VISIÓN GENERAL DE ROMANOS 8:28-30

Visión teocéntrica de la salvación (Como Dios salva al hombre) resaltando las cualidades y
perfecciones divinas.
Aquí está el orden de las causas de nuestra salvación, una cadena de oro que no puede
ser rota (Rom.8:28-30).
Rom.8:28
El propósito de Dios en el plan Redentor (Este pasaje habla del propósito de Dios y
no de los hombres).
La palabra propósito está ligada a:

 Presciencia: Conocimiento anticipado-preparar de antemano

 Beneplácito de Dios: El designio de su voluntad (Ef.1:11)

Todas estas expresiones se refieren al consejo de Dios en cuanto a la obra de salvación en

Cristo (Ef.1:9; 3:11). Cristo es el centro de tal propósito, en su ejecución y cumplimiento.
La Iglesia también es parte de este propósito (Ef.1:5). Adopción conseguida a través de
Cristo (Rom.8:29) Predestinados para ser conforme a la imagen de Dios.
La Iglesia es el objeto de la predestinación y el consejo de Dios, en virtud de su unión
mística con Cristo (Ef.1:4). En virtud de la elección, Dios decreta un plan con anticipación y
además se apropia de la Iglesia (grupo de creyentes) ya antes de la fundación del mundo
(Ef.2:6).
Ahora, la cadena se inicia en la eternidad pasada….
Rom.8:29
1. “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos
conformes a la imagen de su Hijo”. Toda la raza humana merecía la destrucción, pero por
razones imperfectamente conocidas para nosotros, Dios determinó recuperar a algunos por
la regeneración y el poder de su gracia. El predestinó, o decretó antes, que ellos fueran
conformados a la imagen de su Hijo. En esta vida ellos son renovados en parte y andan en
sus huellas.
El preconocimiento de Dios
¿Cuál es la base de la elección?
Algunos piensan que la presciencia de Dios, es la respuesta futura de aquellos que,
escuchando el evangelio, van libremente a Cristo, reconociéndolo como Señor y Salvador.
Bajo este punto de vista, la presciencia habla de un preconocimiento previo en el cual Dios
es pasivo, con respecto a lo que van hacer las personas. Esto excluye una determinación
de una acción anticipada.
Esto es falso, por las siguientes razones:
1). Conocer(prognosis) (Rom.8:29; 11:2 con ref. 1 Ped.1:2; 1:20). Significa “amar antes”
y “designar antes”. Dios es activo en la acción y no un mero espectador que aguarda por
una acción espontánea.
2). La condición espiritual del hombre sin Cristo (corrupción radical, incapacidad total).
Ef.2:4-10; Juan 6:65,44; 10:25-28. Los hombres responden favorablemente al evangelio
solo por la renovación espiritual en el corazón (cambio radical en el interior).
Esto no es coacción ni forzar la voluntad, es libertad para escoger lo bueno, es capacidad
para obedecer a Dios y sus mandamientos.
Entonces, el Preconocimiento mencionado en Ro. 8:29 se refiere a un activo deleite divino.
Indica que Dios, en su propia soberana complacencia, señaló con su amor a ciertas
personas, muchas de las cuales no habían nacido todavía, reconociéndolas gozosamente
como suyas propias, escogiéndolas para vida y gloria eternas. Sirven para indicar el hecho
de que Dios selecciona un número determinado de entre la raza humana y los coloca en
relación especial con El.
Rom.8:30
2. “Y a los que predestinó…
En realidad, el “preconocimiento” implica ya la “predestinación”. Pero la diferencia está en
el énfasis. En tanto que el primer término dirige nuestra atención a las personas a quienes
Dios eligió y sólo de modo general a su destino final (vida eterna, gloria), el término
predestinación fija nuestro pensamiento más definidamente en el propósito para el cual
ellas fueron elegidas y en los medios para lograrlo. Esa meta no es simplemente “llegar al
fin a entrar al cielo”, sino “ser hechos conformes a la imagen del Hijo de Dios”
(santificación/presente; Glorificación/futuro).
En este punto, el apóstol nos mueve de la eternidad pasada al tiempo y espacio terrenal…
A éstos también llamó” … (Los elementos del llamado: La obra del ES/la palabra).Ef.1:13
Este es el llamado del evangelio. El amor de Dios, que reina en los corazones de quienes,
una vez fueron Sus enemigos, prueba que ellos fueron llamados conforme a su propósito.
¿Quiénes son las personas llamadas conforme al propósito de Dios?
Las que experimentan las siguientes acciones divinas:
• Eficazmente llamados (influenciados por el Es/ renovación completa en el interior)
• Convencidos de sus pecados
• Movidos para abrazar a Dios y a su Hijo
• Aquellos que reconjocen a Jesús como Señor y Salvador
3. “Y a los que llamó, a éstos también justificó”. Nadie es así justificado, sino los
llamados eficazmente. Los que resisten el evangelio, permanecen sujetos a la culpa y la
ira. Justificar es declarar justo a un hombre en el trono de Dios. Es absolver a los hombres
los cargos que se le imputan por medio de una justicia externa… que logra satisfacer las
demandas santas y justas del Dios Todopoderoso…
4. “Y a los que justificó, a éstos también glorificó”.
Siendo roto el poder de la corrupción en el llamamiento eficaz, y eliminada la culpa del
pecado en la justificación, nada puede interponerse entre esa alma y la gloria. Esto estimula
nuestra fe y esperanza, porque como Dios, su camino, su obra, es perfecta. —El apóstol
habla como alguien asombrado y absorto de admiración, maravillándose por la altura y la
profundidad, y el largo y la anchura del amor de Cristo que sobrepasa todo conocimiento.
Mientras más sabemos de otras cosas, menos nos maravillamos, pero mientras más
profundamente somos guiados en los misterios del evangelio, más afectados somos por
ellos. Mientras Dios esté por nosotros, y nosotros seamos mantenidos en su amor, podemos
desafiar con santa osadía a todas las potestades de las tinieblas.
(Glorificación: Liberación de la corrupción de la carne en forma definitiva al recibir un cuerpo
trasformado, sin corrupción).
Conclusión:
El propósito de Pablo fue entregar a los lectores una evidencia clara de las virtudes que
experimentan a aquellos que verdaderamente aman a Dios; entonces solo para ellos, todas
las cosas les ayudan a bien. Estos pasajes fueron dados a los santos para traer seguridad
y confianza en medio de las distintas circunstancias que atraviesan en esta vida.
Especialmente en medio de la aflicción y angustia.
(Comprender el plan redentor es parte del conocimiento salvador que deben tener los
creyentes. De este conocimiento se puede obtener una buena fuente de seguridad o
certeza).
Meditar en el hecho de que la salvación estuvo basada en la complacencia, benevolencia,
bondad y amor abundante de Dios que determinó salvar a objetos indignos y miserables,
incapaces de realizar algo que pudiese agradar y honrar a Dios verdaderamente.