Para los Uitoto y para muchos pueblos de la Amazonía, el Mambe, la coca, es una

ética: “la palabra correcta”, “la que aclara la palabra”. He mambeado, he meditado algunos
minutos; mambeo mientras escribo, le pido que me aclare los pensamientos, qué los
signos escritos en ese texto reflejen una intención verdadera y correcta:
Hace poco, por casualidad, me encontré a un personaje muy singular. El restaurante
al que usualmente voy a almorzar estaba repleto y cuando esto sucede me agrada com-
partir mesa. Así pues, a la mesa se sentó un muchacho delgado, de unos 20 años más o
menos. Luego de pedir, dijo sin más: “Tremendo tatuaje, hace rato que me quiero hacer
un Alex Grey.” Lo miré intrigado por unos instantes. Se refería a la copia de Godself en
mi antebrazo izquierdo. Pocas personas conocen a Grey; y quizá se conozca más de él
por su colaboración en el diseño de las caratulas de la banda Tool; pero de Grey hablaré
después...
Hablamos un rato sobre mi tatuaje y sobre los tatuajes en general, y de pronto
soltó un: “¿Ha fumado Salvia?”. Lo examiné antes de responder. Supe que no era una
persona del común, como constaté a medida que avanzó la conversación, se trataba de un
psiconauta1 . La charla no tardó en derivar hacia un compartir de nuestras experiencias
con Salvia y otras plantas y sustancias. La Salvia Divinorum es una planta usada en
rituales de sanación y adivinación en la región de Oaxaca, México, principalmente por
los indígenas mazatecos. En Colombia es completamente legal, aunque es más común
conseguirla en forma de extractos que se fuman: 3x, 5x, 10x, etc.
He fumado pocas veces Salvia, debo admitir, y lo he hecho pocas veces porque me
aterra. Si bien para cada persona es un sensación diferente, “la Salvia le da a cada uno
lo que necesita, lo que se merece”, como concluimos con Jimmy, que así se llamaba
el muchacho; para mí ha sido casi como experimentar la muerte. El lenguaje —o al
menos el español— queda corto, como con cualquier experiencia en un estado alterado
de conciencia y es poco lo que se logra recordar y reintegrar; pero para mí es algo así:
segundos después de un sólo plon, empiezas a sentir un hormigueo por todo el cuerpo
y en especial en la cara. Luego, súbitamente pierdes la conciencia de tu cuerpo y tu
mente queda vacía de recuerdos durante unos minutos(?). No sabes quiénes son tus
padres, no sabes qué acabó de pasar, no sabes dónde estás, no sabes quién eres, no
sabes ni siquiera qué eres. Tan sólo la conciencia pura frente a un frenesí de imágenes
de las que sólo recordarás un par y lo único que permanece es el sentimiento que te
genera; para unos es un júbilo incomparable, para otros, la sensación más aterradora
que hayan tenido. Finalmente, los recuerdos van volviendo como una avalancha y en
alrededor de 15 minutos nadie habrá notado que casi te come un agujero negro; o que
había una presencia maternal gigante que te tomaba de la mano mientras te decía que
no te preocuparas, que este mundo no es lo real; o que te diste cuenta que este cuerpo es
1 Persona que se sumerge voluntariamente en un estado alterado de concencia, producido a través de medita-

ción o sustancias que alteran la mente, para explorar la experiencia y existencia humana.
un ávatar, recordaste y te reuniste de nuevo con unos seres que te preguntaban cómo te
fue en la Tierra; etc.
En YouTube hay miles de videos de gente fumando Salvia, hay los que se desploman,
los que les agarra una risa incontenible, los que no les produce absolutamente nada, etc.;
le comenté esto a Jimmy. “Es que esto escarba hasta lo más profundo de la conciencia,
pero si no hay profundidad, pues...”, contestó. No repliqué; no me gusta creer que hay
unos “iluminados”, pero ahora que lo pienso, sí siento que hay algo que debe hacer clic
en la persona, algo que gracias a la planta se expande: un sentimiento, una intuición.
En mi caso, desde niño me gusta la Biología; además, cuando estudié ingeniería, me
presentaron la Teoría de Sistemas y las Ciencias de la Complejidad; creo que todo eso
fue lo que hizo clic, lo que hace clic cada vez que consumo enteógeno. En estos tres
campos, ningún proceso está aislado, Todo está en interdependencia con Todo. Ej: A
pesar de que la célula tenga su membrana, tiene una relación íntima con su medio:
es difuso establecer que el límite en que los proces vitales de la célula ocurren es la
membrana celular. Lo mismo se puede extrapolar a la economía, las ciencias sociales,
etc...La diferencia fue entonces fue pasar de la fórmula y la teoría descriptiva a sentirlo,
a vivirlo en carne propia. Sentir cómo los signos y símbolos heredados culturalmente
se deconstruían: el dinero y el juego económico; lo ridículamente cómico del poder; la
religión (que por más ateo, queda incrustada en el subconsciente); ¿Es correcto pensar
que las fronteras de tu ser las define tu piel?...en fin, éxtasiarme en el extraño milagro
que es vivir y percibir el mundo.
Vuelvo a Alex Grey, consulto su conferencia en TED Talk: Cosmic creativity — how art
evolves conciousness, allí comenta sus años de artista novato, sus años de depresión y su
experiencia con el LSD y como su propuesta estética ha ido evolucionando hasta lo que es
hoy: El arte visionario. Dos partes resuenan en mi mente: “Cada acto creativo empodera
otro acto creativo. El pintor canaliza la fuerza creativa en un artefacto y este artefacto a
su vez se convierte en una batería lista para cambiarle el canal al espectador, para darle
una nueva forma de ver el mundo” y “una vez entendemos las cosas desde una nueva
perspectiva, creamos un mundo nuevo”. Me gusta pensar que la gente que se abre a
experimentar y escuchar lo que nos dice las plantas (y hongos) está creando un mundo
nuevo. Me gusta pensar que hacen parte de una re-evolución estética, lenta y silenciosa.
Las culturas aborígenes poseían/poseen rituales que alimentan su imaginación, su
consciencia y su conexión con la Madre Tierra. La cultura occidental desechó estos
rituales; pienso que hay mucha gente allá afuera que necesita que le cambien el canal, que
reclama insconscientemente por este tipo arte. Que necesitamos (re) generar símbolos
y signos que nos hagan sentir La Tierra como un solo ser, como un solo cuerpo, como
nuestro propio Ser.

Jeison D. Pacateque S.