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EL HOMBRE DE DIOS COMO CONSEJERO.

TEXTO: 1° TIMOTEO 4: 6 – 11.


Todos los seres humanos, como cristianos o no cristianos, tenemos que desarrollar la
función de consejeros, para otras personas o de nuestra propia familia, del cual
tenemos que velar para encaminarlos en la voluntad de Dios.
1: EL CONSEJERO DEBE SER AMIGABLE.
Debe ser amigo de las personas o de los hermanos, para que una persona tenga
confianza de contar sus problemas, hay que ser amigos de ellos. Jesucristo brindo esa
amistad a sus discípulos para que se llegarán a él con toda confianza. Juan 15: 14 –15.
2: APRENDIENDO A DELEGAR EN LA CONSEJERÍA.
Tenemos que entender, que por muy hábiles que nosotros seamos, no podremos
resolver todos los problemas, tenemos que buscar gente que nos rodee y que nos
pueda ayudar. Aquellos grandes hombres de Dios, siempre se rodearon de personas
para ministrar la obra.
a) Moisés, fue instruidos por el suegro para buscar hombres que le ayudaran en el
ministerio, el cual formo su equipo de personas que le ayudaron. Éxodo 18:13-
26.
b) El rey Josafat, de la misma manera se rodeo de hombres que le ayudaban en el
pueblo, para educar y formar a la gente. 2° Crónicas 19: 6 – 11.
c) David, busco a treinta hombre valientes, que estuvieron con él, durante su
reinado, hombres dispuesto y entregados a un hasta la muerte. 1° Crónicas 11:
10 - 47.
d) Jesucristo, también se rodeo de doce discípulos, para que tomaran la visión de
Dios, y después también selecciono a otros setenta a quienes comisiono para
engrandecer su reino. Mateo 10: 1 – 5.
e) El apóstol Pablo, también se rodeo de un equipo hombres para que le ayudaran
en el ministerio. Hechos 20: 1 - 17 , 32.
Tenemos que reconocer, que todos tenemos un función que desarrollar en el cuerpo de
Jesucristo, si nosotros no contribuimos no abra ningún desarrollo.
3: CUANDO SE REQUIERE LA CONSEJERIA.
La conserjería tiene que ser ante y también después, dependiendo las
circunstancias que se dan en la vida.
1) Escuche a la persona antes que usted hable, hay que oír primero para dar el
consejo,
2) No lleve la consejería cuando esta el problema, no dará resultado la consejería
cuando las personas se están tirando los platos, busque el momento apropiado.
3) Nunca le de la razón a las personas sin oír a la otra parte, porque no siempre
tendrá la razón.
CONCLUSIÓN: procure desarrollar sus habilidades que Dios le a dado, lo hará por
medio de la consejería. Sea un buen consejero y no un mal consejero.

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