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“No hay puente entre la Justicia Transicional y la


Indígena”: Feliciano Valencia
 por ONIC en Comunicados Regionales  15 Agosto 2016

Por: Sonia Cifuentes / Asociación Minga.

Ad portas de que la Corte Suprema de Justicia


de na la suerte del líder nasa condenado a 18 años
de prisión por el delito de secuestro, desde su
territorio habla de los interrogantes sobre la ley que
debería aplicarse a los indígenas que se han
en lado en las Farc.

En mayo pasado, la Fiscalía y la Procuraduría


pidieron absolver a Valencia, argumentando que su caso lo debe resolver la justicia indígena.

Al líder indígena Feliciano Valencia Medina intentaron cortarle el pelo en la cárcel San Isidro de Popayán.
Cuando estuvo detenido durante dos meses, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) quiso
aplicarle la misma norma que cobija a los presos mestizos, como una forma de mantener la disciplina
carcelaria, higiene, seguridad y prevención ante una probable fuga. Pero imperó la justicia indígena, que
detuvo tal exabrupto para la cosmovisión de los nasas del norte del Cauca. No le cortaron el pelo y luego le
permitieron purgar la pena en su territorio.
El lunes pasado lo encontramos allá, en el resguardo Muchique Los Tigres, en Santander de Quilichao
(Cauca), a donde fue trasladado en noviembre de 2015. Con su cabello intacto. Indio, largo y liso. Encima un
sombrero de que y de su cuello descolgaba un collar bordado por indígenas Kamsá, que tiene la gura de
un tigre. Hoy espera la decisión de la Corte Suprema de Justicia, tras presentar un recurso de casación
luego de que el Tribunal Superior de Popayán lo condenara a 18 años de prisión.

Lo acusaron del delito de secuestro contra el cabo del Ejército Jairo Danilo Chaparral Santiago, porque el 14
de octubre de 2008 la Guardia Indígena los retuvo a él y a otros soldados que se in ltraron con armamento
en la Minga de Resistencia Social y Comunitaria que se desarrolló ese año en el resguardo La María, en
Piendamó (Cauca). El castigo fueron 20 latigazos. Y la justicia acusó a Valencia de ser el promotor de tal
juicio.

Ahora está hablando de poscon icto. En una tarima improvisada en la vereda Santa Lucía de este
resguardo, frente a más de 800 comuneros. En su discurso comenta algunas salvedades que tienen los
indígenas frente al proceso de paz entre el Gobierno y las Farc.

Con Colombia2020 habló sobre la justicia transicional que tendrán los guerrilleros de las Farc que dejarán
las armas en los próximos meses. En el norte del Cauca, donde hay más de 103.000 indígenas nasas, está
trabajando en temas de justicia indígena en el contexto de paz. Valencia dice que los indultos para los
indígenas que están en las las de la guerrilla aún no están contemplados dentro de su justicia propia.
También habla del futuro que tendrán los guerrilleros aborígenes en el movimiento social y del modelo de
justicia que proponen para no seguir chocando con la justicia ordinaria, cuando en La Habana se habla de
un tribunal especial para la paz. Este diario conoció que una comisión de La Habana viajaría al resguardo La
María, para llegar a acuerdos sobre esta materia.

Usted estuvo en una cárcel ordinaria, luego la Procuraduría y la Fiscalía pidieron su absolución, ¿Qué
mensaje le envía al país?

Situaciones así no se pueden repetir. Es un precedente muy preocupante para la construcción de paz. Se
habla de un tribunal de justicia transicional donde habrá jueces que van a de nir delitos, penas y sitios para
guerrilleros, milicianos y comandantes, pero nosotros, que hemos sido constructores de paz y nos la hemos
jugado como le consta al país, nos vemos abocados a este tipo de situaciones. Preocupante, porque ellos
transarán entre cinco y ocho años, y a mí me pesa una condena de 18 años por un delito que no cometí. Por
ejercer algo que hemos hecho milenariamente los indígenas.

¿El movimiento indígena tiene propuestas para superar choques entre la justicia propia y la ordinaria?

Tres propuestas. Una, el diseño, la construcción y la puesta en marcha de una ley de coordinación entre la
justicia indígena y la ordinaria. Segunda, que nuestra justicia pueda operar de manera e caz, rápida y
efectiva, y eso sólo se logra con recursos. Estamos pidiendo presupuesto a la nación, pero no pasa nada. Y,
tercera, tiene que haber un proceso de formación a los operarios de la justicia ordinaria, para que entiendan
nuestra lógica de hacer justicia.
Se viene la justicia transicional, un mecanismo especial que tendrá el Gobierno para juzgar a los guerrilleros
que dejen las armas. ¿Qué pasará con la justicia indígena?

