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Vivimos en un país en el que el turismo representa una de las actividades más importantes del

PIB: los extranjeros que visitan nuestras costas y también nuestras ciudades de interior son
muy numerosos, y en muchos casos ni siquiera la tan famosa y temida recesión económica ha
sido capaz de frenar este fenómeno. De hecho, las facilidades que tanto ellos encuentran para
venir a nuestro país como las que nosotros encontramos para salir del nuestro son cada vez
mayores, sobre todo si optamos por el transporte aéreo. Hoy en día cualquier persona joven
ha viajado en avión, o si no lo ha hecho seguramente sí haya tenido la oportunidad, algo que
para otras personas de generaciones pasadas era totalmente impensable: el transporte aéreo
se veía hace décadas como algo reservado a gente de negocios o familias de élite. Muchos
jóvenes incluso miramos raros a nuestros padres o familiares de mayor edad cuando nos
comentan que han ido a la agencia de viajes a reservar sus vacaciones, pues consideramos que
ahora mismo todo está a “golpe de clic” y es más sencillo desarrollar todos esos trámites vía
Internet. Quien ha conseguido todo ello, sobre todo en lo relativo a transporte aéreo y viajes
en avión, pues en el tema de hostelería también podríamos profundizar infinitamente, son las
compañías aéreas de bajo coste, que han puesto al alcance de todos la posibilidad de viajar en
avión, sobre todo en trayectos cortos. Es precisamente esta causa la que me ha llevado a la
realización de este trabajo, pues siento inquietud por saber cómo operaban las aerolíneas
antes y cómo lo hacen ahora, pero sobre todo me pregunto si puede ser rentable para una
compañía que yo pueda volar de Madrid a Londres por veinte euros cuando el billete de tren
Soria-Madrid me supone un gasto similar o incluso superior. Es cierto que no todos los
pasajeros viajan a ese precio, y que no es tan sencillo conseguir tarifas tan bajas, pero igual de
cierto es que existe tal posibilidad, y por ello me pregunto cómo es posible que este tipo de
aerolíneas sean rentables. De hecho ese pretende ser el eje central de este trabajo: realizar un
estudio de la evolución del mercado a lo largo del tiempo para conseguir entender el modelo
de negocio de estas compañías y lo que se espera del mercado en el futuro. La metodología
empleada para ello es la revisión bibliográfica de todo tipo de libros, artículos, tesis doctorales
y fuentes similares que arrojen datos sobre el negocio del “low cost”, para lo cual hemos
tenido que servirnos incluso de gran cantidad de artículos de prensa y portales web tanto de
Irlanda como de las islas británicas, al ser Ryanair una de las compañías “low cost” por
excelencia y tener como tal un papel muy protagonista en el presente trabajo. Hemos
asimismo analizado las cuentas anuales de algunas de las empresas más representativas del
sector, tanto de aerolíneas tradicionales como de compañías de bajo coste para conocer cómo
operan unas y otras 14 En la segunda parte del trabajo, sin embargo, hemos dejado atrás esa
metodología más descriptiva de los primeros capítulos y hemos optado por una metodología
analítica con el estudio de numerosos datos y ratios contables de dos de las empresas más
representativas del sector en nuestro país como es el caso de Vueling e Iberia, lo cual nos va a
permitir ver si todo eso que vamos a ir comentando previamente se refleja en las cuentas
anuales reales de dos empresas españolas. El primero de ellos pretende dar a conocer el sector
de la aviación comercial, analizando su evolución desde sus orígenes hace ya bastantes
décadas hasta la actualidad, donde como hemos indicado previamente forma parte de la vida
cotidiana de prácticamente todos y cada uno de nosotros. Para ello hemos dividido el trabajo
en cuatro capítulos En el segundo capítulo trataremos de presentar las diferencias entre las
aerolíneas tradicionales y las aerolíneas de bajo coste, tratando de analizar desde un punto de
vista general el modelo de negocio de unas y otras dando respuesta a preguntas tales como:
¿merece la pena viajar en “low cost”? ¿Es posible que una empresa de bajo coste sea más
rentable que una tradicional? ¿Cómo se consigue esa rentabilidad? Una vez hayamos
presentado todo ello de una forma general, explicando de un modo más cualitativo que
cuantitativo aunque apoyándonos por supuesto en gran cantidad de cifras y datos relativos a
los últimos años, abordaremos en el capítulo tercero del trabajo el caso particular de dos
compañías aéreas: una compañía tradicional como es el caso de Iberia, y una de las más
importantes aerolíneas de bajo coste en nuestro país como Vueling. Dedicaremos
posteriormente un capítulo final a la formulación de conclusiones, tanto generales como
particulares del caso analizado, tratando con ellas de dar respuesta a unos objetivos que
formularemos a continuación antes de comenzar con el análisis de la evolución del sector a lo
largo de los años. En este último capítulo trataremos de mirar también al futuro, pues aunque
lo veremos a lo largo del trabajo, todos conocemos que las compañías de bajo coste cada vez
son más importantes en el panorama nacional, y, como hoy en día ya incluso se están
operando vuelos transoceánicos “low cost” habrá quien se pregunte si el fin de las compañías
tradicionales está cada vez más cerca. De esta manera, el objetivo principal del trabajo, ya
citado previamente, es saber si realmente las compañías de bajo coste son rentables, pues el
volumen de aerolíneas “low cost” es cada día mayor, pero sobre todo saber cuál es su modelo
de negocio y cómo consiguen esas rentabilidades, para lo cual nos hemos fijado los siguientes
objetivos: 1. Conocer cómo ha evolucionado el consumidor junto a la aviación a lo largo del
tiempo. 2. Analizar cuáles son los ejes vertebradores del modelo de negocio de las aerolíneas
tradicionales por un lado y de las aerolíneas de bajo coste por otro.

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