pero no podía hacerlo era lo que estaba sucediendo en aquel momento. Todo
cambio sentía que esa no era mi vida, que aquella mujer desubicada no era yo,
esto parecía una historia de novela sacada de un libreto, que no tenía fin. Que
cada día las necesidades crecían mucho más. Aquel lunes 19 de marzo para mi
será una fecha inolvidable, una fecha que al recordarla solo me genera un
profundo dolor…

Luego de contarles con detalle cada momento, de mí vida tenía que seguir mi
camino y llegar donde me estaban esperando para empezar de cero, después de
un largo viaje por fin llegue a Colombia y solo podía observar cada, calle que
caminaba, cada lugar donde llegaba, ¿pero todo no era de color gris, y saben
porque? Pues aquellas personas con culturas totalmente diferentes a las mías me
brindaron su ayuda, me abrieron las puertas de su país por, un instante me puede
sentir como en casa, pero al mismo tiempo me sentía incompleta pues no tenía a
mi lado la otra mitad de mi alma como yo le suele llamar “mi familia “

Era como un sabor amargo, algo inconsolable. Que no podía cambiar, pues
imaginaba que nada de esto estaba sucediendo, y que todo muy pronto volvería a
la normalidad, pero eso sería engañarme a mí misma ya que, en, el fondo de todo
esto yo sabía que mi país no cambiaría así tan rápido, pues me atrevo a decir que
pasaran años para que vuelva hacer la Venezuela de 10 años atrás. Y en fin de
todo esto no había una sola noche que me acostara llorando, por estar tan lejos de
mis hijos que aún no podía traerlos conmigo, pues no tenía aun el dinero que
necesitaba para traerlos y estar todos juntos nuevamente.
Pues esta situación tan desagradable no la merece ningún ser humano, a
obligarse a sí mismo, abandonar todo, y empezar de nuevo en una nueva ciudad,
a construir nuevas metas, nuevos sueños, acostumbrarse a nuevas culturas…
absolutamente todo esto para mí era una locura. Pero saben algo? Yo tenía algo
muy grande dentro de mi corazón y esa era mi fe en “DIOS” pues sé que el bueno,
siempre conmigo y de estas íbamos a salir juntos.
En Colombia donde me encontraba conseguí un trabajo digno y respetuoso pues
era en un salón de belleza donde la dueña, me brindo, trabajar con ella y me dijo
estas palabras que nunca olvidare “Suhail ustedes son nuestros hermanos
venezolanos, quien necesitan una mano para salir adelante y yo con gusto le
brindare mi ayuda” y así poco a poco puede sobrevivir en un país desconocido
para mí y salir con mi familia de todo esto y aquí estoy ahora viviendo en Colombia
y al mismo tiempo ahorrando de mi sueldo para poder traer a toda mi familia… y
así seguir con nuestras vidas pero en un nuevo país, con mejores oportunidades.

CONTINUARA…

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