Es claro ante la norma y ante nosotros que los gobernadores indígenas en este momento son nuestros
jueces naturales. Se va a poner en vigencia un Tribunal de Justicia Transicional, pero no han invitado a
nuestros jueces. Hay una jurisdicción especial de paz que va a trabajar de manera paralela a la jurisdicción
especial indígena, pero no hay un puente que transitoriamente nos ponga a conversar. Entonces se vienen
preocupaciones como estas: en el marco de ese proceso de negociación, ¿qué jurisdicción va a aplicar para
el caso de los guerrilleros, milicianos y mandos indígenas? Porque muchos viven en el territorio, están en el
territorio y seguramente se quedarán aquí. Segundo, ¿dónde van a pagar sus penas? ¿En las cárceles, en las
granjas de resocialización o en los centros de armonización? Y tercero, una vez desmovilizados los
guerrilleros, ¿se quedan con el movimiento político que se acuerde en La Habana o regresan a las
comunidades y se vinculan a la vida comunitaria?

¿Y si deciden quedarse con el movimiento político que surja del proceso de paz?

Eso no está claro y tenemos que conversarlo, porque si deciden quedarse allá, no obstante ser indígenas,
nos tocaría pensar qué pasa con sus derechos como indígenas al renunciar a nuestro proceso. Temas
como esos nos preocupan y se tienen que hablar en la jurisdicción especial de paz y en el tribunal de
justicia transicional. El problema es que si no estamos invitados, cómo ponemos esos asuntos y
elaboramos rutas para no chocar en ese ejercicio.

Hay guerrilleros indígenas que fueron condenados por la justicia propia a penas, hasta de 60 años. Según se
ha dicho, la gura del indulto y la rebaja de penas estarían contempladas en los acuerdos de La Habana.

La lógica de la justicia en Colombia es que no se actúa sobre cosa juzgada. Para el caso de los que ya han
sido juzgados por la justicia indígena, ya es cosa juzgada, eso no se puede reversar en el tribunal de justicia
transicional. La pregunta es si eso lo van a tener en cuenta, o sea, no van a meterse con los guerrilleros y
milicianos que la justicia indígena ha condenado. Si es así, los guerrilleros que ya fueron condenados por
nuestra justicia no entrarán a hacer parte del tribunal de justicia transicional.

¿Han pensado aplicar indultos en el marco de esa justicia indígena para los guerrilleros indígenas? ¿O qué
modelo aplicarían?

Hasta ahora no se ha considerado el tema de los indultos. Lo que está considerado es una revisión de los
procesos de los que están en las cárceles del país, para ponerlos a consideración nuevamente de la
asamblea, no para indultarlos, sino para mirar la posibilidad de una rebaja de penas. Hasta ahí se ha
hablado, pero indultarlos no, en este momento.

Entonces, ¿El movimiento indígena cómo ve el modelo de justicia pactado en La Habana?

Nosotros no nos vamos a meter en ese asunto porque es un resultado del proceso de negociación de ellos,
Farc y Gobierno, pero sí vamos a dejar el precedente de que lo que se pacte en La Habana no entre a
suplantar los procesos que nosotros hemos construido. Por eso hay una comisión étnica en este momento
sentada en La Habana, para hacer todos esos procesos. Si al menos no se pueden reversar cosas, dejar
constancias y salvaguardas.

Pero ahí entran a chocar con la justicia transicional.

Claro, se presentaría un choque. Los que están en este momento en la cárcel de San Isidro juzgados por la
justicia indígena ya están diciendo que los cabildos los tienen que sacar, porque ellos ya quedan cobijados
con el proceso de La Habana. Nosotros decimos que ya es cosa juzgada y se quedan allí.

¿Los indígenas guerrilleros que se desmovilicen entrarían al modelo que adopte la justicia indígena?
Eso es lo que nosotros estamos pidiendo: claridad. O los acoge la justicia transicional o los entregan a la
justicia indígena. Sobre eso ni las Farc ni el Gobierno se han pronunciado. Vamos a ver qué criterios se van
a construir en la justicia transicional. Por eso estamos alegando que nuestros jueces naturales debían ser
convocados al tribunal de justicia transicional.

Fuente: El Espectador

http://www.nasaacin.org/informativo-nasaacin/3-news ash/8323-%E2%80%9Cno-hay-puente-entre-la-
justicia-transicional-y-la-ind%C3%ADgena%E2%80%9D-feliciano-valencia

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